LOS MUNDOS TRAS LA MURALLA
Más allá del Reino Medio existen incontables mundos habitados por todo tipo de espíritus. Aunque estos mundo son invisibles e intangibles para los mortales, los shen, y en especial los Kuei-jin, se relacionan con ellos y con sus moradores de forma habitual.
LOS MUNDOS TRAS LA MURALLA
Más allá del Reino Medio existen incontables mundos habitados por todo tipo de espíritus. Aunque estos mundo son invisibles e intangibles para los mortales, los shen, y en especial los Kuei-jin, se relacionan con ellos y con sus moradores de forma habitual.
Los espíritus se encuentran por todas partes, aunque son más numerosos en zonas con un fuerte Chi. En las primeras Edades solían manifestarse físicamente en el Reino Medio; por tanto, el espíritu de una roca determinada, o el gei-ryo de una espada única, podían aparecer para ayudar o molestar a los héroes legendarios. En la Quinta Edad, casi todos estos seres están dormidos y deben ser amenazados u obligados a despertar. Un amanecer especialmente bello o el yugen obtenido al contemplar una obra de arte suelen ser la únicas muestras perceptibles de la presencia de espíritus.
Los mundos espirituales existe en yuxtaposición con el Reino Medio, aunque los mortales no suelen ser concientes de ello. Algunos shen, incluyendo a los Kuei-jin, pueden viajas a estas dimensiones y relacionarse con el kami de los ríos o con las sombras de los muertos. En la Quinta Edad estos viajes son peligrosos, ya que existe una Muralla que separa los reinos del espíritu y de la materia.
En cierto modo, el plano místico del Oriente recuerda a su contrapartida occidental, solo que el primero no esta dividido en los Tres Mundos con los que los seres sobrenaturales de Occidente están familiarizados. Los Kuei-jin saben que el Reino Medio obtiene su nombre de su posición entre dos vastos planos espirituales, los mundos duales del Yin y del Yang. El Mundo del Yang alberga todo tipo de espíritus de la naturaleza, kami y seres similares. El del Yin, por el contrario, es un lugar tétrico que comprende el Inframundo y sus innumerables fantasmas. De mundos es de los que fluye el Chi, y es a sus moradores a los que los shen rinden homenaje.
LA QUINTA EDAD
En as anteriores edades los espíritus se dedicaban a sus labores asignadas, cumpliendo felizmente (o al menos con respeto) la voluntad de la Augusta Personalidad. Ahora sin embargo, el orden del Reino Medio y de los mundos espirituales se ha roto. A medida que los planos mundanos reflejan la degeneración de la Quinta Edad, sus contrapartidas espirituales les sufren de igual modo. Los Kuei-jin observan con sus sentidos sobrenaturales mundos desolados y corrompidos. La polución y las guerras nucleares erosionan el palacio del Rey del Mar, las torres retorcidas de la Ciudad Perversa reflejan las calles laberínticas de Tokio y Hong Kong, el Reino de los Espíritus Luchadores se llena con victimas de las guerras de Indochina y el Mundo Yin que bordea a Camboya es un lugar lleno de calaveras y Espectros salvajes.
Cada vez más espíritus abandonan sus obligaciones y se hacen tan egoístas como los vampiros. Muchos espíritus domésticos y naturales, ignorados por una población cínica y “reeducada”, vagan como nómadas sin rumbo. Ministros y protectores se convierten en crueles tiranos, combatiendo sin piedad por aquellos lugares en los que el Chi no esta envenenado, y los espíritus se vuelven cada vez con mayor frecuencia hacia los Kuei-jin para sellar con ellos todo tipo de pactos.
LOS MUNDOS DEL YIN Y EL YANG
El primer giro de la Rueda de las Edades se produjo cuando el universo se dividió súbitamente en dos polos opuesto: Yin, el principio oscuro, pasivo y reactivo, y Yang, el principio brillante, enérgico y activo. Es de estos dos elementos y de sus combinaciones de donde surgieron las Diez Mil Cosas de la materia y el espíritu.
Aunque el Yin y el Yang se han separado del Todo, siguen cerca del Reino Medio. Bajo la guía del Cielo, estas dos fuerzas gobiernan el giro del Ciclo. Lo que el Yang crea, el Yin lo erosiona. Los soldados a los que el Yang manda en heroicas misiones son consolados tras la muerte por el Yin. Durante la segunda y la tercera Edad los dragones y los kirin anunciaron el asenso de los emperadores, los espíritus de los muertos ayudaban y aconsejaban a sus familias vivas, los kami se manifestaban en las rocas, los árboles y los estanques y los hechiceros conjuraban puentes de pluma hacia los cielos.
Tras la traición de los Wan Xian se alzó la Muralla y se impidió el paso entre los mundos mortal y espiritual. Este acontecimiento dejó a los shen del mundo material atrapados y confusos; se habían quedado sin guía celestial, sin mentores espirituales. Algunos interpretaron sus ordenes lo mejor que pudieron, mientras que otros, olvidando sus obligaciones con las cortes, sembraron el caos en el Reino Medio.
A medida que pasaban los siglos, algunos shen aprendieron magias que les permitían viajar a los Mundos del Yin y el Yang, pero lo que hallaron los dejo atónitos. El orden de la Augusta Personalidad se había roto como el capullo de un gusano; los diferentes ministros habían creado sus propios dominios y los dirigían igual que los tiranos feudales. Aunque algunos seres aún recordaban la voluntad del Cielo, la mayoría estaba convencida de que os dioses-dragones, si no estaban muertos, se hallaban profundamente dormidos. Algunos shen proclamaron que el Cielo había vuelto la espalda al Reino Medio y a los mundos espirituales, y que solo tras las purgas de la Sexta Edad el universo regresaría a la normalidad.
A pesar de todo, dos grandes reinos espirituales, Yin y Yang, seguían defendiendo el paradigma del Reino Medio. Aunque normalmente se decía que los Reinos Yang se encontraban “sobre el mundo” y los Yin “bajo el mundo”, esta configuración no era más que una metáfora.
¿QUÉ SON LOS REINOS ESPIRITUALES?
Los mundos espirituales son reinos de pura energía Chi que desafían as leyes físicas naturales. Estos planos coexisten con el Reino Medio, aunque la Muralla impide que sean percibidos por los mortales. Los mundos espirituales reflejan el plano material; los cambios de un “lado” afectan al otro.
LAS TIERRAS ESPEJO
Las zonas de Yin y el Yang que se encuentran justo al toro lado de la Muralla sin denominadas Tierras Espejo, ya que reflejan a sus contrapartidas en el Reino Medio. Aunque su geografía es más o menos constante, cada viajero experimenta un entorno que varia según su propia percepción. Un tranquilo jardín proyectará un reflejo de paz y sosiego; por el contrario, un poblado de míseras chozas en el Reino Medio podría aparecer en las Tierras Espejo como un erial lleno de gusanos. Los seres de las Tierras espejo del Yin no suelen poder percibir ni relacionarse con aquellos que están en las Tierras Espejo del Yang, aunque algunos poderes espirituales lo permiten.
Las Tierras Espejo suelen ser el hogar de espíritus menores que perdieron su puesto y que fueron expulsados de sus reinos, o que quedaron atrapados (o decidieron quedarse) cerca del Reino Medio. También hay renegados que huyen de sus superiores. Todos estos espíritus suelen relacionarse con los vampiros, y algunos aceptan servir como nushi, “consejeros”espirituales para un wu. Otros se quedan cerca del mundo material en un intento desesperado por conservar lugares de gran belleza, o para alimentarse de la angustia y a miseria de los humanos (dependiendo de la naturaleza de la criatura en cuestión).
El viaje por las Tierras Espejo es similar al del Reino Medio. Las distancias y las direcciones son idénticas. Si un Kuei-jin entra en os mundos espirituales y recorre un kilómetro en las Tierras Espejo, al regresar de encontrara a un kilómetro de su posición inicia.
Las Tierras Espejo y el Reino Medio se afectan mutuamente. Si un lugar en el segundo es saqueado o destruido, su contrapartida sufrirá un destino similar. Igualmente, si un lugar espiritual es profanado o contaminado, su correspondencia mortal suele deteriorarse, hacerse insegura o llenarse de “malas vibraciones”.
EL TAPIZ
Las zonas más profundas de los Mundos de Yin y del Yang son denominadas el Tapiz. Al contrario de las Tierras Espejo, el Tapiz carece de contrapartida material, ya que está compuesto totalmente de espíritu. La distancia y el tiempo en esta dimensión son subjetivos, y atravesarla asemeja a una experiencia onírica. Los espíritus más poderosos suelen habitar aquí, protegiendo celosamente sus dominios de los extraños.
El Tapiz cuenta de dos secciones principales: el Tejido y los reinos. El Tejido es el flujo, el estrato inhabitable a través del cual se viaja de un reino a otro. En el Mundo Yang, el Tejido es denominado Umbra; en el Mundo Yin Tifón o Tempestad. Los espíritus nacen del Tejido, viajan por él y regresan a su seno para curarse o descansar. Su aspecto y sus “leyes físicas” pueden variar enormemente, dependiendo de la cercanía de los espíritus e incluso el estado mental de aquellos que lo recorren.
Dentro del Tejido existen innumerables reinos, dominios donde los espíritus poderosos establecen sus posesiones y guaridas. Algunos de estos mundos recuerdan a viejas cortes mortales, otros tienen aspecto de ciudades de pesadilla y otros no se parecen a nada conocido en el Reino Medio. Los reinos son las moradas de los espíritus, y los Kuei-jin más iluminados los visitan con frecuencia para suplicar o servir a estas criaturas.
El viaje por el Tejido es bastante subjetivo; una travesía podría parecer que dura meros segundos o varios meses. La velocidad depende hasta cierto punto de la fuerza mental y de la confianza de los viajeros, ya que aquí el espíritu reina supremo y la materia no es más que una ilusión. Se puede conseguir la ayuda de un guía espiritual, pero sus indicaciones podrían ser erróneas… a veces a propósito. Es mejor conocer el destino y no salirse de los brillantes caminos de los dragones que surcan el Tejido. Algunos de estos caminos se corresponden con líneas Chi en e Reino Medio, así que os más sabios viajeros pueden emplearlos para disponer un “mapa de carreteras” que les permita recorrer grandes distancias en el mundo material.
En algunos puntos del Tejido se abren portales que conducen a los reinos. Algunas de estas entradas están protegidas, mientras que otras invitan a la exploración. Dentro de los Mundos del Yin y del Yang aguardan incontables reinos…
YIN, YANG Y YOMI
Aquí se explican los tres mundos espirituales (Yin, Yang y Yomi) y algunos de los reinos más importantes que los conforman.
EL MUNDO YANG
Muy por encima del Reino Medio se encuentra el salvaje y caótico Mundo Yang. Este lugar alberga un número casi infinito de reinos, y sus constantes transformaciones hacen que estos parezcan aún más numerosos. Es posible encontrar Paraísos e Infiernos, mundos de sueños y de pesadillas, el Reino de los Espíritus Luchadores y las cortes de los dragones. Aquí vagan espíritus de todo tipo, algunos personificaciones de ideas y objetos, otros representaciones de su propia monstruosidad.
Aunque son menos las almas mortales que pasan al Mundo Yang que a su sombría contrapartida Yin, muchos moradores del Reino Medio terminan aquí aunque su estancia es breve: son conducidos a un reino donde los espíritus les juzgan, recompensan o castigan. Tras esto se transforman en espíritus y se reencarnan como humanos o animales, o bien son arrojados al Mundo Yomi.
Los shen llegan aquí tras su muerte, en especial los hengeyokai y las hadas. Estos seres también son capaces de comunicarse de forma limitada a través de la Muralla; los hengeyokai denominan “Umbra” al Mundo Yang mientras que los hsien se refieren a él como “El Ensueño”. Los Kuei-jin orientados hacia el Yang aseguran descender de la Reina Escarlata, que supuestamente caza en las zonas más profundas de este Reino.
El Mundo Yang no tiene centro conocido, y su energía fluye caprichosa por todas partes. Vientos y tormentas salvajes azotan el Tejido, haciendo el viaje incierto y peligroso. En estas tempestades Yang existen varios reinos , hogar de todo tipo de deidades, dragones y espíritus poderosos.
REINOS YANG
Ki, en el Ki Chuan, habló sobre los reinos que había visitado, tanto en el sueño como en la vigilia. Aquí se presentan algunos de los más conocidos.
EL REINO DE LOS ESPÍRITUS LUCHADORES
La mitología budista habla del Reino de los Espíritus Luchadores, una vasta llanura de la aniquilación en la que los espíritus sin consagrar marchan a la batalla. Sobre una extensión infinita de tierra empapada de sangre innumerables criaturas chocan y se despedazan entre gritos, humo, metal entrechocando y disparos. El suelo se cubre de cuerpos, esqueletos de criaturas titánicas, armas, armaduras y maquinaria de todo tipo. Carros destrozados de la Edad Antigua se mezclan con los tanques de la Republica Popular y los Zero Mitshubishi. La batalla nunca cesa, ni de día ni de noche; los espíritus “muertos” o heridos terminan levantándose, recuperando sus miembros amputados y prosiguiendo al lucha.
Los Kuei-jin que han visitado este reino suelen hablar de tres grandes fuerzas que combaten ente violento caos. La primera guerrea con precisión mecánica bajo el estandarte de una gran araña. La segunda es una legión de monstruos deformes que combate bajo el estandarte de una serpiente o un ciempiés; la tercera “fuerza” es una turba desorganizada de cambiaformas y remolinos de energía. Fuerza es para ellos un eufemismo, ay que no disponen de un emblema y combaten contra si mismo tan a menudo como contra sus enemigos. Los Kuei-jin, que no entienden el motivo de esta guerra eterna, suelen mantenerse al margen.
UMI, EL REINO DRAGÓN DEL MAR
El dominio del Umi, uno de los Reinos más poderosos del Mundo Yang, reclama el control de todo el Pacífico, aunque algunos reinos polinesios e indonesios no están demasiado de acuerdo con estas pretensiones. Se cree que es posible llegar hasta aquí mediante grandes remolinos en los abismos oceánicos más profundos. Desde su palacio en el fondo de su reino, el Rey Dragón de Umi supervisa sus infinitas responsabilidades, gobierna las calmas y las tempestades, guía a los barcos a buen puerto o envía a los tiburones a devorar a los supervivientes de un naufragio.
A su servicio hay escuadrones de Zhong Lung y escuelas de Same-Bito, así como versiones espirituales de tiburones, medusas, calamares gigantes y otros terrores oceánicos para mantener el orden en el mar.
El Rey Dragón no abandona sus aposentos privados y no ha sido visto públicamente desde hace 50 años por lo que corren números rumores sobre su autoexilio. Algunos cortesanos aseguran que el Rey Dragón llora por su amor, la destruida Princesa Dragón de Hiroshima; otros creen que el Rey Dragón se encontraba en la cama de la Princesa aquel 6 de agosto de 1945, y que desde entonces sufre un mal terrible que le ha desfigurado.
En lugar del Rey Dragón gobierna su senescal, Gajyra, un inmenso y brutal espíritu dragón cuyo aliento flamígero puede vaporizar el jade blanco y el metal. Algunos murmuran que el propio Gajyra ha sufrido la contaminación de las pruebas nucleares en el Pacífico, pero nadie se atreve a decírselo en la cara.
EL MUNDO YIN
Bajo el Reino Medio, opuesto al Yang, se encuentra l siniestro Mundo del Yin. Aquí todo es sombrío, apagado y silencioso. Estos reinos son más estables que los del Yang, y sus moradores son más relajados… o resignados. La mayoría de las almas humanas acude aquí tras la muerte, aunque algunas pasan al Mundo Yang tras el proceso de la reencarnación.
Al contrario que el mosaico de sensaciones del Yang, el Mundo Yin dispone de un centro relativamente estable: la gargantuesca creación espiritual conocida como el Inframundo y, bajo ella, el Vacío. Son muy pocos los vivos que viajan hasta estas tierras, aunque los Kuei-jin, algunos magos y cambiaformas descienden a los reinos Yin para cumplir determinadas misiones. Los vampiros orientados hacia esta energía negativa suelen considerarse siervos del Dragón de Ébano.
REINOS YIN
El Mundo Yin también contiene reinos sobre los que Ki escribió. A continuación presentamos dos de los más importantes.
EL REINO OSCURO DE JADE
En el centro del Yin se encuentra el Inframundo, también conocido como el Reino Oscuro de Jade. Casi todos los humanos del Reino Medio que se convierten en fantasmas terminan aquí, aunque algunos son cosechados por los Reyes Yama y conducidos al Yomi. El Reino Oscuro de Jade es un lugar siniestro, esculpido con el pálido jade blanco, un material formado con las almas de los infortunados que fueron considerados indignos de otra cosa que no fuera a la fundación del reino.
El lugar es gobernado por el tirano Qin Shihuang, a los que algunos Kuei-jin sirven por miedo. Se puede encontrar más información sobre este reino en Wraith: El Olvido, la Guía del Jugador de Wraith y el suplemento El Reino Oscuro de Jade.
LA JUNGLA SUSURRANTE
En los limites del Reino Oscuro de Jade se encuentra una gran extensión de follaje surgido de la misma Tempestad y que se extiende sin control en todas las direcciones. Este bosque, que crece con formas imposibles para las plantas normales y que responde con lamentos a los vientos de la Tempestad, es conocido como la Jungla Susurrante.
Todo el lugar y sus habitantes están compuestos de metal, ya que éste es el elemento del Yin. Árboles de plata con hojas afiladas que brillan en la luz apagada, y las lianas de alambre hace muy difícil avanzar. Serpientes de bronce y perros de hierro recorren a floresta en busca de viajeros desprevenidos. Sin embargo, los más peligrosos moradores de la jungla son os Mukade, gigantescos ciempiés-demonio aparentemente construidos con placas de hierro negro. Los Reyes Yama suelen esclavizar a estas criaturas y las emplean como maquinas de asedio vivientes en sus guerras eternas.
EL MUNDO YOMI
Existe un tercer mundo espiritual, aunque a pocos shen les gusta hablar de él. Se trata del temido Mundo Yomi, guarida de los Reyes Yama y de sus lacayos demoníacos. Este lugar pavoroso, también conocido como los Mil Infiernos, parece compuesto por los peores elementos del Mundo del Yin y de Yang. Se trata de una dimensión que se yuxtapone a las otras dos, tomando elementos de ambas para su formación. Algunos shen dicen que, a medida que el Reino Medio se corrompe y envenena, sus contrapartidas espirituales sufren el mismo efecto, proporcionando nuevos pedazos de maldad espiritual que contribuyen a aumentar el Yomi.
Los Kuei-jin conocen este lugar mejo que nadie, ya que el alma P´o de todos ellos se somete a un terrorífico viaje por el Mundo Yomi antes del renacimiento. Los vientos desgarradores y las tormentas de este Mundo dejan su marca en el P´o, desfigurándolo y enfureciéndolo. Sin embargo, al convertirse en Kuei-jin el alma demuestra tener la fuerza necesaria como para escapar de los Mil Infiernos, haciendo que todos sus habitantes ansíen el momento de capturar al fugitivo y hacerle regresar.
El Mundo Yomi es hogar de incontables tipos de demonios. Las regiones más cercanas al Yin suelen estar infestadas de espíritus malvados conocidos como Espectros; as más cercanas al Yang son el hogar de las monstruosas Pesadillas. Los maestros del Yomi, los poderosos Reyes Yama, tienen reinos infernales en lo más profundo de su dimensión. Allí, rodeados por rugientes tormentas y campos llenos de muertos, guerrean entre ellos y contra los shen de naturaleza más pura, soñando con la noche en que llegue la Sexta Edad y uno de ellos sea coronado Emperador Demonio.
REINOS YOMI
El Libro de Hierro del Puente Rojo, escrito por el demente poeta Kuei-jin O, habla de mies de reinos infernales. A continuación s describen algunos de ellos.
LA CIUDAD PERVERSA
Esta vasta y contaminada megalópolis puede alcanzarse desde las cercanías de Tokio, Bangkok, Yakarta o Hong Kong, aunque no corresponde exactamente con ninguna de ellas. Se trata de un lugar opresivo de espectaculares rascacielos, arcos de neón interminables y suburbios depauperados. El color del ciclo es el de un color sin sintonizar. Los edificios, que desafían abiertamente los principios del feng shui, crecen en todas direcciones. Miles de fantasmas y otros elementos urbanos recorren sus calles entre espíritus metálicos, demonios eléctricos y wraiths maestros en el poder Habitar. También es posible encontrar cíborgs de la Tecnocracia.
La Ciudad Perversa la gobierna el Rey Yama Mikaboshi. Desde su rascacielos de 70 plantas, este demonio presume de la corrupción que afecta al Reino Medio, y está convencido de que su ciudad se convertirá en el dominio más poderoso de los mundos espirituales, convirtiéndole en Emperador Demonio de la eterna Sexta Edad.
KAKURI
Cerca del Mundo Yin y rozando los Territorios Conquistados de Inframundo japonés, el reino Yomi de Kakuri aguarda a los muertos nipones. El poderoso Rey Yama Emma-o gobierna este universo de tinieblas desde el que planea arrasar los paraísos de los propios Budas. En Kakuri moran muchos Muertos sin Reposo, que han escapado de las garras de Qin Shiuan para caer en las de Emma-o, que no son mucho mejores.
Este demonio tiene sirvientas vampiras, todas ellas mujeres. En realidad, solo las mujeres pueden servirle, aunque no se sabe si esto se debe a un homenaje a las antiguas tradiciones que ligan al Yin con lo femenino o a un simple capricho. Estas Kuei-jin suelen denominarse a sí mismas shikome, y reciben favores y dones mágicos de Emma-o a cambio de su servicio y de la entrega de una determinado número de almas al Rey. Las que no consiguen cumplir estos objetivos son arrastradas a Kakuri, donde son devoradas.
EL INFIERNO DE LA DESOLLACIÓN
Este Reino Yomi es un lugar horripilante de vientos lacerantes y eternas tormentas de energía destructora. El paisaje es desolador, y ha sido erosionado formando altas columnas pétreas de formas imposibles.
El Infierno de la Desollación es el dominio de la Reina Yama Tou Mu, también conocida como la emperatriz de Hierro. Viste una temible mascara metálica y guantes con garras de acero, quizás para protegerse de los vientos de su reino, que cortan como cuchillas. El demonio controla legiones de lamas condenadas y se sabe que ha utilizado vampiros n sus planes, aunque fue una enemiga de los Wan Xian y no quiere más que ver a sus descendientes sufriendo el tormento eterno.
LOS REINOS CELESTIALES
Algunos shen hablan de los Reinos Celestiales, que se encontrarían en e firmamento espiritual, por encima del Yin y del Yang. Si es cierto que existen, los dominós de la Augusta Personalidad (y de sus lacayos, los Reyes Dragón) se han separado pro completo de la creación.
Los Reinos Celestiales parecen haber dado la espalda a las preocupaciones del Reino Medio. Mortales y shen recitan sutras y cantan mantras mientras buscan la liberación de tantos siglos de pesar, pero no tienen respuesta.
Algunos sabios Kuei-jin enseñan que mediante la trascendencia Dhármica es posible escapar a los ciclos del mundo y encontrar el consuelo eterno (o el olvido) en estos reinos.