Partida Rol por web

Nombre: Brian Spetock
Jugador: Matute
Profesión: Ex-policía, SWAT. Actualmente Mercenario Corporativo.
Edad: 30 años
Puntos de personaje: 65
Humanidad actual: 32
PH perdidos: 33
Reputación: 5

CARACTERÍSTICAS

INT 8  ♦  REF 10 (9 blindaje)  ♦  TEC 8  ♦  FRIA 8  ♦  ATR 5  ♦  SUE 3  ♦  EMP 6 (-3)  ♦  MOV 8  ♦  TCO 11 

- Carrera (asalto): 24m ; 10 seg: 80m ;  Salto carrera: 6m
- Levantar: 440kg ; Transportar: 110kg ; Lanzar: 110m

HABILIDADES
Sentido del combate 7 (bonus inciativa y advertir/notar)
INICIATIVA = 9 (REF) + 7 (SENTIDO DEL COMBATE) = +16

(M) Mercnario (45): Sentido del Combate, Armas Cortas, Armería, Atletismo,  Cuerpo a Cuerpo, Fusil, Pelea ó Artes Marciales, Sigilo, Subfusil
(L) Libres: REF + INT + 5= 10+8+5 = 23
(G) Gratuitas: 3

Tareas: Fácil 10 - Media 15 -  Difícil 20 -  Muy Difícil 25 - Casi Imposible 30

 KARATE:

Mod Daño por FUE = +4 (Tipo Corporal 11)
Puñetazo +2 al ataque para +14 (+3 al daño para1d6+9, por nudillos+ FUE +Karate
Parada: +2 al ataque para +14 (+3 al daño para 1d6+7 por FUE + Karate)
Bloqueo: +2
Esquivar: -2 al ataque del otro, -3 a los propios

TCO: muy fuerte
Mod. daño: +4
MTC: -5
N. SALV: 11

Casco de Nylon CP20 CE0 
Chaqueta Blindada Ligera CP14 CE 0
Pantalones Antibalas CP20 CE+1
CE -1

Leve.........(aturd=  0): 1-2-3-4
Grave...... (aturd= -1): 1
Crítico......(aturd= -2):
Mortal 0...(aturd= -3:
Mortal 1...(aturd= -4):
Mortal 2...(aturd= -5):
Mortal 3...(aturd= -6):
Mortal 4...(aturd= -7):
Mortal 5...(aturd= -8):
Mortal 6...(aturd= -9):

IMPLANTES

Filtros nasales (+4 TS Gases y Humos tóxicos (70% efectiv.)
Nudillos de Acero (Arma Corporal 1d6+2 daño por mano)
Implante Hueso y Músculo (+2 TCO)
Tejido Dérmico (blinda el cuerpo con CD 12)
Módulo Ocular Básico (hasta 4 opciones) (DERECHO)
· Antideslimbrante (Inmune a ceguera por fogonazos o láser)
· Amplificador de Imagen (+2 Advertir/Notar) con la vista
· Termógrafo (Pautas caloríficas y lecturas Temperatura)
· Infrarrojos (Ver en oscuridad total, por emisión calor)
Módulo Ocular Básico (hasta 4 opciones) (IZQUIERDO)
· Antideslimbrante (Inmune a ceguera por fogonazos o láser)
· Lanza dardo hasta 1 m. No falla. 1 disparo (Biotoxina II)
Equipo Neuronal (perimete implantes Neuronales)
Amplificador Olfativo (+2 Advertir / Notar con el olfato; +2 a Vigilar / Rastrear)
Editor de Dolor (Baja tiradas resistencia en dos niveles)
Zócalo para Chips (permite hasta 10 chips... por INT, Max 8)
Chip Nadar +1
Chip Motocicleta +1
Chip Esgrima +1
Chip Seguridad Electrónica +2
 

ARMAMENTO

- Dardos:
ácido: 1d6 al blindaje (3 asaltos)
somnífero: TS Aturd. Falla: duerme, Pasa: -2 todas las Habilidades (Nota: -4 dardos del cargador)
biotoxina II: 8d6 de daño ó 4d6 pasanto TS.

- Granadas:
deslumbrante: todos en 5 m del punto caída, cegados por 5 turnos.
incendiaria: 4d6 por tres asaltos a todos en 5 m.
fragmentación: 7d6 a todos en 5m.

- Spray pimienta: alcance 1 m y 5 usos. No afecta a implantes. -4 a todas habilidades durante 1d4+1. Tirada de Combate CC

4 cargadores para COLT, 100 ed y 2 Kg
2 cargadores para Pistola de Dardos, 50 ed y 1 Kg
2 silenciadores

EQUIPO (revisar)

Peso ... Ubicación.......... Detalle
3.0 ... Cruzada al pecho .. Arasaka, Rapid, Asault 12.
0.0 ... Brazo Izq / Der ... Dos sobaqueras, una en cada brazo (2x20 ed)
3.0 ... Sobaquera IZQ ..... Colt AMT Modelo 2000 (balas normales)
3.0 ... Sobaquera DER ..... Colt AMT Modelo 2000 (balas penetrantes)
1.0 ... Cintura (espalda) . Pistola de dardos AVANTE P-1135 (Somnifero)
1.0 ... Pecho ............. Granada (Incendiaria) --> 1
1.0 ... Pecho ............. Granada (Fragmentación) --> 1
0.5 ... Cabeza ............ Casco de Nylon (CP = 20)
3.0 ... Torso y Brazos ... Chaqueta Blindada Ligera (CD 14)
3.0 ... Piernas .......... Pantalones Antibalas (CD 20)
0.5 ... Ojos .............. Gafas de espejo (siempre puestas, sacar p/ dardo de ojo)
0.5 ... Espalda ........... Mochila con
>>>>>> 0.5 >>>>>> Techtrónica 15 Microwaver
>>>>>>... >>>>>> Silenciador (2, para las COLT)
>>>>>> 2.0 >>>>>> Munición Escopeta, caja de 12, Perdigones --> x4
>>>>>> 1.0 >>>>>> Munición Pistola muy pesada, caja de 50 --> x2
>>>>>> 1.0 >>>>>> Munición Pistola muy pesada Penetrante, caja de 50 --> x2
>>>>>> 1.0 >>>>>> Dardos para Pistola, Ácido, caja de 25 --> x1
>>>>>> 1.0 >>>>>> Dardos para Pistola, Somnífero, caja de 25 --> x1 (-4 dardos)
>>>>>> 1.0 >>>>>> Dardos para Pistola, Biotoxina II, caja de 25 --> x1
>>>>>> 4.0 >>>>>> Granada, Deslumbrante --> x4
>>>>>> 2.0 >>>>>> Granada, Fragmentación --> x2
>>>>>> 2.0 >>>>>> Granada, Incendiaria --> x2
>>>>>> 1.0 >>>>>> Saco de Dormir
>>>>>> 0.5 >>>>>> Binoculares --> x1
>>>>>> ..... >>>>>> Precintos (un uso, dificultad p/ romper MUY DIFICIL)--> x6

Nuevo:
dos esposas metálicas, tres tiras de plástico (esposas)  300 ed, maleta ropa 30x30x30, Federated Arms X-22 con cargador, 2 botes de droga líquida (500x2, ver datos)
 

Notas coche: 40 litro de CHOOC (15ed/litro) Comfort medio.

NOTAS

Blindaje 450
Implantes
Armamento 2500
Munición y varios 955
Equipo 130
Total ... , sobran ... 15ed

HISTORIA PUBLICA

Los orígenes de Brian son oscuros, olvidables, perdidos en sus propios recuerdos. Hace ya treinta años nació en los suburbios de Night City y, desde corta edad, perteneció a la pandilla del barrio "Los Tiburones negros". Estos pobres diablos ni siquiera eran buenos en lo suyo, el robo callejero. Más allá de alguna golpiza a algún pobre incauto (y siempre que fueran cinco contra uno, o aún más) eran incapaces de conseguir algún eurodólar de ninguna manera. Robándole a sus propios padres, el pequeño Brian vagaba por las calles, orgulloso de su tatuaje... que escondía en cuanto se alejaba más de dos cuadras de su zona de operaciones... un viejo galpón abandonado que "Los tiburones negros" consideraban su centro de operaciones.

Las cosas cambiaron cuando "Los gitanos de la calle 23" se apropiaron del barrio. Robos, asesinatos, trata de blancas, servicios de "protección", venta de drogas, ningún negocio quedaba fuera de sus manos y un grupo minúsculo como "Los Tiburones" no sobrevivió a la competencia. NO, no sobrevivió. Una incursión relámpago al centro de operaciones le costó la vida a casi todos los miembros de la minúscula banda. Los gitanos no querían competencia... ni siquiera la de la lastimosa banda de Brian.

Oculto en un viejo armario, el pequeño Brian, que solo contaba con 15 años, vio como sus amigos, "El Chata", "Mocos Secos", "El Manco" y su hermano Robin, caían bajo las balas y filos de los nuevos señores del barrio que, finalmente se apoderaron del lugar para convertirlo en SU sede. El pequeño escapó y rumió su venganza por días y días. Finalmente se decidió, con la vieja 22 de su padre en las manos, volvió a ingresar por su "entrada secreta", en los sótanos del galpón y se preparó a matar a, por lo menos, el cabecilla de la banda.

No pudo hacerlo. Las actividades de "Los gitanos" no pasaban desapercibidas como había sucedido con las de "Los Tiburones". Cuando Brian se preparaba a ejecutar su venganza, llegó al lugar el "Escuadrón Municipal de Seguridad" El pequeño nunca olvidaría lo que vio. El camión ingresando al galpón sin preocuparse de abrir el portón, la lluvia de disparos que surgía del mismo y de los especialistas en asalto urbano que disparaban desde los edificios vecinos, Las granadas, los gases, la precisión, Los comandos que descendían del techo, la violencia controlada, la unidad de los integrantes del escuadrón, el equipamiento. Descubrió, en segundos, que había una forma de hacer las cosas. Y que esta era mejor que la que había tenida por cierta hasta ese momento.

Brian tuvo un objetivo. Abandonó a los pocos tiburones que quedaban y se convirtió en un seguidor del Escuadrón. Durmiendo en la puerta del cuartel, pronto, estos se dieron cuenta del interés del pequeño que siempre merodeaba a su alrededor y les ofrecía sus pequeños servicios. Una compra. Un recado. Un favor. Poco a poco, el pequeño se hizo "amigo" de los policías. Y llegó el momento, el ofrecimiento de una posición como aprendiz. Y Brian la aceptó agradecido.

Se olvidó de sus padres, de su banda, de su barrio. Solo vivía para el escuadrón. Aprendiz, recluta, soldado... pronto fue escalando posiciones y perfeccionando su entrenamiento. Finalmente fue un miembro de pleno derecho del Escuadrón. Incluso lo superó. El Teniente Kumte, al descubrir la habilidad del pequeño para acceder a los lugares más insólitos lo recomendó para el "Servicio de Extracciones Legales", la unidad de elite, la unidad cuyos miembros actuaban en solitario, rescatando secuestrados, "apresando" testigos hostiles. Y Brian era de los mejores.

Solo tenía un problema, los fondos del departamento no alcanzaban para que consiguiera las cibermejoras que necesitaba. Ahora que estaba en las ligas mayores, era consciente de lo que se podía conseguir con eurodólares suficientes. Lo veía en los matones que debía eliminar. Lo veía en las calles, pero no había fondos. Brian era de los mejores, pero solo algunos conseguían la subvención, solo aquellos que pertenecían al grupo del ahora capitán Kumte. Y Brian, pese a sus habilidades, pese a que el mismo Kumte lo había recomendado no pertenecía a ese grupo.

Así que continuó operando solo con su habilidad, con su vieja .45 que manejaba como pocos, durmiendo en su camioneta, la que era su hogar, su medio de transporte y su defensa.

Hasta que...

HISTORIA PRIVADA

La misión de Brian era clara. No sencilla, pero clara. Solo debía acceder a "El Límite" y conseguir convencer a Milos Kowalsky que debía acompañarlo para atestiguar contra el grupo que se dedicaba a la venta de drogas. Parecía que había una Corporación involucrada, e incluso decían que operaba gracias a que algunos policías hacían la vista gorda.

No era la primera vez que accedía al límite. No era la primera vez que "convencía" a un informante de declarar. No era la primera vez qu la situación se complicaba más de la cuenta. Cuando llegó al lugar le llamó la atención la cantidad de "guardias" que lo protegían. Solo es un soplón se dijo, los puedo burlar... y si es necesario matar. No fue sencillo, no eran "solo guardias". Eran expertos. Con todo, Brian tenía una misión y la cumplió. Seis muertos, un montón de cibermejoras desparramadas por la calle y un prisionero perfectamente esposado con el que llegó a la base.

Pero luego... Brian todavía no lo entendía. El preso muerto, la orden de arresto, el video donde el mismo asesinaba a quien había apresado y el secuestro del que fue objeto y que le evitó la cárcel. Finalmente una conversación con un ejecutivo de TALLON GLOBAL, la corporación que aparentemente estaba tras las drogas y que, inexplicablemente, ahora eran sus aliados.

- Kumte es el culpable - le explicaron - le pagábamos, y muy bien, para que no enviara a nadie tras nuestros pasos y ahora que se destapó la olla ha acusado a la corporación. No lo podemos permitir. Nuestros abogados se ocupan de la parte legal, pero esto requiere una solución más permanente. Nadie juega con nosotros - No le gustaba lo que oía, pero menos pagar por las culpas de quien lo había culpado a el.

- Fue el quien fraguó el video, necesitaba un chivo expiatorio, y parece que fuisteis el elegido - le confirmó con una sonrisa - Parece que tenemos un objetivo común.... pero no será sencillo llegar hasta el. Conozco vuestras habilidades. Sois más conocido de lo que suponéis, pero los hombres de Kumte están cibermejorados. No tendréis posibilidades... aunque os podemos ayudar. Tenemos el mismo objetivo, si nos demostréis que sois de fiar, tendréis las mejoras que no os quisieron dar. La duda es... sois confiable? -

Brian tomó rápidamente su decisión. El había dejado su mundo por la policía. No iba a permitir que ese desgraciado ensuciara el uniforme. Sería un renegado, si, pero no perdería de vista su objetivo, eliminar a Kumte y sus hombres - Contad conmigo. Soy bueno, lo sabeis. Mientras no me pidais que mate ó amenace a inocentes tendréis toda mi voluntad... ya os haré un lista de lo que necesito. Y me diréis cuanto vale. Eso si, cuando Kumte esté acabado, nuestra asociación también -

Hubo un acuerdo. Cerrado con un firme apretón de manos. Kumte estaba en problemas. Había creado un monstruo. Y este se estaba preparando para acabar con el.

Salón-cocina
Dormitorio
Baño
Cerradura normal (dif 15)

Mapa

- Punto rojo: Apartamento situado en Japan Town (C3) Edificio a la derecha del 11 (al lado de China Town)

- Triángulo verde: Edificio de Tallon Global (único en su manzana)

Charter Hill, 23:30

Echaste un vistazo al nombre que estaba tras la fotografía: Pierre Bourdieu, un inmigrante con visado falso de trabajo que había escapado del contrato de Tallon Global. La Compañía quería recuperarlo porque poseía cierta información que sospechaban iba a vender al mejor postor, por lo que las instrucciones eran precisas: localizarlo y traerlo al punto seguro que te indicaran. Necesitaban conocer qué había dicho exactamente antes de eliminarlo, eso o meterle un chip explosivo para asegurarse su lealtad.

Si aún no había pasado por el quirófano tenía una visible cicatriz en su mejilla izquierda. No es que fuera una buena referencia, pero de momento unos cuantos ed te habían llevado al distrito donde se ujetencontraba “La Hacienda”, el mejor casino de la ciudad. Según te habían informado era posible que tuviese una habitación en alguno de los edificios de por allí, así que condujiste un buen rato por Charter Hill e hiciste algunas preguntas.

- Sí, amigo –contestó un aparcacoches al que le habías dado cincuenta ed- No sé en cual pero tiene que ser uno de esos –señaló dos bloques de edificios del mismo constructor.

No eran demasiado grandes, pero era posible que tuviese alguna medida de seguridad. La zona había resurgido de la nada y se consideraba una de las más seguras para vivir, y no por las Corporaciones sino por la influencia que el casino “La Hacienda” había dado a lugar. Aparcaste donde te fuera visible observar los bloques y pudiste ver que en la entrada tenían una cámara de seguridad. Eso significaba que estarían conectados a alguna compañía de vigilancia o tenían un guardia propio en el interior. Cuando ibas a echar un vistazo a la parte trasera la suerte se presentó ante ti.

Pierre bajaba de un AV taxi acompañado por una mujer de aspecto bastante sugerente, posiblemente una mujer de compañía. A lo lejos se escuchó un trueno, y teniendo en cuenta que el cielo estaba bastante nublado seguro que iba a caer una buena sobre Night City. Aquella era “la semana mojada”, y no todo lo que caí era precisamente agua. Con suerte el nivel de contaminación sería lo suficientemente bajo como para evitar una lluvia ácida o cualquiera de esas cosas que las fábricas producían.

Sonó tu teléfono, era “La Rata”. En tu época de policía conociste a un arreglador especializado en encontrar información, y eso en Night City era bastante útil. Si se tenía en cuenta que antes de comprar una buena arma para eliminar a alguien tenías que localizarlo el negocio de “La Rata” era bastante fructífero. Aún mantenías contacto con él y si te llamaba era porque algo quería o algo te ofrecía.

-¿Spetock? El mar es grande, pero he encontrado a uno de los peces que buscabas... Si quieres saber donde está la pieza de pescado te saldrá por 300 ed.. Puedes ingresarlo en la cuenta de siempre. Cuando tenga el dinero volveré a llamarte.

Aquella era una buena oportunidad porque se trataba de alguno de los policías que te habían arruinado la vida, y si te llamaba “La Rata” la oportunidad podría ser buena. Ya que sabías dónde estaba Pierre dedicaste unos minutos a llamar a un contacto de la empresa para que le transfirieran el dinero al arreglador. Diez minutos después de la primera llamada “La Rata” volvió a llamarte.

-Perfecto, así me gusta, pagador puntual. El pichón ha salido del nido para ir a Uper Marina. Se encontrará con un ronin en American Bar, frente al mar –indicó- Ándate con cuidado, el American está atestado de samurais y ronin. Además, dicen que si quieres entrar en la CIA seguro que encuentras algún reclutador allí. Vale, vale… no es precisamente un callejón solitario pero el pichón irá allí, sola –aclaró- No armes mucho jaleo si no quieres que te rompan las piernas. Ya sabes, nunca has hablado conmigo –te pareció escuchar una risa- Es un placer hacer tratos contigo Spetock.

Tenía que tratarse de Helen Garnet, una detective de tu antiguo departamento. Sabías que tenía chanchullos gracias a su posición como policía. La cuestión era simple: te quedabas a vigilar a Pierre o ibas al encuentro de Helen.

.

Las noticias habían sido buenas... aunque inoportunas. La pequeña operación había permitido que la presa se escapara... solo por el momento. Encima la lluvia, o posibilidad de lluvia, no ayudaba. Brian cortó la comunicación y lo pensó un momento. Quizás era un buen momento para arreglar viejas cuentas... pero eso podía esperar, por lo menos un rato.

Con un gesto mecánico, encendió el automovil y lo acercó a la puerta por la que había entrado su presa actual Supongo que será solo un rato... las fulanas no se quedan más que lo indispensable se planteó mientras verificaba que su equipamiento estuviera en orden y buscaba estacionarse lo más cerca posible.

Si es tan estúpido como para acompañarla, lo tengo al alcance de la pistola de dardos... dormido no causará problemas planeó sus acciones Y si ella baja sola... bueno, sabrá el numero de apartamento, para ir a buscarlo.

Con la facilidad que da la práctica, Brian se acomodo en su pequeño automovil y espero pacientemente. Conocía la rutina, en cuanto viera a su presa, o a la mujer, verificaría que no tuviera demasiados implantes y usaría su pequeña pistola de dardos sobre él... o intentaría que se acercase al vehículo para interrogarla a ella. Lo bueno de las fulanas es que hablan cualquiera rió por lo bajo mientras permanecía atento, mirando hacia la entrada por donde habían entrado.

Charter Hill, 00:30

Decidiste que aquella noche ibas a encargarte de Pierre. Sabías donde estaba y suponías que en un par de horas lo tendrías inmovilizado en tu coche listo para acudir al lugar de encuentro. El otro asunto, el de Helen, podría esperar. Como no sabías a la hora que acudiría al bar que te había indicado “La Rata” tal vez tuvieras suerte, o simplemente intentarías enterarte qué tramaba. Fuera lo fuese ahora mismo tu prioridad era otra.

Aparcaste más cerca e intentaste pasar desapercibido. Sabías que aquella zona tenía un control policial, tanto público como privado, así que encendiste la radio y en alguna ocasión fingías que hablabas por teléfono. Todo para pasar el rato y no levantar demasiadas sospechas, aunque de todas formas la zona estaba concurrida así que no esperabas problemas.

Ya había pasado una hora y Pierre parecía que se estaba dando el gustazo con aquella fulana. Lo que más lamentabas era aquella fina y negra lluvia que estaba cayendo desde hace media hora. Afortunadamente la  mujer salió del bloque y espera en la entrada (del bloque) mientras hablaba por teléfono.

Arrancaste tu coche para hacer algunas preguntas a la mujer cuando una moto con dos ocupantes se colocó delante de ella proveniente de la calle transversal y la dispararon con un subfusil. Su cuerpo cayó inerte y comenzó a rodar por las escaleras principales mientras la moto se daba a la fuga.

Aquella era una noche de elecciones, de eso estabas seguro.

- Maldición - la imprecación brotó de la boca de Brian sin que este siquiera se diese cuenta. Por un momento estuvo tentado de eliminar a los motociclistas, pero rápidamente acalló su reacción - En que estarían metidos esos dos - murmuró por lo bajo, refiriéndose tanto a Pierre y su compañera como a los desconocidos motociclistas, mientras analizaba sus opciones.

Finalmente optó por lo más lógico. Apagando la ignición de su vehículo el ex-policía se acercó a la mujer herida y verificó su estado. Estaría muerta?. Sus armas seguían en sus fundas, pero su manos y sus ojos verificaron rápidamente el estado de la mujer. Necesitaba que le diera el número de apartamento, sea de palabra... o en sus pertenencias.

Advertir emblema chaqueta: difícil y +3

Charter Hill, 00:30

Saliste del coche convencido de que aún estando incorporado en el carril no podrías haber hecho nada, sin duda la estaban esperando cuando salió del edificio al abrirse las puertas automáticas. Lo único que lograste ver con relativa claridad fue una especie de emblema del piloto en su hombro. El parche en la chaqueta era redondo, rojo y con una línea negra cruzada. No era demasiado, pero dadas las circunstancias…

Habías elegido el momento adecuado mientras el guardia volvía a entrar en el interior del edificio tras comprobar el estado de la mujer. Debías actuar rápido mientras la gente salía corriendo y dando gritos ya que pocos se quedaban tras el comienzo de un tiroteo. Ala cercarte fingiste dar asistencia a la fulana y comenzaste a registrarla. No encontraste nada en su ajustado vestido mientras la lluvia arrastraba la sangre que emanaba de ella, pero su bolso tal vez revelaría algo, al igual que su móvil.

Ya tenías claro, tras una vuelta por los alrededores, que en la puerta trasera había una cámara de seguridad así como en la principal. A parte estaba un sistema de seguridad que con suerte podrías neutralizarlo en dos o tres minutos. Ahora, además, comprobaste que por lo menos había dos guardias armados que salían de un cuarto del interior del edificio. En aquel instante el tiempo lo era todo, y tú estabas armado y blindado junto a un cadáver.

Circulo rojo con raya negra de que me suena No era el momento de quedarse a pensar, solo de actuar - Está muerta - comentó Brian en voz alta, para cualquier curioso que quisiera acercarse mientras con un rápido gesto tomaba el bolso y el celular

- Y la moto no debe estar lejos - Subir al auto y arrancar fue casi un único movimiento, así como la maniobra para ubicarse en la dirección en que había huido la moto. En realidad no le interesaba alcanzarla, pero para huir, mejor que pareciera que no lo hacía, sino que emprendía una persecución.

Con suerte, si nadie lo seguía, se podría detener en un par de calles para revisar más tranquilo el bolso... y verificar con quien estaba hablando la mujer cuando la mataron... y trazar nuevos planes. Parecía que las cosas no serían tan sencillas como hubiera querido.

Charter Hill, 00:40

La llegada de los guardias de los edificios hizo que tomaras una rápida decisión. Tal vez podías confundir a los transeúntes de que eras un segurita privado, pero a ellos seguro que no. Aprovechaste el revuelo para subirte al coche mientras que los dos guardias intentaban alejar a la gente de allí. Cuando ya te alejabas una furgoneta de seguridad se acercaba a la entrada.

Aparcaste cuatro bloques más allá de donde se hallaba tu objetivo para revisar lo que te habías llevado. Lo primero que hiciste fue revisar el móvil de la mujer, en especial la última llamada. Aparecía el número sin nombre y en su agenda habían muchos más con identificación. Antes de intentar averiguar más echaste una ojeada al bolso. No era demasiado grande pero era sorprendente la habilidad que tenían las mujeres para llenarlo de tantas cosas. Entre ellas estaba una cartera digital con algunos datos sobre ella, y así supiste que su nombre era Susane Huster a pesar de que en sus tarjetas de presentación se hacía llamar Marla.

Entonces te llamó la atención un objeto que no debería estar ahí. Se trataba de un pequeño aparato, no más grande que un mechero, llamado “puente de enlace”. Su función básica era enlazar el contenido vía wireless de una terminal a otra, y por lo general costaba algo más de unos trescientos ed. ¿Qué haría una mujer como aquella con algo así? No te dio tiempo a responderte pues el móvil de la mujer sonó. Se trataba del último número marcado.

.

Al revisar ese pequeño pero abultado bolso, Brian esbozó una sonrisa, como de costumbre estaba asombrado por la cantidad de objetos que una mujer era capaz de guardar en tan poco espacio. No era la primera vez que lo observaba y, como de costumbre, seguía impresionado.

El artilugio tras su reconocimiento, fue a para a uno de los bolsillos de su mochila y cuando el ex-policía se disponía a realizar la tediosa tarea de buscar el numero en la agenda escuchó como sonaba el celular - Maldición - murmuró mientras miraba a su alrededor para asegurarse que nadie se acercara a su vehículo. Luego tomó su decisión. Cerró los ojos un momento y al abrirlos pulsó el botó de recibir las llamada mientras hablaba en voz alta, pero sin dirigirse al teléfono - Si, Susy, si. Yo atiendo... Otra vez! - dijo claramente, esperando que el nombrar el verdadero nombre de la mujer fuera suficiente para que no sospecharan de el. Acercando el teléfono a su boca y oídos entabló, o más bien, intentó entablar una conversación - Si, y ahora, quien es? - preguntó no muy educado, como si estuviera atendiendo solo por obligación y estuviera ya cansado de hacer de "telefonisto".

Sabe que intentan localizarlo.

Es localizado en un área de 200 metros. Calcular que cada turno equivale a 1 min

Charter Hill, 00:45

Sólo cuando pusiste el oído sobre el teléfono escuchaste con claridad un zumbido constante. Tenías un grabe problema y todo dependía de lo cerca que se encontraran: estaban rastreando el móvil. Ahora mismo sólo tenías dos posibilidades: quitar la batería al móvil o dejarlo encendido. No servía siquiera apagarlo pues la señal de la terminal del servidor de la compañía telefónica permanecería encendida.

Sólo esperaba que no le hubieran dado tiempo a descubrir tu posición pero eso dependía de varios factores. El primero era sin duda el equipo que disponían para rastrear la señal, el segundo la distancia entre ambos puntos. Era posible que no le hubieran dado tiempo, y también que ya estuviera marcada tu posición.

Hicieras lo que hicieras tenías lago claro: querían localizar a Susane o por el contrario al individuo que se había llevado su móvil.

- Esto no me lo esperaba - las palabras, dichas en voz baja después de pulsar el botón de apagado del celular fueron el preludio de la acción casi inmediata. Por suerte el auto todavía estaba encendido, mientras conectaba la marcha atrás, con el fin de distanciarse de su ubicación actual, Bryan verificó por el espejo que nadie estuviera llegando y soltó el celular en la acera. 10, 20, 50 metros serían suficientes para detenerse y observar quien era el que estaba rastreando el aparato

Casi inconscientemente movió el cuerpo hacia atrás y las piernas hacia adelante, cosa de dejar la menor cantidad de cuerpo visible. Con los ojos alcanza se dijo a si mismo mientras esperaba que aparecieran los rastreadores e intentaba pasar desapercibido ante quien llegase

Charter Hill, 00:50

No dudaste ni un instante y tiraste el móvil por la ventanilla sobre la acera. Ralmente era una lástima no haberse quedado con él pero el riesgo era demsiado alto. Sólo lograste quedarte con el número que acababa de llamarte, y aún así era probable que se tratara de un número limpio e irrastreable. De todas formas ya se encargaría la Compañía de verificarlo.

Saliste del hueco donde estabas y aparcarte unos 70 metros hacia adelante. Tu siguiente acción fue hacerte lo menos visible posible mientras observabas a todos lados. A los cinco minutos apareció un coche que te pareció sospechoso, se trataba de un modelo parecido al tuyo de color oscuro.

El vehículo aparcó en doble fila parando el tráfico momentáneamente mientras que un hombre asiático bajaba del asiento del copiloto. Sin demora buscó el móvil hasta encontrarlo y lo enseñó a los ocupantes del coche: el conductor y otra persona atrás. Después de unos segundos buscando algo más, y varios coches adelantando insultándolos y tocando la pita, el asiático regresó con gesto de no haber encontrado nada más. El automóvil arrancó y te sobrepasó, por lo que tenías su matrícula.

Podías seguir al coche, o simplemente apuntar su matrícula. También podías intentar saber cómo se encontraba Pierre. Varias elecciones y poco tiempo para decidirte.

Años en la policía habían calado hondo. En la guantera siempre había un pequeño block de hojas y una lapicera para anotar datos que resultaran importantes. El número de teléfono y la patente fueron rápidamente anotados por Bryan para no olvidarlos posteriormente mientras que su cerebro trabajaba a marcha forzada.

Finalemente tomó su decisión. La mujer no era importante, solo un medio para llegar a Pierre, su verdadero objetivo. Con calma volvió a encender su vehículo y volvió a donde estaba antes, solo que esta vez no estacionó en el mismo lugar, no quería que lo relacionaran con quien había "saqueado" el cadaver. Una vez allí, se sacó su casco de combate y lo apoyó en el asiento del acompañante, listo patra ponerselo si resultaba necesario y, tranquilamente comenzó a revisar la agenda. Estaría Pierre allí? siempre era mejor que el saliera a que Bryan entrara y si conseguía su número...

Era dificil, probablemente la mujer no tendría los números de todos sus clientes, pero por probar no se perdía nada. Y estando en el lugar podría verificar que su objetivo no se retirara... si es que ya no lo había hecho.

Charter Hill, 01:20

La lluvia aumentó su intensidad sin llegar a ser torrencial, una ayuda necesaria para limpiar toda la porquería que flotaba sobre la ciudad. También era posible, si no habían tomado medidas, que se hubiera llevado la sangre de Marla escaleras a bajo.

De camino al conjunto de bloques intentaste hacer memoria para identificar la insignia de la chaqueta del motorista. Sin duda se trataba de un grupo poco conocido y por eso no lograste identificarlo. Tal vez con la vaga descripción que tenías alguien más habituado a los bajos fondos pudiera darte una respuesta. De momento tenías otras cosas que hacer.

Cuando llegaste al cruce de caminos aminoraste la marcha. Habían cortado la calle a ambos extremos con conos luminosos que prohibían el paso, así como un coche cruzado por cada lado mientras los agentes privados y los policías intentaban mediar la jurisprudencia. La travesía entre los edificios estaba completamente despejada a diferencia de los extremos donde se agolpaban curiosos. Antes de que un agente de seguridad privada te ordenase que continuaras el trayecto pudiste ver como el cuerpo de la mujer estaba cubierto y entraban al edificio una camilla vacía.

Aparcaste en la misma calle donde te encontrabas procurando no alejarte demasiado, pero al mismo tiempo no levantar sospechas. Una rápida ojeada a su agenda electrónica no te desveló demasiada información. Aparecían bastantes nombres, tanto de hombres como de mujeres, así como restaurantes, bares, clubs y demás por el estilo. De momento nada te sonaba, excepto algunos bares de lo más comunes. Tal vez podrían cotejarte los datos para sacar algo en claro, pero parecía de momento no había nada demasiado interesante. El nombre de Pierre no aparecía por ninguna parte.

Ya habían pasado bastantes minutos y la policía, ambas, no abandonaban la zona. Si hubiera sido una lugar más desafortunada era probable que antes de que llegara la policía alguien se hubiera llevado el cuerpo para venderlo, pero estabas en buen distrito. Ya no había tantos merodeadores, muchos habían regresado ya a sus casas y las calles quedaban un poco más tranquilas. La espera desapareció con un toque al cristal del asiento del copiloto. Un hombre de mediana edad que sujetaba un paraguas pegó a la ventanilla la identificación de Tallon Global y te hizo una seña para que bajaras el cristal.

- ¿Spetock? –se fijó un poco más en ti y sonrió- Sí, eres tú. Toma –te entregó una tarjeta- Deberías aprovechar que están liados y darte prisa antes de que la invaliden.

Se despidió con un simple guiño y con la misma se retiró como si fuera un transeúnte más con paraguas y gabardina vulgar calle abajo. La tarjeta pertenecía al servicio de seguridad de la empresa del edificio, y dado que tenía el nombre del segurita el desconocido se las había apañado para quitársela a uno de los guardias. Como no te había llegado mensaje alguno en relación a la agenda aquella era una buena oportunidad.

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La situación se complicaba cada vez más y al ver la camilla vacía entrando en el edificio EN VEZ de que la usasen para llevar el cadaver de la mujer un mal pálpito se dibujó en la mente del ex-policía.

Por un momento estuvo tentado de retirarse - Ya veo que era la asesina y la mataron... para no dejar pistas... esa patente se vuelve cada vez más importante - Las palabras surgieron por lo bajo, a modo de murmullo mientras la idea de que su objetivo estaba muerto se comenzaba a filtrar en su cerebro.

El golpeteo en la ventanilla y la sorpresa de lo que le entregaron era la forma de asegurarse de lo que realmente había pasado - Bien hecho - llegó a contestar Brian pero fue en vano, su bienhechor ya se estaba retirando.

Tras pensarlo un momento avanzó con el auto y lo ubicó en la esquina de la parte trasera del edificio donde había entrado la camilla. Luego tomó el casco del asiento y se lo encasquetó mientras bajaba del coche y se preparaba a ingresar en el edificio. Con una mirada casual memorizó el nombre que figuraba en la credencial y se encaminó hacia la puerta trasera, la misma por la que su objetivo había ingresado.

Dejó la escopeta en el auto y verificó que el mismo estuviera seguro y listo para partir. Si tenía que huir mejor estar tranquilo que nadie se lo llevara... y que no tuviera nada delante que le impidiera sacarle provecho a su movilidad.

Luego, con la seguridad de tantos años en la fuerza, se acercó a la puerta y levantó su credencial, dispuesto a suplantar al segurata hasta confirmar si Pierre seguía vivo... o si era para el que llevaban la camilla. Al acercarse a la puerta esperó que sus "compañeros" la abrieran y solo pregunto - En que piso? - esperando que nadie lo reconociera... o más bien, dejara de reconocer, sabiendo que el casco que tenía puesto era una ayuda. Su tono, condicionado por la experiencia intentó que fuera lo suficientemente formal como para no ser objeto de preguntas... solo de respuestas.