Partida Rol por web

 Hablo con castaña 

Día 2 Tarea 3

Después de unos cuantos enfrentamientos bastante sencillos, en los que Aipom y Totodile habían hecho gala de sus habilidades, y otros algo más complicados con sus Pokémon de menor nivel, Amber terminó haciéndose con unos pocos Pokémon que todavía faltaban en su Pokédex, además de algunas adiciones interesantes en términos de rareza. Y aún así también gastó Pokéball en hacerse con un Pokémon que ya tenía, ya que tenía un objetivo en mente.

- ¡Nidoran macho y Nidoran hembra! - le dijo a Iris, su pupila, ofreciéndole aquellos Pokémon a modo de regalo. - Se que te gustan los Pokémon que van en pareja... ¡cuídalos bien, eh!

Día 3 Tarea 1

Al día siguiente Amber luchó contra dos entrenadores por la mañana para ganar algo de experiencia adicional antes del combate. Hizo que Pichu y Spinarak se repartieran el peso del combate durante el primer enfrentamiento, y en el segundo el que luchó fue Totodile. Hubo un combate más en esa jornada, pero fue Iris la que luchó. Amber sólo le dio muchos ánimos.

Día 3 Tarea 2

Llegó el momento del combate por la Medalla, y aunque a Amber le gustaba hacer que todos sus Pokémon ganasen experiencia aquel no era el lugar para experimentar. Así que Aipom, su Pokémon más fuerte y fuente inagotable de golpes críticos, salió a luchar primero contra el Geodude de Brock. Los Pokémon del Líder eran duros como rocas, pero sabía que Aipom estaba más que lista para enfrentarse a ellos. Y cuando Aipom dio señales de cansancio, Amber la retiró rápidamente y sacó a su as en la manga, Totodile, cuyo tipo agua sería una ventaja más que suficiente para derrotar a Brock. ¡Conseguido!

Día 3 Tarea 3

Tras unos días de entrenamiento y un combate duro contra el Líder, aquella tarde la pasaron Iris y Amber charlando y jugando con sus Pokémon, para que se conocieran entre ellos. No hablaron de nada importante.

Dejando de lado la seriedad del hecho que un pokemon psiquico-lucha como bien podía aparentar ser Jade y una veneno-fantasma como bien podrías ser tu se tocaran viendo sus habilidades se hacian efectivas, la conversación continuó sin más respuestas - Obviamente, no soy tan frio. Les doy juego a los demás, pero en una comparativa contigo, se nota que tu eres mucho más juguetona, por no decir festiva. Vamos, sin duda contigo no voy a sentirme aburrido o triste fácilmente - confesó entonces mirandote directamente. Parecía que ahora el ojiverde estaba más atrevido.

-Puede ser - obviamente, era difícil que dos cabezones pudieran darse a torcer el brazo, más aún si los dos tenían y podían darse la razón mutuamente. Era extraña la sinergia que teniais tu y el hijo de Green, pero a buenos ojos podiais sentiros bastante bien.

-Como tu en mi - confesó haciendote ver que ya había visto las tuyas hacia el varias veces, en especial animandolo en el gimnasio - Exacto. Que tus pokemon estén sanos y bien cuidados va más allá de la coordinación, pero por suerte tenemos mucho tiempo para ver como hacerlo correctamente, ya que una meta tan alta no se alcanza de la noche a la mañana - aseguró con una sonrisa, pues aunque también significara que ibais a pasar mucho tiempo juntos, el hecho de que compartiriais viaje ya quedó claro con anterioridad.

Ya en la tienda, ambos conseguisteis comprar todo lo pedido siendo que, aunque no lo necesitarais, el dependiente os lo puso en unas bolsas de papel como hacía con todos los clientes - Muchas gracias por la compra, y suerte en vuestro viaje - pero a diferencia de los clientes normales, al ver que erais entrenadores joven, os respondió de aquella forma dandoos a entender que ser entrenadores nuevos os daba un privilegio de trato distinto.

-Capturar una Zubat verde será difícil... Pero si es lo que tanto deseas, estaré pendiente por si la veo decirtelo. Y si, el Monte Moon, el Tunel Roca, la cueva Diglett y el Monte plateado están llenos de Zubats. Suele ser la queja mayoritaria de muchos entrenadores, o al menos eso me dijo mi padre - se encogió de hombros - Pero es su habitat natural. Es como si te quejaras por pescar Magikarps todo el rato con una caña que está muy desgastada - se encogió de hombros, pero al menos ahí te daba una sensación buena de que podrías llegar a encontrar alguno con suerte. Por si fuera poco, tenías incluso dos ojos más a tu favor, y si contabas a Spike y Nebbia sumaban ocho.

Ya pues con todo comprado y todo planeado, Jade y tu salisteis para pasar la última noche en el centro pokemon antes de partir...

2-3

-¿D-de verdad? - preguntó Iris emocionada mientras te miraba con ilusión - ¿P-para mi? ¿E-en serio? - tan emocionaba estaba que cuando se lo diste y los tomó en la mano, se lanzó a darte un abrazo muy muy fuerte - GRACIAS MAESTRA. Es el mejor regalo que me han podido hacer. Y claro, los protegeré y cuidaré muchisimo - Acto seguido y retirandose un poco, sacó de sus pokeballs a su equipo completo que se comprendían del Butterfree y Beedrill que ya habías visto, el Minun y un Plusle que pareció haberlo capturado ella por su cuenta, el cual se estaba comiendo una baya y finalmente tus Nidoran - S-son increibles todos - E incluso podrías ver en la mirada de la niña así como su emoción, que había algo más allá de atrapar a los pokemon que solo atraparlos todos como era tu meta.

3-1

Durante los combates con los entrenadores, hartos de ser cambiados por ser muy debiles, tanto Pichu como Spinarak dieron el mejor esfuerzo de su batiendo a los dos pokemon del entrenador rival y quedando un tanto exhaustos. Necesitaban pasar por el centro pokemon, pero ambos parecían estar sonrientes de haberlo hecho tan bien, incluso te miraban entusiastas como esperando elogios.

Totodile como no, dio el máximo de si mismo, derrotando con cierta facilidad al segundo entrenador

Por su parte durante el tercer enfrentamiento, Iris pidió un combate doble para usar a los dos Nidoran que le regalaste y aprender a luchar mientras estos dos daban lo mejor de si mismos. No es que Iris mejorara mucho como entrenadora de combate, pero al menos empezó a tomar las lecciones básicas y adaptarse mejor, hasta que finalmente ganó el combate y empezó a hacer mucha fiesta. Al final se dirigió a ti emocionada - YA ESTOY PREPARADA. Quiero derrotar a Brock y seguro que Rino y Rina lo derrotarán muy fácilmente - Sin duda, se la notaba con ganas.

3-2

Durante el combate de Gimnasio, fue un gran acierto sacar a Aipom en primer lugar. Su fuerza se vió demostrada contra el Geodude, que sin duda presentaba una resistencia digna del mayor de los oponentes. No obstante, tal fue su aguante y su insistencia en batir al pokemon mono, que cuando Aipom logró derrotarlo, este estaba bastante cansado y en las últimas nada más viste aparecer al Onix de Brock. Si bien imponía más su altura que lo que pudiera esconder, fue suficiente para detenerte y pensar las cosas como una autentica estratega y sacar así tu as en la manga. Totodile, por su lado dio una batalla insaciable al Onix, que si bien intentaba oponer resistencia, al verse superado por su debilidad acabó siendo derrotado unos minutos después - Sin duda Amber, has utilizado una muy buena estrategia. Te mereces la Medalla Roca - dijo entonces el derrotado Brock guardando sus pokemon y avanzando hacia ti para darte la medalla

Cuando terminasteis vosotros, Iris se vio con ganas confrontando a Brock - E-es mi turno - y aunque estaba nerviosa, estaba llena de confianza para ganar.

Así pues, Brock le concedió el combate si tu no te oponías, y como bien te dijo, durante la primera parte del combate sacó a Rina, quien derrotó poco a poco y con bastante esfuerzo al Geodude. Imitandote, cuando salió el Onix, Iris cambió a Rina por Rino y siguió una similar estrategia al principio. Si bien no tenía a su disposición el punto fuerte contra los pokemon tipo roca, como era el agua, Iris logró abrirse paso con la fuerza y potencia de los movimientos de tipo lucha que guardaban ambos Nidoran derrotando también al lider del gimnasio y recibiendo de este mismo la medalla.

Cuando lo logró saltó a tus brazos de alegría - LO CONSEGUIIIIIIIIIIIIIIIIII. A-ahora s-se que puedo con todo, y c-con tus lecciones maestra, pienso llegar muy lejos. - feliz y contenta dijo abrazada aún a ti - P-por que... m-me permitirás viajar contigo ¿No? - aunque no dudaba que dijeras que no, quiso confirmarlo

3-3

El resto del día pudiste aprovecharlo para conocer a Iris, que como bien venías viendo estos momentos atrás le gustaban tres tipos de pokemon: Los que iban en pareja, los monos y los bebes, pero su favorito eran los que podía usar en pareja. De hecho te mencionó que sus idolos eran Vito y Leti y como se sincronizaban haciendo un majestuoso combate a cada vez que recibían combates que retransmitir, de tal manera que decidió querer ser como ellos.

Finalmente, ambas decidisteis ir a dormir para mañana continuar vuestro viaje.

3-1

Buneary recibe 390 exp
Buneary sube de nivel

Vulpix recibe 395 exp
Vulpix sube de nivel
Vulpix aprende Rugido

Scyther recibe 354 exp
Scyther sube de nivel
Scyther aprende Persecución

3-2

Al intentar hablar con la de pelo castaño, esta te miró con un deje un tanto pasota. Es más su mueca denotaba el poco interés que tenía. - No me interesa hablar con nadie... - con un tono de voz algo bajo y quizás apagado, la chica te mencionó repetitivamente según intentabas hablar con ella. Hasta que al final la misma se hartó y te miró mosqueada - Mira, no tengo tiempo que perder en charlas. Debo hacerme más fuerte para derrotar a alguien, así que si quieres echar un combate hazlo, pero si no apártate de mi camino - y dicho eso empezó a andar hacia fuera de la ciudad. Sin duda fue un tanto grosera, pero al mismo tiempo se denotaba que había algo que la atormentaba.*

Connie entonces se cruzó de brazos y sonrió de forma más amplia, muy similar a la imagen clásica de una Meowth — Entonces es un hecho: de mi cuenta corre evitar que te pongas triste o que te aburras, mientras que tú me darás fuerza y paz mental, es un buen trato, ¿no? — la pregunta fue más retórica que nada ya que la Hemlock se había determinado. En ese momento observó al chico mientras el leve rubor se mantenía en sus mejillas; si él estaba siendo más atrevido, ella obviamente se vería contagiada pues no era como si le desagradara. Huelga decir que selló aquella promesa quizás unilateral con su típico guiño de ojo.

Lo anterior se extendió un tanto hasta la conversación sobre el pidgey de color especial, pues aunque allí no demostraron acuerdo total en sus respectivas ideas, sí que podría sentirse cierta sinergia en sus puntos de vista: sus perspectivas se complementaban, solo debían aprender a darse cuenta. — Así será… — aunque quizás una era demasiado juguetona y el otro muy centrado…

— Ciertamente — no tuvo reparo en canturrear con animado cariz, sin problema pues en aceptar lo que era obvio. — ¡Asegurémonos de disfrutar! — exclamó tanto hacia los pokémon acompañantes de cada uno como hacia el Oak, claro, aunque el hecho de que al final su mirada volviera invariablemente hacia Jade igual y era signo de su prioridad a la hora de dirigir esas palabras. Por otro lado su meta no era la única que requería trabajo duro, determinación sin par y un desarrollo acorde de sus habilidades, pues así como ella buscaba la cima de la coordinación, el de ojos verdes apuntaba a coronarse entre los entrenadores, ¿cómo encontrar mayor complicidad que aquella?

— ¡Gracias! — ya en la tienda la chica de Fucsia tomó su parte de las cosas mientras que le sonreía al encargado debido a su amabilidad. Sin duda notó la diferencia de trato, pero no se iba a meter con los procesos de la tienda, además a ellos les beneficiaba al fin y al cabo. — Así será más fácil mantener todo bien separado, que útil — luego comentó a su compañero ya que se separaron del mostrador.

— Te lo agradecería y mucho; sé que es difícil, tanto como capturar un pidgey dorado… — bromeó aunque tampoco estaba diciendo algo muy alejado de la realidad, al fin y al cabo dicha especie era tan común en los cielos de Kanto como los zubat en sus cuevas; — Pues el nombre de la cueva Diglett podría ser engañoso, por lo específico — continuó diciendo con peculiar humor. — No sé por qué se quejan, la verdad; los zubat son criaturas geniales y hermosas, con mecanismos de supervivencia que funcionan donde muchos otros pokémon no podrían ni avanzar, sus alas tienen el potencial de alcanzar grandes velocidades… y son representantes emblemáticos del tipo veneno, sin ofender, Nebbia — dijo un tanto más seria pero no precisamente molesta, más bien demostrando que no buscaba a la dichosa criatura solo por capricho.

En cualquier caso la coordinadora en aras no podía estar más emocionada y contenta, así como expectante de lo que les depararía el camino. En un inicio Connie pensó en viajar sola, acompañada de un gastly si tenía suerte, pero el destino había querido dar un giro bastante peculiar. Ahora, pues, la Hemlock más bien fantaseaba con lo que sucedería camino a Celeste, pues independientemente de su suerte no podría pedir mejor compañía, y ese parecer no se debía solo al humano de ojos verdes, sino también a sus fieles compañeros pokémon.

Durante la noche por caer Connie soñaría con el concurso que cada vez estaba más cerca…