Partida Rol por web

No pude evitar que una lobuna y siniestra sonrisa se posara en mis labios por unos instantes ante las preguntas del joven heredero. ¿Tan ingenuo era?¿No tenía ni idea de lo que significaba el rango de Maestro de Espías?

"Ah joven Ragnar, parece que aún no lo entiendes..."

-Ser Ragnar, lo que gano es tan obvio que ni me molestare en responder. Con respecto a que evita que traicione a los traidores... pues la respuesta es nada.- dije con una sonrisa y un encogimiento de hombros. -Esta reunión la organizo Roland y mucha gente nos ha visto el la taberna asi que matarme aqui mismo es imposible; Por lo que si yo quisiera levantarme y hablar con tu padre para que los cuelgue a los dos por traición no podrían hacer nada para impedírmelo.- guarde silencio unos segundos antes de continuar para que asimilaran esas palabras; pues así era la vida en este negocio. -No tiene garantías de que no los traicionare asi como yo no tengo prueba alguna de que no seré el traicionado. Punto.-

Di otro largo trago, algo frustrado por tener que explicar lo más básico de una conspiración grupal. Chasquee con la lengua y volví a dejar el vaso en la mesa suavemente. -Ahora deben responder a mi pregunta de forma concreta mi pregunta anterior. ¿Están dispuestos a llegar hasta el final?- Esta vez el silencio no fue interrumpido por nada; ni gestos, ni chasquidos, ni siquiera por un traga de vino tan necesitado...

Roland miró a Álvar. 

"¿Realmente creerá que soy tan inocente?... O quizás..."

La prueba de matar a su pariente no podía estar dirigida a él: él había organizado la reunión, y estaba hablando de traicionar a su hermano y Señor. Roland comprendió -o creyó comprender, más bien -que la pregunta no era para él.

Sin embargo, decidió responder, para darle una introducción a su sobrino:

-Quizás no sea un maestro en los combates de espada o escudo, pero soy muy bueno con las estrategias. Por eso, llamé a esta reunión a ustedes dos, abusando del cargo que mi hermano me ha asignado en el Consejo de Guerra. La casa es mi mayor prioridad. Y estoy dispuesto a todo para que prospere.

Miró a Ragnar:

-¿Y tú, joven caballero? ¿Serías capaz de llegar hasta el final para que la casa se imponga sobre las demás en el resto de Poniente, toando la carga del heredero y la dirección de la casa?

Ragnar escuchó cada palabra del espía y supo que ese hombre no le debía ningún respeto. Tendría que hacer algo en algún momento, sino, podría llegar a ser un problema. Pero ahora no, no era momento.

-Si te pregunto algo, mejor sería que respondieras con la verdad y con respeto, por más obvio que pensaras que fuera- dijo el joven -Sigo siendo el Heredero, y, por cómo se están desenvolviendo las cosas, seré tu Señor antes de lo que pensábamos. No pido que te arrodilles ante mí y beses mi nobles pies- dijo fingiendo pomposidad -sino sólo el respeto que me merezco por ser quien soy... ¿acaso te he faltado el respeto alguna vez, fiel Álvar?- el tono había sido sosegado, pero con autoridad, y hasta amabilidad. Hubo una pequeña pausa -Pero tienes razón nuevamente, nadie tiene seguridad de nada, sólo la aparente garantía de que todos buscamos lo mismo: el bien de la Casa Nightwing.

Y la próxima respuesta era un paso sin retorno. Si aceptaba, sería sólo por el bien de la Casa, que ya de por sí había sufrido embates como nunca antes. Primero Mérida, luego Constance y ahora un Lord alcohólico y traidor de su señor feudal. Pero también estaba el tema de saber que también podría ser el traicionado una vez en el trono del Cuervo. La posibilidad de no aceptar estaba cerrada ya. Eso era un hecho.

-Señores- comenzó mirando a los dos -Por supuesto que iré hasta el final con esto, acabo de decírtelo hace un momento. Mi padre está tomando decisiones apresuradas, a raíz del dolor y el alcohol para superarlo, pero no por ello significará la ruina para esta Casa. El Cuervo debe sobrevivir a toda costa, y esta Guerra no será su final ni su ruina, será un momento de ascenso...

Sonreí complacido por las respuestas. Aparentemente estaban dispuestos a todo y eso era justo lo que necesitaba.

"...El respeto que merezco por ser quien soy..." Más pomposo y altanero no podría haber sonado. Y yo que siempre había creído que el era diferente al menos en esa parte a los demás nobles, pero aparentemente lo llevan dentro desde que nacen.

-Teneís toda la razón mi señor, os ruego que me disculpes por mis atrevidas palabras que jamás fueron destinadas a ofenderos. La verdad es que creí que tras haber derramado tanta sangre de nuestros enemigos juntos en Harrenhall ya me tendrías digno de confianza y un camarada; pero si "sirviente" es mi título, que así sea mi noble señor.- En mi cara estaba escrita la palabra sumisión, nacida de años de práctica para el oficio. -Soy tu siervo y me enorgullezco de servirle.- Dije mientras me sentaba erguido y hacía una lave reverencia. Esperaba que esta reacción lo complaciera más que la natural.

Dejando el pequeño discurso atrás, volví a sentarme más cómodamente y traje de nuevo la copa a mi mano. Esta clase de discusiones le secaban la garganta a cualquiera. -Ya aclarado todo lo demás, hay un par de temas para discutir creo yo y voy a plantearlos aquí rápidamente para que los tengan en consideración- dije mientra levantaba el dedo índice de mi mano libre. -Primero, el usurpador cuenta con el apoyo de muchas de lascasas de las Tormentas.- saque de uno de mis bolsillos más ocultos un trocito de pergamino y se los alcance para que lo ojearan.

_{Casa Selmy de Torreón Cosecha
Casa Wylde de Aguasmil
Casa Trant de Gallowsgrey
Casa Penrose de Los Pergaminos
Casa Errol de Pazo Pajar
Casa Estermont de Piedraverde
Casa Tarth de Castillo del Atardecer
Casa Swann de Timón de Piedra
Casa Dondarrion de Refugionegro
Caron de Canto Nocturno}

-Como verán, son las casas más poderosas de estas tierras excepto por nosotros, los Nightwing.- Les di unos segundos de silencio para que asimilaran la información antes de seguir con el próximo tema. Levante un segundo dedo. -Luego viene el tema de las traiciones, porque no somos los únicos caballeros. Tregar tenía planeado traicionarnos a todos en plena batalla; o al menos tengo grandes sospechas de esto y estoy en plena investigación.- Otro silencio, porque esta información iba a ser más difícil de digerir. Tregar era un viejo conocido de la casa y su traición sería un golpe bajo.

Ragnar lo miró a Álvar y rió ante su espléndida actuación de sirviente sumiso.

-No hace falta que actúes de esa forma, Álvar- dijo aún con gracia en la voz -Justamente por haber derramado sangre juntos espero el respeto que nos merecemos quienes han compartido tal destino. Creo que me has malinterpretado, no quiero que seas "mi siervo", preferiría "mi amigo" y "consejero", pero justamente como tal, evitaría los sarcasmos innecesarios...

Luego, tomando el papel que nos extendía el espía, le echó una mirada a los nombres que aparecían en él.

Son muchas y poderosas... será todo un desafío...

-Es lógico que lo tenga... nosotros deberíamos estar entre ellos- replicó Ragnar sin dudar y con enojo en el tono -Parece que si seguimos junto a la causa realista, tendremos un panorama difícil a corto plazo... ya deben estar reuniéndose para enfrentar a los realistas.-

Que eran ellos mismos, claro. ¿Es que su padre había pensado que podría salir victorioso sin tener el apoyo de ninguna de las casas de las Tormentas? Nuestro lema era "Somos la Tormenta", ¿cómo no seguiríamos al Señor que ostentaba el título de Señor de Bastión de las Tormentas?

-Con respecto a Tregar, deberíamos hablar con él. No incluirlo en esta mesa chica, pero sí tal vez hacerlo partícipe de que espere... que no tome cartas en el asunto aún. Es un fiel sirviente de la Casa, y así como nosotros, vela por su bienestar. Aunque sigue siendo un soldado, y utiliza los métodos que conoce y sabe utilizar- Ragnar dudó de continuar, pero prefirió hacerlo. Esta no era información que lo tomara desprevenido, ya que su padre se lo había confiado hacía poco tiempo -Álvar, mejor si no le informas de esto al Lord, sino perderíamos un potencial aliado en nuestra causa-

Roland se alegró de ver que su sobrino pensaba tanto en el bienestar y progreso de la casa como él mismo. De hecho, no solo lo pensaba con la misma preocupación, sino también de la misma manera.

"Bien hecho, Rarkan... Sé que será difícil, pero lo haremos juntos..."

-Es cierto. Tregar no debe saber de este pacto ni de estos planes. Pero debemos disuadirlo de lanzar su golpe en plena batalla. Porque si lo hace, no solo arruinará nuestra posibilidad de sostener las apariencias frente ambos bandos, sino también debilitará nuestras fuerzas para cuando sea nuestra la hora de atacar. 

Luego, posó su atención en Álvar.

-Álvar, necesitaremos que uses toda tu habilidad para conseguir informaciones vitales, como las que nos acabas de brindar; pero también para que Owen no pueda tener ni la más mínima duda de nuestra lealtad ni la más leve sospecha de nuestra conspiración. Sé que tu famoso talento no nos traerá problemas. -le dijo tratando de mostrar la confianza que le estaba otorgando. -¿Podrías confirmar esto acerca de Tregar?

"Tregar que suerte tienes... a pesar de que eres un traidor estos te quieren salvar la vida."

Eran las ironías de la vida; pero aún asi nada podía salvarle la vida si era un traidor. -Les pido me disculpen, pero si Tregar es un traidor su destino esta sellado. Lord Owen en persona me dio esta misión y para evitar levantar sospechas la llevare a cabo sin demoras. Ese hombre pensaba traicionarnos a todos para salvarse él solo...- O al menos eso era lo que yo creía.

Tome la copa y la llene de nuevo. Recordar el asunto era... problemático. tregar iba a ser un hueso duro de roer si se llegaba al punto del castigo, pero mis hojas siempre encontraban la forma de teñirse carmesí con la vida de mis objetivos. Seguramente también saldría bien parado de esta.

-De acuerdo, haz lo que creas conveniente...- dijo el joven -Entonces, ¿cuáles creen que serían nuestros próximos pasos? Porque pronto habrá un gran combate, y tendremos que estar listos- preguntó mirando a todos a los ojos.

El curso a seguir... pues la verdad en sus planes todo quedaba a merced del futuro. Si a Lord Owen le iba bien,no tenían nada que hacer, pues solo si la campaña del rebelde daba frutos deberían mover sus piezas Ragnar y Roland.

-Pues yo diría que lo que debemos hacer es esforzarnos para que Lord Owen triunfe. Si lo logramos no tendremos que mover ni un dedo.- Ese sería por lejos el mejor escenario posible. -Pero por las dudas, tal vez sería bueno que usted Ser Ragnar se ponga en contacto si puede con la familia de su esposa. Son fuertes aliados de los Stark y sería un buen punto de apoyo para sus planes.-

-¡Excelente! Bien dicho, Álvar. Lo mejor serà que nosotros sigamos defendiendo a Owen. Y que procuremos concentrarnos en darle victorias a nuestra casa.

Se tomó un buen trago de vino, y para concluir dijo:

-¿Alguien quisiera agregar algo?

-Por mi parte no- dijo despreocupadamente el heredero para luego mirar al espía -¿Álvar?-

Tenía mucho para pensar el joven... ¿dormiría o se pasaría en vela la noche leyendo y meditando?

-Nada más.- dije mientras me levantaba en un movimiento fluido y rápido. -Si hemos de reunirnos de nuevo que sea en un lugar menos concurrido por favor.-

Fueron mis últimas palabras. Tras ellas hice una amplia reverencia y me dirigí con precaución hacia la salida, para que ninguno de los leales parroquianos del local notara mi presencia. 

Ragnar saludó al maestro de espías, y miró a su tío.

-¿Estás seguro de todo esto?- era claro que era su última pregunta al respecto y su mirada estaba clavada en los ojos de Ronald.