Partida Rol por web

El rostro del inquisidor siniestro se tornó desquiciado y desenvainó su espada con la mano que tenía libre.

—¡NO TOMARÉIS ESTE NAVÍO GOMORRITAS DE AZMODAN!—gritó lanzandose a la batalla.

Minutos más tarde, el mismo inquisidor con la cara echa un mapa se vamboleaba con el salvaje oleaje en el interior de un barril flotante. Mientras tanto, los piratas de Tong-Hu por fin ponían rumbo fuera de Orre y sobre todo, ¡por fin podían descansar!

-Eso ha sido rápido. -Dijo Max Powder, el cual por un segundo había pensado que se había caído inconsciente por como los eventos se habían desarrollado con aquel último enemigo- Sea como sea... como "nuevo Capitán" ordeno que... hagáis lo que Siobhan diga... creo que voy a echarme una siesta de Capitán...

Tras decir aquello, en el mismo suelo, Max Powder calló de bruces, echandose ahí la siesta. Si alguien quería algo de él podría pisarle para despertarle, aunque con todas las heridas que tenía en el cuerpo, lo más probable es que no respondiera al primer ni al segundo pisotón.

-Y si véis a Valeria... -dijo con los ojos cerrados- decidle que no sabe maquillarse...

    Con total fatiga miraría aquel barril con su único tripulante alejarse poco a poco de nuestra nueva embarcación ... dudo que haya alguien en estos momentos que pueda negar eso... , solo para mirar a mis exhaustos compañeros, cada uno mas magullado que el otro, luego al mar y por ultimo la superficie de madera.

   C-creo que no eres el único que necesita una buena siesta - mientras poco a poco me sentaba con la espalda a una muralla del lugar, solo para mirar mis lentes y notar como estos se le notaba los evidentes desgastes de haberle usados como armas-  Y quizás pasar con un oftalmólogo c-cuando lleguemos a puerto - guardando los mismos en mi cartera y cerrar por un par de minutos los ojos antes de pensar cualquier tipo de movimiento a futuro. 

Todos buscaban un poco de descanso cuando una voz se escuchó.

—MU...CHOS ¡ME OIS! ¿CHIC...S? ZZZZZZZ—era la voz vociferante del viejo Tong-Hu—¿QUÉ... PASADO? ZZZZZZZ ¿... PERDIDO... SEÑAL...? 

Sorprendidos sacaron el transmisor que el pirata había abricado antes de despedirse de ellos... o lo que quedaba de él. El cacharro estaba en bastante mal estado, normal entre los golpes, las carreras y sobre todo la lucha en medio del mar.

—¡CHICOOOOOOOS!—con el último grito de Tong-Hu saltaron chispas de la radio.

Parecía que el artilugio estaba en las últimas, quizás esta fuera la última vez que pudieran hablar con él. Si hubierasn tenido cangrejófonos...

El hecho de que Tong-Hu a través de la radio los volviera a contactar molestó a Max Powder, el cual quería echarse una siesta en aquel mismo suelo tranquilamente sin tener que escuchar ni interferencias ni a su antiguo capitán, por lo que, sin despegar la nariz del suelo ni moverse lo más mínimo habló.

-Que alguien haga algo con ese ruido... -Comentó para acto seguido escuchar como la radio explotaba- Gracias. Pero esa explosión le doy un 2/10, necesita mejorar.

Tras esto, el muchacho siguió a lo suyo, es decir, quedar inmóvil en el suelo, en medio y medio de todo aquel barco con el que lograron escaparse de aquella isla, o al menos en mitad de aquel intento de huída.

   Debido a mi estado y el clima no ayudaba a que conciliar el sueño fuera una tarea simple, por lo que ante los últimos zumbidos del aparato no pude evitar abrir poco a poco los ojos.

   Pasaron.... cosas - iba mentando no muy segura de que el comunicador fuese capaz de mandar totalmente fluido el mensaje, de echo parecía que hasta ya no fuera capaz de siquiera mantener la comunicación ... tampoco es que fuera mi especialidad esto de reparar artilugios... , pero casi como catarsis... necesitaba soltar esto y quizás a futuro... anotarlo en la bitácora de la banda- estuvimos a punto de.... hacernos con la victoria de este año, ojala pudiera a...a verle visto al joven Powder y la capitana Vetev ,Señor, s-si que se esforzaron para dejar sus nombres retratados, p-por desgracia... un incidente trunco el ultimo cuarto de la final asi como el premio - agregaba mientras de vez en cuando miraba al furioso cielo que se arremolinaba, siempre... con necesidad de rodear poco a poco los cielo de aquella isla - Un elixir... se salió de control... y se llevo mucha gente en aquel caos, y si no fuera por fortuna, q-quizás hasta nosotros, fue horrible de ver.... de experimentar - cerrando los ojos casi a modo de paz, mientras aquella imagen de aquellas calles volvía fugazmente a mis ojos solo para desaparecer al instante - Lo bueno... es que estamos todos, p-por lo que basta descanso, algo de c-comida y pronto estaremos buscando un nuevo puerto en donde proseguir nuestras aventuras.

   Para entonces, dejar escapar un ultimo suspiro a la vez que miraba al estropeado comunicador.

   Gracias por todo Señor Tong-hu, espero algún dia pueda ver lo que a crecido la banda que nos lego...

  Tras ello y luego de una largo momento en silencio, terminaría agregando.

   Si alguien puede ir preparando un café bien cargado.... no sabrían cuanto lo agradecería...

Siobhan, con bastante esfuerzo tanto por su búsqueda como por su situación personal, había conseguido encontrar en aquel barco todo tipo de suministro médico que aquellos fanáticos tenían. Y justo cuando estaba llegando junto al resto, escuchó a Tong-Hu y a sus camaradas dialogar, por lo que se quedó parada y en silencio.

Poco más había que añadir a lo dicho por Mary, así que Siobhan únicamente se limitó a decir:

- Ya podrías haber aparecido antes… sin señal dice…conociéndote seguro que te has estado tomando una siesta tremenda. En resumidas cuentas, tenemos nuevo navío; al que por cierto tendremos que ponerle un nombre. Y a pesar de haber perdido a Levi, si nos ha traicionado, tenemos una nueva integrante y yo diría que casi dos –dijo mirando a Nadire con cara de: deberías quedarte y lo sabes. - Por lo que después de tratar todas nuestras heridas, si quiere y nos dice su ubicación podremos pasar por ti y dejarte en algún otro lugar… puede que como dice Mary mientras tanto encontremos alguna que otra aventura.

—¿PERO... DICES... ÑATA?—la radio volvió a chisporretear—¡... SEÑA... PERDIÓ... EN COMBATE! ¡CUANDO GORKO CAYÓ! ¡NO HE SABIDO NADA MÁS!

Tong-Hu parecía bastante alterado y enfadado. El piloto de la radio empezó a parpadear.

—No... escucho... en ¿... habéis hecho... radio?

—Déjame a mí—dijo Nadire sacando sus herramientas y enfrascándose con el cacharro—. Señor Tong-Hu, ¿me recibe? ¿Me oye bien? Me llamó Nadire, de los Piratas del Delfín Negro. Pero soy una gran fan de su trabajo. Este cacharro está en las últimas, aunque tengo que reconocerle que es un gran trabajo. No sé como ha podido hacer tanto con tan poco.

La fúrida miró a los Piratas de Tong-Hu.

—Chicos, si queréis decirle algo es ahora o nunca. No sé cuánto voy a hacer que esto aguante.

Tener unas últimas palabras con su antiguo capitán podría ser el inicio del fin de aquella pequeña gran aventura que habían vivido en aquella isla pirata en donde, habían perdido a un tripulante pero habían ganado dos más, así como haber obtenido un barco perfecto para su uso. Una aventura provechosa.

-Decidle quién es el Capitán ahora... -Puntualizó Max Powder.- Y que es más sexy que el anterior...

No eran palabras bonitas, pero tampoco se podría esperar que Max Powder dijera algo que no estuviera demasiado lejos de los temas que a este le interesaba, es decir, las bombas y él mismo... y a veces los postres dulces. Pero eso era lo que ahora se había convertido Max, en un pirata hecho y derecho... aunque ahora mismo se sintiera deshecho y como un desecho.

   Lo que reflejaba mi rostro en estos momentos era una especie de mensaje bastante evidente "sin energías ni tiempo para repetir todo aquello ", por lo que mirando al cielo, simplemente agitaría con pereza mi puño hacia arriba mientras comentaba con los resquicios de ánimos que me quedaban.

   Volvemos a navegar, podemos continuar.... - siendo quizás bastante resumido, pero dejando claro que nuestro objetivo de ir a Orren al menos se había cumplido ... quizás no con los mejores métodos, pero  cumplido al final de la jornada...

En vista de lo que había dicho Nadire y que el viejo pirata no le había respondido, Siobhan volvió a insistir:

- Que si quieres que vayamos por ti y te dejemos en otro lugar. Que no me quedé muy conforme dejándote solo cuando nos separamos –dijo en primera instancia antes de seguir, ya que aquello salvo cambio de ultima hora, pintaba a despedida. – Y que estoy segura de que habrías disfrutado viéndonos aquí, que gracias a tus enseñanzas hemos salido adelante… bueno, más o menos –concluyó dando una visual a todos y cada uno de los presentes con sus numerosas heridas.

—No, no, estoy bien aquí—respondió el viejo—. Los lugareños son buena gente. Me ayudan a moverme de un buen lugar a otro. Es un buen sitio para jubilarme.

La radio volvió a chisporretear.

—Señor Tong-Hu—lo interrumpió Nadire—, si hay algo que tenga que decir, le recomiendo que lo haga ya. Este cacharro se muere.

—Qué chica más impaciente. Sabré yo lo que duran mis cacharros—respondió el viejo con una indiferencia que casi lo podían ver rascándose la cabeza como cuando pensaba—. Bueno chicos, me alegra ver que todo ha salido bien. Estuve escuchando vuestro combate hasta que derrotasteis a Gorko y entonces la señal se cortó. La verdad es que me sorprendisteis con eso, no daba un duro por vosotros. Nadie lo daba, vamos. ¿Se puede saber qué pasó? ¿Ha sido el ataque ese de la Armada? Bueno no importa, ya me enteraré. Que a la cosa esta no le queda tanto. En fin supongo que esto es algo así como una despedida.

Tong-Hu se quedó en silencio unos segundos.

—Parece que os he enseñado bien. Si os salió bien el plan de Max del barco, conseguisteis apuntaros al torneo y derrotásteis a un Señor Corsario supongo que ha sido por algo. Pero esto es sólo el principio muchachos. Ante vosotros se abre un vasto mundo. El puerto de destino es el mañana y cada día más incierto. ¡Encontrad el camino! ¡Cumplid vuestros sueños! ¡Recordad que estáis todos en el mismo barco y vuestra bandera es la libertad!—parecía que el viejo pirata se había emocionado un poquitín—. Ahora adelante Piratas de Tong-Hu, viajad hasta los confines de este mundo y como siempre he dicho...

¡ZZZZZZZZZAP!

 La radio emitió un último chisporroteo y un humillo oscura salió del altavoz. Parecía que ya había dado todo lo que podía dar. Y era un final digno del viejo pirata, acabar con una conversación a medias. Seguro que el día que muriese también se le quedaría el discuros a medias.

El estado de Max era tan deplorable que no iba a poder imponer ni una bandera ni nada capitanía, pero en su mente, lo único que tan solo estaba parcialmente herida (a diferencia de su honra, su hombría y de su actitud), él era el Capitán y por tanto podía escoger la bandera que quisiera, una bandera mucho mejor que la "figurativa" de "Libertad".

-No. -Respondió al anciano en mitad de su emotivo discurso- Nada de "Libertad". La bandera será una calavera-bomba...

Al parecer Max no pillaba lo que el discurso implicaba, aunque tampoco estaba por la labor de ello, de hecho, por no estar, ni siquiera se había percatado que había una tripulante de más con más pelaje de lo habitual. Aunque eso ya sería problema de Max del futuro, si es que superaba la noche y nadie lo lanzara por la borda.

Tras la despedida de Tong-Hu y con las heridas tratadas al mínimo, todos fueron buscando un lugar en el esquife en el que poder descansar.  Orre y la tormenta que había sobre la isla se iba haciendo cada vez más pequeñita. Sin embargo la isla seguía siendo amenazadora. ¿Cómo había podido ocurrir todo eso? Pero nadie pensó mucho en la pregunta, poco a poco, uno a uno, todos fueron cayendo en un necesario sueño.

El grupo continúa aquí.