Partida Rol por web

Amsu... ¿y a mi no me respondes?

Yo... Si te sirve, siento haberte cogido por el rabo antes...

Pero tranquilo... - baja la mirada - no quiero discutir contigo. Ya se que es difícil que el niño pase de hoy. _{Cosa que lamento...}

Viendo que mis palabras pasaron desapercibidas, alzo la voz un poco mas esperando que me escuchen mientras relajo mi rostro y miro a Ananistra.
- Ananistra. Dime una sola cosa. Amas al Leñador? Realmente le amas?
Ahora me giro hacia Amsu para hablarle.
- Amsu, tu me tienes en el punto de mira. Yo por todo lo que he visto y como has obrado, confio en ti con fe ciega. Espero que llegado el momento sepas ver mi sacrificio y valorar realmente como soy.
Y al terminar con la Quimera, me giro y vuelvo a tensar mis facciones encarandome a Tolen.
- Y tu.... DINOS QUIEN TE HA TRAIDO DE VUELTA TRAIDOR!!!

Hyent'nrám no amor al Leñador, soy incapaz de amar a nadie...aunque desde que llegue aqui estoy siendo victima de sentimientos extraños....sentimientos olvidados por mi piel y mi mente hace mucho mucho tiempo...por corazon tengo una roca...pero creo que la escencia de Cell, el amor por proteger su legado me ha tocado...haciendo que cambie y quiera protegerles...El amor es un sentimiento Aterrador!!!

Miro a la mujer cambiante y asiento mientras cabeceo asintiendo con la cabeza, pero seguidamente vuelvo la vigilancia a Tolen.
Me engaño una vez y perdio mi confianza. Recuperarla le va a resultar casi imposmible.

Decido ignorar a los que no hacen más que decir tonterías haciéndome preguntas de las que no sé las respuestas.

-Dije que podía traer a alguien de vuelta, pero lamentáblemente no puedo confirmar a quién. Apostaría a que mi amiga Shäre está del lado del bien, y daría mi vida porque el leñador también lo estuviese. De Taire no puedo decir lo mismo, y quien decidáis matar esta noche también entrará en la tómbola. Si tú traes de vuelta al leñador, no sé si mis conjuros terminarán antes que los tuyos o no, pero en caso de que no lo hagan, habrá más probabilidades de que resucite a uno de los otros tres. Como he dicho también me gustaría traer a Shäre, pero no sé si estaría bien hacerlo por Taire o por la nueva víctima.

- Tolen... Pareces estar muy seguro que vas a ver un nuevo dia... Que nos escondes? Porque crees que vas a poder utilizar tus poderes? Se hará justicia.

-Porque tengo fe en que no volveré a ser asesinado espero que al menos me deis la oportunidad de traer a alguien de vuelta antes de emitir vuestro juicio para que al menos cuando lo hagáis, tengamos más oportunidades de derrotar a los verdaderos traidores.

El sosegado enano, no pudo evitar compartir el tacabo con su camarada, pues en efecto ese tabaco era de las motañas mas altas del norte, muy cerca de su gran patria donde los niños no temen ya a los gigantes, mientras disfrutaba de esa conversacion, se percato que estaba demasiado taimado, incluso Dork estaba de la parte de Tolen.

-¡Esto es intolerable! Los muertos deben permanecer allí, ¡Pues a su regreso no sabemos como volverán! Es peligroso jugar con la vida y la muerte y yo no deseo que Tolen siga entre nosotros, no hará mas que confundiros como ya lo esta logrando, es un as del engaño, pero no engañara a este enano.-Se dirigió directamente al pequeño -Ha muerto gente por ti y los tuyos, no voy a tolerar que siga así.-Se levanto, no sin antes entregar su preciada pipa a su camarada.-No os dejéis engañar, tal vez el que traiga de regreso ocupe su puesto entre los sirvientes de Rakedus, y eso no podemos permitirlo, debemos detenerlo ahora, ¡Mientras tenemos oportunidad!

El enano, volvió a sentarse y arrebato su pipa de las manos de Dork, dando una larga bocanada a su buen tabaco, necesitaba calmar su sangre, ahora mismo no tenia ganas de hablar de los buenos momentos.

Eladrín estaba realmente confundida. No hacía más que tratar de desentrañar que se ocultaba entre las palabras de cada uno... Y entre los silencios de los que callaban.

GGRRRR GGGRRRR GGRRRRR Sorya.... responderte yo a esto... el tener poder si pero no el de traer la vida, el ocultar a asesinos a la vista de todos, el hacer que nadie pueda ver que ellos ser seres viles y corruptos, el ser peligroso solo por estar vivo y mas peligroso ahora que ellos saber que el estar, los siervos de Rakedeus iran en su busca y el sabra quienes ser, y a quienes proteger... el no ha de pasar un dia mas, ellos hara lo posible por dejarle vivo, por sembrar dudas, todos los que ahora hacer eso, estar en el punto de mira... tu incluida Sorya.

Cualquier duda se pagara con la muerte, que el traera y los suyos.

GGRRRRRWWWW

Hyent'nrám, si tu no ser quien traer a Tolen ya se vera, habra que buscar mas..... pero aun asi tu no separarte de mi, y yo asi poder verte y vigilarte. Tu ahora no tener que demostrar nada ser mejor asi.

GGRRRRRR dudas... dudas siembran... muerte traer consigo.....GGGRRRRR yo matar si llegar a aquel que dudar de mis palabras por decir la verdad del humano...GRRRRRRRR

Pero, pero.... Kyú... Eso ya lo han dicho, puedo entenderlo, aunque no me guste escucharlo... - Mira a la inmensa mantícora con expresión culpable - Yo.... yo lo que quiero saber es sobre la esfinge... - agacha la mirada 

Es... una de mis deudas... le bebo algo importante a la gran esfinge... y aún no he sido capaz de resolver su enigma. 

     Anhelo de un niño
     Lágrima de la diosa
     Epitafio del dragón

No sé la respuesta... y aún no puedo regresar sin ella. Pero Tolen tiene muchos anhelos, él podría darme una respuesta, aunque no fuera la que la esfinge busca, al menos ella sabría que he buscado. Y... _{y... estoy hablando demasiado...}

mirando a Sorya de nuevo Esa respuesta que buscas, no eres la unica.... pero no es el momento de resolver la inscripción en uno de los laterales del templo de la Esfinge, no es el momento..... GRRRR

Pero, pero... ¡Tengo preguntas! - Echa a corretear, olvidándose del espacio prudencial que había estado intentando mantener para que al resto no les afectase su calor... Primero se acerca a la grupa del dragón de cristal - ¡Podemos preguntarle a Hyent'nrám por el Epitafio! ¿porque tú has visto alguno? ¡Yo no! y he buscado en innumerables mundos!

En algunos eran bestias sin mente que solo devoraban, en otros eran grandes codiciosos que acumulaban montañas de tesoros sin fin. Hubo un mundo que a su vez eran docenas en las que decidían el destino de los mismos astros. Sabios y humildes, diminutos o inmensos, grandiosos o deleznables.. ¡Ni uno solo de ellos recibió un Epitafio! ¿porqué no?

Y, y... y tenemos al niño, podríamos conocer su anhelo. Bueno, supongo que ahora será solo Vivir, pero ya es algo mejor que nada. ¿qué anhelarías si no fuese vivir, Tolen? ¡O si vivieras!

Y, y... - corretea otra vez, acercándose a Eladrin hasta pasar frotándose con ella con suavidad, rodeándola para acabar mirándola a sus ojos apagados - Y tenemos a una Seguidora de una diosa... una además, que fue cegada por la mano de esa misma deidad. ¿podríamos saber por qué lloraría tu diosa? - Y antes de darle tiempo a responder, corre una vez más hasta situarse nuevamente junto a Amsu.

- Mañana quizás ellos no puedan responderme. Quizás estén muertos. Y quizás tengas razón... hay cosas importantes aquí... cosas que tienen que ver con muchos mundos y muchas grietas en todos los planos, y con la batalla que hemos compartido para librarnos del gran Loco. Algunas de ellas no las comprendo aún, pero sí se que todos ustedes tienen que tener sus búsquedas y sus historias además de la lucha común. ¡Y yo quiero conocerlas! La suerte de Tolen ya está echada y nada lo cambiará ¿tan malo sería preguntar antes?

Echa la mirada atrás, deseando que alguien pueda aportar algo al enigma.

- Primero fue Amsu, después Greed, ambos han confirmado que el Little Tolen era culpable y aún así hay quien lo duda y pide que se le de una oportunidad. Son dos personas diciendo que es culpable y nada que nos indique que el paso por el mundo de los muertos le haya cambiado, por favor si a Taire se le condenó con menos. En cuanto a su poder, quizás el ser maligno no quita que pueda tener una segunda habilidad algo que le permita resucitar a los muertos y convertirlos en sus aliados. Eso le daría la ventaja de tener a alguien más a su lado y además muchos dejarían de sospechar de él por haber demostrado tener un poder. De una forma u otra no creo el humano deba quedarse más tiempo entre nosotros. 

Eladrín sintió la cercanía de Sorya, al menos ella no la consideraba una idiota por dudar del niño.

- Mi diosa llora por la almas que se van y por los ojos que están más cegados que los míos. Se cometió una injusticia con Taire, fue ajusticiado porque sus palabras no nos eran gratas y con ello me temo que nos hemos condenado a nosotros mismos. Veo falsedad en muchas palabras de los aquí presentes. En verdad os digo que las personas que rasgan sus vestiduras y proclaman a los cuatro vientos su pureza de alma, me transmiten mucha intranquilidad.

GGRRRR Eladrin, pues matame si asi quedas mas tranquila, pero perderas un gran aliado, alguien que pueda guiaros en la oscuridad que nos encontramos mas alla de la luz GGRRRRRR

Miro a Amsu fijamente con solemne expresión.
- Mi aguerrido, compañero, si algo me ha dado la sabiduría de mi estirpe es a medir mucho mis actos y sus posibles consecuencias, y a valorar quien es merecedor de mi confianza. Tu nos descubriste al primero de los traidores con acierto a pesar de que tu vida peligraba por ello. Al igual que Cell tu te has ganado mi confianza por lo que lucharé a tu lado. Toda demostración llegara a su debido momento. Hasta entonces solo la confianza o la desconfianza hablará en mi favor o en mi contra.
Al terminar mi conversación con Amsu me vuelvo hacia la pequeña masa de nervios y dudas en que se ha convertido Sorya, para dedicarle una sonrisa y unas palabras.
- Sorya, eres sabia, y tu curiosidad es un gran don para seguir acrecentando esa sabiduría. Quieres respuestas, y yo solo puedo ayudarte en una de ellas. El epitafio de un dragón.
Levanto la cabeza y miro al cielo.
- El epitafio de un dragón no son palabras, no es una inscripción en una lápida, no es un verso en la muerte. El epitafio de un dragón viene dado por los actos que a lo largo de toda la vida lleve a cabo.
Sin apartar la vista del cielo sigo hablando pero ahora con un aire de nostalgia, dado por el recuerdo de aquella a quien amé. A quien amo. A quien amaré.
- Cuando un dragón muere su alma brilla con luz propia y su cuerpo físico desaparece dejando solo un esqueleto vacío. Ese alma brillante asciende a los cielos y se convierte en una estrella. Si el alma del difunto ha llevado una vida honorable, llena de sabiduría, llena de actos en pos del bien común antes que del suyo propio, su alma brilla con mas fuerza que la mismísima Luna e incluso desafia al mismisimo Sol dejándose ver en los dias mas despejados a plena luz del día, y siguiendo su buen hacer guiando a marinos, pastores, estudiosos, etc.
Con un pesar que me presiona el pecho levanto mi garra señalando un pequeño punto luminoso en el cielo y tras un segundo consigo arrancarme las palabras de las entrañas cargandome de fuerza.
- Como su alma. Ella era pura, bella, fuerte, era perfecta. Era un ejemplo a seguir y su alma brilla sin parangón en el firmamento. De repente mi expresion cambia para seguir hablando con seriedad, intentando esbozar una sonrisa a traves de una expresión de pesar y tristeza. - En cambio si el alma es mezquina, malvada, oscura, el brillo se apaga. Incluso cuando la infamia es tal, lo que hace es absorber el brillo de las desafortunadas almas débiles que no tengan fuerza suficiente para combatir ese mal. Estas almas oscuras creo que tu Sorya las conoces como agujeros negros y los sabios de los Montes Grises los conocen como agujeros de gusano. El epitafio de un dragón es esa posición que se ha ganado en la vida, en los recuerdos, en los corazones para toda la eternidad. Esa posición en el firmamento que nos recuerda cuan grande fue su gesta o villanía, cuan extensa su bondad o maldad, cuan inigualable su sabiduria o ignorancia, cuan luminiso su brillo o extensa su oscuridad. Los grandes dragones tienen grandes epitafios con brillos inigualables y yo aspiro a que mi alma descanse al lado de las suyas, con su mismo brillo para eternidad. Que ese sea mi epitafio.
Y levantando la mirada de nuevo hacia ese pequeño haz de luz, dije.
- Brillaré a tu lado para la eternidad y te demostraré mi amor.

El enano se levanto de un salto.
-¡ESO ES! La ¿mujer?-No recordaba si debajo de esa armadura había un hombre una mujer o un animal bípedo-Baddel piensa de la misma forma que yo y estoy seguro que no nos equivocamos, si dejamos que el niño juegue con nosotros, los secuaces de Rakedus están jugando con nosotros. ¡NO PODEMOS TOLERAR ALGO ASÍ!-Alzo su puño al cielo nublado esperando que su señor confirmara sus palabras.

-¿Tenéis miedo? - Digo a los que no paran de acusarme - ¿Tenéis miedo de que os hayáis equivocado o hayáis sido engañados? ¿Tenéis miedo de ver que realmente no soy mala persona? - Niego con la cabeza y decido dejar el tema, si quieren matarme lo harán igualmente, pero no voy a entrar al juego de discutir con ellos cuando diga lo que diga no lo van a aceptar.

-Y esto me recuerda a cuando una vez, cuando me quedé encerrado en el arcón del señor Pitín, me había colado en su despacho para robarle una pluma mágica que permitía que todo lo que escribieses rimase automáticamente con lo que llevabas escrito, el problema es que regresó antes de la cuenta, y tras darse un baño con miel de faritapo, se puso desnudo a tocar la bandurria. Tocaba bastante mal y a si que decidí escaparme, pero claro, tenía el problema de que si salía me podría resbalar con los restos de miel que habían quedado en el suelo, pero si me quedaba tenía miedo de que la música me hiciese cantar y me delatase, a si que al final decidí la única opción viable: Conjuré un elefante gigante púrpura en el jardín, a si que el señor Pitín salió corriendo para ver que pasaba y pude escaparme con la pluma. Lamentablemente luego perdí el artefacto cuando me lo robó una ardilla de dedos largos, pero esa es ya otra historia.

Los ojillos de Sorya brillaban con la intensa curiosidad que la caracteriza mientras escucha al dragón de cristal, fascinada por sus palabras. Cuando éste termina su relato, aún se queda mirando al cielo, cada vez más oscurecido del ocaso. - Hyent'nrám, eso... eso es sorprendente. Y debías quererla mucho... Lamento tu pérdida - Con un nuevo trote suave se acerca hasta el dragón y pasa a su lado frotando su pelaje contra el costado escamoso de éste, agradecida - Eres muy muy sabio. Me has dado una respuesta que no he escuchado nunca, y no son pocos los dragones a los que he preguntado... aunque también hay que admitir que no todos veían mi presencia en sus cubiles de buen grado. Muchos de tus primos tienen muy mal despertar. - Bromea. Dando un saltito, le regala un corto lametón en la quijada (off, espero que esté bien dicho xD) del dragón y sonríe. Pasada la emoción inicial, nuevamente se retira hacia el muro que flanquea la posición del grupo, situándose lo más lejos posible de Y'aimm, y se recuesta sobre las rocas aún calientes del sol del día para meditar sobre dicha historia.

- Baddel, Trahorn, Amsu y los demás... ya sé lo que van a hacer cuando caiga la noche, pero... no se... ¿podrían al menos no ser tan crueles?  Lo siento, quizás para ustedes sea una tontería, pero no deja de ser un niño... ya, ya me callo... - Y apoya la cabeza entre sus patas, erizando el pelo hasta perder nuevamente su aspecto humanoide y mucho más una bolita de peluche.