El viaje a Coruscant se había anticipado un día. Los motores del transporte eran muy buenos y poco a poco fueron ganando unas horas de ventaja hasta conseguir salir del espacio con un día de antelación.
De momento parecía que la estrategia había resultado, los Jedi habían abandonado la atmósfera de Garos en un transporte Ithoriano en donde supuestamente abordarían una nave de pasajeros con destino a Coruscant. Pero en el último momento el carguero con el que habían venido en piloto automático despegaría y sería en esa nave en la que harían el viaje de regreso.
Sabían que la estrategia no serviría con el Sith, el Éter era un foco imposible de ocultar, incluso dentro de Hiperión con su fuerza camuflada era fácilmente perceptible desde kilómetros de distancia.
El trayecto había sido silencioso y de reflexión, el padawan había pasado casi todo el tiempo entrenando, mientras hacía una mirada atrás hacía su planeta natal intentando sacar un sentido a toda la locura vivida. La experiencia había sido muy dura y dolorosa, pero el padawan había logrado superarla sin ceder a la tentación del reverso tenebroso, una parte de su aprendizaje ya había terminado, se había negado al poder rápido y fácil, había resistido la ira desbocada, no lo sabía, pero su nombramiento estaba más cerca de lo que cabía esperar.
Por su parte, el siempre inquieto Zabrak había pasado casi la mayor parte del tiempo trazando una complicada telaraña en la que situar todos los cabos y rutas posibles de cada acontecimiento. Era una labor titánica, ya que los Ancestros ocupaban un lugar importante, pero su era había pasado hace miles de año y aun arrojaba potentes ecos en la actual, era evidente que había un punto de ruptura en la telaraña, por la cual tanto Sith como corporaciones habían recalado en el complejo de Garos. ¿Pero cómo?.
Esa pregunta sin respuesta tenía a Carr casí ensimismado, toda su voluntad estaba enfrascada en encontrar algún detalle pasado por alto que explicará el como esa información, supuestamente olvidada desde el cataclismo de Garos había podido recabar en espacio Sith.
Tormak también había estado en un profundo estado de reflexión, las enseñanzas de la Orden le habían llenado siempre, pero jamás se había llegado a postular que se podía "destilar" la fuerza de esa manera, y mucho menos utilizarla para fines constructivos o destructivos. El sabio maestro postulaba que a pesar de la sabiduría del consejo y los historiadores aun estaban a años de luz de comprender todos los misterios de la fuerza. Al parecer los Ancestros les llevaban muchísima ventaja y prueba era el haber conocido a la noble maquina viviente Hiperión, toda la sabiduría perdida con su valiente sacrificio era una dura herida y recuerdo que reafirmaba la fe de los buenos seres en la luz y su determinación en la lucha contra las fuerzas de la oscuridad.
Entre un millar de pensamientos el tiempo fluyo constante e impasible, cada uno se sorprendió de lo rápido que se le hizo el viaje, aunque eran conscientes que sus preocupaciones lo habían acortado en gran medida. La visión de Coruscant al salir del hiperespacio era nostálgica, la inmensa urbe que ocupaba todo el planeta bullía con vida y la actividad de la consolidad nueva república, en la que la orden jedi tenía una fuerte presencia. Era bueno volver a la academia.
Al poco de tomar tierras fueron escoltados a toda velocidad hacía los salones de la academia, el maestro Glazer Stromdard, un gran diplomático y miembro del consejo los esperaba con una sonrisa y una amplia fuente de alimentos. La reunión tendría lugar en una de las salas privadas cerca de los jardines en la que se respiraba la calma.
Tirada: 1d3-2
Motivo: Retraso/Anticipación Viaje
Resultado: 1-2=-1
Disculpe caballero .... -deja que el caballero jedi pueda decir su nombre.
No entiendo porque un transporte de mercancías de primera necesidad sería objetivo de un ataque de una flota de este tipo. ¿Había algo más en ese transporte que pudiera ser blanco de algun ataque?
Una flota con una tecnología desconocida hasta el momento... sofisticada tecnología...
¿Hay más detalles sobre esa tecnología?
Por la mente de Tormak empezaban a brotar recuerdos de Garos, de algunas de sus misiones diplomáticas donde habían sido atacados, del éter y .... de los sith.
18 días. ¡¡Gaskarth!! (maldición zabrak). Ha sido demasiado tiempo. Los sith han sido alertados, han regresado de los límites exteriores...o eso...o los sith que Jarik dijo haber encontrado en Garos han dado también con algo...
El zabrak permaneció en silencio hasta que habló la maestro Ariel.
- Debemos acceder a esa información cuanto antes. Debemos saber contra qué nos enfrentamos...es evidente que los sith han sido alertados por el descubrimiento de Garos, sea de una forma u otra.
Coincido con el maestro Tormak en que algo se nos escapa de esa información. Los sith no se rebelarían con un ataque tan inútil. Algo han recogido, y me inclino por creer que es ese "superviviente no encontrado". Quiero saber todo sobre él, y los datos del convoy.
Mientras, no perdamos tiempo. Nos queda mucho por hacer.
Carr se movió más como un zabrak que como un jedi, aunque se mantuvo sin ningún problema en los límites de la serenidad. La situación no estaba para desperdiciar más tiempo. En su mente rememoró los escritos de la gran época de inflexión en la orden, como él lo llamaba, la parte de la historia jedi que más había estudiado.
Fue la era del llamado Imperio Galáctico, donde los jedi descubrieron que sus antiguas tradiciones habían quedado obsoletas frente a la evolución del sith y al movimiento de la Galaxia. Descubrieron así mismo algo muy en relación con el presente.
Descubrieron que la Orden jedi era peligrosamente vulnerable en tiempos de guerra total.
Si eso es cierto maestra Ariel, es algo que escapa los límites de nuestra comprensión. Toda esta tecnología está fuera de nuestro alcance.
Gorek se giró un momento y observó a su maestro. No puede ser verdad lo que estoy escuchando... ¿se está rindiendo?
Aun así -siguió Tormak- hay esperanza. El éter aun está en nuestras manos y de la misma forma que los sith han recuperado su fuerza los ancestros aun tienen que demostrar la suya. ¿Cuál es la voluntad del consejo maestra Ariel?
Gorek respiró aliviado al oir esas palabras.
Resultaba muy extraño ver a un Jedi apurado en la academia, más si cabe cuando en vez de 1 son 5. Aunque esta era de las escasas situaciones en las que cada segundo marcaba la diferencia entre éxito y derrota.
La comitiva alcanzó una de las salas de comunicaciones, sin hacer ningún comentario los operarios de la sala pasaron los registros del combate por la pantalla.
Se contemplaba la escena desde el punto de vista de la nave de carga, escoltada fuertemente. El cargamento eran bienes de primera necesidad que irónicamente habían quedado intactos. La flota se acercaba a la órbita de Geonosis cuando las 3 naves desconocidas salieron del hiperespacio justo enfrente.
Los intentos de contacto no llegaron a finalizarse. La nave negra disparo un formidable rayo de color violeta hacia el carguero. El tremendo disparo envolvió la nave penetrando sus escudos, las grabaciones muestran parten del interior en donde se provocó un fogonazo de luz violeta, la tripulación pareció retorcerse de dolor y la vida los abandonó.
Cada nave de escolta disparo su represalia sin pensárselo dos veces, los turbolaser pesados del crucero Mon Calamari se estrellaron contra una de las naves sin provocar efecto, cada disparo parecía disiparse entre la superficie de la nave atacante y los cañones de iones no les hacían nada.
Las fragatas y cañoneras centraron su fuego en uno de los atacantes, pero una especie de campo de gravedad envolvía a la nave desviando disparos y mitigando impactos, los láseres y turboláseres resultaban impotentes para romper esa defensa.
De nuevo se produjeron disparos, esta vez varias salvas de un extraño rayo azul brillante. El flujo de energía ignoraba por completo los escudos de los portacazas, en apenas pocos segundos los atravesaron por varios puntos provocando 4 violentas explosiones.
Se envió petición de ayuda a Geonosis, pero de poco sirvió, el combate finalizó en cuanto las naves negras dispararon de nuevo el rayo violeta hacía las naves restantes, reduciéndolos a cascarones vacios.
Carr frunció el ceño al escuchar al padawan.
- Necesitamos la información pertinente del transporte. Toda la disponible, absolutamente toda. También todo lo que pueda encontrarse con ese "único superviviente desaparecido".
Cuando nos marchemos, descargadla en la nave lanzadera, y la estudiaremos durante el trayecto.
Ahora necesitamos comunicación con el maestro Shim´awakty.
El zabrak volvió a mirar al padawan con el rostro serio.
- ¿Qué fue de ese "capitán imponente de ojos rojos", Gorek? ¿Qué sucedió con él y con su nave?
Bien parece que el círculo se está cerrando, empezó en Garos y es allí donde parece que va a terminar
Contactemos con el maestro Shim'awakty, debe ser informado de estos sucesos y seguro que para cuando lleguemos nosotros ya tendrá alguna noticia que contarnos
- Saludos, maestro - sonrió el zabrak -. Estamos recopilando información sobre ese ataque, todo lo necesario para entender por qué se revela una fuerza como esta de una forma tan aparentemente inútil.
Vamos a regresar a Garos, maestro. Espero que te alegres de vernos. Una vez puesto a salvo el "éter", creemos que es allí donde se va a decidir mucho de lo que está pasando.
¿Tienes algún tipo de pregunta que podamos responderte?
Por mi parte hay una...¿sabes algo de Jarik?
Maestro... -Tormak iba a decir algo pero no le dio tiempo, pues la comunicación cesó.
Nuestro enemigo se ha dejado ver ahora, algo hay en Garos que aun atrae la atención de los sith. Debemos actuar con presteza. El maestro Shim'awakty es fuerte pero temo por él. Con su permiso maestra, creo que debemos volver a Garos y acabar con lo que ha empezado.
Eso es lo que me temía al ver esas máscaras, pues no suelen utulizarlas los sith que a los que estamos acostumbrados a enfrentarnos.
Tormak se quedó un momento pensativo, como evaluando la situación.
La razón está con usted maestra Ariel, como de costumbre. Queríamos asegurar el éter en Coruscant, mantenerlo a salvo, inalterable... pero no es ese su destino. El éter es, según los ancestros, la fuerza destilada y como, la fuerza, cambia, se transforma y fluye por el universo. Aunque hubiera preferido la seguridad de Coruscant, esa no es la razón de su existencia.
Si lo hubiera visto antes, si hubiera percibido antes el camino, a lo mejor ese transporte no hubiera caído en manos de los sith...
Ariel puso su mano sobre el hombro de Tormak y eso fue suficiente para el jedi. A través de la fuerza le comunicó más de lo que se podría aprender en un mes de estudio.
Si no hay inconveniente, partiremos ahora con destino a Garos. Que la fuerza la acompañe, maestra Ariel
El zabrak enarcó una ceja con evidente sorpresa, aunque ningún otro músculo se sumó a ella. Permaneció allí quieto observando lentamente a unos y a otros...
- Eso significa que asumiremos un enorme riesgo. Puede que el destino del éter no sea Coruscant...pero también podría ser entonces que el destino del éter terminara resultando...inesperado por sacarlo de la seguridad del Templo Jedi. Sólo hablo por mí, por supuesto, pero yo aún albergo demasiados interrogantes como para estar cómodo transportando algo tan valioso a un lugar conflictivo de estas...características.
Carr Junn se encogió de hombros, poco convencido ante la explicación fundamentalista de la maestro Ariel. Las palabras de su aprendiz le provocaron un gesto fugaz de: "y dale con la voluntad de la Fuerza", pero no dijo más.
- Sí, regresemos a Garos...
El zabrak permaneció pensativo el resto del tiempo, con la mente inmersa en un profundo diálogo. Muchas ideas se contrastaban, y no le gustaba el cariz de los acontecimientos.
Se aseguró simplemente de que los datos solicitados llegasen a la lanzadera y de que el éter estuviera custodiado en todo momento. Luego guardó silencio.
Khaeldrom...
La luz que se desprendió del éter e iluminó toda la habitación.
Después escuchó la voz de Erianne...
Con tranquilidad, Tormak miró a la maestra Ariel, y con una media sonrisa de complicidad le dijo:
Yo interpretaría esto como una respuesta
La maestra Ariel respondió a Tormak con otra sonrisa. Se podía notar cierta complicidad entre ellos, aunque casi no se conocían. Tal vez el hecho de encomendar su vida al estudio y comprensión de la fuerza hacía que la comunicación fluyera más allá de las meras palabras.
Otra vez de viaje entonces, vamos allá!!
Máster, en este post y en el anterior he puesto algunos gestos de Ariel en mi descripción de los hechos para hacer más narrativo el post y para que quedara más completo.
No sé si me he tomado demasiada libertad en este aspecto. Si crees que no es adecuado dímelo y lo borraré.
De nuevo no eran posibles los tiempos para preparativos. Cada segundo jugaba en contra de los Jedis y podía ser la diferencia entre las esperanzas para Shim'awakty o no.
No les asombró que la nave ya estuviera preparada mucho antes de subir, todo lo atribuido a Ariel parecía ser cierto y aunque parecía una precaución por un posible viaje resultaba evidente ser una muestra más de los poderes de adivinación atribuidos a la maestra ciega.
Cada Jedi tomó su lugar en la nave en silencio. Había poco de que hablar, en realidad casi todo estaba dicho. De nuevo Gorek pilotaría, el entusiasmo parecía haber vuelto al muchacho desde la noticia de retornar a Garos por otra ocasión.
3 habían partido en principio, ahora eran 4, sin duda eran tiempos oscuros en los que no cabía lugar para estar solo.
Pasan de nuevo a Garos IV caballeros.