No sabía qué era lo que se podía hacer al respecto y tampoco cual había sido la idea de Cottle, ya que no es que le hubiera prestado mucha atención cuando había hablado..
Ahora, incluso yo me quedaba algo preocupada, quizás algo más de lo que me gustaría reconocer, sobre todo después de saber de qué iba todo este lío. El único problema, es que a todo este embrollo yo no le veía ninguna solución factible, siempre que no fuera deshacernos de todos los fragmentos de esa maldita lámpara.
- No sé si Cottle pensaba venir aquí o no.. - Respondí a las palabras de Anne haciendo un gesto de negación con la cabeza, más bien, de resignación. - ¿ Y... ? ¿ Alguno tiene el teléfono del detective?
Miré a la cara a aquellas personas, incluso con la tez más blanca de lo que era habitual en mí.
- Todo esto me da muy mala espina..
Pobre Cottle espero que este bien pienso con gesto de preocupación en mi rostro Parece que todo esto se nos esta yendo de la mano por momentos, creo que lo más sensato seria aprovechar que estamos al lado de la comisaria para avisar a las autoridades mientras desde aquí tratamos de dar con el detective. Por supuesto habrá que obviar toda la parte fantástica o los agentes pensaran que les estamos tratando de gastar una mala broma o que estamos locos
y sinceramente no creo que podamos culparles por ello
Si les parece bien yo mismo puedo bajar a la comisaria
Abbot parece terriblemente preocupado por el suceso - el paquete debe ser el último fragmento de la Lámpara - se dice mientras piensa en el posible destino de Cottle - espero que no le haya ocurrido nada. Necesitamos ese fragmento...
Su rostro, cansado y ceniciento por no haber dormido bien estos días y tampoco haberse aseado lo suficiente. Ha tenido poco tiempo y lo ha usado para sus estudios acerca de la Lámpara y la tienda. Es más tiene unas bolsas oscuras bajo sus ojos que cada vez están más definidas.
Creo que es una magnifica idea - responde, unos minutos después de que Eban formule un plan, debido a que sus reacciones son más lentas por el cansancio acumulado. - Deberían ir a la comisaría usted y una de las señoritas. Y el resto quedarnos aquí por si Cottle o el detective aparecen o al menos recibimos alguna noticia.
Por primera vez desde que había comenzado todo esto estaba de acuerdo en algo con Abbot, aunque esta vez me parecía que sólo era porque le quedaba algo de sentido común. Era mejor que ninguno de nosotros se quedara solo, ya que viendo lo que sucedía casi era mejor ni pensarlo, podríamos acabar demasiado mal.
Abbot tiene razón. - dije para luego arrepentirme de pensar en voz alta. - No es buena idea que ninguno de nosotros se quede solo. Si quieres, yo misma puedo acompañarte a la comisaría. - Me ofrecí ya que me había parecido la mejor de las opciones.
Lo único que me faltaba en aquel momento es acabr en un hospital o muerta porque alguien me dejara una herencia que no valía absolutamente para nada. Estaba muy asustada y seguro que en la comisaría me sentiría mucho mejor.
-De acuerdo, partan de inmediato hacia comisaría, a ver qué podemos hacer por Cottle- digo, algo cansada. Todo lo acaecido desde que me bajé del tren para venir al funeral me había hecho envejecer diez años en apenas unos días- Yo me quedaré aquí, supongo que al igual que Abbot, por si regresase el desaparecido.
La idea de quedarme con el loco de Abbot no me seducía, pero esperaba no se le ocurriese ninguna estupidez, y menos, sabiendo como sabe que voy armada.
Eban y June van a la comisaría, William y Anne se quedan en la habitación de Eban (a menos que me digan lo contrario).