¡Qué grupo tan extraño!, pensó Amy para sus adentros.
La presencia de uno de esos montaraces del norte en el grupo inquietaba a Amy.
Se supone que son buena gente, pero eso de vivir en el campo a la intemperie... eso no puede ser bueno.
Pero por otra parte estaban las elfas, Amy nunca había visto elfos y su presencia le inspiraba confianza y paz. Pero aun así la testaruda hobbit no estaba dispuesta a comportarse como una estúpida confiada, la confianza estaba bien, pero la precaución... esa si que te salva de aprietos.
-"En efecto estamos lejos de Bree y de La Comarca, y no, no somos orcos disfrazados, somos hobbits. Tenemos nuestros motivos para viajar al sur por estos caminos, y como son nuestros para nosotros los guardamos."
La elfa que había preguntado si eran orcos disfrados rió alegremente.
Jajajaja. Pero que criaturas tan curiosas, son encantadoras. Os presento mis respetos, soy Silwen, elfa del bosque de Lorien
Tim perdió la timidez que el asombro por los elfos le había provocado y al fin habló, admirado por la belleza de Silwen y la otra elfa. La humana que iba con ellos también era muy bella, y si no hubieran estado las elfas su admiración hubiera sido para con ella. Pero era tanto y tan maravilloso lo que había oido hablar de los elfos.
Se quitó su sombrero e hizo una profunda reverencia. Mi nombre es Timorothy Tuk. Dijo admirado hacía la gracia de los elfos. Para servirles en todo lo que deseen, buenas gentes. Su gesto de cortesia resultaba incluso cómico.
La elfa que parecía más guerrera también se dirigió a ellos. Mis disculpas por los malos modales, err, hobbits. Carraspeó un poco al decir esa palabra tran extraña para ella. Soy Miriamele, elfa Sindar del Bosque Negro, hija de Thael y Sennar. Aunque no era necesario dar esta última información, decidió hacer el saludo formal como una pequeña disculpa por los bruscos modales. Es un placer conocer a nuevas razas, para una exploradora siempre es objeto de alegría el descubrir algo nuevo.
Amy sonrojó al comprobar la amabilidad de los extraños y darse cuenta que aún no se había presentado.
-"Mi nombre es Amy, Amy Tuk, de los Albos de Bree."
Se apresuró a decir tras la presentación de Miriamele.
-"Es un placer conocer a gente de tan lejos... porque... ¿esos bosques deben estar muy lejos de aquí?, ¿verdad?"
Eh, sí, supongo que se podría decir que están bastante lejos. Pero de todas formas hace muchísimos años que no visito mi hogar, así que no se puede decir que venga directamente de allí. Un honor conocerte, señora Tuk.
Miriamele asintió con la cabeza, reiterando su afirmación.
Ben tuvo que luchar contra su propia timidez al ver a los elfos y con voz entrecortada y algo apagada se dirigió a ellos.
Hola... Dijo timidamente. Yo soy Ben... Benjamin Pisafirme..
No puedo continuar esperandote, Ben.
Benjamin por fin pudo cerrar la boca que había mantenido abierta durante toda la conversación mientras miraba fijamente a los elfos sin apenas moverse. Estaba totalmente maravillado ante su hermosura y gracia, y le parecía increíble que les estuvieran hablando a ellos. Apenas llevaban unos días fuera de la Comarca, ¡Y ya habían visto elfos!
Yo..eh...esto....mi mi...mi nombre es Benjamin....Benjamin Pisafirme, de la Comarca.
Tras el enorme esfuerzo de presentarse, Ben volvió a callarse y a mirar con los ojos como platos a los viajeros.
Pido perdón por mi desaparición....no recibía correos de actualización de la partida y pensaba que estaba medio parada....lo siento. Estaba escribiendo cuando has publicado el mensaje...
El hombre rubio se presentó también ante ellos.
Jajajajajajaj disculpen mi descortesia pero mis compañeros estaban algo nerviosos por posibles bandidos en el cruceLuego de tomar una sonoras bocanadas de aires para calmarse se continuo Buenos dias, en mis tierras hay una leyenda sobre gente pequeña que vive en paz pero nunca crei que fueran una realidad, la verdad es un placer conocerlos. Mi nombre es Fhengel de Rohan.
Os cambio a la escena: "El sur queda muy lejos"