Partida Rol por web

Alice se tensó al oír las palabras de Aaron, pero no dijo nada. Se limitó a asentir en silencio, sin mirarle siquiera

Aaron asintió a su vez y se separó de la mujer.

-No me vengas con tonterías. ¿Qué es lo que hiciste durante ese tiempo? ¿Vas a tener secretos con moi?

Oh, nada interesante. Ya sabes, lo de siempre. Engatusar a algún que otro incauto y aprovecharme de él hasta que ya no me servía. O realizar hechizos de magia negra para evitar que te metieras en mi cabeza mientras conspiraba con Seline y otros amiguetes de mi club de lectura para dominar el mundo. Ese tipo de cosas

-¿Sabes que voy a disfrutar arrancándote esos secretos de tu propia lengua?

Bueno, bueno, no hace falta ponerse así. Tienes que controlar ese temperamento, querido. Venga, te propongo un pequeño intercambio. Tú me dices qué relación tiene tu señor con las lagunas de Aaron y Faliar, y yo te cuento algo sobre ese año misterioso. ¿Qué dices? ¿Trato?

-Mmm... ¿no puedes ofrecerme algo más? En teoría, si acepto, yo te daría dos cosas a cambio de una sola...

Sabes que eso no es cierto. Estamos hablando de intercambiar dos simples hechos puntuales con un año entero de mi vida. De Faliar ya intuyo algo, así que la única verdadera revelación es Aaron. Diría que incluso yo salgo perdiendo...

-Am... espera un segundo. ¿Contabas con que creía que me ibas a contar lo del año entero? Yo me esperaba una simple respuesta en dos o tres palabras, preciosa. Aunque, ¿sabes lo mejor de todo? No confiamos lo suficiente el uno en el otro para poder decirlo. Alguien tendría que empezar y te aseguro que conociéndote, no voy a ser yo el primero que te diga lo que sé.

¿Qué ha sido del honor entre ladrones? Está bien, está bien... Hagamos un trato: Empieza contándome la relación entre él y Aaron, luego yo te cuento el año, y acabas contándome la relación con Faliar. Así te aseguras de que complete mi parte del pacto para oír la historia completa, y yo me aseguro de haber oído parte del tuyo si luego decides no cumplir con tu parte. ¿Qué te parece?

-Mi respuesta tanto para Faliar como para Aaron es la misma, por lo que no, al final tendrías tu toda la información antes. No... no hay trato a no ser que comiences tú, preciosa.

Oh, Emil... ¿Te hice mucho daño, verdad? Te has vuelto una especie de obseso paranoico sediento de venganza... Con lo que tú eras...

A esas alturas, ya eran simples juegos. La lengua de Emil siempre había sido larga y salvaje, difícil de controlar hasta para él mismo. A esas alturas, ya le había dicho mucho más de lo que esperaba al comenzar la conversación, y todo sin darse cuenta

-¿Daño? Sí, bastante, digamos que... mi cuello hecho trocitos es doloroso.

Oh, cariño... No seas tan banal. Siempre te quedas en lo físico. ¿Me vas a negar esa pequeña influencia en la pedrada mental que ahora llevas encima? Que malo eres...

-Tienes si no toda la culpa, gran parte. Y por ello creo que cuando acabe contigo volveré a ser un hombre cuerdo...

Oh... ¿he dicho hombre?

A mí puedes engañarme si quieres, Emil. Puedo hacer como que te creo, si eso te hace sentirte mejor. Pero no te engañes a ti mismo, pichoncito: No hay marcha atrás para tu locura

-En ese caso, disfrutaré de ella. Volviendo al tema... ¿como quieres que te mate?

¿Necesitas preguntarlo?

No pudo evitar sonreír

Como te maté yo. Con un beso