Sin importarle lo que hiciera Tsuyuri o Karakuri, se interpuso entre las dos, al ver que la pajarito estaba vivo y la levanto del suelo cogiéndola con la mano, hacia tiempo que Nyu no sonreía de esa manera.
-¡Estas aqui! Supongo que Daito cumplió su promesa. No te preocupes Karakuri, esta noche no voy a dejar que te pase nada mas. Yo te protejo.
Seeep... la galleta es nuestra ex-delegada.
Luego de haber recorrido un poco el lugar, me tomaría por sorpresa el ser empujado de aquella manera tan repentina, llevándome a una sala donde si bien habrían cosas interesantes que contaría poco más adelante de este post, no me distraerían de ir a ayudar a Galatea.
Todos lo intentamos, todos estabamos seguros de que lo habíamos logrado, pero...
-... -verla colgada de esa manera me dejó paralizado, en completo silencio durante unos segundos mientras mis ojos se empezaban a humedecer. -. No... Maldición... -visiblemente frustrado, cerraría el puño de la mano derecha y golpearía una pared con todas mis fuerzas, cubriéndome la mano con un poco de mi sangre, pasándome entonces el brazo por el rostro para limpiarme las lágrimas y poder intentar disimular mi estado. -. Lo lamento, yo... Me estoy dejando llevar por todo esto...
Entre una cosa y otra, Daito acabaría dando su vida no por los gemelos, sino por la EX-delegada, quién sin su traje no parecía ser nada más que un pájaro bastante exigente al momento de buscar asiento, aunque debía admitir que tenía buen gusto dada su decisión final.
-Causar el mayor alboroto posible... -resumí a Arthur respecto a Aki, con cierta frialdad poco natural en mi. -. Daito-san habrá cambiado su vida por la de la delegada: ciertamente, dadas nuestras sospechas en Toko-san, su voto triple será más valioso que otra cosa, aunque los gemelos también habrían sido una buena opción... -observé entonces a Sunako, pasando a explicar. -. Para ponerte en contexto, los gemelos mostraron ayer los recuerdos de Ryuuji-san, donde vimos que por la noche fue a Maneshi-san a preguntarle quién era realmente: ella respondió diciendo que era del grupo de héroes, y luego alguien lo golpeó, siendo que según tenemos entendido fue Aki-san. El caso es que Maneshi-san confirmó inmediatamente después haber dicho eso, y explicó el papel de los héroes en todo esto, por lo que el poder de Ryuuji-san parece ser capaz de hacer a la gente decir la verdad, por lo que darle la cura a él seria bastante conveniente -aseguré, antes de fijar mi atención en Karakuri. -. Hace poco tuvimos una... desafortunada separación con los presentes aquí, y yo acabé en el despacho del director: tal parece que nos tenía vigilados, porque habían un montón de cámaras por todas partes, incluso se podía ver a Daito-san empalado por la ventana. El caso es que también vi el almacén de la cocina, donde estaba la puerta entreabierta y los cuerpos de Nakamura-san y el tuyo propio, Karakuri-san, incluyendo tu armadura: tal vez podamos pasar luego a buscarla...
Al ver a Nyu interponerse entre ella y Karakuri simplemente la dejó hacer sin querer molestarlas.
- Gracias de nuevo Nakiri-senpai. Si todo va bien -miró a Arthur- estarás como nuevo en cuanto amanezca. Siento haber dudado de ti... pero están siendo una locura de días...
El tiempo pasó, por lo que algunos aprovecharon para sanar las heridas que tenían, en concreto Tsuyuri Sunako y Arthur Ryuuji pasaron a sanarse, y aunque las heridas que tenían mejoraron ligeramente, aún tendrían que esperar que los analgésicos, las grapas y las vendas hicieran su efecto sanador.