Partida Rol por web

Entre el conocimiento y la fe (HLCN)

Dia 1: Sólo los niños se salvaran.

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14/03/2013, 19:30
Máster

Oh rosas negras,
Negras rosas, 
que os habéis marchitado,
Por la codicia, la fortuna y el ego,
Si solo una verdad existe,
Decidme porque la piel de muchos es distinta,
Decidme porque hay días soleados y días sin sol,
Decidme porque las horas cambian en el tiempo,
Y porque, todos  teñimos  nuestras venas de rojo,
Bestias y humanos, iguales y diferentes,
Hijos de la misma luz creadora somos.

¿Por qué hablar de una sola línea?
¿Por qué no señalar los múltiples caminos?
Cual desdicha aquél que proclama una única verdad,
Cuan  egoísta es quien se guarda el conocimiento para sí,
Cuanta ignorancia hay en el pueblo que es sordo.

¿Sois Ovejas o sois Lobos?
¿Sois Ovejas, o simplemente no sois?
¿Quién sois entonces?

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14/03/2013, 19:33
Máster

En uno de los maizales del poblado,  se ha encontrado una escena horrorosa. La negra Agapita colgada  de pies y encadenada se encuentra, sobre un árbol que hace a las orillas del cultivo.


Muerta se encuentra y sus ojos muestran angustia. Una horrible muerte tras unas gran angustia, y al lado del camino dos cuerpos encuentran, al parecer han muerto cada uno en el enfrentamiento: el obispo y el alcalde

Es la historia de dos seres que en la discordia y en la pelea cada uno mata al otro, y ninguno sale vencedor.
Una víctima inocente era la pobre Agapita, quien a nadie nunca le hizo daño, no era ni masón, ni religiosa, pero ella está muerta. Y muertos estaréis muchos si no acaban con esta guerra, masones e inquisidores están en el pueblo, y  mucha sangre correrá.


La muerte de esos tres ha impactado a todo el pueblo. Los niños lloran, y muchos se lamentan. La escena es espantosa.

Pero la cosa tiende a empeorar.
Un soldado noble os ha reunido en la plaza, y les ha comunicado lo presente.

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14/03/2013, 19:37
Gustavo

Mi nombre es Gustavo, soy soldado del ejército español, me han hecho jurar silencio, pero he decidido romper ese voto para advertirles, que la muerte del Obispo y del alcalde ya es conocida, y que han ordenado que una tropa venga a este pueblo e investigue, que es posible  que muchos mueran si no se van.

Los mira con sinceridad y les dice.

Pero el problema es que hay orden de no dejarlos salir,  el pueblo esta sitiado, yo ofrezco mi ayuda para sacar a los niños en esa carreta, que ellos, por su inocencia, no tienen culpa en este conflicto. Podre llevarlos a la capital para que se les de cuidado, y si queréis, podéis mandar cartas conmigo, para que familiares de otros pueblos vengan y los recojan.

Os dos horas para montarlos en la carreta.

Dice mostrando la misma.

No puedo quedarme más, porque lo que estoy haciendo puede ser visto como traición. Sólo los aconsejo que  busquen la forma de liberarse de esta peste, así cuando vuelva el ejercito el problema estará solucionado.

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14/03/2013, 20:15
Nikolai Vasiliev

Sabía que la inquisición no traía nada bueno, pero por otro lado la herejía masónica no se podía perdonar tampoco. El soldado español les advirtió de que estaban sitiados, no podían salir. Aunque al menos decía que podían salvar a los niños. Él, como cuentacuentos conocía a alguno de los jóvenes, así que alegró al saber que podían estar a salvo.

-Creo que debemos hacerle caso y salvar a los niños. Pero no debemos olvidarnos que estamos en peligro, si ha muerto el Obispo y el alcalde es porque alguien los ha matado.

Nikolai no quería creer que los asesinos se encontraran entre los habitantes del pueblo, y esperaba que así fuera. Aunque, ¿como podían estar seguros?

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14/03/2013, 20:22
Muerto 1:Hermano Leovigildo

El hermano Leovigildo empieza a gritar en la plaza del pueblo. - Arrepentíos pecadores!!! pues el fin esta cerca! solo así podréis salvar vuestras oscuras almas y limpiar vuestras manos de sangre de los pobres inocentes!!

Tenebras est super populum Et sola fides potest salvare eum! Sus ojos se ponen blancos y convulsiones recorren su cuerpo justo encima de los dibujos aparentemente sin sentido que había pintado el día anterior.

Cuando se le pasan las convulsiones, se pone de rodillas, sujetando una cruz de madera en una mano y se pone a rezar. -Acercaos hermanos, y rezad por vuestra salvación.

Credo in Deum Patrem omnipotentem, Creatorem caeli et terrae. Et in Iesum Christum, Filium eius unicum, Dominum nostrum, qui conceptus est de Spiritu Sancto, natus ex Maria Virgine, passus sub Pontio Pilato, crucifixus, mortuus, et sepultus, descendit ad inferos, tertia die resurrexit a mortuis, ascendit ad caelos, sedet ad dexteram Dei Patris omnipotentis, inde venturus est iudicare vivos et mortuos. Credo in Spiritum Sanctum, sanctam Ecclesiam catholicam, sanctorum communionem, remissionem peccatorum, carnis resurrectionem, vitam aeternam. Amen.

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14/03/2013, 20:37
Muerto 20:Alba

- Joder, lo que nos faltaba. - pienso contemplando la macabra escena.

Una mueca de disgusto se dibuja en mi cara al apreciar lo sadico del panorama. Tres muertes violentas. Dos personalidades y una pobre nativa.

- Este puto pueblo se ha ido al infierno. - niego en silencio con la cabeza.

Inspiro profundamente y cierro los ojos por un momento.

- Nada. Todo rojo. Esta mierda de escena sangrienta no se me va a quitar de la cabeza. -

Evidentemente alguien va a tener que pagar por todo esto. Y a juzgar por lo que dice el soldado, todo el maldito pueblo vamos a pagar por ello.

- Y ahora, ¿que hacemos? - lanzo la pregunta al aire

- Alguien va a pagar por ello...-

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14/03/2013, 20:43
Muerto 22: Francisco Núñez
Sólo para el director

Al despertame muy al alba, luego de un sueño intranquilo, me alisto y me dirijo al pueblo, con intenciones de buscar a Diego y decirle para irnos de cacería antes de lo previsto, cuando llego escucho al soldado sobre toda la informción brindada.

Maldita sea y ahora esto

Me dirijo lo mas rapido que pueda hacia donde estan los cuerpos de los muertos, con la intención de examinarlos y buscar pistas.

 

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14/03/2013, 21:03
Muerto 9: Eduardo Toñin

Lo que yo pensaba, voy a tener mucho trabajo, y parece que no hay nadie imprescindible, han caido el alcalde y el obispo. Agacho la cabeza y sigo trabajando en las zanjas para los cuerpos

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14/03/2013, 21:12
Muerta 11: Isabel "La rubita" Tormes

Llego por la mañana a mi puesto con mi abuelo como todos los dias y al rato escucho al padre Leovigildo que grita en la plaza - que ocurre? - pienso escuchándole y me acerco donde un caballero que nos reune y nos cuenta - que han muerto el obispo y el alcalde? - me quedo perpleja y me santiguo - increible... es terrible...

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14/03/2013, 21:48
Muerto 24: Pedro "Unaoreja" Díaz

Otra noche durmiendo en un banco y otra noche que me despiertan...

Pedro se incorpora, escucha al soldado con atención y tras revisar que sigue teniendo todas sus pertenencias se acerca al soldado, sacando una carta de dentro de un bolsillo de sus pantalones.

-Gustavo, ¿podría llevarme esta carta a la ciudad costera más próxima? Busque a un hombre llamado Francisco "niunpelo" y dígale además que espero no retrasarme mucho.

El joven pirata le entrega en mano una carta que escribió ayer por la noche, sabiendo que no iba a poder salir. La muerte del obispo y el alcalde no le afectan en absoluto, sin embargo la muerte de la joven mujer negra sí, pues no entiende qué razón podría tener alguien para cargársela. Al no ser del pueblo no reacciona con pena o tristeza, y espera que esa no sea razón para que le echen las culpas.

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14/03/2013, 22:06
Muerto 21: Frank "3 dedos"

Pensaba que lo peor había sucedido, tras la muerte del alcalde y el obispo, las cosas irían a peor. Pero la presencia del soldado mostraba que lo peor estaba por llegar. Al menos él daba una esperanza.
-Los niños son tan inocentes como nosotros los adultos, todos merecemos salvarnos de esta loca lucha, somos pueblerinos no inquisidores o brujos.-No estaba de acuerdo totalmente con las palabras de aquel soldado y quiso dejarlo claro.

Por suerte para su egoísmo, su familia; hija y esposa, estaban fuera trabajando. Esta noche regresarían y al ver el poblado cerrado, seguro que irían a casa de su cuñada, eran las únicas buenas noticias que tendría. Al menos ellas no tendrían que pasar la locura que se cernía en la aldea.

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14/03/2013, 22:13
Muerto 16: Shuaila

Salgo de casa como todas la mañanas parar ir a la casa de la dueña a trabajar... y me encuentro con un alboroto que no sabía lo que estaba pasando... y veo que estaban muertos el Alcalde y el obispo no sabía que había pasado... y quienes podían ser los culpables... pero lo que dejo preocupada al escuchar a un Señor que era calva que creo que se llama Nikolai decir que había aquí poner a salvo a los niños...

Me dejo desconcertada porque no sabía si corrían peligro solo me quede preocupada porque no le pasara nada a mi hija... no se tenían la mayor pararte de culpa lo inquisidores. O lo masones pero lo que estaba claro que el pueblo no está a salvo... me fui del sitio donde estaban los cadáveres y me dirigí a la casa de la dueña.  Y averiguar si la señora sabía algo de lo que había pasado.

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14/03/2013, 22:14
Muerto 14: Dorian "el maldito"

Tras despertar en la posada unos gritos le despiertan. Un cura protagoniza un espectáculo dantesco. "Esto no tiene porque ser así. El pueblo no debería estar sometido."Voy directo al bar de Gustavo.

-Una cerveza.

Espero a la cerveza.

 

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14/03/2013, 22:16
Gustavo

Llevare las cartas que me encomendais, dice el fiero soldado, y aunque injusta pueda ser la causa, solo niños saldran de este pueblo, apuraos madres y padres, traed a las criaturas, dentro de poco debere marcharme...

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14/03/2013, 22:27
Francisco Berenguer

Me desperté temprano. Hacía tiempo que no podía dormir bien, tanto en la ciudad como en el campo mientras viajaba. Esperaba que este sueño hubiese sido más reparador que los que tuve ultimamente, pero los acontecimientos del día anterior no colaboraron.

Me vestí y salí de la posada en la que estaba alojado y recorrí las calles que ya se llenaban con actividad. Fue entonces cuando alguien señaló a la negrita colgando del los pies. Fue un espectáculo que me revolvió el estómago de solo verlo y no pude sostener la mirada mucho tiempo. Cuando me recuperé, un soldado que había salido de la nada estaba apurando a las madres a sacar a sus hijos del pueblo, pues en poco tiempo morirían más personas. Más que nada para alejarme de la escena, tanto física como mentalmente, y concentrarme en otra cosa, me acerqué a la carreta que señalaba el hombre e intenté ayudar en todo lo posible a los hombres y mujeres que rápidamente llevaban a sus hijos a la misma para subirlos primeros.

Intentaba acomodarlos lo mejor posible, aunque era bastante dificil, ya que algunos ni sabían lo que estaba pasando y se mostraban inquietos y lloraban por la idea de abandonar su hogar. El soldado también se mostraba nervioso, pero hacía todo lo que podía por ayudar.

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15/03/2013, 00:04
Gonzalo

Gonzalo ya estaba despierto y limpiando un poco el suelo de la taberna cuando empezó a oír voces en la plaza. No se apresuró demasiado a salir a ver lo que pasaba, ya que, después del mensaje del día anterior y la llegada del obispo suponía que era algo más de esa historia.

Cuando hubo terminado de barrer, se acercó a la puerta, volvió a calzarla para dejarla abierta (como cada día) y fue a ver que pasaba.
Inmediatamente se quedó horrorizado.
Un hombre que se hacía llamar Gustavo, y decía ser militar, acaba de contar algo horripilante y repugnante. Abrió y cerró la boca varias veces, como un estúpido pez, sin saber bien lo que hacer.
Quién ha podido hacer algo tan horrible se preguntó para si mismo.

Siguió escuchando al militar. Estaba de acuerdo con él. Había que sacar a los niños del pueblo. El sentimiento de paternidad frustrada que tenía le impulsó a entrar de nuevo en la taberna. Cogió una de sus preciadas botellas dee vidrio, la llenó con leche y la tapo con un corcho. Cogió las pocas manzanas que le quedaron del día anterior y un bollo de pan caliente recién salido del horno, de los que preparaba para las comidas. En el último momento, y pensándolo tres veces, metió un poquito de carne desecada que tenía bien guardada. Lo metió todo en un saco de pan y se acercó al militar.
Tome- le susurró - Sé que no es mucho, pero no puedo hacer más. Trate bien a los niños, por favor. Parece ser que es lo único bueno que tiene este pueblo...

Gonzalo era consciente de que con ese acto había pecado en exceso de altruista. Y que estaba perdiendo dinero. Pero no importaba, si lo que decía el militar era cierto, y el ejercito venia a tomar la ciudad, tal vez pronto muriesen todos, y lo único que quedaría para recordarles serían esos pobres niños. Ellos tenían almas puras aún. No como los adultos, que, tras aquellos horribles actos, tal vez quedaran todos condenados.

Se dio la vuelta y volvió a la taberna. De refilón vio como Shuaila se iba corriendo, espraba que a buscar a su hijita...

El leñador entro detrás de él a pedirle una cerveza. Se la sirvió en silencio. Estaba ya saliendo del shock y ahora además de horrorizado estaba empezando a asustarse. No solo porque tal vez los mataran a todos por ser los vecinos de algún asesino de un enviado de Dios. Si no también por los actos en si.

La pobre Agapita... Le había comprado pescado en alguna ocasión. Era una mujer de buenos modales y amable. Asesinada solo por ser la criada del Alcalde ¿Qué otra razón puede haber si no?. El alcalde también había muerto, pobre el también. No lo conocía de nada, y pertenecía a una de esas esferas que se encuentran por encima de los habitantes llanos, pero aún así había sido un señor bondadoso que incluso había consumido en su taberna en alguna ocasión. Sin importarle mezclarse con los aldeanos.
Y el obispo. Pobre obispo también. Después de un viaje tan largo, morir de aquella manera tan horrible... Además era un enviado del Papa para ayudarles a eliminar el mal del pueblo, aunque parecía que le había vencido... Se santiguó como hacía tiempo que no hacia y cogió para si una cerveza también para reflexionar.
Pero entonces recordó, con un poco de rabia e impotencia, como el obispo había llegado en un elegantísimo y carísimo carruaje tirado pro caballos, y como el dinero de sus ropas podía haber alimentado a todos los niños durante meses. Empezó entonces a sentir un poco menos de pena por aquel señor. Entendía a la gente que pensaba que Roma parecían haberse olvidado de los humildes hacía algún tiempo...

Aunque esto no debe quedar así, el que haya hecho esto no debe salir impune... murmuro después de un largo sorbo de cerveza caliente.

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15/03/2013, 01:19
Muerto 15: Francisco Moreno

Me levante temprano para llevar una carta al correo, los rumores de lo acontecido la noche anterior había llegado a la casa de la boca del unico criado que aun seguía trabajando pese a la escasa paga que mi enferma madre le llegaba a  pasar, pero no me parecieron importantes pues como el alcalde, opinaba que nada malo ocultarse.
Sin embargo al ver la muchedumbre y acercarme a ver la escena de la criada, el alcalde y el ovispo que viniera en la vispera cruelmente masacrados, comprendi que había subestimado la situación. Era claro que algo ocurría y era grave, lo cual rapidamente fue confirmado con la llegada del militar y sus palabras.
"De modo que estamos en cuarentena, como si hubiese una peste en el pueblo" 
Estuve de acuerdo con que sacaran a los niños de aquel infierno, y no pude más que mirar con estupor al clerigo que recitaba en latin como un poseido, esa imagen me quedo aun más hondamente grabada que la de la negra criada masacrada. Necesitaba hablar con alguien de lo alli acontecido, por lo que me dirigi hacia la casa de Antonio el grande, el general retirado quien fuera amigo de mi padre, habia que organizar un plan de accion, antes de que el caos se apoderara del poblado y se sucitara la desobediencia civil.

Camine hasta el caseron antiguo en el que el general vivia y aplaudi energicamente, parado delante de la fachada esperando que no me tomasen por un portador de malas noticias sin atenderme.

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15/03/2013, 08:12
Muerta 11: Isabel "La rubita" Tormes

Escuché asustada al soldado y quise decirle por mi abuelo pero ví que sólo podían salvar a los niños, pero me quedé con la duda así me fijé que Shuaila y la acompañé para preguntarle por su niña, la conocía pues compraba siempre en mi puesto todos los dias, cuando llegamos donde los cadaveres me quedé estupefacta viendo la escena... sin palabras. 

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15/03/2013, 10:31
Muerto 3: Olwyn Oosterbak

Olwyn, como de costumbre, despertó antes de la salida del sol y se fue a su campo. Pero hoy no pudo llegar, unos soldados le obligaron a volver al pueblo sin mas explicaciones. Y al volver fue uno de los primeros en encontrar los cuerpos, lo que le dejo tan sorprendido que así seguía cuando la mayoría de vecinos ya había despertado y descubierto el tenebroso panorama

-por Dios, que horror...- es lo único que murmura al empezar a reaccionar

-aunque parece que el obispo no se equivocaba, hay herejes aquí, ninguna otra persona asesinaría a un obispo de la iglesia así-

No es que saber eso sirva de mucho, la inquisición no se va a detener ante nada para acabar con los herejes, y los herejes tampoco para acabar con la inquisición, "probablemente todos acabaremos como la pobre Agapita, víctimas del fuego cruzado"

Es entonces cuando finalmente cae en lo que ha dicho el soldado y sale corriendo hacia su casa seguido por una sorprendida mula "he de avisar a mis chicos y que se vayan a casa de su tia"

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15/03/2013, 13:20
Muerto 26: Pedro Borrell

Pedro llegó entre los últimos, cuando el soldado comenzaba a hablar.

El hermano Leovigildo perdió la cabeza, piensa. Pobre hombre.

Pasa cerca de una chica que pregunta que hacer.

- No eso, ciertamente, contesta Pedro señalando al pobre Leovigildo que está en medio de convulsiones.

- El pueblo está sitiado. Tal vez deberíamos reunirnos todos y tratar de dar con una solución al problema. Seguramente será mejor opción que la que tienen los militares...