Partida Rol por web

Garth aprieta a Sally contra su pecho, con toda la intención de consolarla. La expresión de sus ojos ha cambiado radicalmente. Donde antes había deseo, o incluso lascivia ahora hay una empatía que hace que su mirada también se nuble y humedezca.

- Yo... yo... Sally... lo siento.

No sabía qué decir. El tipo puntilloso y mordaz no sabía que cojones decir. De pronto agitó su cabeza de nuevo.

- ¿Cri...? ¿Criatura has dicho? ¿Qué criatura? - la miró a los ojos, de nuevo - Cariño... ¿Qué es lo que has visto?

Aquello no parecía una jodida novela, y comenzaba a sentir algo que hacía mucho que no padecía y que a veces incluso echaba de menos, pero hoy no era el caso. Miedo.

Lo miro a mi jefe algo sorprendida. no puedo creer que no se haya dado cuenta.

- Se veía como yo, pero no era yo. ¿No te diste cuenta? No se comportaba diferente? ... ¿Recuerdas cuando me acosté a dormir? Luego me desperté en un lugar oscuro, había una especia de luces a lo lejos y murmullos de voces. Cuando me acerqué a una de las luces te ví a ti, con... conmigo.... pero no era yo. Se veía como yo, pero no era yo.. cuando empezé a gritar volví a la habitación...

DEBEMOS IRNOS YA!

Tomo mis cosas y mi abrigo y agarro las de Garth.

Listo, nos vamos AHORA MISMO

Garth de nuevo se pasó las manos por el pelo, algo revuelto ya después de tanto alboroto.

- Quizá tengas razón.

Se negaba a tener que irse. Ese lugar le resultaba terriblemente inspirador. Pero comprendía que Sally tenía que salir de allí. Algo la estaba volviendo loca y necesitaba ayuda. Puede que tuviera razón al decir que tanto trabajo la acabaría matando. No sabía muy bien como decirle, que él necesitaba quedarse, quería quedarse.

- Sal, espera - dijo tomando su mano - Yo... yo... - titubeó - no sé, si debería - la miró a los ojos y pudo notar el semblante de su mirada. "Oh, no me lo pongas tan difícil" se dijo a sí mismo - te acompañaré al vestíbulo y me encargaré de que te saquen de aquí... pero yo quiero quedarme.

Mientras sigo juntando mis cosas con apuro le digo a Garth con voz acongojada:

- Como quieras.... Deberías irte conmigo. Eres un tonto, perdóname, pero eres un tonto. No sabes a lo que te enfrentas

Tomo mis pertenencias y salgo casi corriendo. Debo volver a casa

Sally abre la puerta de la habitacion, y se encuentra con un hombre en el pasillo al que no habia visto antes. Alterada reprime un grito por la sorpresa.

El hombre se acerca hasta la puerta.

- Oh, disculpe si la he asustado señorita. Estaba buscando mi habitacion, y temo que me he confundido. ¿Le ocurre algo?

Miro al extraño con desconfianza. 

No es de su incumbencia, permiso

lo esquivo y sigo mi camino

GAAARRRTHHH PUEDES VENIR POR FAVOR??!!!

"Claro, que soy un tonto, cariño, por eso te necesito" pensó Garth para sí mismo mientras guardaba el bloc de papel donde había tomado unas rápidas anotaciones. La idea de no saber a qué se enfrentaban, literalmente tal y cómo decía Sally se le antojaba tan peligrosa como excitante. Garth hacía tiempo que no sentía ese cosquilleo en el estómago, de no controlar la situación, y aunque no era agradable, le hacía sentir vivo como hacía mucho que no se sentía.

Escuchó la voz de un desconocido dirigirse a Sally. No le dio mayor importancia, hasta que la joven le reclamó.

- Voy - espetó tranquilamente y con andar pausado se dirigió hacia donde estaba ella.

- Ya estoy aquí - miró al tipo de arriba a abajo alzando una ceja - buenas tardes - y siguió su camino no sin antes pensar "otro dominguero, pues ya somos legión" para sus adentros - Sé que estás nerviosa, cielo, pero no hace falta que grites - la miró dulcemente, aunque todavía sentía su corazón latir a toda prisa - ¿necesitas ayuda con algo? -

El desconocido se queda parado mientras pasais a su lado, y pronto lo dejais atras. Bajais las escaleras hasta la recepcion, donde se encuentra Graham que os saluda cordialmente, aunque un brillo en sus ojos denota que sus verdaderos pensamientos al ver a Sally son algo asi como "Oh, no. ¿y ahora que?"

Sin embargo no los expresa en voz alta, sino que se limita a incorporarse y preguntar.

¿Puedo ayudarles en algo?

Sin mirarlo siquiera, lo ignoro y sigo mi camino. Debo salir, debo salir!

Sally no para. Garth se detiene ante Graham. Intenta hacer acopio de toda la voluntad que puede. ¡Manda cojones! ¿Se habían cambiado los papeles? Ahora él era el que hacía por quedar bien, y Sally la que pasaba de todo y de todos, yendo a lo suyo... pero con la tralla que llevaba encima era casi perdonable. Loeb se dio cuenta de lo mucho que apreciaba a aquella mujer, y que la mejor forma de devolverle los miles de favores que reproches mediante, le había hecho. 

- disculpe eh... - trató de recordar su nombre. Por mucho que intentará ahora ser el poli bueno de la pareja seguía siendo un completo desastre - ¿Graham, no? ¿Señor Graham? - Bravo Loeb, estás quedando como un auténtico imbécil... no ves que el hotel lleva el nombre de este tipo ¿o no? o qué se yo... - Mi, mi... esto... - si decía señora sabía que podía relajar la situación o ganarse el guantazo de su vida -... la señorita Jones, no se encuentra muy bien. ¿Hay posibilidad de conseguirle un taxi? ¿Un autobús? ¿Un coche? - "un carro, un burro, aunque sea un jodido caniche tirando de un monopatín... ¡Joder!" pensaba Garth.

Mientras tanto su mano aprieta con delicadeza la de Sally, intentando frenar su implacable avance hacia la salida.

Graham mira con cara de sorpresa a Sally que ni siquiera se ha parado.

- Er... ¿taxi?... si... supongo que si.... puedo llamar un taxi, pero supongo que tardara un rato. Quiza la mejor opcion sea que el propio Tom les lleve, si quieren le hare llamar, aunque si prefieren un taxi.... El autobus en el que vinieron como ya les dije no vuelve hasta mañana...

Garth mira a Sally.

- ¿Cómo lo ves? Puedes esperar aquí sentada tomando algo - una copa, una tila, un sedante... - hasta que llegue el señor Tom a buscarte...

Miro a Garth llena de rabia. 

¿No escuchaste nada de lo que te dije, cierto?¿No recuerdas lo que vi? Nadie en este hotelucho es de fiar... Me voy caminando si es necesario, pero con Tom no voy a ningún lado. Me voy, no me llamen taxi ni nada. Me voy.

Intenta mirar de forma comprensiva a Sally.

- Pero Sal... no puedes irte andando. Está anocheciendo, va a hacer frío... es peligroso. - intenta coger su mano con suavidad, con toda la ternura de la que es capaz, intentando sentir cierta empatía por ella - No debes irte así... - miró a Graham - ahí fuera no hace como para dar un paseo de madrugada ¿no? - vuelve a mirar a Sally - además, estás cansada, no vas a poder llegar lejos y menos cargada con tu equipaje.

Toma aire.

- Claro que vi lo que pasó... pero estamos cansados... es solo cuestión de dormir un poco... relájate ... por favor.

Algo cansada de tanta insistencia tomo mi equipaje y giro mi cuerpo hacia Garth.

Mira, mientras prometas protegerme me quedo. Pero ante la menor irregularidad me voy caminando, no estoy bromeando

La mira a los ojos. Le incomoda que Graham esté delante, pero sabe que es la única forma de conseguir que se quede.

- Lo prometo. Nada te pasará mientras yo esté aquí consciente... - eso significaba que iban a ser unas vacaciones muy, muy aburridas, pero de algún modo, había convencimiento en su tono de voz.