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[Harry Potter] Misterios en Madrid

La Guarida de Sanguini

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14/10/2020, 18:16
- Máster -

La Guarida de Sanguini no se encontraba en el centro de Madrid, sino en las afueras. Por suerte y por la información que Okada le había dado, no había nada de riesgo en aparecerse allí pues el lugar estaba bastante abandonado.

La mansión era un edificio de dos plantas de apariencia siniestra. Estaba rodeada de un amplio y lúgubre jardín rodeado de árboles marchitos. El jardín sí que tenía flores, todas ellas con tonalidades rojas y blancas según el tipo de flor.

Las verjas de la mansión estaban pintadas de color negro y cuando Merkel llegó se apareció ante ellas, estas se abrieron como por arte de magia invitándole a entrar.

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14/10/2020, 18:19
Sanguini

- Buenas tardes, señor Melker. Me han llamado del Ministerios para decirme que usted iba a venir a visitarme. Disculpa que no salga a recibirle, el vampiro le estaba hablando desde la puerta que estaba refugiada por un toldo donde el sol no incidía, ya sabe lo dañino que es el sol para nosotros. Así que haga el favor de pasar y entrar en el salón. Póngase cómodo y dígame si quiere algo para beber. No tengo costumbre de recibir visitas de mortales, pero supongo que mi mayordomo podrá traerla algo de su agrado. 

El vampiro poseía una apariencia hermosa y era inevitable sentir atracción y fascinación por aquel ser. Esa sensación era muy habitual en ellos.

Sanguini se sentó en un sofá de color negro con orejeras mientras agitaba en su copa un líquido de color rojo oscuro y espeso. Sin duda debía de tratarse de sangre. La habitación era fría a pesar de la buena temperatura que había en el exterior.

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16/10/2020, 17:35
Melker Westerberg

Cuando Melker se apareció frente a la mansión de Sanguini, pensó que aquel lugar tenía el aspecto idóneo para ser el hogar de una criatura de la noche, y no pudo evitar preguntarse si tendría algún conjuro mágico para que los muggles lo vieran como un edificio normal.
Sanguini esperaba en la puerta para que el sol no tocase su piel, por lo que Merkel aceleró su ritmo para que el vampiro no tuviera que arriesgarse más tiempo. - Buenas tardes señor Sanguini. Le agradezco mucho que me haya recibido avisándole con tan poco tiempo. Dijo Melker mientras entraba en la mansión, no sin sentir antes un ligero cosquilleo en la nuca, quizá más por prejuicio que por miedo.

Al entrar, Melker tomó asiento frente al vampiro, y le observó detenida durante un rato, admirando la elegancia y la belleza que irradiaba. -Una cerveza estaría bien, ¿Si es posible? Si no, café o agua. Gracias. Dijo finalmente al mayordomo de Sanguini. - No se si le han comentado la razón por la que estoy aquí. Dijo Melker para ir directamente al grano - La razón es que estoy llevando a cabo una investigación en la que no puedo avanzar si no consigo entrar en el Teatro Real, y para ello necesitaría la clave o una invitación por parte de un vampiro. ¿Podría usted ayudarme? Al hacer la petición, Melker esperaba no haber sido demasiado directo y que eso molestase a Sanguini.

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17/10/2020, 12:39
Sanguini

El mayordomo de Sanguini asintió y en apenas unos minutos le trajo una cerveza de mantequilla bien fría. 

El vampiro sonrió al escuchar las palabras de Melker. No me cuesta nada recibirte a estas horas. Los vampiros, durante el día, no tenemos mucho que hacer. Dijo con una risotada. Efectivamente, para entrar en el Nido de Vampiros es necesario hacerlo con contraseña o con una invitación, que al final viene a ser lo mismo. Volvió a sonreír mostrando sus prominentes colmillos. Después agitó la copa que poseía y le dio un nuevo trago.

Pero conseguirla no es tan fácil. Okada te ha puesto en contacto conmigo porque somos amigos, pero todo en esta vida tiene un precio. ¿Lo entiendes, verdad? El vampiro le miraba directamente a los ojos con gran fascinación, parecía estar tratando de averiguar algo sobre él, como si tratase de profundizar en su mente. Si quieres que te diga la contraseña, antes tendrás que hacerme un pequeño favor... y guardó silencio esperando ver la reacción del mago y quizá también para comprobar hasta dónde estaba dispuesto a llegar por conseguirla.

 

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20/10/2020, 17:36
Melker Westerberg

Melker agradeció al mayordomo de Sanguini que le trajera una cerveza de mantequilla y le dio un pequeño sorbo para disfrutar con su sabor Mucho mejor que la cerveza muggle.
Mientras saboreaba la cerveza, Sanguini comentó a Melker que podría darle la contraseña, pero que esta tenía un precio. Aún imaginándose que Sanguini no le daría la contraseña tan fácilmente como presentarse y pedirla, Melker sintió un escalofrío y se revolvió inquieto en su asiento antes de responder -¿Qué pequeño favor? A Melker no le hacía gracia tener que hacerle un favor a una criatura de la noche, aunque esta colaborase con el Ministerio de Magia, pero si quería saber que estaba haciendo su hermano en Madrid, tendría que hacer lo posible por entrar en el Teatro Real.

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21/10/2020, 19:36
Sanguini

Sencillo. Dijo Sanguini cuando su mayordomo se había marchado y le había hecho entrega de la cerveza. Quiero una varita mágica como la que pueden tener los magos y las brujas de este país. Quiero que su madera sea de serbal. Después se quitó un pelo de su larga melena, con centro de pelo de vampiro. Comentó al tiempo que le mostraba una sonrisa, con sus dos prominentes colmillos, a Melker entre alegre y amenazante.

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22/10/2020, 17:41
Melker Westerberg

Melker había imaginado que el favor sería darle algo de su sangre o algo relacionado con eso, por lo que la verdadera petición de Sanguini le sorprendió de tal manera que no pudo evitar poner una cara exagerada de sorpresa -¿Cómo? No fue capaz de cerrar la boca de la impresión y le costó un buen rato volver a poder articular una palabra -¿Una varita? ¿Para que quieres una varita? Preguntó perdiendo la formalidad debido al impacto de la petición - ¿Y por qué me la pides a mi y no a un maestro artesano? Melker nunca había escuchado que un vampiro pudiera hacer magia,, y no estaba seguro de si lo conseguiría pese a poseer una varita. - Además, yo no conozco a nadie aquí en Madrid, no se ni quien puede fabricar una varita en este país. En el fondo, Melker confiaba que todo eso fuera una broma para probar hasta dónde estaría dispuesto a llegar por la contraseña.

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24/10/2020, 12:18
Sanguini

Ya sabes cómo son las leyes de este mundo. A los seres mágicos no se nos consideran magos de verdad y por eso no tenemos derecho ni a pedir una varita, ni tampoco a hacer magia. Dijo con una aptitud francamente molesta. Yo no puedo solicitarla, nadie en su sano juicio me haría una pues el MIM puede detener a aquel que le haga entrega de una varita a un vampiro. Luego sonrió. Ahí es donde entras tú, a ti nadie te pondrá pegas. Tú puedes conseguir una varita para mi en el Mercado Negro de esta ciudad, se encuentra en la Casa de Campo y yo te daría las instrucciones para llegar hasta el tipo que las vende o las fabrica.

Si te la diseñan para ti, el fabricante no se pondrá en peligro. Y una vez que me la entregues, nadie tiene por qué saber cómo la conseguí. Dijo volviendo a poner una maquiavélica sonrisa. Y no, por si lo dudas, los vampiros no necesitamos usar varita para hacer nuestra magia, pero con ella podemos canalizarla mejor y digamos que es una forma de no sentirse "un ser de segunda".

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26/10/2020, 22:48
Melker Westerberg

Melker sabía que si le conseguía una varita a un vampiro era muy probable que acabase en Azkaban, perdiendo así su trabajo y dando la razón a todos los que pensaban que en el fondo era igual a su hermano. Sería gracioso que me pillaran después de atrapar a mi hermano y que nos encerrasen a los dos en la misma celda Pensó Melker mientras se decidía a aceptar la misión de Sanguini.
En parte, Melker no estaba de acuerdo en el trato que se les daba a los seres mágicos, pero también era cierto que si no se les permitía usar varitas mágicas sería por una buena razón, o eso pensaba.
Melker estaba contra la espada y la pared, ya que si no aceptaba, era muy posible que no consiguiera entrar en el Teatro Real y podría perder el rastro de su hermano. Seguro que estaría planeando algo horrible, y Melker sentía que era su responsabilidad atraparle de nuevo, por lo que no tenía más remedio que aceptar la misión del vampiro. - Muy bien, lo haré. Pero si me entero de que usas la varita para algo malo, yo mismo te atraparé. Dijo seriamente antes de coger y guardar el pelo de Sanguini - Y ahora dime cómo puedo llegar hasta el fabricante.

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28/10/2020, 13:12
Sanguini

- Dirígete a la Casa de Campo y ve al embarcadero que hay junto al lago. Justo miró por la ventana y vio que ya estaba anocheciendo. Era la hora perfecta para que pudiera dirigirse allí. Y pregunta por uno de los míos, todo el mundo le conoce como "El Vampiro de los Valles". Es el encargado de la puerta del Mercado Negro y cuando llegues ante él te hará una pregunta: "¿De qué color es la sangre del Príncipe?". La respuesta será "No tiene". Entonces te dejará pasar y será a él a quien tendrás que preguntarle por el fabricante. ¿Entendido?

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30/10/2020, 18:02
Melker Westerberg

-Entendido Dijo Melker con un tono apagado. En ese momento, el sueco notó como todos los músculos de su espalda y cuello se tensaban cada vez más debido al estrés que estaba sintiendo por lo que estaba haciendo. Quería mandar todo a la mierda, llamar a un equipo del Ministerio para que detuvieran a Sanguini e intentar acceder al Teatro Real de otra forma, pero sabía que sin el favor del vampiro eso sería imposible, y mucho menos si le detenían por su culpa, ya que además de no poder entrar en el nido, tendría a todas esas criaturas de la ciudad en contra suya.
Antes de salir de la casa, Melker respiró hondo un par de veces para sacudirse los malos pensamientos y pensar sólo en la misión Los problemas de uno en uno. Ya me encargaré de Sanguini y su varita cuando atrape a Gunnar.
Sin perder más tiempo en aquella mansión, Melker se desvaneció para aparecerse a continuación en la Casa de Campo, justo donde Sanguini le había dicho.

Notas de juego

A la Casa de Campo

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23/01/2021, 18:33
- Ubicación -

La Guarida de Sanguini no se encontraba en el centro de Madrid, sino en las afueras. Por suerte y por la información que Okada le había dado, no había nada de riesgo en aparecerse allí pues el lugar estaba bastante abandonado.

La mansión era un edificio de dos plantas de apariencia siniestra. Estaba rodeada de un amplio y lúgubre jardín rodeado de árboles marchitos. El jardín sí que tenía flores, todas ellas con tonalidades rojas y blancas según el tipo de flor.

Las verjas de la mansión estaban pintadas de color negro y aunque Melker se apareció como el día anterior, esta vez no se abrieron. Hoy no parecía que nadie le estuviera esperando.

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24/01/2021, 21:42
Melker Westerberg

Melker imaginaba que sería muy difícil tener una audiencia con Sanguini a esas horas de la mañana, pero tenía que intentar hablar con él antes de realizar cualquier otra acción ese día, por esa razón entró en la propiedad de Sanguini y llamó a la puerta con insistencia para que alguno de sus criados abriera la puerta.

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30/01/2021, 13:10
- Ubicación -

Melker se coló en el jardín de la guarida de Sanguini y empezó a aporrear la puerta con la esperanza de que Sanguini o alguno de sus criados le abriese la puerta. Pero nada de lo esperado sucedió. Agotado de llamar, Melker desistió, o ahí no había nadie, o no estaban dispuestos a atenderle. 

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02/02/2021, 14:42
Melker Westerberg

Sin recibir respuesta alguna, Melker maldijo entre dientes y se sentó un rato en las escaleras de la entrada de la mansión para pensar que hacer a continuación. Realmente se sentía impotente, ya que por un lado no quería hacerle una varita a un vampiro, pero por otro lado el fabricante de varitas no quería hacer ninguna varita con el pelo de Sanguini, y sin varita no conseguiría la contraseña para entrar en al Teatro. Las opciones que se le ocurrían pasaban de intentar engañar a Sanguini con una varita cualquiera, sin usar su pelo, a intentar colarse en el Teatro Real, aunque las dos opciones podrían traerle consecuencias negativas al sueco. También podía denunciar a Sanguini, pero entonces tendría a todos los vampiros de Madrid, y quién sabe si de más partes del mundo, en su contra, y era una situación que no le agradaba lo más mínimo.

Después de pensar y pensar, Melker decidió volver al Mercado Negro. Allí quizá podría tratar de hablar de forma tranquila con el fabricante de varitas, podría investigar si su hermano pasó por allí o quizá también podría esperar a la noche y hablar con el vampiro de los valles para conseguir la contraseña de su parte.

Notas de juego

Al Mercado Negro