-Claro que no voy a soltarte, ¡pirata payaso! ¡Solo te levantarás sin dejarme ir! -pataleó un poco pateandole, aunque no veía bien donde en su posición -¿Porque?...Fssss, Fukuhoshi podría haberte enseñado mas modelas siendo que te tenía encadenado. -escuchaba la burla sobre-actuada, con verguenza ajena y enfado propio- ¡Cállate! ¿Como se que no vas a irte sin mas? -dijo molesta.
La frustración comienza a anegar mi alma ¿Es que todo van a ser problemas? Cuando no es uno es otro. Al menos esos dos gallos de pelea, se han calmado por sí mismo; pero ahora tengo un problema mayor entre medias. El maldito espíritu de fuego se ha descontrolado y una bola de fuego escapa, dejando su estela de destrucción a su paso.
Se acabaron las contemplaciones. No más restricciones. Si el escapa, hará mucho daño. No puedo liberar a esos dos, a saber si resultarían de ayuda o si llegaríamos a tiempo. Levanto el vuelo adoptando mi forma de cuervo y persigo a Ogami. Reclamo a las sombras, su obediencia y extiendo desde el suelo flagelos espinados para atraparlo y debilitarlo. Tengo que hacerle retroceder y tengo que hacerlo ahora.
Motivo: Tentaculos de oscuridad
Dificultad: 18
Habilidad: 20
Tirada: 2 4 7
Total: 4 +20 = 24 Éxito
Tiro el dado solo por si acaso. La salvación es Destreza a 15. Dejo a tu elección interpretarlo como quieras, Ogami.
La barrera que impedia mi paso se desvanece al tacto de mis llamas, como todo en este mundo debe consumirse ante mi. Porque me sentia tan aliviado en estos momentos? Quizas era porque jamas debia atarme? O por el mero hecho de consumir todo lo que me rodeaba me daba la felicidad que buscaba. Entonces habia sido absurdo permanecer tanto tiempo atrapado en un cristal.
Antes de que pudiera marcharme de alli unas oscuras ligaduras se encerraron entorno a mi. Reconocia esa oscuridad y aquel que la manejaba.
-Yami.... Mi atencion se dirigue ante el oni oscuro que intenta apresarme. Mis llamas brillaban con ira. -Quieres jugar...juguemos
Una especie de boca se forma de las llamas que ocupan mi cuerpo absorbiendo el fuego que hay a mi alrededor, reagrupandolo en mi interior. Cuando estan casi todas en mi interior las libero en una llamarada diriguida a los tentaculos de oscuridad de Yami.
Motivo: Liberar
Dificultad: 0
Habilidad: 7
Tirada: 3 6 9
Total: 6 +7 = 13 Éxito
Motivo: Llamarada
Dificultad: 0
Habilidad: 17
Tirada: 2 5 10
Total: 5 +17 = 22 Éxito
Objetivo: Llamarada
Tirada: 2d6
Tirada: 1 1
Total: 2 = 2
Akari no había logrado doblegar la voluntad de Lucius para que obedeciera sus órdenes. Los años le pesaban y el cansancio se hacía evidente tras haber levantado la Jaula de Cristal y ocuparse de los cuidados de su nieta. Sin embargo, Shion había demostrado una destreza singular para controlar al Oni, obligandole de inmediato su marcha para verse reducido a menos que un muñeco de madera, sin poder moverse sin su aprobación.
Yami por su parte había logrado extender su voluntad y alcanzar al furioso Ogami, quien a pesar de sus intentos, no era capaz de liberarse de las ataduras que Yami cernía sobre él. Los tentáculos de oscuridad cubrían con cada vez mas firmeza al espíritu de fuego, arrebatandole toda posibilidad de acción.
Karasu, por su parte, ya había logrado liberarse del pegamento que le mantenía atrapado al árbol y su furia era palpable.
Daño Lucius: 18/??
Daño Yami: 2/??
Ogami esta paralizado. Cada turno va a tener que hacer una tirada de Voluntad Dif 18 para liberarse de la Atadura de Yami. Hasta que no logre superar esa tirada, no va a poder liberarse, salvo que Yami lo libere primero.
Lucius, lo mismo para ti. Voluntad Dif 18 si quieres liberarte de la Atadura de Shion. Sino, en cuanto ella ya no esté en escena (Siguiente turno) eres libre.
Los estúpidos trucos de Lucius le habían retenido el tiempo suficiente para permitirle huir, sin embargo Shion demostraba su verdadero potencial logrando detener al Oni y apresándolo. A pesar de su enfado, se asomó una pequeña sonrisa de satisfacción en el rostro de Karasu al comprobar, una vez mas, que Shion era de los pocos seres humanos que aún valían la pena. Ella era especial y podía sentirlo, comprobarlo a cada momento.
De su cuerpo surgió una bandada de cuervos que inmediatamente comenzó a volar en la zona circundante y se dirigieron donde Lucius y Shion se encontraban, mientras él volaba hacia allí. Los cuervos se posaron en el cuerpo de Lucius y con sus picos comenzaron a cortar el pegamento que le mantenía unido a Shion. Cuando ya nada le retenía, Karasu extendió su mano diestra a Shion para ayudarle a levantarse, demostrando así su preocupación por ella.
Me alegraría hacerte callar por unos cuantos años, Lucius. Estuvo tentado a golpearlo allí en el piso, sin embargo parecía que Shion tenía un dominio absoluto y resultaba innecesario continuar la contienda. Pero otros asuntos requieren de mi presencia de manera urgente. Aún tenía el ceño fruncido, molesto por aquella situación. Cuando Shion estuvo de pié a su lado, la tomó por la cintura. Desvió su vista hacia Yami y Ogami, parecía que la situación estaba controlada. Ocúpense del espíritu de fuego entre ustedes, Domésticos. Si lo veo merodeando por mis terrenos lo devoraré.
Se elevó en el aire sin soltar a Shion, elevándola a su lado, sujetándola contra su cuerpo por la cintura. Sus asuntos allí habían terminado y alejaría a Shion del peligro.
Shion, te doy la oportunidad de hacer un post para decir cualquier cosa que quieras decir y luego Karasu te saca de escena inmediatamente.
¿Con esa boquita te dedicas a otras cosas chiquilla? -tanto caracter y fuego en un cuerpo tan tierno y delicado, y cuando se movía allí frotando para despegarse mientras pataleba podía sentir algo que palpitaba, pero no diría el lugar- Tal vez en otra vida encarnaste a Bonnie Parker y no lo supiste hasta que encontraste a Clyde, Shion.
Ante la pregunta de la joven respondí desapareciendo mi pistola. -No tenemos tiempo para esto, en cualquier momento nuestro amigo en común aparecerá y tal vez quiera continuar con nuestra baile macabro, si no me liberas entonces tal vez sea tarde para Hota...
No alcancé a terminar mi frase cuando una parvada de cuervos empezó a fastidiarnos, su dueño no debía estar lejos -'Listos para el segundo Round!', pensé emocionado, pero vivieron sus palabras y acciones, que mataban toda la diversión, una paloma que me veía desde el cielo, preparada para huir ante el halcón, que triste escenario.
Oh por favor Karasu ¡No te prives del placer de cerrarme la boca con tus impresionantes técnicas! -dije con sorna aguda, cuando los cuervos intentaron despegar mi mano de las posaderas de la invocadora les dí una mirada de muerte, cualquiera que intentara tocarme perdería la cabeza ante el vuelo de una Katana que aparecería en un abrir y cerrar de ojos, masajee sus nalgas en círculos, aplicando un poco de fuerza para ir retirando los plieges de adhesivo, además de que estaban suaves pero firmes, el pegamento con su combinación viscosa había trabajado a favor de su elasticidad natural, también hubo otra cosa, que tomé con cuidado cortando un par de hebras aquí y allá- Deja que el tiempo cure las heridas de la hechicera que salvaste de la casa estallando ...¿Tu nariz está creciendo Karasu?
Oh espera... no tiene una sola quemadura ¡Fue un tal Lucius quien lo hizo!.
Puede mis heridas me recordarán cómo caí ... -mis labios se torcieron traviesos- ¡mira, esa nariz! ¡Es una roca!¡Un rayo!¡Un pico de una montaña!*Titubeo* Momento... ¡La que hizo eso fué Shion!
¡Tal vez deberíamos brindar por la forma como me ganaste otra vez!... Excepto que corres con la cola entre las patas abandonando a tu querida abuela y a su nieta, justo después de que tus rizos perfectos se llenaran de adhesivo.
Lo siento Karasu, jamás mandé una hechicera profesional a vencerte para regodearme con la ganancia, aunque puede que la próxima te busque para un contrato *le guiñé el ojo a Shion con picardía*.
¡Corre a que limpien tus alas pichón! Que por donde lo veas, reclamo esta victoria, cambiaste, has dejado de ser un compañero de juegos digno, creo que pondré mis ojos en nuevos potenciales...
Usé toda mi fuerza de voluntad, toda mi fuerza, apreté dientes, resistí el dolor y me levanté apenas para tocar con la yema de los dedos el mentón de la hechicera antes de que nos separáramos -Y tu deberías ver con una nueva luz a tu compañero, te dirá que eres especial y única, ¿Pero será el indicado para que confíes tu vida o... algo más? -susurré con tono bífido.
¡Podremos tener montones de diversión la próxima ocasión! ¡No olvidaré tu rostro!
Shi...on. -dejé caer mis brazos y cuerpo como roca mientras la chica se eleva por los aires, observo su ascenso sin perderme detalle de ningún tipo, con una inmensa sonrisa de oreja a oreja, ignorando cualquier posible réplica de Karasu, esperando el momento en que se levante el hechizo, acumulando energía, atento a los sonidos que provienen del encuentro entre los otros dos Youkais, con la voz de abuela gansa todavía imperativa reventando mis tímpanos.
Y apretando con fuerza en mi mano un objeto pequeño de encaje rojo mientras no perdía detalle de los vuelos de la falda corta a medida que el viento y las llamas crepitantes daban vistazos de la joya secreta de una chica. 'Que hermoso está el cielo estrellado en esta noche'...pensé relamiéndome.
*Cyrano de Bergerac, sobre su nariz en mi caso, sobre la nariz de los Tengu, como Karasu. ¡Dios!¡Practicamente nunca tengo oportunidad de citar a Cyrano!¡Y me encanta! XP
O tal vez le estoy recordando que a Pinocho, por mentiroso, le crecía la nariz. XD
A ver si ya con esto me empiezan a salir post pequeños. XD XD XD
Termino este post, y en el próximo me meto de lleno en batalla.
¡Baile de la victoria para Lucius! xD (min 0:25)
https://www.youtube.com/watch?v=gsz9YgZBx1o
Shion escuchó un aleteo, y muchos cuervos negros comenzaron a picar tanto sobre sus manos como sobre la mano de Lucius removiendo la sustancia pegajosa, que estaba aprovechando a manosearle a placer, por lo cual apenas tuvo la primera palma libre, la cerró propinando un puñetazo, que si bien tenía toda su fuerza era muy débil para siquiera lastimar a un ser espiritual. Levantó la vista y sus pupilas empequeñecieron levemente. Fuego, mucho fuego. Ahora estaba relativamente lejos, pero no se sentía nada tranquila con ello. Pero también se le tendió una mano, mientras escuchaba la voz de Karasu. Levantó la suya para tomarla, pero cuando se separó al alzarle este en el aire, sintió dos cosas, y ambas le hicieron sonrojar: Una, que volvía a presionarle contra si, y dos, que la parte inferior de su ropa interior le abandonada, quedando trabada intencionalmente en la mano de Lucius.
-La próxima vez me aseguraré de mostrarte mas hospitalidad, lo que he hecho hasta ahora no es nada -le espetó, roja. Llevó una de las manos a su falda por detrás para tratar de cubrir los vuelos al ver a Lucius tan concentrado mirándole allí, apenada en extremo.
Tengo a Ogami sujeto con mis tentáculos, forcejea y me arroja fuego. Quema y duele. Pero esta vez le tengo bien amarrado. El agresivo y temperamental Ogami muestra su rostro más salvaje, sus ansias por devorar con sus llamas le tienen consumido. Ahora no es más que otro espíritu que requiere una lección… como yo fuera hace tiempo.
Con menos satisfacción de la que esperaba, modifico los zarcillos cubriéndolos de espinas que se clavan en la esencia ígnea de Ogami. Devoraría yo mismo esa energía, pero su naturaleza me haría demasiado daño. Aprieto la presa, hundiendo las púas y comienzo a hablar.- Eres libre Ogami. Y tu primera reacción es continuar con la destrucción por la que te encerraron. Piensa un poco, no eres una bestia, hay una mente racional bajo toda esa ira y fuego. Si continuas por este camino serás la presa de alguien.- Vuelvo a tensar mis tentáculos alrededor de su cuerpo.- Cálmate y te dejare marchar. Pero si vuelves a dañar a alguien importante para mí… - Dejo la amenaza en el aire y espero su reacción.
Karasu se libera y decide terminar su enfrentamiento con Lucius, que se mofa de él. El tengu vuelve a remarcar nuestro carácter “domestico”, algo que en cierto sentido me irrita. Me imagino que ahora el fantasma estar tirado y no se le pasara por la cabeza ayudar a evitar que su hogar arda hasta los cimientos.
Un rugido se escucha en todo el templo al notar las espinas de Yami clavarse en mi cuerpo. Dolor, dolor, sentia dolor a mi alrededor por la culpa de la oscuridad de Yami. Ya era la segunda vez que me apresaba, la segunda vez que intentaba controlarme. Mi furia iba en aumento, queria salir de aquel lugar, dejar el templo atras. Aun recordaba todas las veces que le habian reñido, todas las veces que el habian reprendido.
Control. Eso era lo que me exigian para permanecer a su lado. Para poder estar en su mundo, para liberarme. Mis llamas brillaban con fuerza a la espera de cualquier oportunidad de escape. Aquel ser de oscuridad no entendia que mi ultimo acto de razoncinio era alejarme del templo. Pero eso no hacia falta que se lo dijera, estaba demasiado nublado por Hotaru, por eso debia marcharse de aquel lugar cuanto antes.
-Me amenazas Yami....amenazas al fuego...alejate de mi o te consumire. Esta vez no forcejeo para salir de sus ataduras. Habia tenido la oportunidad de escapar. Antes no podia por tener las cadenas, pero no debia mantenerse por siempre en este aspecto tan debil. Mis llamas interiores me rodeaban con fuerza girando cada vez mas rapido en mi interior formando una figura humanoide sin ningna caracteristica fisica mas que el cuerpo de un humano, no podia verse nada mas, ni ojos ni nada por el estilo. Mi temperatura se elevaba rapidamente, podia sentir el aire evaporandose a mi alrededor. Un sentimiento muy muy conocido y que añoraba desde hacia tiempo. Ya no hacia falta que se contuviera mas. Mis llamas antes encadenadas ahora volvian a mi.
Motivo: Liberar
Dificultad: 0
Habilidad: 7
Tirada: 4 5 6
Total: 5 +7 = 12 Éxito
Objetivo: Llamarada
Tirada: 2d6
Tirada: 4 5
Total: 9 = 9
Activo el "Paso en llamas" espero a que estes conectada para hacer las tiradas ya que no veo ninguna por parte de Yami.
Karasu se llevó a Shion de allí a toda velocidad, sin dirigir mas palabras a su enemigo. Sin embargo en su rostro se reflejaba el odio por las palabras de Lucius. El enfado era palpable y con toda seguridad la discusión no concluiría allí. Era evidente que su orgullo había sido golpeado y, cuando fuera oportuno, volvería para continuar con aquel combate.
En cuanto Shion se alejo, Lucius fue liberado de su atadura para poder moverse con libertad.
Yami continuaba conteniendo a Ogami, quien hacía intentos desesperados por soltare. Si bien la voluntad de Ogami no era suficiente para soltarse de las fuertes sombras de Yami, su poder se expandía en llamas azules para lastimarle.
El Templo continuaba con su Incendio y los espíritus mas débiles de las zonas circundantes se arremolinaban inquietos. Los 3 Onis podían sentir la voluntad de Akari extendiéndose por el bosque, realizando una invocación. Aparentemente, sea lo que sea que estaba invocando, tardaría un tiempo en llegar.
Daño Lucius: 18/??
Daño Yami: 8/??
Yami, Para dañar a Ogami en tu turno anterior con los zarcillos, tira 2d6. Si vuelves a atacarle este turno, tira otros 2d6.
Manteniendo con firmeza por la cadera a Shion contra su pecho, Karasu se alejó de allí a toda velocidad en dirección a las montañas. El viaje duro apenas unos cortos minutos, durante los cuales Shion fue capaz de sentir el aroma de la piel del Tengu, recorrer sus pectorales con las yemas de los dedos y percibir la firmeza de sus brazos. Sus pies tocaron tierra en un lugar que Shion reconoció de inmediato: Un frondoso árbol de cerezos azules, el lugar donde se habían conocido por primera vez, donde él le había entregado una larga pluma negra.
Aquí estarás a salvo. Por algún motivo la voz de Karasu parecía siempre carente de emoción o, llegado el caso, cargada de enfado. Deberías mantenerte alejada de Lucius, es un bribón peligroso y descarado que buscará abusar física y mentalmente de ti. Karasu no había soltado a Shion, ni la había separado de él, solamente le había acomodado para que estuvieran frente a frente y aún la mantenía sujeta por la cintura, con sus cuerpos pegados. Él no debería ser quien mancille tu pureza. Sus manos solo ensuciarían el semblante de tu espíritu. Shion no podía determinar cuando la mano de Karasu había comenzado a acariciarle la mejilla, pero aquella situación se estaba volviendo mas intensa de lo que ella esperaba.
El conjuro de agarre perdió efecto apenas a unos momentos de alejarse, esperaba que ese patán pudiera controlar al espíritu de fuego junto con Yami. Durante el trayecto, Shion intentó mirar a otro lado y hacerse la distraída, pero no podía evitar de cuando en cuando mirarle fijo durante algunos instantes, tanto al rostro, como al pecho suavemente marcado por musculatura. Claro que, se deba cuenta ella misma y volvía a mirar a otro lado de súbito, con un ligero rubor picaresco aún persistente. Por el camino fue preguntándose cual era el otro asunto urgente que tenía que atender para tratar de distraerse...
Cuando llegaron a la montaña, al claro, no parecía tener mucha prisa por ir a ningún lado sin embargo, y el mantener contacto de esa forma...no podía negar que no le gustaba.
-Creí que al ser un espíritu de la aprendiz del templo no iba a ser peligroso de esa forma...lo siento, Karasu-sama... -suspiró frustrada- Lamento que haya creado caos en esas instancias. La próxima vez estaré mas preparada para demostrarle que los humanos también podemos pelear a ese nivel.
Mantenía el rostro elevado para verle, ya que era algo mas alto que ella, tratando de no concentrarse en la proximidad y en el hecho de que no tenía interiores. Cuando comenzó a acariciarle el rostro, no pudo hacer mucho para evitar ruborizarse del todo.
-Gracias...
Ogami sigue revolviéndose. Me quema y busca abandonar toda restricción. Aprieto de nuevo.- Loco.- Digo, sin ira, ni rencor.- Moriras por no ser capaz de controlarte. Te controla tu naturaleza, pero ¿Es eso todo lo que eres? Un fuego que no se extingue y que consume sin más. Por lo que fuiste y por lo que ella te dio, recupera la compostura y márchate en paz, o aléjate herido y débil.- Es su última advertencia. La próxima vez extenderé cuchillas y lo cortare a conciencia antes de liberarlo, que sea otro el autor de su muerte no yo.
Lucius, haz algo con ese fuego, por favor. No creo que quieras que el lugar que te alimenta quede reducido a cenizas.- Grito al fantasma esperando que al menos tengo algo de cabeza en este asunto.
Objetivo: Espinas 1
Tirada: 2d6
Tirada: 4 6
El dado ha explotado: 4
Total: 14 = 14
Objetivo: Espinas 2
Tirada: 2d6
Tirada: 2 3
Total: 5 = 5
Continuo retorciendome en las ataduras del oni oscuro. Quiero salir, escapar de este lugar. El dolor que me esta infligiendo cada vez es mayor y apenas le estaba haciendo daño con las llamas que me rodeaban. Almenos el templo ya estaba ardiendo con fuerza. Podia sentir la energia de la anciana mover algo a las afueras.
Pero quien seria mas rapido, la anciana o mis llamas?
En respuesta a su pregunta mis llamas brillan con intensidad. -Yo soy fuego, soy llama eterna, consumo todo lo que me rodea. Una risa macabra sale de mi boca. -Haberme sometido y hacerme mas humano me ha hecho debil! No volvera a pasar.
Motivo: Liberar
Dificultad: 0
Habilidad: 9
Tirada: 2 2 6
Total: 2 +9 = 11 Éxito
Objetivo: Llamarada
Tirada: 2d6
Tirada: 1 6
El dado ha explotado: 6
El dado ha explotado: 4
Total: 17 = 17
Comprobó con placer que Shion había corregido el modo en el que se dirigía a él, recordando el trato respetuoso que correspondía según las diferencias entre ambos. Sonrió divertido por las palabras de la invocadora, como si le estuviera contando un chiste inocente y carente de sentido. Los humanos son débiles. Espetó sin mas acotaciones, aunque su rostro se acercó rápidamente al de Shion, tanto que la chica se podía ver reflejada en el carmesí de los ojos del Tengu. La respiración cálida golpeaba en los labios y sus narices casi se rozaban entre sí. Las siguientes palabras le hicieron estremecer, no por su contenido, sino por lo cercanas que fueron a sus labios. Tu eres fuerte, distinta a todos.
La mano que le sostenía por la cadera se había acomodado en la cintura, atrayendo aún mas ambos cuerpos al contacto, obligándole a sentir en profundidad el calor corporal que emanaba. Nunca había visto un ser como tu antes... única. Parecía que Karasu estaba a punto de besarla, sellar los labios de ambos en la intimidad y la pasión que se sentía en el aire, que debía desatarse con la intensidad de una tormenta. Sin embargo, se separó de ella con completa soltura.
Nuestros caminos volverán a cruzarse, Invocadora. De eso estoy seguro. La figura de Karasu se deshizo en cuervos, que entre graznidos y aleteos, se alejaron de aquel cerezo de flores azules.
Los gritos y llamados iban y venían, pero en el lugar donde había estado del Youkai había desaparecido, los otros dos seres sobrenaturales se debatían en una batalla sobrenatural que parecía consumir todo alrededor, los cimientos mismos de la casa parecían temblar ante el juego de llamas y sombras.
De repente un rayo salió volando directo contra un costado de Ogami, era hielo artificial, así mismo otro disparo dió contra las bases principales del recinto en llamas, y se pudo ver uno estallando contra el árbol de Sakura, cristalizando en hielo las ramas y tronco carbonizado.
Y a distancia de tiro, saliendo del follaje, pudieron ver a Lucius, no decía nada, avanzaba implacable, totalmente concentrado en la batalla, todavía con el cuerpo cubierto de cortes, magulladuras y cenizas del impacto. Pero bajo la concentración dura y fría del asesino, sin decir más chistes, sin ironizar, sin más parafernalias, sólo su arma helada como sus ojos mientras reducía la distancia paso a paso.
Motivo: Ice Gun
Dificultad: 0
Habilidad: 20
Tirada: 1 5 7
Total: 5 +20 = 25 Éxito
Objetivo: Rei
Tirada: 2d6
Tirada: 2 6
El dado ha explotado: 1
Total: 9 = 9
Bueh, Creo que no tengo que decir de dónde saco esta, básicamente es otra de esas armas que no existe, pero para el momento me resuelve ambos inconvenientes:
Ice Gun (Pistola de Hielo) de Mr Freeze.
XD
Supongo que las tormentas son imprevisibles, pensó en referencia al Tengu, algo frustrada pero también contenta. Definitivamente, volverían a cruzarse, y la próxima le demostraría que podía producir aún mas armas que Lucius y usarlas de forma competente, eso debía terminar de impresionarle para poder acercarse mas a él. De momento, decidió tomar una rama del suelo y arrodillarse en tierra, haciendo un dibujo sencillo e infantil de un campo (o eso parecía), una casa y un sol. Miró alrededor, y saltó dentro. Abriendo la puerta de la casa y cayendo en la suya propia, en la sala de pintura. Volvió a repasar lo último de la noche y sonrió.
Closed? xD
Lucius mostraba la característica determinación que siempre tenía en los combates, al igual que cada vez que todo dependía de él. Sus ataques fueron certeros y aunque no habían sido suficientes para apagar el fuego que asolaba al templo, si había sido suficiente para dar por finalizado el combate entre Yami y Ogami, encargándose de ambos al mismo tiempo. Minutos mas tarde de que la pelea entre los Onis concluyera, un espíritu de la lluvia se hizo presente, invocado por la Sacerdotisa del templo, generando una lluvia copiosa con la suficiente fuerza para apagar el incendio.
Por desgracia el Templo estaba destrozado y el agua que había ingresado por los agujeros provocados por los daños, había dañado aún mas los interiores. Haría falta mucho trabajo para repararlo.
Fin de la Escena.