- ¿Por qué esa actitud tan hostil a mi persona, mis hermosas damas? - inquirió Rudeus Greyrat con cierta molestia en el rostro, al ver las reacciones de ambas cocineras recriminando su estadía en las cocinas - ¿A caso les parece mal que un servidor venga a cumplir con sus obligaciones, siendo prioridad investigar lo sucedido con el senescal e informarle al lord Amoins Gueuse del envenenamiento de nuestro buen Deadfate? ¿No será a caso que temen que alguien como yo advierta en sus cocinas alguna irregularidad que deba informar a nuestro señor? - habló en un tono comedido y sin acritud alguna, pero no permitiendo que se cuestionase su estadía en aquel recinto - Dejadme hacer mis tareas y yo no entorpeceré las vuestras, sus mercedes. Coordinar que las comidas sean bien elaboradas calentadas y servidas a tiempo es una de mis responsabilidades... así lo expresa la nota que me entregó el senescal y así actuaré en consecuencia. ¿Tenéis algo que objetar?
No entendía aquella actitud petulante y pretenciosa de las cocineras, especialmente de la señora Patamás, pero no entraría en aquel juego absurdo de acusar sin fundamentos o posicionarse en contra de alguien simplemente porque no fuese de su agrado. La inquina que le tuviesen por ser el Consejero y fiel servidor del lord Amoins Guese, y alguien mucho más docto y versado que esa mujerona analfabeta que le había interpelado, de poco a nada le importaba. Eso sí, bien que degustaría algunas uvas maduras y las sobras de lo postres para deleite y placer personal mientras permaneciese en las cocinas. ¿A caso iba a privarse de tan exquisitos manjares?
Rudeus verificó que todo el proceso de elaboración se realizaba correctamente, amén de cerciorarse de que todos los productos que se usaban eran de calidad y en perfecto estado, por lo que una vez que le quedó claro que todo estaba en orden, y que simplemente debían aguardar los tiempos de cocción y reposo, se despidió de los allí presentes con un leve asentimiento de cabeza. Tenía muchas otras tareas que realizar antes de la hora de comer y el tiempo apremiaba.
Edité para alguna corrección menor
Armand entra en la cocina junto a los demás, también sorprendido de ver al consejero de la moneda y al bardo por estos lares.
Hay mucha gente en la cocina. A diferencia de las sirvientas que han erigido su dominio en la cocina, Armand es un esclavo que no tiene ningún lugar propio por el que enfadarse o sentirse invadido. En primer lugar, ni siquiera tiene privacidad que reclamar ya que cuando no está trabajando, está durmiendo o pintando.
Pero no comprende cómo es posible que el senescal haya mandado a tanta gente a la cocina. Y lo que sí no le gusta es que hagan el trabajo que le toca hacer a él. ¿De qué sirve un esclavo al que le hacen la faena?
Así que se acerca a la señorita Verte, con mucho cuidado de que su sucio cuerpo ni siquiera roce una hebra del vestido de la sirvienta, y le hace unos gestos para indicarle que él se encarga de avivar los fuegos para mantener la comida caliente. Al fin y al cabo, si un desastre llegase a pasar y alguien se quemase, mejor que sean las manos de Armand.
Miró al consejero con cara poco amigable.
- Teniendo en cuenta que ya desde el primer momento se nos ha intentado acusar cuando el Senescal ni siquiera había probado bocado, entenderá usted que saltemos a la mínima. Siempre la culpa es del servicio. O de los pobres esclavos. -Miró ahora a Armand-. Nunca de los señoritos, claro. -Siguió protestando con retintín-. ¿Qué va a revisar si no ha cocinado en su vida? Llevo sirviendo aquí desde antes que se limpiase el trasero a sí mismo, así que haga el favor de dejar de creerse con derecho a decir si el asado está cociendo correctamente o no.
Lo miró con desdén y luego siguió a lo suyo.
- Siempre igual. A limpiar orinales le ponía yo.
La sirvienta dejó a Armand encargarse de los fuegos. Era un joven callado, educado, diligente y trabajador. Y apuesto. Una lástima que fuese un esclavo, y no pudiesen casarse. Era el tipo de hombre que tanto ella como su padre aprobarían. Ojalá el amo le libere joven, y aún pudieran tener hijos.
Eso fantaseaba Claire mientras hacía sus tareas y no quitaba el oído de lo que ocurría en las cocinas. Toso el tiempo en silencio. Conocía su lugar.
Tras completar sus respectivas actividades, todos los presentes en la cocina empezaron a dispersarse rápidamente.
- Bermejo Russus y Rudeus Greyrat salieron hacia el Sur en dirección a la Terraza.
- La Señora Patamás y Madame Bavard salieron atravesando la puerta Oeste de las Cocinas.
- Armand y Claire Verte salieron por la puerta Este en dirección hacia la Despensa.
Al comienzo de las FASE 4:
Todos abandonaron las Cocinas.
- Bermejo Russus y Rudeus Greyrat entraron en la Terraza T-2.
- Madame Bavard y la Señora Patamás entraron en Pasillo G.
- Armand y Claire Verte entraron en la Despensa.
Dilaila Merygold y Arne Windsbraut entraron en la cocina simultáneamente.
En la FASE 5:
Dilaila Merygold y Arne Windsbraut entraron en las Cocinas desde la Despensa
Podéis interactuar en esta estancia todo lo que dure la ronda.
Al comienzo de la FASE 6:
Ambos salen, Dilaila en dirección a las Terrazas (T-2) y Arne en dirección al pasillo del Este (Pasillo J).
Madame Bavard, Armand y Clarie Verte entraron simultáneamente en la cocina
En la FASE 6:
Armand, Claire Verte y Madame Bavard entraron en las Cocinas.
Arman y Claire Verte lo hicieron desde la Despensa.
Madame Bavard desde el Pasillo G.
Cocinas
Armand
Claire Verte
Madame Bavard
No hace tanto, la cocina se encontraba abarrotada y con un gran ajetreo. Ahora el contraste es total, pues los tres últimos miembros del servicio que quedaban en la cocina, la abandonan prácticamente a la vez.
Armand | Sale de Cocina hacia Terraza 2 |
Madame Bavard | Sale de Cocina hacia Terraza 2 |
Claire Verte | Sale de Cocina hacia Pasillo G |
Cocinas
Bermejo Russus
Jack O Lantern
Prácticamente al mismo tiempo, Bermejo Russus procedente de la puerta de la Terraza y Jack O Lantern proviniente del pasillo Este, entran en las Cocinas y se encuentran mutuamente allí.
Bermejo Russus | Entra en Cocinas desde Terraza T-2 |
Jack O Lantern | Entra en Cocinas desde Pasillo J |
Actualización Fase 9 en curso. Por favor, esperad.