Mira a ambos lados del pasillo, y finalmente se decanta para ir hacia la izquierda. No obstante, antes de empezar a andar, entra de nuevo en la habitación para ver si allí hay alguna túnica o alguna pieza de ropa... No le molesta ir con la sábana alrededor de su cuerpo, pero no es plan.
La puerta se abrió lentamente.
Excelente. Dijo una voz conocida. Llevaos el cuerpo de aquí. Ya ha cumplido su misión.
Dos mortifagos encapuchados se acercan hasta el cuerpo de tu madre y con cuidado, la cogen por los brazos y las piernas y se lo llevan de allí. Después, cierran la puerta y te quedas sola con el Señor Oscuro, que parece bastante complacido.
Lo has hecho bien, pequeño. ¿Cómo te sientes?
Encuentras junto a tu cama la ropa que tenías puesta, completamente doblada y limpia. Te vistes y sales hacia el pasillo nuevamente, caminando hacia dónde está la luz.
Cuando llegas allí, te das cuenta que es una reunión de Mortifagos. Están Peter, Alwyn, Crocker, todos, excepto Voldemort.
En el momento que te ven llegar, todos se giran para mirarte y te hacen una leve reverencia en señal de saludo.
Sonríe, devolviendo la leve reverencia, por mera educación, y se acerca directamente a Peter, cogiéndolo de la mano, entrelazando sus dedos con los de él... Si supiera lo que había pensado antes de verlo aparecer, seguramente no estaría tan contento. Pero mejor no pensar en eso.
¿Dónde está Will? - le preguntó más bien bajo, notando que falta su presencia.
Al entrar los mortífagos y llevarse a su madre cuál saco de patatas, William intentó reunir los pedazos en los que se había roto su persona e hizo todo lo posible por aparentar una frialdad distante. Aún así, al oír la voz del Innombrable y preguntarle por sus sentimientos, no pudo evitar tragar saliva con dificultad.
Siempre es un placer servirle, milord. -le responde, girándose hacia él con la mirada baja y la cabeza inclinada- Aunque sea duro, eso es lo que mis padres y yo siempre hemos querido, serle útil sean cuales sean las circunstancias.
Voldemort cogió por los hombros a Will y abrazándolo, salió junto con él de la sala. Lo acompañó por el pasillo, hacia un lugar que se iluminaba por las antorchas y cuando llegó hasta el final del pasillo, una gran sala se abrió dejándolo ver un montón de mortifagos que estaban allí mirando a Britanny.
Todos los mortífagos estaban allí, hasta los padres de Will, que lo miraban sonriente debajo de las túnicas.
La abuela de Brit también estaba con ellos, junto con Marmaduke, Crocker, Peter, Alwyn y varios más que aún no conocéis.
Voldemort se aparto del chico y se sentó en una especie de trono que había en una punta de la sala y apoyó el mentón en su puño cerrado.
Demos la bienvenida a William y a Britanny a nuestra familia. Dijo levantando las manos.
Y así, uno a uno se fueron acercando a vosotros para presentarse y daros la mano.
Una cosita, cuando decís "los padres de Will" te refieres solo a mi padre, verdad? Acabo de matar a mi madre! xD
Brit sonreía a Will abiertamente, contenta de que él también hubiera pasado la Iniciación, la suya en sí había sido... Increíble. Incluso no pudo apartar la mirada de Voldemort mientras se dirigía al trono, luego ya decidió mirar un momento a su abuela para sonreírle. Esperaba que estuviera orgullosa.
Les dio la mano a todos los que se acercaban, dando las gracias a su bienvenida.
Al entrar acompañado por el Innombrable, William estuvo a punto de tropezarse al ver allí a su madre. Durante un gran instante, su mirada se posó en ella, sin creerse aún que estuviese viva. Al ver que realmente había sido probado y que nadie fue herido, pudo sonreír de alegría. Quizás las cosas se complicarían más tarde, de eso estaba seguro, pero en ese momento se sintió alegre y relajado. Aliviado.
Miró a Brit y le sonrió. Y mientras sus nuevos compañeros lo saludaban y le daban la mano, iba memorizando sus caras de forma inconsciente. Le sería útil saber quienes serían sus amigos y quién no. Y quizás más adelante podría usarlo...
Voldemort carraspeó un par de veces tras los saludos para que todos le prestaran atención.
Al parecer, lo que tenía que decir era sumamente importante, por lo que quería que todos y cada uno tengan todos los sentidos puestos en él.
Se movió en su trono y simplemente, sonrió. Sobre todo, miro a Will y a Brit, y asintió con su cabeza, como indicando que lo que venía a continuación era dirigido a ellos, o que eran parte importante de lo que iba a decir.
Amicus, muchos de vosotros sabéis por qué estáis aquí, y como van a ser las cosas a partir de ahora. Damos la bienvenida a los nuevos en nuestras filas y ellos serán los punta de lanza en el plan que llevo trazando desde hace mucho tiempo. Ellos serán primordiales en el éxito del plan, por lo que quiero que todos apoyéis con vuestras acciones a ellos dos, para que todo salga como es debido.
Voldemort os vuelve a mirar.
¿Tenéis alguna duda ahora mismo? ¿Hay confusión en vuestras mentes?
Britanny prestaba atención a Voldemort, soltando la mano de su abuela, la cual esperaba que la mirara orgullosa, igual de orgullosa que se sentía ella de sí misma.
Tenía muchas preguntas y dudas, quería saber de una vez de qué trataría este plan que Will y ella iban a ser tan importantes... Pero no dijo nada, tenía que ser paciente, o al menos intentarlo. Así que solo negó con la cabeza, no tenía ninguna pregunta, y la confusión era solo producida por la impaciencia.
Miró a Will, esperando su respuesta.
Aunque a William le costó mucho despegar la mirada de su madre, cuando Voldemort llamó su atención se prestó atento a escucharlo. También negó al ser preguntado por dudas. Claro que tenía dudas, ya que realmente no sabía como terminaría todo o que les tocaría hacer la próxima vez. Pero ya estaba dentro y no podría salir sin desperdiciar su vida. Y eso era lo más preciado que tenía... Por ese motivo, sonrió al Innombrable y miró a Brit después de hacerlo. A partir de allí empezaba todo y no podía meter la pata.
El plan es sencillo. El final del mismo es la muerte de Dumbledore y el control total de Hogwarts. Dijo sin más.
Vosotros, como alumnos de la escuela y nuevos Mortífagos tendréis un papel esencial en este plan. Os lo explicarán en su momento, pero tenéis que tener cuidado, mucho cuidado. Mis informadores me han dicho que en este mismo momento, se están tomando medidas para impedir cualquier ataque en la escuela.
Voldemort miró a un lado y a otro.
Y eso sólo me hace sospechar de una cosa... tenemos un topo entre nosotros. ¿Alguno de vosotros quiere decir algo? Continuó mirando a todos los demás, incluidos a los dos niños.
Martin se agachó delante del señor oscuro, aún con la cabeza cubierta por la túnica y la máscara en su rostro.
- Puede tomar mi vida si lo desea, Señor Oscuro, pero nunca le he traicionado. - Dijo el Mortífago.
Lo sé, Martin, lo sé. Dijo el señor oscuro mientras sonreía.
Ahora ya da igual. El plan está en marcha.
Voldemort miró a todos y a cada uno de los presentes.
Esta misma noche nos internaremos en Hogwart y mataremos a todos, incluyendo a Albus Dumbledore... del cual me encargaré personalmente. Mataremos a todos, no dejaremos rastro de vida entre las paredes de Hogwarts. Si mi fiel Peter ha sido bueno, ya debe de estar preparando todo para nuestra llegada... también nuestro amigo el Profesor Snape. Severus nunca nos ha dejado de lado y eso se tendrá en cuenta cuando reine entre los magos de Inglaterra y del mundo.
El Señor Tenebroso volvió a sonreir.
Preparaos, saldremos de aquí en poco tiempo.
Así que un topo? -se pregunta William tras el comentario del Innombrable- Pues debe de ser alguien de lo más talentoso, no se como puede escapar a la mirada del Señor Oscuro... Aunque me iría bastante bien descubrir quién es si quiero sobrevivir aquí. Necesitaría un experto en engaños...
Por un momento, William se despista y empieza a hacer sus cábalas, sobre como ppodría salir de esta vivo. Aúnque su ensimismamiento no dura demasiado. Al comentar lo de Hogwarts, William nota como si una mano agarrase su estómago con todas sus fuerzas y no quisiese soltarlo. La afirmación del Innombrable de atacar Hogwarts le parecía totalmente surrealista. Simplemente no podía creérselo. En su mente intentó hallar algo que le dijese que era mentira. No encontró nada. Si Voldemort lo había dicho, sería cumplido. William no sabía cuanto tiempo llevaban planeando el asunto, pero el hecho de que Valdruk fuese encontrado junto a un cadáver de una Gryffindor y bajo la Marca del Innombrable le recordó que estaban en guerra y que las cosas tendrían que precipitarse en un momento o otro. Y aunque se sintiese asustado ante los acontecimientos, sabía que algo tendría que hacer. Lo que no sabía era que hacer.
Aunque... Y si buscaba al topo? No tenía ni una posibilidad en encontrarlo, si el Innombrable no lo había hecho. Aún así, tenía que intentar parar esto.
Britanny abrió los ojos sorprendida.
¿¡Atacar Hogwarts!?
Parpadeó confundida, ya sabía que Voldemort y los suyos no eran hermanitas de la caridad, pero de aquí a cargarse todos los magos y brujas... Era un poco demasiado mucho precipitado. Le parecía una bestialidad.
Se humedeció los labios y dio un paso enfrente.
Mi señor... - dijo en un tono de voz más bien bajo, pero ante el silencio de la sala, se la escuchó sin problemas - ¿Todos los magos y brujas? No es que me parezca mal, pero... ¿No sería mejor dejar en vida al menos los que sean de Sangre Limpia? - carraspeó, y sonrió débilmente, esperando que Voldemort no se lo tomara como una ofensa.
Brittanny, soy magnánimo en las victorias. Si algún Sangre Limpia quiere rendirse ante mí, no será eliminado. Para nada. Primero será puesto a prueba y después, se unirá a nosotros. No mataremos a nadie que quiera unirsenos, pero no creo que los profesores estén muy de acuerdo en ello... bueno... menos Snape, que es él que nos abrirá las puertas del colegio para comenzar el plan. Dijo el Señor del Mal mientras sonreía.
Después, miro a Crocker y a Aliansforth.
Vosotros dos, quedaos aquí y eliminad las pruebas. En poco tiempo esto estará lleno de alumnos curiosos y no queremos que nos descubran... por lo menos, no por ahora. Les caeremos tan fuerte que no sabrán que demonios les ha pasado. ¡Vamos!
Y con un ademán, el Señor Oscuro comenzó a caminar por los túneles, seguido por casi medio centenar de mortifagos.