Partida Rol por web

Todos los mechas abrieron fuego contra la enorme serpiente.

La enorme serpiente no tuvo oportunidad, balas y lásers llegaron desde todas las direcciones, perforando el cuerpo del kaijuu en diversas zonas, ocasionándole una muerte instantánea.

La inmensa bestia se desplomó como una tonelada de ladrillos, quedando tendido entre los seis titanes de metal, coml si de una enorme alfombra se tratase.

Eliza disparó con la esperanza de que el trabajo en equipo lograra acabar con la criatura, y cuando éste cayó abatido se dejó escuchar un profundo suspiro proveniente de la joven, uno lleno de alivio que se demostró al relajar sus manos.

-Bien Lion... Lo hicimos, chicos-sabía que solo era el comienzo, pero a pesar de todo había acabado bien. 

¿Y ahora qué? No quiso decir más, quedando  a la expectativa de lo que harían a continuación. 

¡Muere! ¡Muere!

Pienso al ver los proyectiles de todos que le perforan al cuerpo del kaijuu y cae, como cuando un cazador prepara alguna alfombra de oso como los que veo en las películas.

-¡Toma tu merecido!

Celebro mientras aplaudo eufórica. Se siente bien acabar con ellos.

-Fue una buena idea, Michael. No le dejamos ninguna forma de escapar.

Y sé que con esto Drake se callará la boca.

Buen trabajo a todos, la jaula mortal funcionó, creo que terminamos por hoy, Eliza haste cargo voy a poner al león en modo.reposo para tratar de regenerar algo de energía, lo suficiente como para poder activar el sistema de reparación, mi.robot está que se cae a pedazos. 

Strauss fuera. - digo por los comunicadores, mientras desconecto todos los sistemas no esenciales de mi mecha, confiando en que eso me ayudaría a reponer la energía perdida.

Tanya permaneció fascinada mientras veía cómo el resto abatía a la enorme criatura con aquella lluvia de disparos, observando la potencia de sus ataques, hasta que el kaijuu se desplomaba en la superficie, completamente aniquilado, sin una oportunidad de defenderse o atacar a uno de ellos. Habían tenido éxito en eliminar al resto de la amenaza, y la rubia no había tenido ni siquiera que realizar aquel ataque frontal que habían planeado con Michael como última medida. Algo bueno, teniendo en cuenta que sólo podría haber atacado una vez, antes de que Nyx fuera destruido por el ataque de la criatura si ésta sobrevivía.

Suspirando de alivio, ante la victoria perfecta en aquella misión, la rusa se relajó un poco, mirando a todos los presentes, esperando que nadie hubiera recibido algún daño por la enorme criatura durante aquel ataque en conjunto. Parecía que nadie se encontraba en mal estado, exceptuando ella y Michael, si bien el daño en sus mechas se debía a enfrentamientos anteriores y aún podían mantenerse en pie. - Lo hicimos, Eliza. Has sido una buena líder... Tú también Michael. - Dijo al final, aunque dejando en claro que prefería a la pelirroja... no sólo por su capacidad como líder, sino también por una cuestión personal, claro, si bien estaba claro que la respetaba por su habilidad para liderar. Después de todo, no lo había hecho mal, habían eliminado a Orcus anteriormente y al enjambre sin que ninguna quedara completamente fuera de combate. Ahora Drake tendría que tragarse sus palabras... aquello no hizo más que dibujar una sonrisa divertida en el rostro de la rubia.

- Si, Nyx también necesita ser reparado. El otro kaijuu le hizo un daño apreciable... - Por suerte, ya habian terminado con la misión y podrían regresar a la base. El plan de Michael había sido lo suficientemente efectivo para eliminar con rapidez al kaijuu volador, por lo que tenía que admitir que éste había hecho un buen trabajo también como líder, incluso si la rusa tenía su... favorita. Lo bueno, era que ahora podrían regresar y relajarse un poco antes de que volviera a ocurrir otro ataque nuevamente.

La gran bestia caía, abatida entre el fuego cruzado de dos cuadrillas enteras.

Nuevamente el silencio volvía a envolver las cabinas por algunos cortos minutos, roto solamente por la respiración agitada de los tripulantes que se dejaba escuchar en el comunicador. Algunos segundos más y las palabras eufóricas de algunos seguidas de las instrucciones del líder dejaban claro los próximos pasos.

Aisling, erguida y con andar sigiloso se desplazó hasta la bestia muerta,  la mirada cromada del mecha reflejando en el visor exterior el animal frente a si y regalándome en el interior de la cabina una imagen detallada en “acercamiento”. La pelea completa había sido grabada por las cámaras automáticas pero una cosa era acción y otro estudio exhaustivo.

Del caos carbonizado en la bóveda poco se podía hacer ya, pero esto, esto era otra cosa.

-Eiaa…..Comandante Drake.

Se escuchó mi voz, después que Michael indicara la retirada, dirigiéndome al estricto hombre en el Avalon que dirigía nuestras vidas prácticamente. Mi petición informal, aunque sin el marcado acatamiento característico  de las reglas militares distaba de la falta de respeto, simplemente era una chiquilla bipolar hablándole directamente al jefe de aquel manicomio volador. Que le sentara mal y me mandara por un mes a limpiar letrinas(¿?).buehhhh.. que mas daba.

-¿Cree que al Doctor Daisuke le interese alguna muestra neurológica de este bichote? Digo antes que se pudra o comience a apestar.

En un movimiento surreal Aisling puso una mano en la cadera como una adolescente impaciente que espera a la salida del colegio por sus amigas.

-Los nanobots podrían mantener el tejido fresco, digo si le interesa estudiarlo, sino pues nos vamos andando de regreso a casita. ¿Umm tendrán natilla esta noche en la cena?

La división científica ya está en camino para la recolección de las muestras, ustedes prepárense para extracción, su labor allí ha concluido.

Torres buen trabajo con la defensa del laboratorio, Strauss te ganaste tu lugar. Ambos han logrado un desempeño superior al ochenta por ciento.

Los veré en la sala de comando al regresar.- responde Drake con seriedad.

Eliza suspiro, dejándose caer sobre la cabina en un estado eufórico, perladas gotas de sudor recorrían su piel.

-Lo hicimos.

-Gracias comandante.

Sonrió cansada a sus compañeros, agradecida de su oportuna intervención.

-Michael, gracias –Dijo al joven                que la había salvado. En serio… gracias.

No podía esperar para volver a la normalidad y se encontraba aterrada y emocionada de su próximo encuentro con los Kaiju.

-Regresemos a la base.

Dijo, esperando por fin dar epilogo a esa aventura tan arriesgada.

-¡SI!

Grite a todo pulmón apretando los puños, saltando, bailando por nuestra victoria, y aunque pareciera increíble, conteniéndome de estar despedazando o humillando el putrefacto cuerpo de la bestia o lo que quedaba de ese monstruo.

-Alanya, que buena idea, que lo corten en mil pedazos.

En verdad me cuesta no sonar sádica o gritar improperios, pero no estoy mas en las calles de la madre patria y muchos esperan un comportamiento decoroso de mi parte.

Aun así bailo para festejar.

-¡Yo invito los tragos!