Partida Rol por web

- ¿Como has dicho que te llamabas...?

Te miraba con superioridad y desprecio al pasar a tu lado

Alesia aun no le había preguntado aquello ni si quiera después de intimar y le cogió desprevenido viniendo del recién conocido, así que tardó un segundo más de la cuenta en responder.

- Luca Cannavaro

"Mierda, ¿debería haber mentido? No.. lo mejor será parecer sincero y seco con el jefe"

La verdad era que aquel aire de superioridad no hacía sentir al chico ni frío ni calor; a los ojos de Luca era solo un pele: se tiraba a su mujer y tarde o temprano encontraría la forma de quitarlo de enmedio; incluso sentía un poco de lastima por él, pero aquel aire desagradable solo conseguiría que le costara menos eliminarle.

- Acompañame...

Parecia que iba a hacerte salir con el a los carruajes.

"oh, oh..." Aquello pintaba mal, el corazón se le aceleraba por momentos y por alguna extraña razón le gustaba aquella sensación

El chico dió unos pasos hacía donde le indicaba el hombre, se moría de ganas de girarse y descubrir que cara debía estar poniendo Alesia, sin embargo hizo un esfuerzo por no caer en la tentación.

Una vez fuera se detuvo y no te miró en ningun momento, habló en voz tenue pero lo suficientemente alto como para que le escucharas perfectamente

- No se donde os ha encontrado, ni me importa. Ni si vuestro verdadero trabajo es para el que os voy a pagar, cosa que tampoco me importa demasiado. Si se os ocurre cometer el error de pensar que podeis ponerle una mano encima a mi mujer, os quedareis sin mano y quizá tambien sin otras cosas. Y ten tambien otra cosa muy clara, no me gustas.

Hizo una pausa

- Pide que te preparen un caballo en los establos y afila bien tus armas, no me gustaria que despues de todo fueras inutil en este viaje.

Esperó a que te fueras.

Luca matubo el rictus en la cara durante toda su explicación mientras pensaba sin escucharlo demasiado:

"Prefiero el sistema de los perros, es mas estereotipado y no admite confusiones; te meas en la rueda del carruaje cuando me acerco y queda todo entendido. Claro que supongo que tendria vergüenza de enseñar su cosita delante de sus potenciales adversarios... lo unico que tiene es dinero después de todo es un mierdas"

Luego sin dirigirle para nada la palabra, se giró y se fué a buscar los establos tal y como se le había ordenado, ahora con una sonrisa en los labios, pero antes de desaparecer le echo un ojo al culo de la duquesa; la advertencia de no tocarla había augmentado su apetito.

El duque no parecio notarlo, cuando llegaste al establo te dieron a escoger caballo... apenas entendias sobre ellos asi que te limitaste a escoger por su color: blanco, gris o marron. El criado no parecia dispuesto a perder demasiado tiempo

- ¿Con cual se queda? - te insistió

El chico se acerco al caballo gris y le dio dos palmaditas amables en el cuello, ese era su color; el de la mezcla y el de las calles.

- Me gusta este

La verdad es que estaba emocionado, nunca había tenido animales de compañia más que gatos y palomas, los cuales no le gustaban demasiado a decir verdad. Pero en el fondo no tenía ni idea de como iba a hacerlo para seguir al carruaje.

- Spero que se te de bien chabal, porque por lo que a mi me riguarda...

Le dijo mientras le meneaba el crin

- Se lo preparé para el viaje - comento el criado - estará junto a los carros en un momento - te aseguró

Luca se paró unos segundos a pensar en las ordenes que le habían dado

" ..un caballo en los establos y afila bien tus armas, no me gustaria que despues de todo fueras inutil en este viaje"

El chico entonces sacó el cuchillo de la parte trasera de su cinturón y se quedó mirando su oja medio oxidada.

"joder, es ridiculo llebar eso a afilar. No tengo intención de usarlo, pero un guarda sin si quiera una espada es para tomarlo a broma"

El chico entonces se le ocurrió la idea de irse a dar una vuelta por la finca a ver si encontraba algo parecido a un almacen de armas o una herrería. Quizás lograra conseguir un arma decente aunque solo fuera para aparentar.

Junto a los establos estaba el pequeño taller donde herraban a los caballos y trabajaban el metal. Alli supones que debian afilar tus armas, parece el unico lugar donde podrias conseguir algo.

El chico caminó hacia el taller esperando que no hubiera nadie excepto algun sabre abandonado. También afilaria algo su cuchillo, aquel duque parecía tener una piel un poco dura.

Encontraste a un chico joven, apenas un niño, haciendo una pequeña pila de leña en una esquina. Te miro al entrar un momento y luego siguió con su trabajo.

Sobre la mesa habia 9 espadas, una al lado de la otra y a un lado un martillo de herrero. El resto de las herramientas estaban colgadas de las paredes.

- Bambino, necesito una espada. Soy el nuevo guardaespaldas de la duqueza e..

"Em.. ¿qué hago contandole la pelicula a este niño? supongo que será el hijo del herrero o quien sea que se cuide de esto"

- Il fatto e que debería hablar con el encargado... Sabes si va a tardar molto?

El chico se explicaba gesticulando ampliamente para que lo entendiera. Nunca supo muy bien como comportarse con los niños, así que o bien los trataba como adultos iguales a él o como bebés, sin terminos medios.

Se encoje de hombros

- No se cuando volverá, pero puedes coger una y el se la cobrará al duque, si necesitas algun trabajo vuelve despues de comer pero no se si le encontrarás de todos modos.

- Grazie chico, voy a coger esta misma pues.

Luca se acercó a las espadas y cogió la primera que se le puso por delante; se la colgó en el cinturón si ni si quiera sacar el filo de la beina, de todas formas solo la quería para aparentar.

- Hasta la vista.

"Espada nueva, un caballo y mi cabeza a punto de ser cortada por un marido poderoso y celoso; no está mal."

Después de esto, salió hacia el punto de partida donde había dejado al duque, junto a los carruajes.

Junto a los carruajes solo pudiste encontrar sirvientes preparandolos, los duques seguramente estarian dentro.

Al ver el panorama frente a los carruajes era evidente que aún faltaba algún tiempo antes de partir, así que el chico se dispuso a buscar a la duquesa para "acatar" sus ordenes sin importar cuales fueran.

Consigues llegar despues de dos dias de viaje, el cochero te informa de que estais entrando en su propiedad.

Una casa enorme rodeada de jardines, en los que estan preparando algunos carruajes para algun viaje.

Un carruaje llega a la finca del duque de Lucani.