Partida Rol por web

La llegada a Pueblo Paleta fue como todos los demás. Tranquila, sin incidentes, y viendo una ciudad tan portentosa como lo era la misma Trigal de la que procedías. Salvo que tu transporte se retrasó bastante, tanto que te hizo llegar muy tarde al laboratorio del profesor Oak, pero más vale tarde que nunca, o al menos eso decían.

Allí te atendió un ayudante del profesor el cual te pidió la Pokenav para registrarte como un entrenador iniciado, al mismo tiempo que configuraba nuevos programas para el mismo aparato y la RotomDex como unica e intransferible de tu ID. Mientras tanto el profesor, el cual parecía haber hablado con tus padres, te ofreció tres pokemon originarios de Johto, para que tuvieras la misma elección que tus padres, o al menos eso parecían querer ellos.

Aunque Totodile fuer el elegido, el profesor te dió también un kit de iniciados como entrenador para que tuvieras algo con lo que empezar, sin olvidar lo que levabas en la mochila*, y te aconsejó que metieras al Aipom persecutorio de Johto en una pokeball para considerarlo que fuera tuyo, a menos que ya tuviera una pokeball asignada por alguien.

Dicho eso y con todo listo, se despidieron de ti dandote en el pokenav los numeros de Oak y Green por si acaso necesitabas una mano en un futuro.

No obstante el inicio de tu viaje para capturarlos a todos comenzó con baches y obstaculos pues, queriendo atrapar a todos los pokemon de la ruta uno, te topaste de bruces con una entrada llena de gente ayudando a Spearows malheridos por un rayo y llevando algunos al centro pokemon.

Allí una agente Mara te comunicó que había sido una ayuda de un entrenador bastante fuerte, ya que los Spearows habían sido cabreados por un novato bastante tonto y habían llamado a sus bandadas hasta aquí. Algo peligroso para cualquier entrenador novato. Con esa información, te pidió que no intervinieras, que ya tenían suficientes manos en aquel lugar, y que continuaras un tanto del camino de la ruta 1 antes de enfrentarte a cualquier pokemon, ya que en esta zona era posible que algunos estuvieran heridos por los Spearow.

Ya una vez a mitad de la ruta 1, podías hacer lo que quisieses en ella: (A partir de aquí te explico. Puedes simplemente andurrear y esperar a ver a cada uno de cada especie que haya en la ruta (lo cual te consumirá más tiempo) o hacerlo por suerte y arriesgarte que te toque alguno repetido, pero también otros que pueden ser capturados sin presentar batalla. En tu post me indicas y ya te paso a donde conviene)

Tras una larga y dura travesía cumpliendo el inicio tu sueño en la ruta 1, o al menos el comienzo de este sueño, llegaste a Ciudad verde feliz, contenta y... a punto de desfallecer. Tenías un hambre voraz. Algo obvio teniendo en cuenta el tiempo derrochado en ir a por los pokemon de la ruta 1. Allí, en Ciudad Verde, también había unos cuantos pokemon salvajes, pero primaba el alimentarse.

Por suerte el centro pokemon a esas horas no tenía a mucha gente comiendo, pero tampoco la cocina abierta. Sin embargo la enfermera Joy, apiadandose de ti, te hizo algo con lo que tenía en forma de un unico plato, además de comida y sanación para tus pokemon.

Ya comidos, y con la tarde presente, faltaban los pokemon de Ciudad Verde, que según RotomDex, se podrían conseguir más adelante en otros lugares, y finalmente el Bosque Verde, la cuna de los pokemon tipo Bicho de kanto, algo así como la Ensenada de Johto. (De nuevo como en la ruta 1, puedes ir poco a poco esperando que salgan todos y cada uno o por suerte y con algunos que no presenten batalla. Indica)

Tarde, tarde, tarde... ¡Llego tarde! Sentada en el asiento de su medio de transporte, Amber sacudía nerviosamente sus piernas casi sin parar. No había planeado llegar tarde en su primer día de viaje por la Región Kanto, y la espera en el medio de transporte realmente la estaba matando. ¡Odiaba estar sin hacer nada! Por supuesto, podía planear cuales serían sus primeros movimientos en la región después de recibir su primer Pokémon pero... ¡es que eso ya lo había hecho antes! Exasperada, Amber soltaba un bufido tras otro con los brazos cruzados mientras miraba por la ventana... Bueno... empezaré con retraso, ¡pero cumpliré mi objetivo sí o sí!

Con actitud decidida, en cuanto Amber llegó a Pueblo Paleta procedió a recorrer las calles en busca del Laboratorio del Profesor Oak, pero mientras lo hacía una cara conocida se presentó ante ella, casi sin aliento tras haberla alcanzado...

- ¡Aipom! - gritó Amber, entre sorprendida y divertida. - ¿Qué estás haciendo aquí?

Resultó que Aipom la había seguido desde Ciudad Trigal, y había viajado escondida en el medio de transporte junto a Amber, a quien había tomado al parecer bastante cariño en la Guardería Pokémon. En aquel momento no podía hacer otra cosa, así que Amber decidió llevar consigo a Aipom en su hombro a visitar el Laboratorio, donde un ayudante del Profesor Oak la atendió y, tras una llamada a los padres de la chica, se decidió que Aipom sería clasificada oficialmente como Pokémon de Amber. ¡Tenía a su primera compañera!

Pero aquello no era todo, porque también existían tres Pokémon que habían sido preparados para que fueran el primero de Amber. La chica, por supuesto, conocía ya aquellas especies que le mostraron, y tras ver la actitud de aquellos tres ejemplares en particular...

- ¡Te elijo a ti! - sonrió la chica, señalando al Pokémon con el dedo.

La energía de aquel Totodile era casi contagiosa para Amber, aunque tal vez era a Totodile a quien se le contagiaba la energía de su nueva entrenadora... En cualquier caso, con dos Pokémon oficialmente en su equipo y con todos los artilugios necesarios recibidos para comenzar el viaje, Amber se encaminó hacia la Ruta 1 de Kanto... ¡su primer reto como entrenadora y como capturadora de todos los Pokémon del mundo! Sólo una persona lo ha conseguido antes... ¡bueno, pues eso se acabó! ¡Capturaré a todos los Pokémon que existen, y después retaré a Red! ¡Ese es mi camino!

Pero los imprevistos no paraban de suceder aquel día, y es que había habido algún tipo de incidente con una gran cantidad de Spearows. No puedo capturar a éstos Spearows, no sería justo. Ya están debilitados. Sin más remedio, Amber siguió avanzando por la Ruta 1 y, cuando llegó a una zona lo suficientemente abierta y alejada del incidente, su misión comenzó.

- ¡Pokémon de la Ruta 1! - Amber abrió los brazos gritando a todo Pokémon que pudiera escucharla a su alrededor. - ¡Mi nombre es Amber Aurum, y voy a ser la mejor capturadora y entrenadora del mundo! - la chica llevó sus manos al lazo blanco que sujetaba su coleta, y lo apretó con más fuerza mientras dedicaba a todo aquel Pokémon que pudiera verla una sonrisa desafiante. - ¡Si sois lo suficientemente valientes... venid a enfrentaros a mí!

Amber no dejaría la Ruta 1 hasta que no hubiera capturado todas y cada una de las especies que la habitaban, dando siempre prioridad a los Pokémon del lugar que quisieran retarla a capturarlos. No atraparía ningún Pokémon repetido, pues no le hacía falta, a no ser que realmente fuera un Pokémon muy fuerte y que quisiera presentar batalla contra Amber y sus dos Pokémon, que por supuesto colaborarían en las capturas.

Al llegar a Ciudad Verde Amber se notó desfallecer, y hubiera caído derrotada en la calle de no ser porque encontró un Centro Pokémon antes. Pidió comer, pero el gruñido de su estómago habló más alto y más claro que ella, y al final tragó alegremente todo lo que le pusieron por delante, deshaciéndose en agradecimientos hacia la Enfermera Joy. Pero el día no iba a terminar allí.

Algunos Pokémon sólo aparecen por la noche, así que es mejor que acampe fuera de la Ciudad. ¡Así seguro que veo montones de Pokémon! El siguiente objetivo de Amber era el Bosque Verde, al norte de Ciudad Verde, aunque si veía alguna especie de Pokémon en la ciudad que todavía no estaba en su colección intentaría capturarla. En cualquier caso podría capturarlos en otros lugares, así que... ¡Bosque Verde, allá voy!

- ¡Pokémon del Bosque Verde! - mientras se apretaba su lazo, ya dentro del bosque, Amber sonrió con seguridad. - ¡He venido a por vosotros! ¿Quién es lo bastante valiente como para enfrentarse a mí?

¡No iba a dejar el Bosque hasta que capturara todas las especies allí presentes, y las buscaría bajo las piedras, entre la hierba, bajo tierra, sobre los árboles... donde hiciera falta!

Y así comenzó su camino por la ruta uno, empezando a encontrarse por el más tipico y primer pokemon de la ruta 1:

- ¡Así que tú serás el primero - dijo Amber al ver a un simple Rattata acercarse a ella en los comienzos de la Ruta 1. - de la larga lista de Pokémon que capturaré! - sonrió. A su lado, sus dos Pokémon, que iban fuera de su Pokéball, esperaban impacientes. - ¡Totodile, - escogió. - enfréntate a Rattata!

El combate no duró demasiado, los Pokémon de aquella ruta no eran demasiado fuertes... así que Amber obtuvo su primera captura sin demasiadas complicaciones.

-¡Aipom, éste es para ti! - le dijo Amber a su otro Pokémon al ver cerca a otro de aquellos Pokémon tan comunes, en este caso un Pidgey.

A continuación, un Buneary al que se enfrentó usando a Totodile...

Y el último que encontró fue un Zigzagoon.

- ¡Bien hecho, Aipom, Totodile! - dijo Amber chocando su mano con la de Totodile, y la otra con la mano-cola de Aipom. 

Tras luchar contra todos los pokemon y capturarlos uno a uno, te das cuenta de que la reserva de Pokeballs en tu bolsillo va acabando, así como la energía de tus compañeros y de igual forma tu hambre aumentaba.

Y aún quedaba un pokemon uno que te miraba desde la copa de un arbol que parecía haber tenido la suerte de no estar con el grupo inicial de Spearows.

Este pequeño Spearow tras que terminaras los combates bajó al suelo y extendiendo las alas como si quisiera enfrentarte, graznó un par de veces antes de bajar la guardia y dió un par de pasos más como si quisiera acompañarte. Parecías haberle caido bien al Spearow tras tu muestra de habilidades.

Ya en Ciudad verde te repusiste así como antes de encaminarte al bosque verde podrías reabastecerte de los recursos necesarios, en especial pokeballs pues te habian dicho lo tipico de que era la cuna de los tipo bicho*

Ya en el bosque esperabas empezar a capturar a diestro y siniestro... solo que el lugar al principio no se veia muy agraciado. Marcas de combate un tanto agitadas parecían haber ahuyentado a los pokemon, de hecho muchos se escondían antes de que pudieras hacer nada contra ellos. Por suerte el camino del bosque verde era largo y podrías capturar pokemon más adelante, si no fuera porque las marcas de un rayo te hicieron pensar que estaban pasando cosas demasiado raras por allí.

Al final cayó la noche sin poder hacer mucho más salvo andurrear un poco por el bosque. Lo bueno es que en la noche salian los más nocturnos antes de irse a dormir, lo malo es que habias gastado muchas energías en muy poco tiempo. "Mañana sería otro día ¿No?

Sino fuera por que....