Alice pudo comprobar cómo Aaron se sorprendió cuando dijo que él era el único en quien podía confiar, a pesar de que trataba de ocultarlo. En seguida recobró la compostura.
-Bien, allí nos veremos-Dudó un segundo-Ten cuidado-Acto seguido, volvió sobre sus pasos.
- ¿François? ¿Dónde estás? Tenemos que seguir adelante...
Cuando llegó a donde había dejado caer el estoque, lo recogió, así como la funda en forma de bastón, que estaba entre los restos de los bancos. Mientras envainaba la hoja, pensaba en Alice. Qué estúpida. Si se lo hubiese dicho, si les hubiese dicho que había más, habrían tomado medidas.
¿Lloriquear? era ella la que se quejaba de que no había dejado con vida a quien por poco acaba con ella. Por otro lado, Pierre no estaba orgulloso de su reacción tan apasionada. Tan sentimental. Pero ya estaba hecho. Aun así, seguía molesto con la inconsciencia de la joven Xerine. La misma que le acababa de reprochar no plantarle cara, ahora se escaqueaba como si nada hubiese pasado. Herida, desangrándose. Pero COnrad no iba a ir corriendo a ayudarla. A menos que fuese tan estúpida como para dejarse morir, mientras tanto, cargaría justamente con las heridas que ella misma se había buscado.
No podía creer la actitud de Xerine. Siempre aparentando control, cuando en realidad podría ser la que estaba más perdida de todos. No estaba enfadado con ella, sino preocupado por cómo todo se le había ido de las manos. Podría fingir cuanto quisiera, y sin embargo, si el cartógrafo no hubiese estado allí, intuía que el final de la batalla habría sido distinto. No esperaba un gracias. Lo había hecho por lo que lo había hecho. Al igual que había ejecutado sin compasión a ala traicionera asesina. En fin, sería mejor no perderla de vista. Como a un niño pequeño. No fuese que se hiciera daño otra vez. Quien sabe si aún había más asesinas acechándoles.
Espero respuesta de Fransuá.
Parecía que la mentira había cuajado bien, pues creyó adivinar cierto brillo de sorpresa en los ojos de Aaron. Si eran imaginaciones suyas o realmente había surtido efecto no lo tenía claro, pero sería mejor ir buscando apoyos frente a la aparente tormenta que se le venía encima. Si no fuera porque en esos momentos se encontraba atada al grupo en más de un sentido probablemente habría elegido ese día para tomar un nuevo camino. Pero las cosas no eran tan simples... Nunca lo eran
Y no es tan fácil huir
Ya te conté el plan: La idea es salir del pueblo cuanto antes, y esconderse en el bosque lo mejor que pueda. Pero sin gastar mucho tiempo en el proceso, que se está desangrando. Acto seguido, primeros auxilios. Ya veremos después