- Claro, sino la tarea se te puede hacer eterna. - Respondí mientras mostraba una sonrisa, aunque acto seguido tuve que taparme la boca porque se me escapaba un bostezo. - Vamos a dormir, sino mañana nuestras caras van a necesitar mucho maquillaje para tapar las ojeras..
Una cosa era descansar poco y quedarse todo el día dentrod e una tienducha de mala muerte, pero tener que salir e ir sin arreglar eso no tenía ni que ser legal.
William presta atencion a todas las palabras del inventario y toma notas freneticamente en su gastada libreta - Doctor Bohr, Padre Tobias.... no parece dificil reunir los fragmentos de la lampara, el tema de las protecciones magicas es otro problema a tener en cuenta... pero mejor contemplarlo mas tarde- Tras escribir un buen rato y romper la punta del carboncillo varias veces, se dirige a sus compañeras:
- Muy interesante, volvere a releer las notas de los diarios que he tomado para ver si encuentro datos de esa expedicion o mas informacion sobre las protecciones magicas de las salas. Pero mejor hablar mañana con los poseedores de los fragmentos de la lampara.... son 4 varones.... mostraran mas atencion en ustedes dos que en un viejo carca como ya, jeje - William os mira con una mezcla de ironia y lascivia en sus ojos, pero pronto en su cara tan solo se dibuja su ya tipica sonrisa burlona. -El Hotel nos espera, necesito descansar- Abbott termina la frase frotandose sus enrojecidos ojos, mostrando un justificado cansancio tras el duro dia.
lamento no habe podido postear antes, se q suena a excusa, pero he estado esta semana muy liado fuera de casa y nunca he sacado mas de 5 minutos libres delante de un ordena con internet, sry.
Debería sentirme molesta porque un hombre como Abbot me dijera algo de este estilo, pero en realidad no era así, En el fondo estaba totalmente convencida de que por muy desagradables que fuéramos siempre tendríamos un mejor resultado que Abbot con sus habilidades sociales, entre las cuales no se hayaban ni ser agradable, ni saber cuando mantener la boca cerrada, así que simplemente sonreí halaga imaginándome mi propia película. Quizás algún día podría llegar a escribir mi propio guión y pasarme al otro lado..
Cuando me di cuenta de que mis pensamientos me estaban haciendo sonreir demasiado, me puse en pie y esperé a que Anne estuviera preparada para marcharnos.
-Bueno- le digo a los dos, mientras reprimo como buenamente puedo un bostezo- ¿Nos vamos? Ciertamente, no estoy acostumbrada a trasnochar...
- Claro! - Respondí alegre ya que llevaba bastante rato queriendo hacerlo.
Encaminé mis pasos hacia la puerta de la tienda, suponiendo que los demás harían lo mismo. No pude evitar echar un vistazo a las sombras que se iban formando según apagaba las lámparas a mi paso, pero este lugar me daba escalofríos.
- Alguno tiene un particular interés por llevarse la llave de la tienda? - Pregunté ya que escuchar mi voz me hacía estar más egura de mi misma y olvidarme de mis inquietudes, al menos por unos instantes.
Sentía bastantes ganas de poder descansar en una cómoda cama y la verdad, es que si no me hubiera ofrecido ya para ayudar a Anne, al día siguiente no me molestaría ni en regresar. Esto no estaba echo para mí, ni me interesaba lo más mínimo, como mucho, un poco de curiosidad, más bien alguna clase de morbo oculto por el hecho de quesucedían cosas extrañas.
Si nadie tiene nada más que decir, cierro escena. Abro en el hotel para que digáis cómo vais a actuar y así abrir escenas adecuadas.
Es 27 de Abril, Miércoles, de 1922. Son las 00:48 horas.