Mientras el firebat es estampado contra la esquina, y el guardia recupera su arma a unos metros de ti, comienzas a moverte en la dirección tomada por el piloto, aunque más despacio de lo que acostumbrarías con la armadura a pleno rendimiento. El esfuerzo es mayor de lo esperado, así que o te estás haciendo viejo para esto o te has acostumbrado demasiado a que las máquinas te lo den todo hecho. Quizás vaya siendo hora de retomar algo de entrenamiento físico en el gimnasio de vez en cuando.
Según tu experiencia las dificultades para moveros están cuasadas por el fallo de los servomotores de guía táctil y solo funcionan los accionadores hidráulicos sin los cuales solo seríais estatuas. La granada debía ser algún tipo de mierda emisora de pulso electromagnético y ha debido dejar sin energía temporalmente vuestros trajes de combate. La batería nuclear tardará en reactivarse unos minutos por sí misma, pero hasta entonces no funcionará ningún apoyo electrónico de la armadura.
El ruido de fondo continúa, salpicado por algún grito. La bronca debe abarcar algo más que la sala de oficiales.
Algo te inquieta al cruzar corriendo por delante de un par de habitaciones y reduces tu marcha. ¿Tanto ruido y aquí no hay nadie? Raro.
Buscando algo, no sabes bien qué, reparas en la ausencia de casquillos en el suelo, y las paredes de metal rozado por el uso pero aún brillante no muestran las abolladuras de los violentos combates que llevas vistos.
Por fin unos pasos más adelante frente a un cuarto de luces que se encienden y se apagan como chisporroteando ves un rayajo de pintura roja, lo que implica que estás cerca de zona de combate. Claro que en este puesto avanzado solo los firebat llevan armadura roja. Acercandote extrañado por no ver las características areas ennnegrecidas que dejan estos tipos al pelearse, ves como el arañazo diagonal muestra partes de sí resbalando frescos hacia abajo en varios puntos de la línea. No es pintura de armaduras, es sangre. Fresca.
Tirada oculta
Tirada: 1d10(+8)
Motivo: Alerta (Jonas)
Dificultad: 9+
Resultado: 10(+8)=18 (Exito)
Tirada oculta
Tirada: 1d10(+10)
Motivo: Sigilo (Zerg)
Dificultad: 9+
Resultado: 4(+10)=14 (Exito)
Pasas a la siguiente escena: Reses desbocadas (Reuniendo al ganado)
Todo el sistema se cae y derrepente veo el gran problema de estos trastos, aun mas al no concocerlos a fondo y pensar que esto puede ser algo que suceda con facilidad.
-Joder...esta mierda se ha parado ¿como se vuelve a encender joder,!
y por qué a ese cabrón parece que le funciona a la perfección...y mi armadura...yo de estos trastos no entiendo nada...
-Sargento, este trasto no funciona, joder, haga algo.
Comienzo a dar tumbos hacia el guardia que ha recuperado su arma. Aparentemente podria caer al suelo en cualquier momento, pero me esfuerzo todo lo que puedo para no caer.
Venga sargento, coja el arma y fria a ese cabrón mientras me ve haciendo el payaso...o lo tendré demasiado cerca y me tocará partirle su metalico culo
Debo haberme expresado mal (por mucho que la interpretación de Brian me haya hecho reir) XD.
Podéis moveros normalmente, pero aparte de llevar mogollón de peso en muerto encima (que cansa lo suyo) no podéis ejecutar acciones precisas con facilidad (coger un cigarro con dos dedos, pulsar un botón... Además de tener inoperativos los sistemas electrónicos de la armadura (comunicadores, sensor de tiro, luz, etc...)
Si queréis editar posteos acorde a esto, adelante ;)
Eres mecánico, y en tu vida como colono has trasteado con innumerables cacharros, más o menos extraños, caseros, de importación... por lo que te haces una idea del problema:
Este traje va con batería recargable (nucleares, de pequeño tamaño). Si te las ingenias, puedes recargarlas.
No sin dificultad me pongo en pie sintiendo como recae sobre mi cuerpo todo el peso de mi robusta armadura. Totalmente indefenso y desarmado comienzo a moverme por el pasillo con torpes movimientos y palpando las frías paredes en busca de algún cuadro de fusibles que me dé la clave sobre lo que ha sucedido.
Mientras mis compañeros se ocupan del marine Alpha, puesto que yo me encuentro indefenso con mis lanzallamas inutilizados al estar integrados en la armadura, investigaré de donde procede la avería de nuestras amaduras, pues sin ellas no tenemos mucho que hacer.
Consideraba que aun siendo mecanico, algo relaccionado con una armadura marine se escapaba de mis posibilidades...pero si hay posibilidadme estrujaré mi cerebro^^
Tal vez este trasto reaccione ante un cortocircuito...algo leve.
Intento provocar de alguna forma un cortocircuito en mi armadura o a falta de eso tambalearme a una zona cercana a una fuente de calor. Si son baterias de fusión, la reacción se verá acelerada por la adición de energia externa que favorezca la reacción. A no ser que nuestras armaduras ya tengan las baterias de fuión fria, con lo que solo intentaria provocar un cortocircuito para acelerar el proceso.
-Vamos a ello...puede que duela, pero...
Si hay algo que como mecanico pueda hacer, dime como hago la tirada^^
Mi acción no la cambio para nada, yo me tambaleo hacia la zona 1: porque es un plan maestro: 2, porque no estoy acostrumbrado a ese peso muerto repentino como otros soldados 3: porque...soy...Brian...
En mitad del negro pasillo el guardia Alpha cruza caminando hacia atrás, al parecer desconcertado al ver los movimientos de Brian, apuntándoos alternativamente sin decidirse a abrir fuego y acaba desapareciendo en la oscuridad el umbral luminosos que procede de la sala de oficiales.
Recortándose contra el extremo opuesto del pasillo se puede ver la silueta del firebat golpeando mas que palpando la pared en un punto determinado. Tras el golpeteo metálico se escucha un crujido de chapa al hundirse, y algo más tarde un chisporroteo.
El sargento Connor, al parecer más ducho llevando armadura en situaciones extremas ha emprendido una pesada carrera en pos del piloto y termina perdiendose tras la iluminada esquina del final del pasillo que siguió el piloto.
Del interior de la sala, surgen los persistentes sonidos de disparos y violentos golpes, demostrando que el odio acumulado durante tanto tiempo se ha vuelto incontenible tras comenzar a manifestarse.
Dejas al soldado de asalto verselas con el guardia de élite. Brian, a pesar de ser un gran combatiente, parece haberse visto afectado por el artilugio que el guaria Alpha ha hecho detonar. Calculas sin embargo que ambos podrán enfrentarse a la situación suficientemente bien, y tu elección es clara: seguir al piloto antes de que se aleje demasiado.
¡Mierda! , una vez te pones en marcha corriendo acabas de averiguar el alcance del potencial de la granada. Tu armadura pesa como si llevaras tu Goliath en brazos. Es casi como luchar en las lunas de Dylar IV, cuya gravedad alcanzada el G2 a pesar de los amortiguadores que os instalaron durante tu misión allí. Sin embargo, tu voluntad de hierro se extiende a tu cuerpo y lo obligas a continuar. Esperas que la energía vuelva pronto al traje de combate, a ser posible antes de sentirte agotado. Tuerces la esquina en el mismo punto que el piloto, regresando a un área iluminada por la luz artificial del centro de mando.
El piloto está a una decena de metros por delante de ti, mirando con curiosidad algo en la pared frente a otra habitación cuyas luces parpadean.
Continúas en la siguiente escena: Reses desbocadas (Reuniendo al ganado)
El domingo-lunes continuamos, que nuestro piloto estará en el Metalway a estas horas y no estará disponible hasta entonces. El post está inconcluso adrede, no te preocupes por eso.
Tanteando con golpes ciertamente estruendosos la parde donde crees recordar haber visto en alguna ocasión a un técnico hurgar para reparar una avería del flujo eléctrico, terminas hundiendo un trozo de pared al cabo de unos instantes de ir "palpando" la superficie de esta en dirección contraria al Alpha, que parece haber preferido replegarse, a pesar de teneros en estos momentos a su merced, torpes y desarmados.
Al notar que la chapa de la pared cede y no pudiendo emplear la enorme fuerza que te concedería la armadura en condición operativa, hundes la chapa hasta el fondo empleando el peso muerto del guantelete de combate, suficiente para lograr tu objetivo: dejar a la visto un montón de cables de suministro energético y transferencia de datos.
Arrancando de cuajo todos los cables que te caben en la mano, llevas un manojo chisporroteante hasta tu espalda, donde sabes que se alojan los generadores que deseas reactivar.
Un tremendo latigazo te revuelve las tripas y te hace notar un ardor horrible en la espalda, haciendote caer de rodillas al suelo. Por fortuna para ti, la carga residual no te ha matado, y pese al dolor que sufres como si aún te estuvieran clavando agujas candentes te alivia ver que al menos las interfaces de tu armadura recobran su vida luminosa y titilante al reiniciarse el sistema.
Tirada: 1d10(+2)
Motivo: Idea brillante (INT)
Dificultad: 11+
Resultado: 4(+2)=6 (Fracaso)
Tirada: 1d6
Motivo: Daño por electrocución
Resultado: 4
Ya te actualizo la vida. Vuelves a estar funcional, pese a que ha sido a lo bestia.
Después de la burda maniobra de arrancar los cables del circuito eléctrico y concetármelos a los géneradores y su consecuente electrocución, intento ponerme en pie tras haber caido de rodillas por el calambrazo. No sin dificultad lo consigo, pero noto como todavía me tiembla todo el cuerpo, mis movimientos continúan siendo torpes e imprecisos aunque poco a poco los voy sincronizando mejor.
Me adentro por el pasillo caminando por donde Teddy y el piloto ya lo habían hecho antes.
Joder...esa armadura no se ha quedado frita con esa descarga...asi que...habra que hacerlo.
Al observar que el frebat ha conseguido dar un buen empujón a sus baterias, decido imitarle.
Tendré que preguntar algo sobre este trasto de traje...baterias nucleares...tal vez sean de esas de fusión fria, asi que el calor no las ayudara,...podria aberme cocido si llego a probarlo.
Me encamino a la pared donde los cables estan sueltos y apretando los dientes...
... coges los cables que latiguean en el aire chisporroteando, la única iluminación de la zona del pasillo en que te encuentras, y los aplicas al igual que viste hacer al firebat sobre tu espalda, donde esperas que se hallen los generadores.
Tal y como esperabas apretando los dientes, un latigazo te sacude haciendo brillar chispas en tus ojos durante un instante mientras el dolor te atraviesa de lado a lado como si te hubieran metido un avispero en la armadura y otro en el pecho.
Final y afortunadamente los cables empiezan a echar humo y a arder, interrumpiéndose la corriente al superar el voltaje transmitido la resistencia del cableado, liberándote de la tortura eléctrica que te habías autoimpuesto.
Aún bajo los efectos del shock eléctrico, te preguntas si fue una buena idea maldiciendo por dentro, hasta que tímidamente las interfaces del visor del casco nuevamente vuelven a emitir datos. La armadura está reiniciando sistemas, pero vuelve a ser funcional.
Entonces te das cuenta de que no oyes nada. Sí, el firebat se ha marchado siguiendo al sargento, que a su vez perseguía al piloto. ¿Tanto habrá pasado? ¿Habrás perdido la consciencia mientras la corriente te atravesaba? Notas con preocupación que ya no oyes ruidos de combate tras de ti, en la cercana sala de mandos. ¿Estarán ya todos muertos?
Tirada: 1d6
Motivo: Daño por electrocución
Resultado: 4
Con paso firme guiado por los servos de la armadura ya restablecida sigues al sargento. Whooops, pareces una de las aves nadadoras de los pantanos de Antiga, tambaleandote al moverte. La armadura funciona, pero la descarga eléctrica te ha dejado un recuerdito en el cuerpo. Bueno, al menos ya no te hace cosquillas y has reiniciado la batería.
Al doblar la esquina, ya en un pasillo iluminado, puedes ver a una decena de metros al piloto, aunque la espalda blindada del sargento Connor te bloquea parcialmente la visión.
Continuas en la siguiente escena: Reses desbocadas (Reuniendo al ganado)
Maldición ¿que ocurre aquí?
Mis ojos se pierden en el vacío que me rodea intentando encontrar una explicación. Doy unos pasos vacilantes intentando comprobar si me escucho a mí mismo. Hablo para ver si es un problema del traje..o mío...
Después de estas comprobaciones cojo mi arma y salgo por donde han ido el sargento y el firebat.
Marca solo para el director los mensajes. No hay más destinatarios.
Puedes oirte hablar, como quien habla entre algodones, pero lo que son tus pisadas te resulta imposible oirlas. Fenómeno, te has quedado sordo.
Frunciendo el ceño, cargas el arma con rabia. Alguien va a pagarlo, porque estás de muy mala hostia. Echa a andar tras el firebat. Qué genio, brillante idea la suya. Cabrón...
Continuas en la siguiente escena: Reses desbocadas (Reuniendo al ganado)
En ella puedes dejar marcados a los CUATRO destinatarios disponibles que aparecen por defecto.