Partida Rol por web

Sabía sobre su hermana, sabía sobre ella, todas las alarmas se encendieron en el momento, y llevó sus manos a su boca, mirando al hombre con horror, ¿sabía? ¿qué tanto sabía?. Su hermana... ¿cómo podia saberlo?. El terror pasó a rabia, apretó los dientes.

- no use argumento bajos... no use a mi hermana para convencerme de algo... cómo lo quiso hacer la señorita Alice... eso es indigno...- replica en el acto, porque aunque supiera la verdad, no tenía derecho, Alice lo había aprendido, usar a su hermana para convencerla de algo, sólo produciría el efecto contrario. Sin embargo, lo que reveló le hizo ruido, manifestarse, como lo hizo al quemar el manicomio, y como lo ha ido haciendo, el cuerpo de May debe estar debilitándose o algo así - yo...sabré que hago o dejo de hacer - agregó con la misma seriedad. Este hombre no sólo la llamaba loca, sino que usaba a su hermana para presionarla, tenía mucho coraje de intentar manipularla, y por muy desvalida que pareciera, no aguantaba aquellos intentos de otros que se creían en derecho de obligarla a algo. 

- en la Umbra está el castillo de corazones de Annis Black..- agrega de la forma en que lo había escuchado, usando las mismas palabras. 

"Cristo santísimo, ¿en qué me he metido?¡Locos!¡Una casa de locos!" pensó, mientras se llevaba una mano a la sien, masajeándola. "¡Locos!"
Y luego, aún callado y ensimismado, mientras se pasaba una mano por el pelo, a modo de peine, hacía presente un nihilismo casi inmanente: "¿Por qué luchan para un par de días más?¿Por qué no se suicidan? Sería lo más fácil, menos doloroso y seguro traerá la perdición de esa Annis... Locos..."

Luego volvió a mirar a Agnes.
-Me odiaré por lo que voy a decir, pero en ningún caso se les entregará ni a la señorita Alice ni a usted, Agnes...
"Locos, sí. Pero tú, ¡el primero!" pensó refiriéndose a si mismo.
-Ir a su terreno ha de ser una locura, seamos cuan fuertes seamos. No cometamos locuras sin saber a qué atenernos... Mejor actuar en nuestro terreno. Ya vimos que hasta manipula este mundo, pero al menos aquí es tangible y sangra. Por un tiempo, pero... Es suficiente.-se giró hacia Will -Déme un hombre fuerte que me acompañe y siga el ritmo, Wesley, y le juro que no hay quien me detenga.-Edward era el único que conocía todas las capacidades, aparte de Alice. Él sabría juntarlo con alguien cuya forma de actuar fuera similar y que no supusiera conflicto.
Puso una mueca acerca de la supuesta "magia negra" del negro.
"Locos, y un pagano..."

-Pero necesitaría un par de horas. Llegar a mi casa, prepararme, cambiar a ropa más cómoda... Casi preferiría que mi acompañante, sea quien fuera, viniera conmigo. Cortaríamos tiempo y podría armarlo también... ¿Algún voluntario?

Bueno chicos... esto llega a su fin...

Es broma. XD Solo la escena.

A partir de ahora , seguimos en " Daños colaterales"