Partida Rol por web

Charter Hill, 02:00

No tenías tiempo para escoger las cosas que podías llevarte como quisieras, así que metiste todo en la maleta de Pierre (una de tamaño mediano) y te dispusiste a salir al pasillo. Pero el ambiente no era el que esperabas; no había tiros, ni gritos… nada de nada. Sólo te imaginabas que la policía había controlado la situación y posiblemente estuvieran buscando al guardia desaparecido.

Reaccionaste rápido cuando en tu emisora portátil, robada al guardia, escuchaste cómo le llamaban. Hasta entonces no habías escuchado nada porque no habían usado el transmisor. Puesto que tarde o temprano descubrirían a Kilsman atado a la barandilla de la escalera lo más sensato era salir de allí con rapidez, y sobretodo de forma segura.

Echaste mano a tu última granada deslumbrante y la lanzaste con precisión entre los guardias de seguridad. Era una acción fácil pues se trataba de un pasillo recto y la granada sólo tenía que rodar, y así sucedió. Antes de que nadie se diera cuenta la acción química se produjo y ésta vez los hombres en el lado opuesto sufrieron los efectos deslumbrantes.

Sin dilación corriste hacia las escaleras de emergencia con la maleta en la mano y la pistola de dardos en la otra. Con una camisa roja atada a la cintura pasaste la tarjeta de seguridad y entraste al rellano de las escaleras. El guardia aún estaba dormido con las manos sujetas a la barandilla y arrojaste la camisa en el tramo superior. Acto seguido bajaste la escalera con rapidez. Cuando casi estabas en la primera planta escuchaste como la policía y los guardias de seguridad irrumpían en las escaleras vociferando e intentando encontrar al culpable de su ceguera momentánea.

Ya conocías la salida trasera y llegar a tu coche sólo te costó un poco más. Habías sacado una buena ventaja pero no era cuestión de tentar a la suerte quedándote en los alrededores. Parecía que estaba lloviendo con mayor insistencia y al mojar la tapicería de tu choche sólo esperabas no pillar un resfriado.

Entraste y saliste del edificio sin crear ninguna baja. Agradeciste que ninguno tuviera gafas con opción antideslumbrantes u ojos cibernéticos, pues si así hubiera sido la historia no tendría aquel final: rápido y limpio.

Era el momento de huir, y exactamente eso fue lo que hizo Brian, escaleras, puertas, automóvil. Dejando la maleta en el asiento del acompañante condujo rápidamente hacia los cuarteles de Tallon Global.

Una vez en el lugar, el ex-policía reacomodó sus nuevas pertenencias. Sacó un par de granadas de su mochila y las acomodó cuidadosamente en su pecho, agregó los dardos que había usado para completar la carga de su pistola de dardos y buscó un sitio en su cinturón para las esposas metálicas y las tres esposas plásticas que había "requisado" junto con el spray pimienta Puede ser útil para no matar a alguien se dijo a si mismo mientras guardaba la nueva pistola, y su cargador en la mochila al lado de las dosis de droga.

La emisora interna, la tarjeta de seguridad y la cartera (sin los ED) de Pierre, junto con el portatil, el puente Wi-Fiu y el celular de su asesina, junto con la ropa fueron a parar a la valija que debía entregar en el laboratorio cuando diera su informe.

Luego descendió de su vehículo y, con la maleta en la mano se dirigió al cubículo que le hacía de oficina, debía escribir un informe... y no sería sencillo. Solo esperaba que el hecho de poder asegurar que el traidor estaba muerto y traer su portátil y el "puente" fuera suficiente para evitar que le echaran la culpa de nada. De hecho sabía, o sospechaba, quien había sido la asesina... lastima que estaba muerta, aunque por lo menos traía su celular.

TALLON  GLOBAL

ORIGEN

William Tallon fundó la compañía con su fortuna personal hace 40 años. Procedente de una acaudalada familia propietaria de diversas minas en Brasil (esmeraldas, plata y oro) soñaba de joven en crear un Imperio reconocido mundialmente.

Ya sus estudios hacían de él un miembro distinto de la familia. Ingeniero químico de profesión invirtió su fortuna en crear Tallon Pharma, una próspera empresa dedicada a la farmacéutica que pronto sirvió de base para lo que hoy es conocida como Tallon Global.

Actualmente es considerada como una Corporación a nivel Mundial de Nivel medio-alto, con grandes posibilidades de convertirse en una Corporación Líder.

SUBDIVISIONES

Tallon Global se divide en tres subdivisiones, que aunque claramente distintas están bajo el control de la directiva encabezada por William Tallon.

► Tallon Pharma (subdivisión farmacéutica):
- proporcionar de modo global medicinas de alta calidad
- elabora Drogas de Combate legales, suministrándolas a distintas fuerzas militares.
- de forma ilegal suministra localmente drogas en la calle para recaudar sustanciosos fondos.

► Tallon Biogen (subdivisión genética)
- bioimplantes: nanotecnología avanzada entre otros
- alteraciones genéticas a la carta, también "bebé a la carta".
- alta clonación (fase experimental con buenos resultados)

► Tallon Security (subdivisión de seguridad personal): a nivel medio, no comparable con otras Corporaciones como Arasaka.
- policía corporativa
- seguridad personal
- extracciones

Distrito Medical Center 03:20 (edificio de Tallon Global)

Entre el tráfico y los minutos que dedicaste a dar vueltas para averiguar si te seguían llegaste una hora más tarde a tu destino. El Distrito Médico siempre estaba atestado de gente y vehículos en una ciudad donde los tiroteos eran comunes y las rencillas el pan de cada día. Los valores de las Compañías dedicadas al área médica subían cada día y la competencia se hacía cada vez más intensa. En éste caso Tallon Global, y en concreto al División de Tallon Biogen, habían elaborado una red más elitista donde la competencia no era tan salvaje y los valores eran seguros.

El edificio contaba con cuarenta plantas y tres subterráneas como parking. Sabías, además, que habían otras plantas subterráneas de acceso restringido. Antes de llegar al parking metiste tu tarjeta de la compañía en la cajetilla mientras una cámara te enfocaba visiblemente. El segundo control era manual y contaba con una máquina de escáner rápido mientras dejabas el coche estacionado. No era un método infalible pero sí rápido después de mejorar la seguridad tras haber sufrido el año pasado un atentado con coche bomba.

Pasados los controles previos el resto era sencillo: pasar una tarjeta de identificación. No siempre era así ya que algunas partes del edificio era necesario identificarte mediante un lector dactilar y ocular. Siempre que hacías los rigores de seguridad aparecía en una pantalla junto a tu foto y tu nombre el nivel de seguridad dos. Por lo que sabías la Compañía tenía  un máximo de seis o siete, no estabas muy seguro.

Al llegar al rellano principal, por otra parte que no era la pública, uno de los guardias te saludó. Lo habías visto en otras ocasiones, pero como todos sin un turno de trabajo fijo. No estabas seguro de su nombre, pero siempre te hablaba de los resultados de los partidos de fútbol americano.

- El Señor Chang le espera en la planta treinta y cinco -te indicó con sencillez.

Las puertas del ascensor se abrieron de inmediato esperando que entraras. El botón de la planta ya estaba encendido y de la misma forma que se abrieron las puertas se cerraron. Poco después llegaste y como recibimiento te topaste con tres hombres armados y uno con un detector de metales.

- Deje la maleta a un lado -comenzó su rutina- Extienda los brazos y separe las piernas.

Por lo general no había problema en llevar armas en las zonas donde solías estar, pero ya habías pasado por eso en alguna ocasión. Eso significaba, en la mayoría de los casos, que había un pez gordo cerca. A medida que un arma era detectada la introducían en una caja de ceramita de alta resistencia. Cuando vieron tus granadas en el cinto no dudaron en apuntarte, pues anteriormente simplemente estaban atentos.

- ¿Quieres montar una guerra? -si había ironía en sus palabras su seca expresión no te lo demostró. Tras eso las deposito en la caja y te cacheo manualmente, incluyendo la entrepierna. Eran listos, por lo general ningún guardia se atrevía a palmar la entrepierna de otro hombre, pero estos tipos no se andaban con rodeos.

NOTAS DE JUEGO

A ver, pensaba ponerte el mensaje siguiente para completar pero... ahora pienso que si en caso que quieras poner alguna objecion al cacheo no vamos a estar para atrás y delante. Podemos hacer varias cosas:

- Contestas al mensaje (desde que llegas hasta que comienzan a cachearte)
- Esperas a que escriba el otro mensaje porque no te importa el cacheo y así escribes sólo una vez (me dejas una nota para que prosiga)

Como veas  ;)

Nota: si quieres que siga ponme una nota, de lo contrario escribe las impresiones que te parezcan.

Aprovecho para decirte que el gas pimienta te lo cuelgo mañana porque ahora no sé donde diantres puse las notas. No tienes zona de trabajo. Ellos te llaman y acudes cuando y donde digan. Puede ser en el edificio o en un piso franco, o donde sea. Eso sí, tus infórmenes los haces frente a una cámara que lo graba todo y un informático añade datos extras para completar con imágenes o lo que sea dentro del chip.

Un pequeño esbozo... Henry Chang es tu inmediato superior. Fue quien te reclutó y te da los trabajos a realizar. Generalmente tiene un carácter tratable pero es muy serio y eficiente en sus tareas. O sea, que prefiere tener empleados que amigos si con ello las cosas salen bien. Escribo con su nick para que lo veas.

Solo eran guardias. No amigos, ni siquiera conocidos, pero eran caras que ya había visto antes y después de la experiencia que había tenido, Brian respiró aliviado ante la rutina - Subo - contesto con calma y se preparó para grabar su informe en el piso 35. Lo tenía claro. No hablar de más, explicar claramente lo que era un dato fiable y lo que eran suposiciones y no mentir... excepto que fuera estrictamente necesario.

- Cuidenlas. Me han salvado la vida más de una vez - comentó como al pasar, refieriéndose a sus pistolas, en realidad sin prestarle demasiada atención al cacheo. En el peor de los casos sus armas principales eran su cuerpo y su mente... y eso no se lo podrían sacar. Las granadas llamaron la atención, pero tampoco era algo tan extraño - No... si puedo evitarlo - contestó con un tono tan seco como el del hombre de seguridad - Y nunca aquí - añadió más serio, para evitar posibles problemas.

- Terminaron?... Mr. Chang me espera. Tengo un informe que hacer -

Distrito Medical Center, 03:25 (edificio Tallon Global)

Hiciste buena cuenta de la buena calidad de sus armas, del tipo y de su blindaje. Dos de los mercenarios te acompañaron a una de las salas de "Recuperación de Datos" (así lo llamaban), mientras el otro permaneció atento en la esquina más próxima donde dominaba el ascensor y las escaleras sin problema aparente.

Al entrar en la sala y comprobar que todo andaba bien te dejaron allí y ellos permanecieron fuera. El mobiliario era sencillo: una mesa, cuatro sillas, una pizarra digital, una terminal de acceso a la red, una impresora multiuso y una cámara conectada a un portatil donde introducirían los datos para copiarlos en un chip. Además, como siempre, alguien se ocupaba de los datos técnicos; en éste caso se trataba de una mujer llamada Claire. Habías coincidido alguna vez y no te resultaba demasiado amistosa.

Apenas te dedicó unas milésimas de segundo y de inmediato se enfrascó en sus asuntos. Ni buenas noches, ni qué tal el día. Nada. Entonces la otra puerta de la sala, que daría a otras habitaciones interiores, se abrió. Un asiático de treinta y largos te observó unos instantes como preguntándose si con una ojeada podía medir tu valía, pero de inmediato cambió de parecer.

- Pase -dijo con voz pausada- Mr. Chang le espera.

El tipo se hizo a un lado para que pasaras a un corto pasillo que daba a una habitación más cómoda que la anterior. Dos amplios sofás y dos sillones rodeaban una mesa central, todo en tonos oscuros pero con un ambiente bien iluminado. En una esquina se encontraba Chang, sirviéndose una copa en el mueble bar. Ésta habitación también tenía otra puerta, y de allí provenía la voz de una mujer que hablaba en otro idioma (te sonaba a francés) con voz contundente.

- ¿Qué es de Pierre? -se echó un trago de lo que parecía coñac y te hizo un gesto para ver si querías algo.

Cuando le explicaste a groso modo lo más elemental ambos se miraron significativamente. Estaba claro que a Chang no le gustaba la idea de que estuviera muerto, y menos que alguien hubiera grabado la información. Cogió un comunicador de un armario y ordenó que alguien viniera a recoger la maleta para que la fueran examinando. Cuando uno de los mercenarios se retiró con todo os quedáteis solos otra vez con la voz de la mujer como fondo.

- A éstas horas tenía pensado que terminaras el informe mañana pero... -miró la hora- ...necesito los detalles lo antes posible -tomó asiento finalmente mientras que el otro tipo permanecía de pie de manera informal- Hasta ahora has trabajado por tu cuenta con buenos resultados. Tenemos un asunto importante entre manos que cambiará esa situación. Dentro de unas... -hizo una pausa para calcular las horas- ...seis u ocho horas te reunirás con un especialista de la compañía -sonrió al decir esas últimas palabras buscando la complicidad del otro tipo, pero al devolverle una mirada que expresaba que no le gustaba lo que había dicho enseguida Chang reculó en su actitud- Se os informará de los detalles mañana, asi que estad disponibles.

Entonces se dirigió al desconocido.

- Parece que tardará más de lo esperado -señaló con la cabeza la puerta donde tras ella la mujer mantenía una enfrascada conversación- Dejémoslo por hoy Spetock. Prepara el informé con los detalles más relevantes y no apagues tu móvil. Nos veremos mañana.

Al marcharte el otro hombre te saludó con la cabeza y dejó que regresaras solo a la otra sala.

La indiferencia Claire fue perfectamente respondida por Brian... con más indiferencia. Pensando en lo bien equipados que estaban los mercenarios, sonrió complacido. Sabía que en caso necesario podría con ellos... aunque no le interesaba probárselo a nadie. Ni a ellos, nio a si mismo

Siguiendo al ejecutivo, se sorprendió un momento ante la idea de una entrevista personal. No era lo normal. Parecía que el tal Pierre era más importante de lo que había supuesto. Mejor tener cuidado se planteó el ex-policía. Y el alcohol no era la mejor manera de tenerlo, por lo que pasó del ofrecimiento con un gesto amable.

De pie, evitando las palabras que pudieran ser mal interpretadas comenzó su relato. Fueron solo unos minutos hasta que finalizó - ... quizás podamos averiguar que banda mató a la asesina, distinguí el emblema que usaban, pero no creo que sea importante... Supongo que serían solo unos desesperados que trabajan sin saber para quien - se encogió de hombros - Quizás este puente sirva de algo... o puedan averiguarlo con la maleta ó el ordenador. El laboratorio es eficiente para esas cosas - concedió Nunca esta de mas alabar el buen hacer y la capacidad de la compañía - Tengo claro que no saben que quien los "extrajo" trabaja para Tallon, desde ese lado no hay problemas - agregó con seguridad - Y por las dudas cambiaré de vehículo aunque, como siempre, este sea imposible de identificar. En el garage se ocuparán del tema -

El diálogo con el desconocido generaba dudas En equipo... Uhm... espero que sean buenos se dijo a si mismo sin extresar lo que sentía. Ya habría tiempo para talentarlos cuando los conociera

- Me pongo con el informe... Y por supuesto que estaré disponible... Aquí? - preguntó con curiosidad - O en algún lugar en particular? El informe serán solo unos minutos y luego, supongo que descansaré esas horas. Si será un trabajo en equipo no me extrañaría que necesiten mis reflejos bien afilados -

Medical Center, 03:25 – 03: 35 (edificio Tallon Global)

Por curiosidad, mientras escuchabas lo que te decían, encendiste el termógrafo para observar si el ejecutivo que te había llevado a la estancia estaba cibernetizado. Realmente era una costumbre debido a los años de experiencia, costumbre que te reveló que aquel tenía de ejecutivo lo que tú de estrella del rock. Pocas partes de su cuerpo emitían calor, y una pistola pesada (por su tamaño) y un subfusil pequeño se escondían bajo su gabardina oscura.

- Está bien –asintió Chang- Entrega todo eso a Claire y ponle al corriente de lo que me has dicho, con más detalle claro –bebió de su copa y continuó algo pensativo- Ya te llamaremos para indicarte el lugar. A partir de ahora no pasarás por el edificio a menos que se te diga. Estamos en una situación delicada, te informaremos mañana…

Dejó la frase en el aire esperando que no hicieras más preguntas. Ahora te tocaba explicar con mayor claridad lo sucedido a Claire, lo cual, como estimabas, te iba a llevar alrededor de una hora. Después de aquello te tocaría coger otro coche, si había alguno disponible en el garage, y dirigirte a tu apartamento en Japan Town.

Estaba claro que el "ejecutivo" era un guardaespaldas disfrazado. No era el primero que veía, ni probablemente tampoco sería el último. Estaba claro que a Chang le gustaba estar protegido, pero eso no era de la incumbencia de Brian, por lo que no hizo ningún comentario al respecto.

- Me encargo - serio y formal, el ex-policía asintió con la cabeza y abandonó la estancia. No hacía falta insistir con los ejecutivos... solo se causaría problemas a si mismo.

La mujer era silenciosa y eficiente y Brian no pretendía nada más ella. Simplemente se dedicó a repetir lo que ya le había contado a Chang. Esta vez se tomó su tiempo para relatar incluso los detalles que había obviado en anterior ocasión.

Una vez terminada su tarea, recuperó todo su armamento. Se sentía desnudo sin el y bajó al estacionamiento a elegir un nuevo vehículo. Luego se dirigió a su vivienda, dispuesto a descansar. No sabía cual sería la misión que planeaba encomendarle Chang, pero seguramente estar cansado no lo ayudaría a cumplirla... ni, seguramente, a sobrevivir.

FIN DE SESIÓN

- Puntos de experiencia: 15 + 9 = 24 + 3 = 27

Sigilo
Seguridad electrónica
Esconderse
Advertir/notar
Persuasión
Armas cortas

- Equipo obtenido:

- 2 esposas metálicas
- 3 tiras de plástico (esposas)
- 1 spray pimienta
- 1 emisora interna del edificio de Charter Hill
- 1 tarjeta de seguridad del edificio de Charter Hill
- 300 ed
- Federated Arms X-22 con 1 sólo cargador
- Droga (tirada callejeo): la reconoces como Cristal Azul. Es un opiáceo de efectos extremadamente relajantes (-3 REF) con un coste de unos 500 ed el bote.

- Equipo perdido:

- 2 granadas deslumbrantes
- 2 dardos somníferos

- Coche de la empresa: está a nombre de una empresa fantasma llamada "Merkat"

Japan Town, 08:00 (apartamento Spetock)

La noche anterior concluiste un largo día con una ducha caliente que relajó tus músculos. Necesitabas unos minutos para ti, unos momentos para olvidarse de todo. Una comida frugal fue suficiente para saciar tu hambre pues estabas acostumbrado a comer durante tus horas de vigilancia. Sólo habías descansado unas pocas horas pero no te sentía nada mal como para afrontar un día movido, o eso esperabas.

Media hora más tarde, o un poco más, ya habías desayunado y tomado una ducha refrescante para quitarte la morriña de levantarse de la cama. Cuando te estabas vistiendo sonó tu móvil. El número te era familiar y no dudaste en cogerlo. Como de costumbre el mensaje fue breve.

- Calle Farrington, almacén 14, Upper East Side, 09:00 am.

Eran las ocho de la mañana exactamente, y teniendo en cuenta que tenías que cruzar la ciudad para llegar allí debías darte prisa.

Cuando llegó el llamado, Brian estaba preparado. Con calma, pero sin perder tiempo tomó la mochila que había subido a su apartamento y descendió hasta el estacionamiento. Tras respirar profundamente, preparándose para cumplir la misión que le habían encomendado... y de la que aun no conocía los detalles, se puso en marcha.

Era cuestión de estar preparado para lo que viniera... y para esto, lo mejor era llevar todo su armamento. Siempre sería posible dejar algo en el automóvil si se requería sigilo. Y si no... sino mejor estar preparado.