Partida Rol por web

Por donde habían pasado los kllr el terreno había reaccionado como la cera bajo una vela, derritiéndose y desfigurándose, sus materiales de origen mutados por otros y los colores chisporroteando en fascinante y terrorífica florecer de una naturaleza que jamás debió ser la suya. Algunos grüns repetían canturreaban en bucle acerca de las millas que les habría tocado caminar de no haber sido por los vehículos encontrados, otros trataban de comprender el sueño psicotrópico que recorrían y otros obsesivamente comprobaban su armamento y suministros.

La esfera de luz grisácea se separó de la nave kllr y de forma casi casual engulló a una de las cápsulas llenas de Totemkompf. Luego, como si tuviera vida propia, empezó a seguir a las demás.

-¡Maniobra evasiva!

-¡Esto es una maldita cápsula de desembarco! ¡Tenemos suerte de que pueda girar a los lados!

Bajo ellos, el portal empezó a brillar con una luz interior como si algo hubiese explotado dentro.

Cuarta, tira Tácticas Flexibles para mantenerte a salvo de la esfera. Con 10+, te mantienes a salvo y la esfera se desvanece. Con 7-9, no se desvanece. Con 6- marca Tropas.

Las luces de los pasillos de la Ventisca parpadearon ligeramente pero, pese a la explosión, no se notó ni un temblor. Aquella sólida nave estaba construida para durar.

Un rápido escaneo de la zona reveló que no había más enemigos. Los daños se calificaron como menores: algunos calentadores necesitarían ser reparados y varias computadoras se habían fundido pero nada irreparable.

-Señor, la flota kllr está cediendo. Varias de sus naves han desaparecido y la estructura del portal parece cada vez más inestable. Hemos detectado también varias cápsulas de escape más alrededor del portal. Parece que están en problemas.

 

Primera, es el momento de seguir presionando. La flota kllr pierde 1 de efectivos devido a la inestabilidad del portal. Tira Guerra Interminable con Logística y Ventaja. Si quieres apoyar a esas cápsulas, debes elegir "Defender un objetivo".

Flota Kllr

• Equipo: Esferas luminosas, Portales de Abordaje.
• Casco: 5-3-2
• Daño: 1 

Los alrededores de Portobel eran una ciénaga pegajosa de colores irritantes. Las ruedas de los transportes dejaban profundos surcos en los maltrechos caminos. El aire era ligeramente más fresco y los sonidos ya no estaban tan amortiguados, como si los kllr hubieran abandonado la zona. 

A lo lejos divisaron la silueta de Portobel. Las columnas de humo y los fogonazos de la artillería resultaron familiares y casi agradables en comparación con aquel paisaje alienígena y extraño. Una marea de monstruosidades con tentáculos asediaba la ciudad. Conocedores de la potencia de fuego de la Quinta, el volumen de disparos que recibía al enemigo era muy pequeño. Estaban muy escasos de munición.

Segunda, ¿qué vas a hacer? Si embistes al enemigo por detrás, tira Guerra Interminable pero tienes Desventaja porque no has podido traer a todos tus efectivos. Estoy abierto a otras ideas.

A pesar de los intentos de los pilotos Totemkompf por esquivar a la esfera, esta se fue tragando cápsulas de desembarco con una parsimonia que resultaba aún más exasperante. En cierto sentido, parecía un glóbulo blanco devorando pequeños microbios o virus.

-Abordaje rechazado -informó el caballero-capitán- protejan esas cápsulas a toda costa, posición defensiva Leviathan e intenten contactar con la Ankus si es posible e informar de que tenemos algo suyo.

Ver a la flota de la Primera navegar entre la flota kllr pasó de ser una lanza que atravesaba a los enemigos de camino hacia su destino a convertirse en un escudo con una facilidad que solo la fuerza de la costumbre podría hacer. Otras naves podrían haber cruzado estelas o entrado en ángulos de disparo, pero la Escuadra Invierno y la Ventisca sabían como bailar unas con otras para no tropezarse ni causarse ningún daño en esa danza que era una batalla naval.

La Escuadra Invierno siguió las órdenes y se colocaron en distintos frentes, cambiando de un fuego continuo a uno más graneado y preciso, manteniendo a las naves kllr a distancia más que queriendo masacrar toda esa flota. La Granizo tomó posición para recibir las cápsulas de desembarco mientras que la Ventista se encargaba de las naves que perseguían a las cápsulas para que pudieran adherirse a la nave escolta con seguridad.

-Cápsulas de Desembarco, aquí Granizo. Diríjanse a las coordenadas que les damos para embarcar de forma directa.

- Artilleros de la Quinta Compañía, aquí el Primus Grün de las Fuerzas de Seguridad de La Recompensa - comunicó el líder por el instrumental de comunicación, apretándoselo contra el cráneo mientras taponaba la oreja contraria para tratar de escuchar y hacerse entender por encima del estruendo de batalla en las proximidades -. Somos un convoy de suministros sin apenas personal, necesitamos un corredor libre de enemigos; por favor, indiquen coordenadas de fuego intensificado para cruzar una vez termine el fuego de artillería - escuchó las objeciones e improperios entrecortados e inaudibles por explosiones y estática mientras gesticulaba al operador de radio para que se esforzase en sintonizar mejor -. Com-com-comprendo sus reticencias, Maestra Artillera, pero su p-p-posición parece precaria igualmente, quizás valiese la p-p-pena agotar los proyectiles que le quedan para reabastecerse y terminar lo que comenzó.

Tembló más allá de lo que su entrenamiento podría haber prevenido, la furia de los Mandos Totemkömpf era terrible para con los enemigos pero no mucho menos para los clones, especialmente después de lo que había vivido en Belian, donde todo un contingente (y continente) de clones de renombre había sido evaporado de la existencia sin miramientos hasta donde sabían.

Aún así, puso su vida y la de sus grüns en manos de la furibunda Maestra Artillera de la Quinta Compañía.

La Maestra Artillera Gadabaut de la Quinta Compañia de Destructores tenia fama de poco sutil y directa incluso entre los Totemkompf. Aquella inscripcion de "Nada es comparable a demasiados disparos" que algunos caballeros grababan en sus tolkers con la punta de sus cuchillos de combate era una ocurrencia suya de cuando era una recluta recien llegada de las camaras de clonacion.

-Nuestras reservas de municion estan al 4%. Los kllr se estan fusionando y estan creando una especie de muralla viviente que se esta cerrando sobre nuestras posiciones. Soltaremos nuestra ultima salva en las coordenadas X-4058924/FE-4875: aprovechen la brecha.

Primera, tira Movimiento y Maniobra (definitivamente, te mueves por terreno peligroso) con Desventaja. Si tienes exito, logras llevar los suministros hasta la Quinta. Si fallas, no y los kllr y el fuego amigo acaban con los Grün (marca tropas y describe como mueren de formas espantosas de camino a las murallas). Con un 7-9, ambas.

La nave kllr se deshizo rapidamente ante la artilleria de la Ventisca. Las capsulas de desembarco que habian sobrevivido llegaron rapidamente hasta las bodegas de carga de la nave insignia. Los equipos de rescate acudieron rapidamente con sus mangueras de desinfectante para rociar a los vapuleados caballeros de la Cuarta a media que salian de las capsulas entre silbidos hidraulicos y chorros de vapor.

-Ventisca a Ankus, Ventisca a Ankus, iresponda, maldita sea!-radiaba el oficial de comunicaciones-La situacion esta controlada: tienen que salir del... un momento: ¿donde esta el portal?

-Aqui WhiteOut: solicito posicion de nuevo objetivo.

-Granizo solicitando posicion de nuevo objetivo.

El oficial de comunicaciones dejo su puesto y corrio hasta la enorme pantalla de radar que presidia una cupula lateral. Se detuvo ante ella y se quito el casco para asegurarse de que sus sentidos automatizados no le traicionaban (con aquellos modelos viejos nunca se sabia. El radar estaba tranquilo y silencioso. No detectaba nada. 

La flota kllr y el portal habian desaparecido. 

Ver el fuego concentrado de La Maestra Artillera Gadabaut hizo entrar en pánico a los grüns.

- Soy carne de cañón pero no así, por JERU 4.000, ¡NO ASÍ!

Hubo desmayos, gritos de terror e incluso uno se lanzó hacia delante, desquiciado, sólo para convertirse el proteína espolvoreada al caerle cerca un explosivo cerca y pintar a toda la primera fila de fuerzas de seguridad de verde fosforito. No iba a ocurrir, no sin la suerte de uno entre un millar y los grüns eran conscientes que la fortuna jamás les sonreía.

- Entonces ataquemos, por allí, por la retaguardia kllr - señaló Primus a las fuerzas alienígenas centradas en atacar la posición de la Quinta compañía e ignorando, casi insultantemente, a las fuerzas de seguridad -. Proteged los suministros, conducid deprisa y apuntad con cuidado; no le importamos al Dominio, pero lo son todo para nosotros.

- ¡¡¡Grüuun!!!

Con ensayadísimo y coreografiado cuidado que habría puesto de los nervios al más paciente de los Totemkömpf el convoy abrió brecha entre las filas kllr, pintando a sus objetivos de uno en uno para no llamar la atención y concentrando fuego hasta que se desmenuzaban, derretían o desaparecían. Tardaron y quemaron combustible y buena parte de su munición propia, pero al final lo consiguieron y, frente a las hileras de cañones, tanques y caballeros del espacio, los meticulosos grüns de combate se tornaron estibadores y descargaron los suministros que tanto se necesitaban - no creían que fuera a haber reconocimiento pero ellos sabían que estaba bien hecho.

Los supervivientes de la Cuarta se fueron desplegando por la Ventisca del mejor modo posible. Había sido una misión dura y, como solía suceder en todo enfrentamiento con los kllr, no tenían demasiado claro si su intervención había sido determinante para detener la invasión de los extraños alienígenas o si simplemente se habían marchado por su cuenta.

Muchos compañeros fueron trasladados de forma inmediata a las enfermerías, mientras que otros se distribuían por la nave de la Primera Compañía. Todos, antes de marcharse, pudieron ver a la Quimera, que se mantuvo de pie junto a las compuertas de salida y saludó a sus fuerzas, uno por uno. A aquellos heridos más allá de toda posibilidad de salvación los bendijo en persona, apoyando su mano en sus cuerpos destrozados por las heridas.

Cuando todos fueron saludados, la Quimera avanzó por el hangar, examinando las cápsulas. Ya había sido informado de que no habían logrado regresar con las grabaciones. Al menos tenían testigos.

—Nos quedamos con las naves de desembarco de la Orden de la Serpiente. 

Tocó una de ellas, como si acariciase a un ofidio, pero sin sentir la repugnancia que algunos humanos sentían por esos animales. Después de todo, eso no era sino un recuerdo atávico de los miles de antepasados humanos que habían muerto envenenados a manos de los antepasados de las serpientes. 

Pero los humanos modernos habían aprendido mucho sobre el veneno de las serpientes. 

Les tocaba a los volshebniki seguir aprendiendo.

El tempo de una batalla naval era siempre distinto al de una batalla en tierra, pues lo que eran instantes en recibir fuego, disparar, rodar tras una cobertura o cubrirse con un escudo se traducía en segundos o minutos de movimientos de moles gargantuéscas, de toma de datos, apuntar, disparar y lo que tardaban en saber si había impacto o no. Pero cuando todo terminaba de repente la sensación era la misma, la adrenalina sigue fluyendo sin saber qué hacer con ella, la tranquilidad golpea con fuerza y todo parece ser mucho más lento todavía hasta que la calma vuelve a hacerse con todo.

En ese momento estaba ahora la Primera, en una guardia perpetua, lanzando pings de sonar y con todos los sensores activos para asegurarse de que no aparece ninguno de esos seres de la nada sin que lo detecten.

Un grupo de clones no mejorados como caballeros se acercaron a la cubierta donde aterrizaron las cápsulas de la Cuarta Compañía, todos ellos iguales, con el mismo uniforme, pero con distintos rangos. Todos formaron y saludaron de forma disciplinaria a la Quimera.

-Saludos. Soy Bob, el Jefe de Cubierta 36-A, bienvenidos a la Granizo. Si me acompañan le asignaré una sala de descanso para usted y sus hombres antes de que puedan ir a la Ventisca a la zona que se les asignó en dicha nave. Estamos en alerta de seguridad máxima y no se puede mover tropas de una nave a otra y, por una apertura de portal repentina tuvimos que soltar parte de nuestras cubiertas de almacenaje, así que estaremos algo más apretados de lo que deberíamos. Sentimos las molestias, señor.. señora... -dudó un momento y otro de los clones le dio un golpe con el hombro, tras lo que se calló, se cuadraron y saludaron a la vez, esperando ser de alguna ayuda.

La Quimera no pareció darle ninguna importancia a que le llamaran señor o señora. Asintió ligeramente ante las palabras de Bob y después musitó, casi para sí: «pensé que estábamos en la Ventisca... todas me parecen iguales».

Hizo un gesto a los hombres que quedaban en el hangar y luego miró a su interlocutor.

—Guíenos, Jefe de Cubierta.

Las descargas de artillería de la Quinta se reanudaron rápidamente. Los kllr, sin sus portales dimensionales, desaparecieron rápidamente y el cerco se hizo más y más tenue hasta desaparecer. 

A lo largo y ancho del planeta, las redes de comunicaciones volvieron a funcionar. Los daños eran terribles pero sin la presencia alienígena y los sentidos funcionando sin trabas todo volvía a ser normal.

Belian había sufrido enormemente. El hemisferio sur estaba ahora oscurecido por las negras nubes de ceniza de una erupción volcánica de proporciones todavía por calibrar pero allí ya no quedaba nadie para informar. El sistema seguiría siendo parte del Dominio, un sistema aislado en medio del territorio kllr siempre a merced de nuevos ataques.

Por el momento, el curso de la guerra se había detenido pero los Totemkompf sabían muy bien que para ellos nunca terminaba.

¿Ha contribuido mi compañía al éxito de la Orden?

Con drama de por medio pero sí, el Espacio ha sido cosa del La Primera y la Cuarta pero la Octava y la Quinta le deben mucho a las fuerzas de seguridad de la Segunda.

¿Es ahora el Dominio un poco más seguro?

Esta parte sí, sin lugar a duda, pero hemos peleado por las antípodas mientras arde la capital. Queda mucho trabajo por delante 

¿Hemos aprendido algo nuevo e interesante?

Que los kllr son un enemigo endemoniado, con muchos talentos y tecnologías que nos superan.

A continuación, decidid qué compañía ha tenido un papel más ejemplar: esa compañía marca Gloria de nuevo.

A ver, siempre premio a la Cuarta porque lo parte y esta vez no ha sido distinto, pero el momento más épico, para mí, ha sido la colaboración facepalmerítica del bombardeo orbital con el Cañón Sigurd de la Primera a petición de la Segunda así que, +1 de gloria para Primera.