Cuando Abetorius se marcha y estoy en privado con mi esposa nos sentamos para charlar de la propuesta. Hay muchas cosas que nos atan aquí. Tenemos tres hijos muy jóvenes como para quedarse solos e igualmente jóvenes como para una aventura que podría acarrear cierto peligro.

¿Qué opinas amor mío? La misión de Abetorius es lícita pero, aun así, tenemos a los niños y tierras que administrar aquí.

La administración podemos delegarla en personal de confianza. También haría público el propósito de nuestro viaje a Venecia. Los ciudadanos deben saber que no nos vamos por placer ni que los abandonamos por capricho.

Sera bueno para nuestra imagen que sepan que arriesgamos nuestras vidas por defender sus hogares como ellos lo hacen cuando nosotros se lo pedimos.

Pero lo de los niños… me preocupa. No sé si confío en alguien lo suficiente como para dejarlos. Quizás… ¿con tu padre?

-No deseo dejar a nuestros hijos aquí, son muy pequeños... Tampoco sé si mi padre sería la mejor opción...- me quedo pensativa y debato en voz alta. Hace tiempo que no tengo pensamiento que esconder a mi esposo.- Las esposas de mis hermanos son familia, pero no son de confianza para mi. Mi padre las elegiría antes de pagar una matrona... Pero los accidentes pasan y temo que haya demasiados "accidentes" a su alrededor a su cuidado.

Si algo le pasara a cualquiera de nuestros vástagos, moriría de pena... No podría vivir con ello.

-Tampoco mi padre tendría medios para defenderlos de otras criaturas... Puede... Podríamos hablar con mi madre. Ella podría acompañarnos y cuidar de los pequeños. Confío en que los protegería con su vida. No que nos acompañe a Venecia, pero que se quede en alguna aldea o pueblo cercano con ellos... Como Ravenna o Boloña. Que lleve a sus ghouls y a nuestras matronas, le pagaríamos una casa durante la estancia... Y yo me sentiría segura de tener a nuestros hijos cerca.

Sonrío al escuchar la propuesta sobre su madre.

Sin duda me parece una idea excelente. Nadie mejor que ella para protegerlos, cuidarlos, y enseñarles el mundo desde una perspectiva más afín a nosotros.

Era fascinante el modo en el que mi esposa y yo nos complementábamos. Éramos muy diferentes y al mismo tiempo existía una conexión perfecta.

Te amo vida mía.

Me acerco y beso suavemente sus labios.

Empecemos con los preparativos. Hay muchas cosas que tener en cuenta en un viaje tan largo. Recuerda que a mí no me gusta mucho tomar el sol últimamente.

Unas pequeñas carcajadas acompañan al último comentario. Soy feliz. Soy un vampiro inmortal con unos poderes extraordinarios, mi esposa, también inmortal gracias a mi sangre, es la compañera perfecta con quien compartir la eternidad, tenemos unos hijos preciosos de los que estoy muy orgulloso…

La vida me sonríe. ¿O deberíamos decir… la no-muerte?

Acordamos que mi madre es la mejor primera opción. Sonrío cuando dice que me ama.- Y yo a ti...

Me levanto ante lo de los preparativos.

-Avisaré que hagan llamar a mi madre, a ver si aceptaría nuestra petición. De ser así ambos podríais viajar juntos en arcones vigilados, como parte de mi equipaje. Quizás podamos hacer parte del camino juntos por seguridad... Pero una vez lleguemos a Italia en barco, sería mejor separarnos. No quiero que si comienzan a seguirnos sigan también a mi madre...

Muchas cosas que pensar y planear. No quiero dejar cabos sueltos, mejor pecar de precavida que lamentar una fatalidad.

-Ocúpate de informar al pueblo y de proporcionarnos guardias... El resto de pormenores del viaje, déjamelos a mi, querido esposo- me ocuparé de contratar y administrar el dinero bien en los servicios necesarios, como llevaba haciendo desde que llegué la boda.

Unos días más tarde Abetorius regresa a vuestro palacio.

-He recibido noticias de Piero y de su chiquillo Paolo. Amarrarán mañana en el puerto de Constantinopla y me he citado con ellos en la posada "El buen pescador" en un par de noches. Allí os presentaré, y haréis el viaje juntos desde aquí. -La posada "El buen pescador" es una posada de buen nombre y bastante cara, que sólo usan los viajeros y mercaderes más ricos.

Hablo con mis capitanes y sirvientes de confianza para explicarles la situación.

Les doy un discurso sobre como espero que cuiden “nuestra” tierra en mi ausencia y cuanto confío en ellos.

A continuación organizo un “meeting” para todo aldeano que quiera asistir y les cuento también la razón de mi ausencia, quienes estarán a cargo y que espero que todo prospere del mismo modo que si yo estuviese presente.

Preparo nuestro viaje como el de los pequeños. Doy indicaciones sobre el cuidado que tienen que tener con los arcones donde irán Asenoc y mi madre, dando a entender que son cosas preciadas y delicadas (como vestidos míos). Ultimo los detalles del viaje de mi madre con nuestros hijos. Le busco una casa acomodada en un pueblecito donde no vaya a llamar la atención, descartando finalmente una ciudad grande como Boloña. Suponiendo que ahí le costará más pasar desapercibida dada su condición.

Una vez todo listo y dadas instrucciones de cómo deben ocuparse del castillo tras nuestra ausencia, quedo lista para el viaje.

Cariño... este viaje me da un poco de miedo.
Es la primera vez que voy a viajar tan lejos siendo un Vampiro.

Temo que algo ocurra y me quede expuesto en pleno dia.
Se que haras lo imposible porque no ocurra...

Solo queria compartirlo contigo.
 

-No dejaré que os pase nada durante el día, como voz cuidáis de mi durante la noche- prometo a mi esposo que parece inquieto por un viaje tan largo.- Viajaremos tranquilos, pues no habrá alma libre de tormento de aquellos que osen perturbar nuestra paz- poso un beso afectuoso sobre sus labios.