Sire Wenceslass se acerca hasta ti, comenzando contigo una conversación intrascendente apartándote del grupo. Los dos os encontráis a solas en un rincón de la gran sala. Se arrima a ti, casi sin dejar espacio entre ambos, acerca su nariz a tu cuerpo y aspira con fuerza, su cara refleja placer. Sus delicadas manos toman tu cara acariciandola, acerca sus labios a tu oido y susurra:
-Eres tan adorable, tienes una cualidades que me resultan atractivas. ¿Eres acaso un artísta?
"Esta maldita sensacion, esta agobiante y corrupta aura. Es como esa noche en el burdel, cuando me encerraron con aquel hombre en el cuarto." Intentando mantener cara de seriedad, aunque con una mueca de asco en mis labios, empiezo a coger las manos del anciano y apartarlas poco a poco de mi rostro, entre una fuerza que no era ofensiva pero que estaba muy cerca de serlo.
-Sire Wenceslass, le ruego por favor que no ose volver a tocarme.- Dije serio y enfadado.- No quiero montar un escandolo en la cena del señor Giovanni, ni ganarme una enemistad mas, pero soy muy escrupuloso en lo que respeta a este "Tema".- Empiezo a buscar con los pies una salida a cualquier lugar mas comodo y menos estrecho, pero no sin dejar de mirar Wencerlass.- Ademas, piense que pensarian los demas de ver a usted, hablando con susurros y tocando a un jovencito al que siquiera acaba de conocer. No es que sea una imagen muy "cristiana".
No lo podia evitar, no tendria que haber hecho eso y ni haber dicho nada. Pero si ese hombre me tocaba siquiera un poco mas o empezaba a tirarme los tejos, iba a ponerme histerico y aplastarle la cabeza con el objeto mas cercano a mi mano, al igual que aquella horrible noche en el burdel.
-No seáis tan vergonzoso, querido, no tienes nada a lo que temer, desde el primer momento que te vi supe que eras un buen chico. Tus delicadas manos solo podían significar que no te dedicabas a trabajar la tierra, que hacías otras cosas con ellas, por favor Dominic, toca algo para mí, sabré recompensar lo que escuche.
No me gustaba ese tono, nadie de fiar diria "Buen Chico" con ese tono. Pero por lo menos, ahora me ofrecia una oportunidad de cerrarle la boca y obligarle a mantener las manos quietas.
-Esta bien, si asi soy capaz de tranquilizarle hasta que cenemos, tocare alguna melodia para usted.- Todavia estaba serio, pero por lo menos ahora estaba mas relajado.- ¿Sabe de algun instrumento cercano al que pueda tocar o prefiere que llame mi criado y me traiga mi viola?
-Tengo un arpa en mi habitación, la heredé de un tío mío que recorrió gran parte de Europa tocando en los más importantes y ricos palacios. Sígueme, comprobarás que tacto más delicado tiene.
Winceslass recorre un pasillo hasta llegar a unas escaleras de mármol, las cuales asciende lentamente.
"¿Me esta llevando para que le toque el arpa o solo para tener un sitio mas tranquilo para acosarme?" No estaba seguro, pero sabia que por dentro, tenia ganas de al menos llevar Paul conmigo. Si, ese hombre que le ofreci mi amistad y le di un oficio como guardaespaldas aun siendo cojo, ese mismo hombre estaba en cualquier lugar menos aqui, protegiendo por mi vera y salud. En el fondo de mi corazon estaba empezando a tener dudas sobre si contratarle fue una buena idea.
Sin embargo, aunque ese hombre me daba tanto o mas escalofrios que aquella noche, pense que tener miedo de un anciano y de rincones oscuros, sobre todo siendo un noble forjado en la esgrima, era algo ridiculo y absurdo. Asi que le segui por las escaleras y pasillos, silencioso y atento, aunque tambien curioso, de ver adonde me llevaba y si existia tal arpa.
El primer piso se encuentra totalmente desierto, no se escucha ningún ruido. Sire Wenceslass camina con paso decidido hacia el final del largo pasillo y al acabarse, se detiene delante de una puerta. La abre con una llave que saca de entre sus ropas.
-Adelante, aquí tendremos la intimidad que necesitamos. -te dice mientras espera que entres a la habitación.
El habitáculo no es demasiado grande, tiene una cama, una mesa de escritorio con una silla, una pequeña libreria y tres arcones por el suelo. El hombre abre uno de ellos y descubre algunos instrumentos, una bandurria, un violín, una flauta y finalmente llegas a ver una arpa. La coge con sumo cuidado y te la entrega diciendote.
-Vamos Dominic, sientate en la cama y demuestrame que no me he equivocado contigo, hazme sentir.
Luego se sienta a tu lado y cierra los ojos.
"Vaya, asi que existe el arpa. ¿Y que deberia tocar con ella?" estaba dudoso si de tocarla y de como tocarla, era cierto que era musico, pero no tan bueno como Dominic y ahora los nervios amenazaban con hacerme temblar las manos y las notas. Tal vez por eso, decidi eligir una melodia tranquila y facil de tocar.
Una cuna, mis manos empiezan a concentrarse en el arpa y forman notas tranquilas que incitan al sueño y alivian la intranquilidad del alma. Como Morfeo cuando quiso dormir a la bestia de tres cabezas.
Haz una tirada de DESTREZA + INTERPRETACIÓN, a ver que tal tocas esa arpa.
Tirada: 1d10
Motivo: Des+int (1/7)
Resultado: 9
Tirada: 1d10
Motivo: Des+int (2/7)
Resultado: 1
Tirada: 1d10
Motivo: Des+int (3/7)
Resultado: 10
Tirada: 1d10
Motivo: Des+int (4/7)
Resultado: 1
Tirada: 1d10
Motivo: Des+int (5/7)
Resultado: 4
Tirada: 1d10
Motivo: Des+int (6/7)
Resultado: 2
Tirada: 1d10
Motivo: Des+int (7/7)
Resultado: 10
Tirada: 1d10
Motivo: Des+int (10) (1/2)
Resultado: 10
Tirada: 1d10
Motivo: Des+int (10) (2/2)
Resultado: 1
Tirada: 1d10
Motivo: Des+int(10) 2 (1/2)
Resultado: 9
Tirada: 1d10
Motivo: Des+int(10) 2 (2/2)
Resultado: 4
Perdón, se me ha colado la última tirada. Aparte de eso, decir que es la primera vez que veo tantos 10 y 1 a la vez en una ronda de tiradas.
El arpa emite un sonido dulce y la técnica al tocarla te ha parecido buena.
-¿Dices que esto es grande? No tienes derecho a hacerte llamar artista. ¡Eres una desgracia, un mero suplicante en los salones de las Musas! -te dice enfadado.
Toma de nuevo tu cara entre sus manos y se aproxima todavía más.
-¡Pero yo... podría hacerte grande! -te deice en un intenso susurro. ¿Te gustaría?
"Esto ya es el colmo ¿Quien se cree para tocarme sin permiso y sin verguenza?" Irritado, aparto de nuevo sus manos y me levanto bruscamente de la cama. Alejandome del aquel hombre que parecia hablarme como si fuera una prostituta con delirios de grandeza o un juguete al cual recoser.
-Se acabo esta farsa sin pies ni cabeza.- Dije irritado mientras me expresaba furibundo con las manos.-Es cierto, mi musica deja mucho que desear, y tambien es cierto, la idea de poder dedicarme mi vida al noble arte de la musica me atrae como las luciernagas a la luz, pero no pienso ir como un estupido a las promesas sin sentido de cualquier desconocido con mirada lujuriosa, ya lo hice antes, y es un error que nunca volvere a cometer.- A cada palabra, mas cerca parecia de morderme los labios y de hacerlos sangrar.- Lo siento, pero me voy, estoy al limite de mis nervios y me temo que pueda cometer alguna locura. Vuelva a osar tocarme por tercera vez, y le prometo que la sangre correra en la espada de mi hoja.
Furibundo e indignado, me dirigo a la puerta y la abro de un portazo. Adentrandome en la oscuridad del pasillo y buscando de nuevo el salon.
Al levantarte en seco, Sire Wenceslass adopta una posición seria, frunce el ceño y sujeta tu brazo para que no escapes. Mirándote a los ojos te dice:
-No tan rápido querido, aquí mando yo y tu obedeces, tienes suerte de que te haya elegido, muchos son los que venderían su alma al diablo para compartir conmigo tan solo una copa del mas burdo licor.
Tu mente se encuentra confundida, la necesidad de huir de ese lugar van desvaneciéndose poco a poco. Sin saber porque, cesas en tus intentos de marcharte.
-Vuelve a tocar, Dominic, vuelve a tocar para mí. -te dice acercándote otra vez a la cama.
A partir de este momento, estás más receptivo a las exigencias de Sir Wenceslass y acatarás sin discutir todo aquello que te pida.
"Yo... Tal vez, deberia quedarme, si, eso es, solo tocare una melodia mas y me ire... si, eso hare." Y sin saber por que, me sente otra vez en la cama y volvi a tocar el arpa. No era logico, yo queria irme de aquel hombre, pero... No podia negarme una ultima melodia, pero ¿Por que?
No lo sabia, simplemente sonreia como un estupido mientras mis dedos tocaban una melodia escrita con miedo y desesperanza. Olvidandome poco a poco, de que queria irme a un lugar con mas gente y iluminado.
Tirada: 1d10
Motivo: Des+int (1/7)
Resultado: 10
Tirada: 1d10
Motivo: Des+int (2/7)
Resultado: 10
Tirada: 1d10
Motivo: Des+int (3/7)
Resultado: 4
Tirada: 1d10
Motivo: Des+int (4/7)
Resultado: 2
Tirada: 1d10
Motivo: Des+int (5/7)
Resultado: 5
Tirada: 1d10
Motivo: Des+int (6/7)
Resultado: 4
Tirada: 1d10
Motivo: Des+int (7/7)
Resultado: 1
Tirada: 1d10
Motivo: Des+int (10) (1/2)
Resultado: 6
Tirada: 1d10
Motivo: Des+int (10) (2/2)
Resultado: 10
Tirada: 1d10
Motivo: Des+int (10)2
Resultado: 10
Tirada: 1d10
Motivo: Des+int (10)3
Resultado: 3
Por cierto, si hago las tiradas mal o lo que sea, decidmelo por favor, para que me corriga en las proximas rondas de tiradas.
Creo que tengo un serio problema con los 1 y los 10, por que siempre me aparecen en todas las tiradas.
Mientras sigues tocando de nuevo el arpa, Sire Wenceslass aprita con fuerza la copa de vino que sujeta en su mano derecha. El ruido de cristal al romperse compite con el sonido del arpa. Sire Wenceslass coge un pedazo de cristal y lo pasa por tu rostro mientras grita enloquecido:
-¡Más! ¡Mas compromiso! ¡Compromiso y dolor! ¡Eso es lo que crea gran arte! ¡Abraza tu dolor! ¡Esto glorifica al Creador! Dios creó la Tierra con dolor. ¡Las madres dan a luz a sus camadas en medio del dolor y la angustía! ¡Puedo hacerte GRANDE, pero antes debo hacer tu sufrimiento más grande todavía!
Las sangre inunda tu cara, resbala por tu barbilla hasta manchar tus ropas. De repente, alguien toca a la puerta y Wenceslass detiene tu melodia.
-¿Si? -dice Sire Wenceslass.
-Discuple señor, pero la cena está lista, cuando quiera guste el señor puede bajar al comedor. -responde una voz desde el otro de la puerta.
-Muchas gracias, de inmediato bajo. -le contesta.
Sire Wenceslass posa su mano otra vez en tu pierna y acariciandotela te dice:
-Muy bien, mi pequeño, ahora lavate, nos veremos en el comedor.
Tengo que mirar cuantas veces se repiten los 10 con la especialización, creo recordar que solo una vez, pero lo confirmaré, me pillas sin el manual aquí. De todas maneras por esta vez cuento la tirada como válida.
"Mi rostro... ¿Que me ha hecho? ¿Me ha cortado o es sangre de su mano?... Deberia matarle, deberia..." Y otra vez esa sensacion, en vez de ponerme furioso y gritar, solo podia tocarme el rostro y ver como mi mano se manchaba de un tinte rojo." No... Tal vez deberia lavarme... si, tal vez eso me ayude aclarar las ideas, y luego, mas calmado ambos, le pregunte que eso de "aumentar mi dolor"."
Asi, con ese rostro de sonrisa estupida y ojos vacios, me levanto de la cama y me pongo a buscar una toalla, un cubil de agua y un espejo donde ver mi rostro.
Dominic, deberás esperar hasta que el resto de tus compañeros acaben sus conversaciones privadas para continuar en el comedor. Espero que eso sea antes de mañana noche.