Partida Rol por web

Marcus mira hacia arriba y busca inmediatamente las escaleras por las que puede subir, mietras recuerda el nombre de Kindersley Kindersley, quien sera ese señor?
Inmediatamente se levanta y va con paso ligero hacia las escaleras y sube todo lo rapido que puede al quinto piso.
despues cuando llega alli mira el apartamento de donde estaban Cartean y los hombres ricos y busca a los hombres trajeados a ver si los ve por algun sitio.

Si no los ve se acerca ha donde esta el apartamento e intenta oir algo atraves de la puerta

Llegas a la planta quinta algo sofocado, desde luego más tarde que los hombres de traje. Ya deben haber entrado. Te acercas a la puerta y prestas atención a lo que escuchas al otro lado. Se escucha una voz dura y firme, imperativa, que claramente no va a aceptar una respuesta que no le guste.

-¿Quién de vosotros es Cartean? ¡Vamos!- escuchas que dice, alzando su voz sobre las quejas constantes de uno de los hombres, que parece dolerse de algo.

Marcus espera a ver la contestacion de alguno de los presentes Joder que chungo... Veamos si de ultratumba me quieren decir algo

Durante unos segundos, nadie responde.

-¡Vamos!- grita el hombre, a lo que le responden -Oiga, no sé qué quieren, pero seguro...- Reconoces la voz de Cartean.

¡Shuuut! ¡Shuuut! se escuchan dos sonidos sordos, como dos palmadas graves y huecas tras las que alguien se desploma al suelo. Se escuchan más gritos.

-Mírale la cartera.- dice el hombre que lleva la voz cantante.

Miras a tu alrededor, viendo las líneas, los patrones de la esencia, buscas en ellos alguna presencia que quiera hablarte. Pero no hay nada a la vista, estás solo en el mundo espiritual para enfrentar lo que quiera que...

-¡Espera!- escuchas una segunda voz en el interior. Sigue hablando, bajando la voz, pero consigues escuchar lo que dice a su acompañante -No es él. Tengo una señal. Tras la puerta.-

Marcus queda perplejo ante el comentario del interlocutor y su corazon pasa a palpitarle tanto que parece que le vaya a explotar sin mas sale corriendo en direccion a las escaleras y baja corriendo hacia la recepcion. Mierda como cojones me han descubierto? no parecian tener poderes

Tu carrera desbocada escaleras abajo, no puede ser a la vez rápida y discreta, así que lo conviertes en un redoble constante de tambor mientras pasas planta tras planta hasta llegar a la recepción con los pulmones ardiendo y el diafragma inflamado.

Tambaleándote, llegas a la puerta de la calle en el mismo momento en que la puerta del ascensor lanza un timbrazo al abrirse.

Marcus sale a la calle en direccion al parque pero esta vez va lento intentando pasar desapercibido como un viandante mas Aunque esta muy cansado ante la carrera intenta tranquilizarse pero es inevitable que piense: mierda que no me descubran

Al salir corriendo a la calle, ves una furgoneta azul oscuro aparcada frente al edificio. ¿Dónde...? ¿Por qué te suena? No tienes tiempo de pensar en ello, escuchas sus carreras por la recepción del edificio. Sigues corriendo hacia el parque. Cuando estás ya cerca, escuchas cómo la furgoneta se pone en marcha y sus focos te alumbran desde lejos cuando ya estás casi en el parque.

Marcus debil ante el daño que le produce la gonorrea sale de su adentro un pequeño dolor que refleja en su cara. Mierda que querran de mi, debo llegar hasta donde he escondido mis cosas, de todas formas ire por donde la camioneta no me pueda seguir

Atraviesas el parque, dándote cuenta, para tu preocupación, que podría entrar la furgoneta si fuese necesrio. Sin embargo, no lo hace. Puedes escuchar cómo se detiene al llegar a la orilla del parque, pero sigues corriendo en dirección a la cabaña nórdica, intentando ocultarte de la vista de ellos, zizagueando para no revelar tu verdadera ruta.

Marcus va a paso ligero ahora pero sin hacer mucho ruido. creo que les he despistado...