El disparo te duele mucho más de lo que pensabas y el tiempo se ralentiza para ti. Pierdes la fuerza para sostener el arma y finalmente notas cómo te caes encima de algo semiblando. Oyes a K. gritar tu nombre varias veces, pero no puedes responderle. Solo escuchar su voz como un eco cada vez más y más lejano. Como si fuera un sueño, uno de esos sueños que has tenido dormida y despierta con él a tu lado...
- ¿O es que prefieres la realidad? - te pregunta su voz en un susurro.
Ya no estás en el coche, ni hay mercenarios. Estás en una cama de blancas sábanas, con un alto techo sobre tu cabeza. Todo parece irradiar luz pura a tu alrededor. Incluso él, K., quien está tumbado a tu lado en la cama, parece más... "humano". Como si todas las noches de la Purga nunca hubieran pasado y su conciencia estuviera tranquila. K. te mira con una sonrisa, esperando tu respuesta.
Por la gracia divina, has caído en el limbo... Digamos que inconsciente y en un sueño bonito :P
Aunque no recuerde bien las lecciones sobre disparar, una persona a pocos metros tampoco es un blanco tan difícil, por lo que la bala de Doc impacta de lleno contra uno de los mercenarios, dejándolo en el suelo. Desde su posición Doc ve cómo Becky, quien se había asomado por la ventanilla para disparar, es empujada hacia atrás de un balazo. El arma no vuelve a asomarse por la ventanilla y la chica tampoco se mueve.
- ¡Becky! ¡BECKY! - grita K. desde dentro, asomándose también para disparar - ¡HIJOS DE PUTA!
Los disparos de K. no son tan efectivos, pero la chica con traje de Marvel aprovecha el momento para disparar contra el que está ocupado cubriéndose de K. La bala no llega a darle, pero envía el rifle que sujetaba unos metros más lejos, desarmándole.
Motivo: Suerte mercenario
Tirada: 1d8
Dificultad: 6+
Resultado: 2(+3)=5 (Fracaso) [2]
Motivo: Puntería K
Tirada: 1d8
Resultado: 4(+4)=8 [4]
Motivo: Suerte mer
Tirada: 1d8
Resultado: 6(+3)=9 [6]
Motivo: Iniciativas K, Lory, Merc
Tirada: 3d8
Resultado: 3, 4, 2 (Suma: 9)
Motivo: Iniciativa Doc
Tirada: 1d8
Resultado: 4(+2)=6 [4]
Motivo: Disparo Lory
Tirada: 1d8
Resultado: 8(+2)=10 [8]
Motivo: Suerte merce
Tirada: 1d8
Dificultad: 10+
Resultado: 7(+3)=10 (Exito) [7]
Becky está... Bueno, tendrás que ir a verlo para saberlo xD Orden de iniciativas:
La suerte parecía estar de su lado, pues sus disparos fueron efectivos y letales, aunque esa suerte se desvanecería de un momento a otro. O debían acabar con los mercenarios que quedaban ahí o largarse antes de resultar heridos de gravedad. El Doc calculaba que sus posibilidades de sobrevivir disminuían cada vez más, sobre todo al ver cae a la joven de un disparo. Gran parte de su cuerpo estuvo cubierto, así que el disparo debió dar en el torso, incluso en su cabeza. Si la herida no era mortal… quizás pudiera hacer algo.
-¿Pero para qué?- pensó su nueva personalidad, mientras la normal incluso pensaba en posibles soluciones a eventuales problemas. Ya lo vería cuando terminaran de quitarse de encima a esos tipos. Uno ya no tenía arma, así que si aprovechaba aquello, sus posibilidades aumentaban.
Motivo: Disparo
Tirada: 1d8
Resultado: 4(+1)=5 [4]
se acabo mi suerte con los disparos XD
Nunca se había sentido tan ligera. El dolor había pasado el umbral aceptable y había dejado de dolerle el cuerpo. La voz de K. llegaba lenta y suave como una melodía. Becky quería responder pero no podía. Le pesaban los párpados. Le pesaba el cuerpo. Le pesaba....
Abrió los ojos despacio. Necesitó parpadear varias veces para acostumbrarse a la cálida luz de su alrededor. Tardó un rato en ver a K. aunque su cuerpo ya había notado su presencia. Era una sensación nueva que eclipsaba a todas las demás. Era como estar en el hogar.
- ¿Qué te hace tanta gracia?
La voz de Becky sonaba relajada y tranquila. Estaba bien. Se sentía como si hubiera dormido durante días, como si La Purga hubiese sido una antigua y olvidada pesadilla. Como si despertar bajo esas suaves sábanas fuera el pan de cada día.
- ¿Qué hacemos aquí?
No quería mirar a su alrededor. No apartaba la mirada del perfecto y simétrico rostro de K. No sabía cómo habían llegado allí. En realidad, no recordaba de dónde venían. Tampoco era capaz de decir si siempre habían estado así. Se aseguró de apagar esa pequeña alarma que sonaba en su interior. Se encontraba tan bien...
- ¿No puedo sonreír por despertarme junto a la mujer que más quiero en la cama?
K. sonríe más ampliamente, casi riéndose. Lleva la mano a tu mejilla, acariciándola con suavidad y aún sonriente. Al escuchar tu segunda pregunta, se encoge un poco de hombros. Desvía la mirada por toda la habitación con un gesto bastante vago, antes de volver a fijarse en ti.
- Eso... Creo que depende de ti. De lo que quieras hacer... De adónde quieras ir... De con quién quieras estar... - K. te sigue mirando, paseando sus ojos por todo tu rostro y acercándote un poco más con su mano para darte un suave beso en los labios. No es tan apasionado como los que recuerdas, este es demasiado ligero. Como si le faltara "consistencia". K. sigue sonriendo, como si no se hubiera dado cuenta de ese detalle - Aunque eso último creo que ya ha quedado claro.
Uno de los mercenarios evita sin problemas tu balazo, pero no ve venir el de K, que termina reventándole la cabeza de un solo tiro. El otro en cambio, consigue disparar a la chica disfrazada antes de sufrir la misma suerte que su compañero. Lory se agarra el muslo herido por la bala con un chillido de dolor, derrumbándose al suelo. Con tu ojo analítico dirías que no es algo grave por el momento y que la chica podría sobrevivir el resto de la noche, pero obviamente empeorará si no se trata.
- ¡EH! - ruge K. desde la furgoneta destrozada, mirándote directamente - ¡¿Tú eras médico, verdad?! Te daré lo que quieras, ¡pero ayúdala!
Por un momento podrías pensar que se refiere a la chica vestida de payasa, pero ves que está intentando sacar a Becky de la furgoneta. No se mueve, tiene los ojos cerrados y lo que parece una profunda herida cerca del pecho.
Motivo: Suerte mercenario
Tirada: 1d8
Dificultad: 5+
Resultado: 8(+3)=11 (Exito) [8]
Motivo: Puntería K
Tirada: 1d8
Resultado: 8(+4)=12 [8]
Motivo: Puntería Mercenario
Tirada: 1d8
Resultado: 2(+3)=5 [2]
Motivo: 1 K, 2 Lory, 3 Doc
Tirada: 1d3
Resultado: 2 [2]
Motivo: Suerte Lory
Tirada: 1d8
Dificultad: 5+
Resultado: 1(+3)=4 (Fracaso) [1]
Motivo: Iniciativas K, Lory, Doc, mercenario
Tirada: 4d8
Resultado: 6, 4, 1, 3 (Suma: 14)
Motivo: Puntería K
Tirada: 1d8
Resultado: 5(+4)=9 [5]
Motivo: Suerte mer
Tirada: 1d8
Dificultad: 9+
Resultado: 2(+3)=5 (Fracaso) [2]
Con un par de disparos más, todo termina, quedándose en total silencio. Solo lo interrumpen los quejidos de la joven disfrazada, aferrando su herida con gesto de dolor. Sobrevivirá. No parece ser profunda y no tocó ninguna arteria o musculo importante. Aunque deberá recibir algo de atención medica si no quiere empeorar. Se podría decir que tuvo bastante suerte a juzgar por el poco blindaje que lleva. Quizás esperaba distraer a sus contrincantes mostrando piel.
La emoción de dolor y desesperación que provenía del rudo K fue sorpresiva, casi agradable. Incluso un asesino despiadado como él, como todos esa noche, era capaz de preocuparse por la vida de alguien... ¿Tendría a una familia esperándole en su casa? ¿Ignorantes de lo que hacía? Desvió su mirada al rostro pálido de la joven, enmarcado por el cabello negro y pegado a su frente, pensando que quizás ella era su familia.
-Jijiji- con una risita cascada, se acercó a la herida, como si la mismísima muerte se inclinara sobre su víctima, comenzando su examen. Lo primero fue tomar el pulso, comprobando si siquiera seguía respirando o latiéndole el corazón. Luego palpó los alrededores de la herida, evaluando el daño. Debía ver si la bala le traspasó o si seguía dentro, que órganos fueron dañados y si tendría esquirlas. Algunas balas se rompían al dar con algún hueso, desparramando su daño en muchas direcciones. Por suerte contaba con su equipo, lo que le permitiría trabajar casi con comodidad.
Debo tirar algo?
Pd: cuanta gente muerta XD
K. sigue tenso, y por un momento parece que va a gritarte por reírte en un momento como ese, pero se contiene. En su lugar, se queda aún sujetando a Becky, sin moverla apenas del sitio. El pulso de Becky era muy bajo y la respiración se entrecortaba. La bala había atravesado buena parte del pecho de la chica y apenas había rozado una de las costillas. Parecía que la bala seguía dentro y si se había roto, el daño causado alrededor de la zona no habría sido demasiado. Claro que había una complicación y es que estaba demasiado cerca del corazón...
Pero por supuesto para un cirujano experto como Doc, aquello no era un problema tan grave como para alguien sin conocimientos médicos. Tras su operación de urgencia, la paciente no parece haberse muerto todavía, pero parece que harán falta algunos minutos más para que se recupere.
- ¿Cuánto aguantará? - pregunta K. todavía preocupado, casi hablando para sí mismo - ¿Debería llevarla a algún sitio? Los hospitales ahora mismo están cerrados y cuando abran a las 7 se llenarán en cuestión de minutos. Y no podemos arriesgarnos a estar aquí mucho más tiempo...
Motivo: Venga, el mejor Doc del mundo
Tirada: 1d8
Dificultad: 7+
Resultado: 5(+4)=9 (Exito) [5]
He tirado con lo que más tenías, que para algo eres cirujano xD
Y puedes describirlo como más te guste ;)
El sueño en el que estás se ve interrumpido por el sonido de una campana, un timbre. K. aparta la mirada de ti y mira hacia lo que parece el fondo de la habitación. Allí hay una puerta metálica blindada y sucia, con marcas de sangre sobre ella, de la que parece venir el sonido. K. suelta un pequeño suspiro y se vuelve a dejar caer sobre la almohada con gesto apagado.
- Creo que te llaman. No vamos a poder estar aquí mucho más tiempo... - aunque finalmente sonríe - A menos que así lo quieras. ¿Qué te parece? Estar así siempre los dos... Dejar toda la vida atrás... Suena a plan de vacaciones.
De nuevo, sentir el contacto de K. con su piel hizo que cerrara los ojos y disfrutara del momento. Permaneció así unos segundos, disfrutando con el resto de sentidos. Notar a K. acercarse hacia ella y darle ese suave beso le provocó un placentero escalofrío.
- Daría todo lo que tengo por quedarme así.
Sí, estaba claro de que eso era un sueño. Pero estaba tan cansada que no le importaba en absoluto. Pero ella no tenía tan buena suerte...
- ¿Y si me quedara aquí?
No era posible. Lo sabía de buena gana, pero se resistía a admitirlo. Nada había cambiado, pero desde que ese timbre había comenzado a sonar Becky ya no se sentía en paz. La desazón y la urgencia habían empezado a surgir en su interior.
Estar así siempre los dos... Dejar toda la vida atrás...
Sonaba tan bien. Volvió a cerrar los ojos, dejando que las palabras de K. construyeran un fantasía de ensueño en su interior. ¿Podía ser tan sencillo? Podía....
No, las cosas nunca eran tan simples. Volvió a escuchar ese desquiciante timbre. Todavía no había abierto los ojos pero K. estaba allí. No era el relajado y cariñoso K. con el que compartía sábanas. Era una versión ruda, sucia y agresiva. Herida.
- ¡NO!
Se incorporó de inmediato. Miró a su alrededor, intentando entender qué estaba haciendo allí. El falso K. seguía tendido en la cama, y Becky tuvo que luchar para contener las ganas de volverse a tumbar a su lado. Estar protegida por sus brazos resultaba demasiado tentador.
De nuevo, miró hacia la puerta. En su interior se entremezclaba el miedo, el rechazo y la urgencia. Poco a poco su mente se volvía más clara y sus recuerdos más nítidos. Poco a poco fue avanzando hacia la puerta sin ser plenamente consciente de ello. Era momento de volver.
Cuando se conocieron el Doc pudo operar a un chico sin anestesia y sin matarle, así que uno podría pensar que ese aterrador personaje tendría algún tipo de conocimiento médico. Pero al verle operar en medio de la calle, incluso usando un barbijo improvisado y tratando la herida con sumo cuidado, indicaba que era más que un simple doctor. Por unos instantes, dejó de ser ese personaje sádico y que buscaba plasmar algún tipo de retorcido arte, volvió a ser un cirujano que se preocupaba por sus pacientes, que hacia reír a los niños, con enormes ojos inocentes y limpios.
-Menudo desaaaaastre- siseó mientras cortaba y operaba, moviendo sus manos con maestría-. Pero sobreviviraaaaá… aunque quedara cicatriz- mirò a su alrededor, dándose cuenta que habrían llamado mucho la atención-. Lléeeeevala al Hospital XXXX, la atenderán primeeeeeero- le dio el nombre de su propio hospital, solo por el morboso deseo de verla recuperarse estando del otro lado de la acera-. Debemos moveeeernos.
Aun podría correr el riesgo de una infección, necesitaba antibióticos y observación, pero estaba seguro que logró un buen trabajo teniendo en cuenta sus medios disponibles. Por suerte tenía sus herramientas para operar. Ahora mismo necesitaban llevarla a un sitio menos expuesto, de preferencia conseguir un vehículo y ponerse en marcha.
-¿Necesitaaaaas atención medica?- la otra chica también estaba herida, el Doc le miro moviendo un escalpelo y sonriendo de forma aterradora.
Seguro que si nos quedamos ahi llegaran nuevos asesinos
Best Doc Ever
Mientras el motor estaba caliente llego el ansiado mensaje, 10 de los grandes, no era mala recompensa, desde luego mereció la pena la caza y hasta me llegue a preguntar cuanto hubiera costado en la feria una chica como ella. Pero eso ya no importaba, como no importaba la nota del cabrón que la quería muerta, un cobarde que no es capaz de hacer ni su propio trabajo, pero al menos pagaba bien y aunque admito que me hubiera gustado darle caza tras leer su "dedicatoria" seguramente no me hubieran dado más que con el gordo de hace una hora.
-Con suerte él también probara el plomo esta noche. -Reflexione por un segundo antes de que mi nuca se encendiera como una lampara de noche. -Mierda, toca correr.-Acelere y puse distancia entre ambos, Upper East Side estaba en mis próximos planes, allí había dos objetivos y seria mas facil encontrar dos que uno, pero antes di un largo rodeo, el suficiente para despistarlas una vez mas antes de llegar a mi destino y buscar un sitio donde abandonar el coche, era momento de perder a las monjas del todo y ese cacharro era un faro.
Mientras operas, te fijas en un joven chico que también está dentro de la furgoneta, pálido y con la piel algo amarillenta, abrazándose las piernas en un rincón. No parece que esté allí en contra de su voluntad, pues sale a vigilar a la primera orden de K.. Mientras tanto, él está vigilando aunque parece visiblemente más preocupado por la chica. Cuando terminas, asiente sin dejar de mirarla.
- Mientras viva, es lo importante. Y... gracias. - carraspea finalmente, comenzando a cargar a Becky con cuidado - Tú tampoco deberías quedarte aquí. Si encontramos un vehículo en el que quepamos todos, podemos alejarte de aquí... Porque está claro que nos buscan a nosotros.
- Tenían un camión... - dice la voz de la chica payasa, algo apagada y de pie, pero sujetándose la herida - La última vez que los vi, tenían un camioncito. No puede estar lejos. - al ver que te ofreces, Lory asiente con una exagerada cara de pena y se señala la pierna - Pium pium mucha pupa pupa. ¿Me vas a hacer curita sana? - mientras te lo piensas, ves que K. reacciona y que Becky parece que ha despertado. Aparte de eso, ves pasar un coche por la calle, cuyo ocupante parece que está buscando algo o a alguien...
Tirada oculta
Motivo: Percepción Jo-ming vs grupo
Tirada: 2d8
Resultado: 1, 4 (Suma: 5)
Ya puedes marcar a Becky para el siguiente post ;)
El K. que sigue en la cama sonríe aún más. Notas su brazo sobre tu espalda, abrazándote, invitándote u obligándote a quedarte, hasta que consigues levantarte. En ese momento, la habitación deja de ser tan blanca y el día da paso a la noche. Reconoces de sobra la habitación, porque es la tuya. Hay varias estanterías con peluches y muñecos a tu alrededor y tu cama es la que era entonces, mucho más pequeña y con un hombre demasiado grande en ella que ha dejado de ser K.. Notas un olor de tabaco conocido y aunque no llegas a verle del todo la cara, sabes quién es. Y sabes que te está sonriendo y que vendrá a por más.
- ¿Adónde vas, Rebecca? Tienes que ser una niña buena y quedarte aquí conmigo... Todavía no hemos terminado de jugar. - oyes su voz cada vez más cerca cuando abres la puerta y por un instante te da la sensación de sentir su asqueroso aliento en la nuca de nuevo...
Hasta que te despiertas. Frente a ti no hay nada más que el cielo nocturno de Manhattan y el rostro de K.. Las cicatrices, el sudor, ese gesto de preocupación... Sin duda es tu K., aunque parece mucho más preocupado que otras veces y te tiene bien sujeta entre sus brazos mientras te carga a algún sitio.
Puedes marcar a Doc en tu siguiente post (y darle las gracias por haberte revivido xD)
PD: Tienes 1 punto menos de Aguante
Las monjas no parecen llegar a pillarte mientras avanzas por las calles. La sangría parece haber decaído a lo largo de la noche y la zona del Upper East Side es aún más tranquila si cabe. La mayoría de edificios tienen fuertes persianas de metal tapando cada ventana y apenas se ven problemas por allí.
O eso pensarías si no fuera por un par de cadáveres que ves en el suelo en la siguiente esquina. No parecen purgadores cualesquiera; por no decir que llevan uniformes a juego y buenas armas encima. Por no mencionar que no parece que haya sido hace mucho...
Puedes hacer una tirada de Percepción si quieres sacar algo más.
Dejando el coche tres manzanas mas atrás caminaba sin un rumbo fijo, para otear el terreno y ver lo que me podría esperar antes de ir a buscar a una de las dos personas en concreto, pero lo que vi allí me hizo silbar del asombro. -Vaaayaaaa... Era verdad lo que decían en la tele, este sitio esta fortificado. Joder... Creo que los de aquí van a ser mas difíciles de lo que pensaba ya simplemente a ver sus caras. -Pronto me percate que mis palabras pudieran ser mas ciertas que vacías al ver como un par de cadáveres uniformados estaban tirados en el suelo.
-¿Esta gente es de un comando o algo? - Una vez mas la curiosidad pudo conmigo y con el arma a media altura me acerque a los cuerpos para saber como habían muerto y a que tenia que atenerme en esa zona de ricos.
Motivo: Percvepcion
Tirada: 1d8
Resultado: 1(+2)=3 [1]
Operar al aire libre debería haber sido difícil, pero el Doc lo hizo sin que le temblara o vacilara la mano, siempre esbozando su eterna sonrisa. Observó al chico que no hizo nada durante la reyerta, el que tenía el tono de piel enfermizo. Imaginaba que no serviría para nada en un tiroteo, pero quizás había algo más detrás… Aunque no le interesaba en lo más mínimo.
¿Me vas a hacer curita sana?
-Claaaaro, luego podre diseccionar a alguieeeeen- no era una herida profunda, pero si se enfrentaban a un nuevo grupo, necesitarían a todos los tiradores que tenían. La mención del camión que usaban los mercenarios, le hizo desviar su mirada a los cuerpos-. Deben tener la llaveeeee…
Pero alguien más estaba rondando, otro sujeto con una máscara en el rostro, paseando por el lugar como si nada. El Doc no quería luchar, así que solo le sonrió y saludó con una mano roja de sangre. Esperaba que el tipo siguiera su camino. Convenía apurarse a conseguir un vehículo para largarse. Aceptaría su propuesta de ir juntos.
Al acercarse más, Jo-Ming, o el tipo de la máscara roja, se fijó en como Doc, o el tipo de la máscara truculenta, le saludaba con la mano roja cubierta de sangre y una sonrisa tétrica. A su lado Lory, o la chica disfrazada de Harley Quinn, también había decidido acercarse cojeando hacia los cadáveres de los mercenarios, pero se detuvo al fijarse en Jo-Ming. Algo más a lo lejos, K., o un hombre fuerte y musculoso, cargaba en brazos con Becky, o una chica que tenía todo el pecho cubierto de sangre. Y algo más lejos había otro chico con aspecto enfermizo pero que claramente iba con ellos.
Al ver llegar a Jo-Ming, Lory llevó su mano hacia la pistola, atenta a sus movimientos pero sin disparar todavía. K. no parecía haberse dado cuenta de la situación, al igual que Becky y el otro chico.
En un segundo quede rodeado, sabia que ir a mirar seria mala idea pero la puta curiosidad siempre a sido mas fuerte que el sentido común, así que simplemente me pare insitu cuando todos esos ojos se clavaron en el chico nuevo.
-Wow... ¿Son suyos? Lo siento no quería molestar... Simplemente me acerque para ver lo que tenían... Me persigue un grupo de monjas y cualquier cosa es útil, ya saben. -Estaba atento a quien tenia la mano mas cerca de su arma y al tipo de las manos ensangrentadas. -No quiero problemas, me piro de aquí enseguida, no me viene bien quedarme quieto mucho tiempo. -Sabía que darles la espalda sin saber sus intenciones no era buena idea, pero si que podía hablar con ellos, ya que nos dispararon nada mas verme.
Si veo que van hacer algo hostil contra mi, tiro una bomba de humo de las que tengo y salgo corriendo para librarme de ellos y pirarme de allí.