Partida Rol por web

Los tres jinetes corrieron contra los nueve dunlendinos que cabalgaban velozmente contra ellos. Era una locura, pero era su mejor opción, y de no serlo... ya no había marcha atrás.

Los hombres les señalaban, llenos de furia asesina, corrían contra ellos para descargar todo su odio en los rohirrin y su compañero. Sonreian confiados ante la perspectiva de enfrentarse a caballo nueve contra tres.

Eorlingas!!! responde Fhengel al grito de su compañera mientras se dirijia hacia sus enemigos. El rohirrim estaba decidido a matar al lider para desmoralizar al resto, eran mas que ellos, mejores armados y posiblemente mejores entrenados que algunos de sus compañeros...no tenian muchas chances de sobrevivir pero la suerte estaba echada, la moneda giraba en el aire y el solo esperaba a asestar el primer golpe para ver que habia salido.

Su avance distaba de ser la rapida cabalgata como un rayo que seria si aun tuviera su Meara pero igualmente era una cabalgata imperturbable, en linea recta y sin titubeos contra el hombre que le habia señalado el montaraz mejor que ninguno de estos bastardos se meta en mi camino.

Los soldados tomaron posiciones rápidamente, su estrategia era formar un circulo cerrando dentro al grupo de tres jinetes que formaban los viajeros a caballo.

El soldado que pasó cabalgando al lado de Fhengel lanzó una estocada lejana para probar suerte mientras su compañero se colocaba delante para atacarle directamente, aunque Fhengel esquivó ese ataque y se movió más rapido que el jinete que tenía enfrente y lograría ser el primero en atacar.

Otro jinete intentó lo mismo con Leowyn con igual suerte.

Aquella mujer demostraba que había nacido para montar a caballo, tras esquivar una espada que había pasado cerca de su cara, logró colocarse rapidamente para lanzar un ataque contra el jinete que venía de frente a ella.

Su espada hizo una herida limpia en el hombró del soldado, que perdió algo de sangre y Leowyn logró tomar ventaja para el siguiente asalto.

Demostraba con esa actuación que las mujeres de la Marca estaban hecas de otra pasta y bien podían empuñar una espada como sus compañeros.

Tras reponerse de la estocada de Leowyn el soldado lanzó un pobre ataque que la mujer pudo esquivar facilmente con el escudo.

Neram trató de aprovechar la iniciativa de su carga, sin embargo el jinete se movió justo en el momento en que adelantaba su brazo y apenas logró rozar a su objetivo.

El rohirrim sentia como sus antepasados gritaban en el y como su compañeros muertos gritaban venganza dentro de su alma, su sangre estaba hirviendo porque por fin dejaba de intentar ser un lider y volvia a ser un simple guerrero! tengo que mantener la cabeza fria si las vidas de tantos inocentes dependiera de sus acciones no hubiera dudado en entrar en un frenesi asesino contra los dunledinos pero en cambio avanzaba con los ojos fijos en el jefe TU ERES MIO! le grito señalando con la espada.

Neram falló en su ataque pero logró esquivar facilmente la estocada que aquel dunlendino le lanzó tras haberle visto errar con la espada.

Por su parte, Fhengel logró ser más rápido que su enemigo y trató de tomar una posición ventajosa desde la que atacarle. El golpe fue duro sin embargo no logró causarle un gran daño y el dunlendino pudo contraatacar, aunque el ataque del rohirrim le había debilitado. Sin embargo este logró lanzar un ataque bajo, que si no llega a ser por la protección de las grebas hubiese sido mucho peor. De este modo, tan solo le causo una fuerte contusión y no llegó a peores.

Los demás jinentes continuaron moviendose para tomar posiciones y seguir encerrandolos.

El rohirrim tenia un corte en su costado y por la herida empezaba a manar la sangre. Deberia sentir dolor pero solo tenia en mente al jefe de los jinetes y en su cabeza no habia lugar Voy por ti! me escuchas? Voy por ti! gritaba desaforado mirandolo a los ojos mientras agitaba su espada.

El montaráz controla su montura y vuelve a extender su brazo para tratar de lancear a su oponente.

Leowyn recibió un duro golpe en el costado de parte del soldado que tenía a su derecha, justo cuando se preparaba para golpear de nuevo al que tenía enfrente. No pudo colocar su escudo en una posición correcta para defenderse y el golpe le alcanzó de lleno. Aturdida por el duro impacto de la espada que consiguó alcanzar su carne, la rohirrim luchaban por no caer del caballo y intentaba levantar su escudo para protegerse de los siguientes ataques que fuera a recibir.

El soldado al que Leowyn había alcanzado a herir en el asalto anterior, el que tenía justo enfrente, logró alcanzar también con gran fuerza a la rohirrim, que apenas pudo hacer nada para evitar el ataque y quedo malherida y con el cuerpo abatido sobre su caballo.

Neram logró alcanzar a su rival pero apenas logró dañarlo de gravedad, simplemente logró herirle en un brazo, cosa que no debió agradar al soldado ni mucho menos que lanzó un ataque que el montaraz logró volver a esquivar.

Fhegel volvió a atacar con rabia, aunque su estocada fue más precisa que fuerte, y logró herir de gravedad el brazo del soldado contra el que luchaba, seccionandole con un perfecto tajo los musculos y tendones del brazo, por lo que el soldado soltó su lanza y la dejo caer. Herido de gravedad y exhalando sus últimos segundos de vida miro al rohirrim, totalmente a merced de él, esperando la estocada final.

Mientras los otros jinetes tomaron posiciones, encerrandoles cada vez más y llegando a un punto donde todos estaban rodeados de jinetes, con intención de matarlos a hoja limpia.

Fhengel ataca al hombre que estaba a punto de morir, el pobre bastardo ya estaba resignado MUERE! uno menos solo faltan demasiados

Neram observa como los jinetes los cercan, Leowyn queda aturdida en su montura y el otro rohirrim asesta certeros espadazos, la situación es muy peligrosa sin embargo no puede ceder ante la presión y trata de acabar con su oponente herido.

Una lluvia de golpes y espadas fue hacía ellos en todas direcciónes, la que se llevó la peor parte fue Leowyn que trataba de esquivar los golpes como podía en su estado de aturdimiento y fue acertada en su vientre con una cuchillada del filo de la espada de uno de los jinetes, la cual perforó la armadura y logró herir la piel que está cubría y le hizo sangrar. La mujer de la Marca notó la sangre brotar y se fue hacía un lado, momento que aprovechó uno de los jinetes, el que estaba detras de ella* para sujetarla por el cuello y llevarsela con él sacandola de su silla de montar.

Neram falló en su ataque y la replica del soldado también fue infructuosa. Numerosas estocadas perdidas se repartían por doquier y facilmente cualquiera de ellos podría llevarse una, las distancias eran muy peligrosas.

 Sin embargo fue Fhengel quien acertó y acabó hiriendo definitivamente al soldado portavoz del grupo de jinetes, quien murió por sus heridas tras la ultima estocada del rohirrim a la boca del estomago.

Sin embargo la situación se había puesto dificil. Ya estaba completamente rodeados y tal vez no pudierna volver a defenderse ni esquivar tantos golpes, además Leowyn estaba totalmente atrapada y fuera de combate.

Ver como Leowyn cayo en combate y fue presa de las asquerosas manos de los dunledinos solo enfurecio a Fhengel que luego de sacar su espada de las entrañas descarg un fuerte golpe sobre el siguiente jinete mientras con los ojos inyectados en sangre grito en su propia lengua VENGANZA! SANGRE Y MUERTE A LOS DUNLEDINOS, VENGNAZA!

Neram se retorcía en su montura esquivando el alud de golpes que se cernían ante él.  Volvió a soltar su brazo para acabar con el soldado con el que entablaba combate.

La situación era desesperada, ya la joven rohirrim había sucumbido frente a los golpes de los dulendinos y solo él y Fhengel luchaban contra  ocho soldados, cuatro por cabeza era una proporción demasiado desequilibrante para que fueran a salir de esta con vida.

Fhengel recibió un fuerte golpe en la boca del estomago antes de que pudiera actuar. Sin duda alguna debía su vida a su cota de malla, pues de no ser por ella estaría ensartado en una hoja de filo de un dunlendino. El golpe no obstante le hizo serios daños y le dejó sin aire durante unos instantes que se le hicieorn muy largos entre tanto enemigo.

Neram tuvo que esquivar dos estocadas y cuando lanzó la suya no estaba muy centrado en ello, por lo que su espada no alcanzó blanco.

Parecía todo perdido para ellos, pero algo ocurría en el otro lado. El resto de jinetes no les atacó, si no que incomprensiblemente se batían en retirada entre gritos confusos.

-¿Por qué huyen?

-¡Hay fuego! ¡Es brujería!

-¡No puede ser! ¡Los que no huyen han muerto!

-¡Huyamos también!

Antes de que ninguno de ellos pudiera poner orden el descontrol ya se había apoderado de la mayoría que salían galopando como alma que lleva el diablo.

Un rápido vistazo al otro frente les ayudó a comprender: unas largas llamaradas subían frente a los jinetes contra los que sus amigos luchaban y estos, algunos muertos, corrían por el mismo lugar que momentos antes habían galopado embistiendoles.

Era una buena noticia, habían ganado una batalla crucial y que estaba casi perdida al inicio, y todo gracias a sus estratagemas, pero el jinete que sujetaba a la semiincosciente Leowyn huía con ella a lomos de su caballo, como botín de aquella sinrazón.

Neram quedó sorprendido por la repentina desbanda de los dulendinos, pero un instante le permitió observar como uno de ellos trataba de llevarse a la mujer eorlinga, sin dudar un instante azuzó su monturo y puso su lanza en ristre apuntando diréctamente a la espalda desprotegida del dulendino.

Fhengel  esta sin aliento pero peor aun, sin reaccion! escuchaba u pitido en sus oidos y los gritos de los dunledinos pero no podia reaacion. Creia que todo habia acabado y por un momento sintio alivio para su alma pero al ver como intenaban secuestrar a su compañera su furia no hizo mas que crecer exponencialmente y eso mas el odio a sus enemigos hizo que tome las riendas y se disponga a cabalgar en pos de Leowyn y el dunledino

La situación era dificil, Fhengel continuaba aturdido, moviendo las manos hacía donde él intuía que iban a venir los golpes ya que la cabeza le daba vueltas y apenas sabía donde estaba. Pero su posición no era correcta y el ataque del jinete que luchaba contra él y que no huía como la mayoria de sus compañeros entró limpia hacía el cuerpo del rohirrim.

Neram recibió un ataque por parte de los soldados que le rodeaban, el de uno de ellos apenas le rozó pero el del otro le hizo daño, ya que el montaraz se encontraba lanzando su lanza contra el jinete que huía con Leowyn, la lanza se perdió ya que el jinete cabalgaba deprisa y el ataque que hizo daño a Neram le dejo aturdido debido a haberle cogido sin apenas defensas por intentar su ataque.

El resto de sus amigos, se acercaron corriendo hacía ellos para ayudarles. Pero en el espacio de tiempo en que recorrían la distancia que los separaba, los jinetes enemigos que seguían luchando comprendieron que estaban en clara desventaja y decidieron poner tierra de por medio al igual que sus compañeros. Asique aprovechando que Fhengel y Neram estaban aturdidos encarrilaron sus caballos en dirección sur y se alejaron a toda prisa.

Cuándo el resto llego donde ellos comenzaban a recuperarse de los ataques.