Partida Rol por web

El barco de remos no era demasiado espacioso, pero sí lo suficientemente grande para aquellos dos, y mientras no hubiera tormenta, no tendrían problemas en salir de allí, aunque claro, para ello era necesario como mínimo un navegante con la capacidad de preveerlas y evitarlas. ¡Que por suerte había una!.

Era el momento de la verdad, pues a pesar de todo ese debacle moral ahora solo importaba una sola cosa... Sobrevivir.

    S-sin... Perder el ritmo... el cielo parece que nos perdona de momento... - mentaba a mi compañero, para que de momento solo concentrará sus fuerzas en movernos a una zona más templada.

Sin haber terminado de remar, y teniendo las direcciones bastante claras, aquella pequeña asociación entre el Mink y el Gyojin parecía dar sus frutos. Estaba bastante contento de haber terminado de salir de aquel barco de pesadilla, aunque aún quedaba un par de días de viaje a remo.

-M-Mejor... -Comenté mientras seguía remando aún en mi estado- Si hay suerte llegaremos a Nalaga en un periquete... o al menos tranquilos de cangrejos...

El viaje que tenían por delante iba a ser complicado, pero al parecer, la buena fortuna les estaba sonriendo al punto en el que ir desde ese bote de remos desastroso y desaliñado era una opción más que viable para recorrer la distancia que los separaba y llegar hasta allá sanos y salvos...

En la lejanía, pudieron notar una enorme explosión que ocurrió detrás de aquellos dos fugitivos de la parca. Al girarse, estos pudieron ver con total claridad como el puntito marrón en el horizonte, se había vuelto en una bola de fuego incandescente que ascendía por los cielos... Al parecer salieron de ahí justo a tiempo.

    Ohhhhh no..... Anyway - comentaba con una mezcla de asombro y felicidad al notar como aquella onda de calor expansiva sacudiendo la zona marina en donde alguna vez estuvo nuestro barco - Aprecie esto mi estimado Sr.Bigotes, nuestros compañeros nos han entregado el mejor de los regalos de despedida, un hermoso y digno final para tan apasionada tripulación - retomando una vez mas mi remo - ahora... nuestro deber es sobrevivir - ensanchando aun mas la sonrisa - para poder vender la historia , como cuento o canción y que en todos los mares nuestros compañeros puedan seguir viviendo... como el mito del por que se debe de respetar a Nalaga...

La explosión hizo que mis bigotes volaran al viento y de hecho tuve que soltar una mano del remo para poder agarrarme el sombrero y que este no saliera volando. Realmente era algo que pensaba que iba a ocurrir, pero no sabía que fuera a ocurrir tan rápido.

-Por favor, soy un cronista. Yo solo indico los hechos más fehacientes... Así que dígame... -dije a mi compañera- ¿Quién arrancó la pinza al cangrejo en combate singular?. Yo diría que usted quedaría perfecta para ese papel, en cambio yo pude ser el que le pinchara el ojo con mi estoque para permitir que los huérfanos huyeran de esta vil criatura...

Y mientras comentaban los detalles de las aventuras que, claramente, habían vivido juntos y con su anterior barco pirata, aquellos dos continuaron remando, iban a tener un viaje extremadamente largo, casi tan largo como decir muuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuy largo... y eso que alargué la "u".