Partida Rol por web

El caza escolta sigue tratando de acercarse mientras dispara sus láser contra el Corsair en rápida sucesión.

El caza líder no es capaz de acercarse al Corsair, que vuela a máxima velocidad. Sus disparos se producen en uno de los giros y pasan lejos del blanco. El otro Stingray tampoco es capaz de acercarse, sin embargo es más afortunado con sus disparos y mientras el láser medio fuera de alcance se pierde por detrás del Corsair, sus láser pesados impactan en el ala izquierda y en la popa.

Stephanos consigue mantenerse lejos del caza lider, quedando éste demasiado lejos para disparar, pero no consigue un buen blanco sobre el segundo caza y falla sus disparos. Por el contrario, su perseguidor si le impacta de nuevo con los láser pesados, fundiendo aun más la parte posterior de su caza, que ya empieza a ser preocupantemente débil, y su ala izquierda, que aun aguanta.

El caza líder acelera a máxima velocidad para tratar de aproximarse al Corsair, sabe que no tendrá ninguna posibilidad de impactarle desde tan lejos y con los daños sufridos pero aún así dispara sus lásers pesados. El caza escolta sigue empeñado en acercarse lo máximo posible al Corsair y echa de menos el láser medio averiado cuando lanza su andanada.

Stephanos observa la imagen térmica de su perseguidor y sabe que arriesga demasiado con un sobrecalentamiento y no podrá disparar demasiadas armas, así que decide jugar a su juego y acercarse a toda velocidad a distancia corta para disparar con casi toda su potencia de fuego, que es mayor a corta distancia. Con suerte, al acelerar a tope, evitará que su otro enemigo se acerque. Su caza comenzará a sobrecalentarse, pero nada que no pueda soportar.

- Así que quieres venir, ¿no? Vamos, te voy a dar un besito.

El líder imprime máxima potencia a su reactor, pero también hace lo propio el Corsair y se mantiene lejos, con lo que los disparos del dañado Stingray no tienen la precisión necesaria para alcanzarle.

El caza escolta gira y reduce velocidad de forma brusca para acercarse al Corsair que le persigue, consiguiendo colocarse en su cola. En tal posición está tentado de disparar más armamento del que sus radiadores aconsejan para intentar derribar de una vez por todas al correoso Corsair, pero finalmente dispara solo un láser pesado y su ya único láser medio impactando de lleno en la popa del caza enemigo, que responde con una violenta sacudida acompañada de un chispazo y un humo grisáceo comienza a salir de forma constante del motor. Sin embargo, el Corsair gira de forma muy cerrada ahora intentando ponerle el punto de mira encima...

Aunque Stephanos consigue mantener distancia con el Stingray lider, el escolta se coloca detrás y le vuelve a impactar en la cola. En ésta ocasión el piloto observa por el rabillo del ojo como se encienden unos avisos en su panel de daños, acompañados de un molesto zumbido intermitente. De un rápido vistazo comprueba que se trata del reactor, en ese momento realiza un giro brusco y aunque coge de lateral al Stingray que acaba de herir a su Corsair, su instinto y pericia le hacen disparar en el momento oportuno. Los coloridos rayos de distinta potencia impactan en varias zonas del Stingray salpicando su fuselaje de lineas de metal fundido. Justo cuando pasa por la estela que deja el Stingray escolta, Stephanos dispara una vez más, ésta vez con sus armas de cola a través de la pantalla principal de su cabina, que mostraba una imagen de la cámara trasera con los reticulos de puntería. Ambos láser ligeros impactan en la parte trasera del caza que se alejaba alabeando bruscamente. De repente, mientras Stephanos apaga con gesto casi involuntario la alarma de daños y el zumbido deja de sonar, ve que su enemigo empieza a caer en picado, aunque no parece haber recibido daños serios.

Sin embargo, el Alastor esta malherido, su corazón ha recibido un peligroso corte y sangra. Además tiene una fuga que aumenta su temperatura por encima de lo que tenía previsto, lo que provoca una sacudida inesperada por una pequeña explosión producida en la tobera, que le hace perder algunos trozos de la misma y también le obliga a caer sin control durante un par de segundos...

El caza líder ve su oportunidad de acercarse al Corsair enemigo y lo sigue bajando altura para colocarse a su nivel mientras trata de acercarse disparando sus láser pesados.

El otro caza, trata desesperadamente de recuperar el control mientras ve como el suelo se aproxima peligrósamente...

El líder del vuelo de F-90 que acosa al Corsair trata de conseguir un blanco claro ahora que se halla a distancia media, pero a pesar de reducir la distancia el Corsair vuela sin control y es incapaz de lograr un blanco claro con sus dañados sistemas de puntería: los dos rayos de color azul brillante de los láser pesados cristaliza la tierra allí donde impactan.

Y entonces una enorme explosión sacude el terreno circundante: el otro caza ha sido incapaz de recuperarse de la barrena y ha impactado contra el suelo con violencia, quedando completamente destrozado y sus pedazos esparcidos por varios cientos de metros a la redonda.

Tras la breve caida sufrida, Stephanos recupera el control del Alastor, que vuelve a estabilizarse con un suave planeo hacia la derecha, mientras observa que la temperatura de su caza desciende a niveles normales. Un par de rayos laser pasan cerca de él dejando unos surcos de tierra al rojo vivo sobre el árido terreno del planeta. Más allá puede ver con claridad como el Stingray escolta que recibió múltiples impactos en su último encuentro se encamina hacia el suelo sin poder hacer nada para evitarlo, girando sobre todos sus ejes. Es el fin del aparato, ahora solo hay restos quemados esparcidos por toda la zona, y la marca de sus sensores desaparece con el "bip" característico que emite cuando pierde una señal. Ahora tiene sobre sí al caza líder, que tiene daños en sus sistemas, aunque el Alastor tiene el blindaje muy debilitado y también tiene daños, por lo que sigue siendo un combate igualado.

Cualqueira de los dos puede salir victorioso de este enfrentamiento, pero Stephanos no está dispuesto a perder la oportunidad de presumir de su hazaña delante de los MechWarriors, así que mientras gira su aparato y reajusta su velocidad, piensa rápido su estrategia mientras trata de predecir la maniobra que va a ejecutar su contrincante.

El caza restante rompe a la izquierda y acelera a máxima velocidad mientras hace un picado para tratar de alejarse del combate y regresar a la base. Con los daños severos que sufre en su sistema de puntería podría estar en desventaja en un uno contra uno ante el Corsair, que aunque también con graves daños, tendría más posibilidades siempre de impactarle.

Stephanos sobrevira para perseguir a su oponente. Al ver la retirada del F-90 que queda aun en vuelo, le sube el ánimo y decide intentar derribarlo. Es consciente de que su motor está dañado y tiene muchas posibilidades de no alcanzarlo, pero decide intentarlo compensando con su pericia a los mandos de su aparato. Sabe que al perseguirle, realizará maniobras para evitar que le dispare, y podría aprovecharlas para acercarse. Acelera al máximo de lo que dá su reactor, que ya no desarrolla el mismo empuje debido a los daños en la tobera, y fija su objetivo con dificultad entre las vibraciones producidas por el motor.

- No, no me vas a privar de la gloria ahora, cabronazo. Tienes que caer. -Piensa mientras intenta acercarse para dispararle.

El Stingray consigue alejarse del Corsair que a pesar de sus esfuerzos no puede desarrollar suficiente velocidad con su reactor dañado.

El F-90 sigue con su máxima aceleración para intentar dejar atrás de una vez por todas al Corsair mientras realiza maniobras evasivas para dificultar la puntería del enemigo.

A pesar de los intentos por alcanzar al huidizo Stingray, éste consigue alejarse, y los disparos del Alastor no alcanzan a su objetivo a tan larga distancia.

La computadora de batalla debe haber calculado que no puede ganar y hace retirarse al caza aprovechando los daños en el motor del Corsair de Stephanos. El joven piloto es consciente de que por mucho que maniobre, está demasiado lejos como para perseguirle sin alargar el combate más de lo necesario, así que, una vez puesto en fuga al enemigo, se da por satisfecho y manipula su palanca de gases para reducir la velocidad mientras realiza un giro tranquilo y elegante de 180 grados, y apunta con el morro de su caza hacia el cielo para abandonar la persecución y dirigirse a la nave de descenso, tal y como se habia trazado en el plan.

- Aquí Hades, el enemigo ha sido derrotado. Un F-90 derribado y otro se retira con averias de consideración. El Alastor esta dañado. Si no hay otra orden que varíe el plan previsto, vuelvo a la base. Cambio. -dice de nuevo con seriedad, metido en el papel de piloto.

La voz de Sabatini resuena en el comunicador:

- Hades, Sabatini al habla, buen trabajo muchacho. Vuelve a casa. Corto.

Los cazas rompen el contacto ante lo difícil del enfrentamiento: el Corsair teniendo serias desventajas de maniobra por la avería en el reactor y el Stingray con pocas posibilidades de aprovechar la ventaja por sus averías en sensores. El combate así podría ser una lotería que favorezca al más afortunado y ambos cazas vuelven a sus respectivas bases para unas muy necesarias sesiones de reparaciones.

La simulación termina para Petrakis y el sistema informa en una pantalla de resumen sus daños en sistemas y blindaje y sus derribos: 2 cazas atmosféricos Guardian y un F-90 Stingray.