Partida Rol por web

Belphegor ya se había marchado hacia rato cuando llegaron las banshees para recogernos.

-Parece que ahora si que podremos marcharnos.- Habían pasado muchas cosas, había sido un día agotador y desde luego necesitábamos un descanso.

-Ya me conoces, sin nadie parándome los pies corro hacia el peligro, por así decirlo.- La dije con una sonrisa.

No tuvo que mandarnos ir a la nave dos veces, era algo que haría gustoso incluso sin que lo hubiera dicho. Me encamine sin demora hacia una de ellas, con el dragón caminando detrás de mi. No hacia falta que le dijera que se hiciera mas pequeño para entrar en ella, era algo que el sabia.

Ahora solo quería llegar a Elysium, descansar.

- Buen trabajo.

 Sencillas palabras por parte de un capitán, de alguien que tenía un rango bajo entre todas aquellas personalidades. Avner era un maestro, Inma una leyenda de su orden, Alyssa presidía el consejo y el geofrente con lo que cada vez parecía más esa mano de hierro. Era dificil no sentirse amedrentado allí, intelectual y físicamente, pero Adirael ya había lidiado con muchos grupos compuestos por los "mejores", por la elite. Al final sólo restaba una verdad, la necesidad de la esperanza y la gentileza de una humanidad unida. Sus palabras eran simples, pero no vulgares, debían saber que luchaban por un propósito, aunque lo de los rusos se les hubiese ido de las manos a los mandos..

 - Parece que se te puede dejar al mando. - le dijo amistosamente a Raven si optaba por irse con los demás. Y tendría, si sus miradas se cruzaban, una complice con el sacrificio hecho por Lyra, aún así, era un bajo coste por todo lo que podía llegar a ganar de ahora en adelante.

 Inma no le hacía sentir especialmente incómodo, la miró con los brazos cruzados, estático, esperando a estar a solas con ella.  No había nada que Adirael esperase por su parte, ni por la de los demás, le daba igual lo que pensaran, aunque posiblemente muchos le envidiasen, era una mujer realmente hermosa, sin imperfecciones, sin marcas de un pasado peor, casi parecía perfecta. A el eso le hacía más receloso, como mucho, pero todo eran buenas intenciones con ella.

 Desde luego aquella versión era mejor que la que había vivido dentro de Geralt, seguro que Raven opinaba lo mismo...por lo menos aún no le había metido ningún cate.

 Adirael pasó de situar sus brazos cruzados a sostener su cintura para mirar a Inma, esperando algo.

 - La caballería.

 Me siento alagado. ¿Has venido a salvarme? - No era cachondeo, no del todo. Adirael podía mantener una charla distendida con ella. Insinuaba que Inma estaba preocupada por él o por el resto y no pudo sino venir en cuanto pudo. Aunque hubiese parte de eso, seguramente fuesen órdenes.

 No era lo más acertado si era una orden.

 Precisamente Belphegor les había asegurado que mostrar sus armas abiertamente les traería problemas, porque señalaría los objetivos y sabría como actuar. Elena ya había conseguido eso. Sería recordada como una heroína pero lo cierto es que había comenzado el principio del fin con su ardiente chispa.

 - ¿De que se trata?

 Preguntó, de todos modos, tenía algo que decirle.

Las naves finalmente llegaron para evacuarlos de allí. Para Lyra había sido el día más raro de toda su vida, para Krasnaya el más largo, pero parecía que por fin tocaba a su fin. 

La aparición de Inma Helenia sorprendió levemente a la muchacha. Se preguntaba cuántos soldados más de la élite de cada facción habrían sobrevivido y lucharían ahora bajo el mismo mando, persiguiendo los mismo objetivos. Le devolvió a la mujer la mirada con frialdad. Le pareció ciertamente engreída. 

Por suerte, Avner se ofreció rápidamente para ocuparse de ella, así estaría más cerca de Andrastia y con suerte, más lejos del resto. Solo necesitaba un rato de silencio y meditación para poder desconectar y tratar de entender.

Lyra - Gracias, muy amable - respondió con una sonrisa tendiéndole la mano. 

Lanzó una última mirada a Andrastia. No sabía muy bien qué quería comunicarle con ella, pero lo hizo de todos modos. No era momento de decir nada.

Por fin el día había acabado, podíamos marcharnos y los refuerzos había llegado, fue una sorpresa ver a Inma salir de una banshee pero con ella en las cercanías hasta los demonios menores evitarían acercarse lo que era todo un respiro, observe a Adirael con una mirada cómplice, amigable, había confiado en el sin dudarlo, era todo un alago sus palabras.

- No tuve mal maestro - le comente sonriendo, mientras recogía el casco de mi propio traje - aunque hubiera preferido a dianeira por aquí; me trae algo más de confianza - dije eso ultimo casi murmurándolo, Inma aun me recordaba a alguien verdaderamente...problemática.

Fui caminando a la misma banshee que Geralt esperando que hubiera espacio, aunque el dragón se hiciera pequeño, el espacio era algo reducido, después de todo seguían siendo vehículos de combate; Me despedí de Adirael por el momento con un leve gesto con la mano - Hasta ahora - le dije amigablemente, mientras me alejaba.

Pero aún me carcomía el hecho de que vidas inocentes fueran sacrificadas, esperaba no tener demasiados problemas políticos por ello y mucho menos con los familiares de los fallecidos.

Inma sonrió ampliamente a Adirael, se acercó y le hizo una larga caricia en la mejilla hasta que su mano casi acabo en su nuca.

-Pues claro que he venido a salvarte, atravesaría el infierno entero si fuera necesario para llegar a ti.

Confesó con evidente orgullo, como si fuera obvio, como si dudarlo la ofendiera. Acto seguido se acercó mas y se agachó ligeramente para acabar con su boca cerca del oido de Adirael, para susurrarle con el sonido de los motores de las banshees de fondo.

-El problema es "de quién" te tengo que salvar. Yo soy tu espada, Adirael, llegado el momento tendrás que decidir hacia quien dirigirla. Ya sea hacia los monstruos de fuera...

Se separó solo lo suficiente como para que sus miradas se cruzasen, muy cerca la una de al otra.

-... o hacia los que ya estan dentro.

No hacía falta especificar que se refería a Alysa, almenos era la conclusión mas lógica en aquel momento. Adirael debía asumir que estaba al tanto de lo sucedido y de que ella había sacado sus conclusiones y reflexionado al respecto.

En otras palabras: Mataría a Alysa si Adirael decidía que era necesario.

Finalmente tomó algo de distancia como una conversadora normal.

-Me temo que somos dos partes de lo mismo, hermanito. Al final, no lo lograremos si no lo hacemos juntos. Solo quería recordartelo. Bendita suerte la tuya de tener una hermana tan hermosa y devota.

Su complejo de hermano seguía desarroyandose de forma casi cómica, pero el mensaje importante ya estaba dado.

- Recuerdo que me preguntaste sobre un asunto. Si yo supiera o creyese algo, sería bueno que lo compartiese contigo.

 Estoy cerca de saberlo. - le dedicó una mueca similar a una sonrisa, no era algo feliz tener que enfrentar a Alyssa o a cualquier otro que hubiese contribuído tanto con la causa humana, aunque tuviese otros motivos. - Pero no podemos precipitarnos. Hay cosas que aún se nos escapan.

 Contar con inma era...casi perfecto. Del geofrente, junto a Geralt, debía de ser la única persona capaz de enfrentarse a ella adecuadamente. Ambos tenían algo en común, eran demasiado caóticos para ser controlados una vez empezaban la lucha. El caos en la disciplina de Inma, y el caos en la fiereza de Geralt.

 - Puede que pronto debas acompañarme a hacerle una visita. - y esa visita sería para arrebatarle el control del consejo.

 Pero aún parecía demasiado pronto..y temía que después fuera demasiado tarde.

Inma se le quedó mirando, ahora algo mas seria. Dejando una pausa que quería decir tanto como las propias palabras.

-Confio en ti Adirael, te ganaste ese privilegio. Asi que lo dejo en tus manos.

Era la típica frase que seguía con un "pero". Pero ese "pero" ya era conocido por Adirael, no hacía falta que Inma lo mencionara, era un "pero" que se refería a lo que pasaría si Adirael daba un paso en falso, si Adirael no elegía perfectamente el momento o la manera de proceder, o si simplemente actuar empeoraría una situación ya de por si mala.

Pero Inma le seguiría, esa era la determinación que había tomado, era el reconocimiento a su hermano. Adirael era capaz de hacer algo que ella no. Si Inma se encontraba un muro que le impedía avanzar, lo destruiría. Pero su hermano era capaz de encontrar la forma de saltarlo o sortearlo sin la necesidad de ese choque de fuerzas.

Aunque dada la situación evitar algun tipo de conflicto violento parecía cada vez mas dificil.

A Inma tampoco le gustaba la idea de tomar acción alguna en contra de Alysa, ella fue la primera en defender su administración y aceptarla. Tambien había sido Alysa quien de manera directa y sobretodo indirecta, había protegido y velado por Eva. Inma estaba al tanto de todo eso y probablemente fuese incluso mas dificil para ella que para Adirael ir en su contra.

Pero eso tampoco lo dijo, su hermano ya lo sabía.

-Tengamos una cita cuando estemos en Elysium, tu eliges el dia y el lugar, aunque tampoco hay mucho donde elegir en ambos casos. Ahora volvamos a nuestra cueva.

Le acompañaría e iria con él en la banshee. El dia había sido muy largo para el psiquico. Se había ganado almenos un breve descanso.

 Adirael tenía que inclinarse con bastante intención para poder hacer aquello, pero no dudó, llevó sus labios a la altura de la frente de Inma y se decidió a posarlos allí en una muestra clara de cariño. Era como un ángel, tan puro que podía ser ingenuo y tan destructivo que podía parecer injusto. Alyssa le había dado a Adirael la clave de que Inma era su hermana, y lo fuera o no, ya había aceptado aquello y lo había abrazado sin titubeos. Necesitaban hacer que Alyssa eligiese si quería luchar o no, pero no debían ser ellos los que iniciasen la guerra, sólo quienes la arrinconasen para revelar sus intenciones.

 Ya en la Banshee la actitud de Adirael fue más relajada.

 - Me vendrá bien. - dijo frente a la cita - y a ti también. - en lo que sabía se pasaba el día entrenando o en la catedral. - Habrá que arreglar algunos papeles cuando lleguemos.

 Hemos ganado demasiada potencia de fuego, y eso nos puede traer problemas. En cuanto esté solucionado. - No podía ignorar esa responsabilidad, y menos sabiendo que los rusos podían seguir siendo un problema o al menos un pequeño grano en el culo.

 - Hoy me han dado una noticia bastante mala. - Compartió con su hermana, únicamente - alguien que quería ayudar murió el día en que Elena también lo hizo. Eso nos deja aún más solo.

 ¿Crees que debería heredar su tarea si es que es justa?

 Adirael ya tenía bastante presión sobre los hombros, aunque se había librado de toda la presión que le cauaba Geralt y Raven le ayudaba mucho.

 - Luego...está el tema de Krasnaya. - la miró buscando información. - Parecía que os conocieseis.

Una vez los dos sentados en la parte de atrás de la banshee en ruta hacia Elysium, Inma utilizó aquella manera de contestar a una pregunta tan propia de un templario, con la seguridad de alquien que responde algo tremendamente obvio.

-Si consideras que dicha tarea era justa bajo tu criterio, yo personalmente te diría que no dudaras un segundo en llevarla a cabo, incluso cuando yo misma pudiera no estar de acuerdo.

En ningun momento pidió mas detalles, porque confiaba en Adirael, si el psiquico consideraba que no debía rebelar mas, Inma lo aceptaría sin reservas.

Inma quería que Adirael fuera consecuente con sus palabras y con sus principios, no le pediría jamas que los cambiase por otros que ella considerase mejores o mas adecuados, pero si que fuera fiel a ellos. Si ella o cualquier otro decidían seguirle y confiar en él despues de mostrarlos era decisión suya, no problema de Adirael.

-No la conozco de nada, pero la sensación que tuve al verla fue al misma que cuando vi a Eva por primera vez. Ese cuerpo es tanto o mas artificial que el de ella. Por lo que tengo entendido irá a la escuela psiquica, no diré que eso no me preocupa, pero considero que Eva ya es mayorcita como para no tropezar dos veces en la misma piedra, incluso siendo tan "torpe" para tratar con las personas. Lo mismo espero de ti, ademas, Alysa no la habría aceptado tan facilmente si no tuviera motivos realmente de peso para asumir el riesgo, aunque de nuevo sus motivaciones no estan demasiado claras, solo su "efectividad".

Dijo aquella ultima palabra con cierta ironía, una ironía que sabía que solo Adirael sabría captar en toda su fuerza.