Partida Rol por web

La suerte por fin me sonreia, la guerra habia estallado y esta vez no me ivan a dejar fuera, aun asi habia un problema, no tenia ni idea de la a lo que nos enfrentabamos -¿Habiamos ya luchado alguna vez contra el norte? ¿Estamos lo suficientemente preparados?- Pensaba mientras me dirigia hacia el oraculo. Era probable que esto ya hubiese pasado alguna vez más y si alguien era lo suficientemente anciano para saberlo era él

La media hora de subida hasta el templo fue llevadera salvo por la multitud de caras largas de las personas que ya lo habían visitado.Tras pensarlo durante el viaje y pensar si realmente querías escuchar una palabras que pudiesen llevarte al mimo ánimo que los demás llegaste a la puerta principal.

Ya estabas en el templo y en poco llegaría tu oportunidad para hablar con los Dioses.¿Sabías ya bien lo que querías preguntar?

En tu mente se agolpaba esad duda pues puede que en ello esté tu futuro y destino.

Viendo a todo el mundo esperando su turno me desespero ligeramente, pero la otra opción era hablar con Loki, mi padre, asi que espero con paciencia intentando pensar en la pregunta que voy a hacerle al adivino. Las dudas me asaltan durante toda la espera, pero cuando estoy a punto de entrar se me ocurre la pregunta -¿Que he de hacer en esta guerra para alcanzar la grandeza?

Al fin era tu turno y entraste en la sala.Era una sala de un tamaño considerable pero no era grande tampoco.Estaba llena de plantas y líquidos que era mejor no tocar.Herramientas de alquimia estaban desparramadas por un lado y otro y un pequeño humo asomaba de un caldero al fondo de la sala.En el centro el oráculo esperaba.

Te sentaste frente a él y tras aclarar la garganta prenunciaste tus dudas.Se detuvo unos segundos para la respuesta,mirando al horizonte y mascando una planta.

- Tu futuro en la guerra en oscuro como la noche.Una noche abierta un día de verano.

-No se ni para que me molesto en venir, eres tan util como siempre vejestorio- Digo saliendo de la tienda cabreado y dirigiendome hacia la taberna a ahogar mis penas y esperar a que todo comience

- Como inútil será tu esfuerzo por alcanzar el Valhalla,chico.- dijo como despedida-

Bajaste la ladera hacia la aldea y por el camino pudiste ver como la noche caía y el sol daba sus últimos rayos de luz.Por la calle ya no había tanta concurrencia y llegaste sin toparte con apenas nadie a la taberna.Allí el humilde tabernero te sirvió lo que pediste y tras ello se dispuso a atender a los otros 3 hombres que habitaban la estancia.

Tus ojos empezaron a reflejar el cansancio del día,reclamando su derecho al descanso de la oscuridad del sueño.

Me levanto de la barra en la que he estado apunto de dormirme y lanzo unas monedas mientras recojo mis cosas y busco un lugar donde caerme rendido. Atravieso las casas por donde puedo y viendo un pequeño grupo de arboles completamente separado del bosque me meto entre ellos y me tiro en el suelo buscando una posición comoda para dormir -Aqui no me comeran las alimañas por lo menos- Pienso antes de que el sueño me venza