Partida Rol por web

-Si tuviera la seguridad de que va a salir una política liberal siendo yo fascista sería porque igualmente saldría. Me daría igual quien fuera el canciller. Yo u otro. lo que me preocupa es el presidente. Un presidente que lee el futuro pero que cuando a la hora de la verdad salga un gobierno fascista me echará la culpa y olvidará el hecho de que ha elegido a alguien al que acusa, como si la cosa no fuera con él. Soy fascista pero me elijes como Canciller, pues estamos apañados.

Con cara de ofendido el parlamentario Paredes pontifica Te elijo pues creo en las personas. Creo en la democracia. Creo en que hasta Toddy el Facha puede dejar atrás sus malas artes y unirse a nosotros los democratas. ¿Soy un ingenuo? ¿Soy demasiado buena persona? Se llevó la mano al pecho ¡Quizás! Pero soy ante todo un democrata y eso no es solo contar y rasguñar votos. ¡Eso es creer en el ser humano!
 

-Muy humano. Llamarme facha y decir que igual soy bueno cuando estaría claro que no saldría el liberalismo de ser yo facha como no dejas de decir. Y vivas en los mundos de Yupi o no, está claro que sí es un hecho que hay fascistas que no quieren aprobar leyes liberales y que éstos no se "curan" aunque les lama un unicornio gigante que cague arcoiris. Pues qué bien. Solo espero que la fortuna se ría de los fascistas y te dé dod políticas liberales. En fin, soñar es gratis. Aunque lo ideal sería que el razocinio se una a los liberales y se den cuenta de que lo que dices no se apoya por ninguna parte y vean que no siempre apoyar gobiernos sale bien. En fin, ya no tiene sentido hablar. Pues parece que quitando yú y yo, la gente no quiere diálogo.

-¿Pero se están oyendo? Es imposible que entre ambos haya un consenso y menos una alianza fructífera, estamos muy cerco de nuestro objetivo, pero desde luego este gobierno no parece que vaya a lograrlo. Arnulfo, no entiendo tu política ni tus intenciones y prefiero a otro al cargo. -Doble B no tenia pelos en la lengua y lo dejaba claro, siempre que era necesario.

-Y Scott comprenderás que una persona que no confía en mi pase a que he votado en repetidas ocasiones por voto liberal, no puedo confiar yo en él. Así pues espero que este gobierno de despropósito no se forme. Arnulfo una cosa es jugar al poker en tu casa y con tus amigos, pero el azar esta fuera de lugar aquí. Nos jugamos mucho como para ir de farol. -Uso una analogía que ni me molestaría en explicar, pues consideraba a todos lo suficientemente inteligentes para entenderla.

La división no se deja esperar y en cuanto la votación comienza, queda en claro que las profundas grietas en el congreso no han sido curadas del todo. Las profundas y marcadas divisiones se dejan ver y aún con un reluctante Canciller, el voto es cerrado, dejándose saber sólo hasta el último minuto el resultado final.

El gobierno había sido respaldado por los parlamentarios. Media asamblea comienza a aplaudir mientras la otra media parece algo contrariada, y es que, esta extraña alianza había sido favorable a los ojos de los padres de la nación. Así que en medio de cierta dosis de caos, de las celebraciones en las calles y de algunas veladas acusaciones, del separatismo inherente y de la falta de unidad, Arnulfo Paredes es investido como presidente de nuestra joven nación, y Scott Philips es nombrado como su canciller.

Y mientras los dos tratan de sortear sus diferencias, las campañas y los tratos comienzan a gravitar alrededor del próximo Candidato a la presidencia, cuyo nombre no se deja esperar: Rupert Sommerfield. ¿Qué nos deparará su campaña? Con las aventuras del parlamento de nuestra nación, no hay forma de saberlo...

Entregando lo que podía catalogarse como la mejor gestión de gobierno en nuestra joven nación, Leopoldo Capriles Allup, después de un breve período de ausencia debido a complicaciones con su salud debido a una intoxicación por vieiras y Dom Perignon, hace una breve alocución.

- El triunfo de la presente fórmula de gobierno, pese a que no contó con mi aprobación, es un triunfo del pueblo. El pueblo se expresó, y la voz del pueblo es la voz de Dios y por eso la respeto a carta cabal y hago entrega formal de la banda presidencial al electo nuevo presidente de nuestra gran y próspera nación, con la esperanza de que su gobierno sea fiel obra de los deseos mayoritarios del pueblo: más políticas liberales para el mayor bienestar social.

Hace una breve pausa y moja sus labios con un escocés de 21 años de añejamiento, de una reserva especial de uno de sus muchísimos financistas. - Este servidor, como estoy seguro piensa el resto, coloco mis buenos oficios a la orden del nuevo candidato a presidente para el cargo como Canciller, y pues estoy seguro que muchos verán con buenos ojos repetir una fórmula que funcionó en el pasado, después de todo, qué podría salir mal, ¿cierto?