Al caer la noche tras terminar la reunión ser Tuomas se hizo presente en la habitacion de Lady Constance, abrio la puerta sin mas, no queria que lo vieran golpeando la puerta de la mujer.
-Mi señora, necesito hablar con usted, tengo un asunto importante que Tratar.
Constance estaba sentada frente al fuego, su cabello rojo parecía aún más encendido y cuando escuchó la puerta no se movió, ya había echado a Bastian que había ido a buscarla y también a su madre, pensó que sería Mérida pero no era así, era Norcross. No le sorprendió que entrara así, después de todo, ella tampoco era alguien con autoridad allí.
-Norcross... Espero que Álvar no os haya visto entrar aquí, podríamos terminar siendo juzgados por vayan Los Dioses a saber qué.
Le hizo una seña para que se acercara. Era evidente que no había parado de llorar y que no estaba descansada, que todo era demasiado para ella.
-Decidme, os escucho.
-Mi Lady, no permitiré que ese traidor suba al trono que su padre le cedió a usted.-Dijo el castellano - Estoy listo para tomar el castillo con un grupo de leales hombres. Deme la orden y reinstaurare su mandato, no tiene que temerle a nadie mi Lady, no permita que el nombre de su padre se mancille dejando a esta sanguijuela a la cabeza de su familia.
Esta escena no va a poder ser. Tuomas sale muerto o preso del salon real asi que lo siento mucho