Partida Rol por web

-Berry no tiene la culpa de no poder daros respuesta, Ser Xavi.- Respondio el gato, una vez estuviera seguro que la satira no la escuchaba.- No se si recordais cuan real se sentia aquel sueño, pero os puedo asegurar, que el dolor al clavarme esa daga, era tan real e intenso, como cualquier espada que me hayan clavado en vida.

El felino se volvio desde su posicion, con las manos cruzadas tras su espalda, dirigiendo una mirada a Macario y Xavi, parecia estar sopesando algo, como uno sopesaba cuan riesgo corria saltar de una azotea a otra sin matarse contra el duro asfalto.

-¿Quereis saber que era el regalo? Yo os lo dire, era un mensaje de la propia reina, no tengo duda alguna, su voz era la de ella, el artefacto era similar a uno de los que pertenecia a un goblin que nos enfrentamos en el Seto, nuestra primera "aventura" como campeon y reina, y el significado del mensaje es la razon por la que Macario esta obligado a un duelo esta noche.- Revelo, mirando casi con pena al joven floreciente, como si le hubiera caido el peor de los castigos.- Jenny esta, no, necesita encontrar un nuevo campeon para su corte, y quiere darme una oportunidad para volver con ella, antes de que se lo pase al primer patan, sin ofender Macario. Y el regalo era su forma de hacermelo saber.- Dijo de inmediato, tosiendo un par de veces.- Pero no puedo volver ella, y ella tambien lo sabe, sin embargo, fue mi culpa el que ella tenga esta "espina" clavada en su corazon. Si tan solo no hubiera...

Se corto de inmediato, suspirando con melancolia y angustia, habia algo en la mirada del gato que denotaba culpa ¿Pero era solo por haberse ido?¿O habia algo mas? Botas se acerco a Macario, y le puso una mano sobre el hombro.

-Escuchame, el Wyrd es algo muy peligroso para tomarlo a la ligera. NUNCA faltes o deshonres un duelo, tienes que acudir al evento si o si. Y aun mas importante, debes ganar.- Las zarpas del gato, se fueron a los brazos del joven, apretando y buscando el poco musculo que habia en esos brazos de artista.- Y suerte tienes que sea un duelo onirico, tus brazos tienen unos ratones* que parecen no haber comido en años. Pero dime ¿Sabes de alguna habilidad marcial o algo que puedas usar en combate?

Si Berry -se le iluminó la cara- un poco de chocolate estaría delicioso...

No, marcial no.  Es parte de mi ser pacifista, quiero ser un bodisattva. -explicó-  Pero se que se pueden hacer ataques ambientales, del contexto.  Ahí tendría algunas ideas para ganar sin lastimar.  -parecía determinado, pero chocándole la violencia sin necesidad u opción- Sería una forma de mandar un mensaje, hablando del estilo que creo que deberíamos tener en el Drac Arc de San Martín, o al menos en mi corte.

Berry -le habló fuerte para que llegara a la cocina-  ¿algo de aquí de tu hueco en el Seto me ayudaría a dar mejor batalla?  Si viene el sueño aquí podría ser más poderoso por el Wyrd, aunque no quiero atraer a la buenagente a tu sitio.  ¿Que deberé hacer?  Se le oía preocupado por respetar y cuidar a su hermana de corte.

Botas, -dijo en voz más baja- ¿y que más hubo en la ocasión de tu partida?  Lo puedo intuir que no sólo fue aburrimiento.

-!JA, un duelista pacifista¡ Lo que me faltaba por oir.- Se rio sarcastico, Botas, llevando un mano al rostro de manera dramatica.- Por suerte para ti, un duelo onirico, es casi imposible que puedas dañar a tu adversario, pero para tu desgracia, las reglas de victoria son similares a uno real, no importa cuan bien cantes, el Wyrd respetara mas el filo de la espada de tu compañero sobre la ligera pluma que traigas al combate.

Continuo Botas, paseando y dando taconazos sobre el suelo, mientras se llevaba una mano a la barbilla, ignorando la ultima pregunta de Macario. Quizas demasiado emocionado y atraido por la idea de hablar sobre el futuro duelo, o quizas simplemente porque no queria responder, evitandola a cualquier costa.

-Lo siento, amigo, se lo bien que se te da expresarte sin usar la violencia, pero en este caso, Ser Xavi mismo esta mas capacitado para ese duelo que tu. Quizas podrias usar el entorno para aplacar al enemigo, pero seamos sinceros, tu empatia deja que desear, aun te cuesta ver y notar las emociones de los demas. No podrias cortejar la mano de una doncella inexperta ¿Como piensas capturar el corazon y sueño de una reina, para usarlo contra su propio cortesano?- Pregunto retorico, saltandose y poniendose sobre la mesa y llevandose una mano sobre el pecho de manera dramatica.- Estas luchando en terreno no amigo, mi joven artista, y tu como un ciego, te has dejado llevar sin queja alguna. Quizas, si pudieras traer una herramienta o instrumento que haga de tu arte, un arma a tener en cuenta, podrias volcar la balanza a tu favor, pero mejores artistas lo han intentado y fallado. Se requiere de un objeto o talento especial para ello.

-Botas, al suelo, me estas manchando la mesa de barro.- Regaño Berry, con una bandeja repleta de tazas de chocolate y golosinas blancas entre manos, parecia haber recuperado el color en las mejillas, ahora sonriendo levemente con mas calma.

-Macario, no puedes quedarte aqui. Y no solo lo digo porque tendras que acudir a la reina de otoño y Primavera para tener el duelo, lo digo porque no quiero que te quedes aqui, ni tu, ni Xavi.- Sentencio Berry aunque sin malicia, mientras repartia las tazas con hospitalidad.- Os agradezco que hayais venido hasta aqui para ver si estabamos bien, de verdad, pero... Alguien o algo esta intentando darnos caza, matarnos. No puedo volver al Feudo, no se de quien fiarme o de quien no, quizas nuestra reina no sea la asesina ¿Pero que pasara cuando se entere que la pareja del sueño eramos nosotros? Ya has visto lo celosa que es, me odiara a muerte si se entera de esto, y sin proteccion de mi corte, no tendre defensa alguna.- Bajo la vista, apesumbrada y temblando levemente.- Lo he decidido, no voy a volver, me quedare en el Seto el tiempo que haga falta hasta que todo este lio se resuelva. Botas podra quedarse si quiere o no, y vosotros podreis visitar de vez en cuando, pero no pienso arriesgarme a que traigais atencion indeseada. Y es por eso, que voy a tener que pediros que hagais un Compromiso aqui y ahora, para que me deis vuestra palabra de que nadie mas se enterara de nuestra situacion. No sera desinteresado claro esta, Macario podria recibir un poco de "ayuda" y guia de Botas para el duelo a cambio de su silencio, y Ser Xavi, podria, hum...- Berry hizo un mohin con los labios, insegura de que decir a continuacion.- Me temo que no se que ofrecerle, Ser Xavi, no le conozco tambien como quisiera ¿Que tal si le ofrezco frutos goblins u otros productos del Seto a cambio? Suelo cazar y recolectar a menudo por el Seto, podria suplirle con estos, seguro que le servirian para recuperar energias.

- No necesito nada a cambio de guardar en silencio vuestra posición. - le digo a Berry. No obstante tengo una duda. ¿Por qué ella me atacó cuando el Seto se retiró? - le pregunto señalando a la chica herida. ¿Qué quería el Seto de ella?

Luego me vuelvo hacia Botas.

- Averiguaré que está pasando y le pondré fin. - le digo. Nadie ataca a un miembro de la Corte de Verano y queda sin castigo.

Tras estas palabras vuelvo a mirar a Berry.

- Puede ser que pierdas la protección de tu Corte. - comento. Mas no perderás la mía. - añado con un guiño de ojo tocando ambas armas perfectamente enfundadas colgando del cinturón. Los amigos de mis amigos son mis amigos. - prosigo señalando a Botas.

-!JA, un duelista pacifista! Lo que me faltaba por oír. -dijo Botas.

Je, je, se rio Macario en respuesta.  ¿Que no habías oído de Gandhi o Mandela, mi querido Botas?  No les faltaba fuerza.  No todos podemos o queremos ser el Ché Guevara o Alatriste o el Conde de Montecristo.  El joven con alas de colibrí en las sienes escuchó a su amigo y reflexionó con lo que dijo. Ciertamente la no-violencia utiliza al entorno como medio de lograr las cosas, cambiar el mundo.  No lo había pensado.  Una gran coincidencia.  Y si, tienes razón. Me falta empatía, mucha.  Me lo han dicho antes y es un buen camino a recorrer.  -nostalgia, eco de su pérdida en Arcadia, sonó en su voz.

En todo caso, no es mi ilusión ser duelista de la primavera.  Lucharía por sus ideas, ciertamente, con todo -sonrió como gato de Cheshire- pero las peleas por "honor" como posición social relativa me parecen tontas -sin desear ofender, Botas.  

Si me quieres enseñar algo, yo feliz Botas.  ¿Esgrima? ¿Sabías que Mandela aprendió a boxear?  Pero mi intención y medios siempre querrán ser los mismos.  Para que no te desesperes conmigo.  -sonrió divertido, jugando con palabreo como siempre con su amigo.

Tomó un poco del té y bombones, escuchando lo que le decía Berry.  Había llegado a querer tanto a esta sátira.  Realmente la corte los unía por cosas en común, diferentes en cada lazo, pero si que lo hacía.  Sonrió acordándose del sombrero sorteador en la película de Harry Potter. 

Berry -le dijo más serio- seguro que me voy.  Piensen en como borrar nuestro rastro, que las flores me siguen y la grava de las pisadas de Ser Xavi es muy notable. 

Sin embargo, toma en cuenta que avisé, previendo peligro, a nuestra corte que venía a buscarlos.  Marqué el cruce del callejón al seto, con un buen graffitti.  -No sabía que huían de la corte misma.  Lo desharé a mi regreso, pero aun así...

Siguió escuchando sus razones y miedos.

Yo dudo que Jenny haga esto por maldad.  Impulsiva es, pero en su corazón tiene nuestro bienestar.  Lo se, lo he visto. -¿una sombra de duda asomó entre ala y ala?  Algo dijo que era su "juego" con Botas.  Y si quiere que regreses a ser su campeón, -le dijo a su amigo- pues sólo dile que no, y que no quieres más juegos de peligro con ella.

En todo caso hago el compromiso, más fuerte aún,  ¡Y que venga glamour con ello!  -alegre, extraño, un primaveral que era el joven catalán- de que no revelaré la localización de tu escondite a nadie que tu no me autorices, y que buscaré quien es quien los quiere dañar para evitar que lo hagan.   

Pausó, sabiendo que era momento de salir de escena.  ¿Nos llevamos a la chica?  Seguro Gaia sabría como curarla, y tendría más cosas para hacerlo.  ¿Será prudente moverla? 

-Ojala lo supiera Ser Xavi, nunca he visto nada igual como esto.- Respondio nerviosa Berry, llevandose un sorbo a los labios, y manchandoselos, cosa que no noto o no le parecio importarle.- Durante los años que he explorado el Seto, he visto muchas formas de vida morar entre las Espinas, plantas, animales, humanoides, minerales, una vez incluso conoci una idea con forma fisica que devoraba los pensamientos de mentes ajenas, pero las Espinas son espinas, su unica funcion es bordear el camino, nunca han tenido voluntad propia o deseo alguno mas que crecer en los limites, y aun menos actuar o responder como habeis visto. Es tan anti-natural como ver un Fae ser creativo por si mismo, va en contra de todo lo que conozco.

Incomoda, se cruzo de brazos y se retiro junto la perdida insconciente, acariciandola del pelo de manera maternal con una expresion grave de preocupacion.

-Si, llevarosla, es lo mejor, he hecho todo cuanto he podido, necesita una curandera de verdad.- Replico Berry, mirando al duo en una semi-suplica.- Estais haciendo un gran favor al no solo proteger nuestro secreto, sino ademas ayudar a una desconocida. Por todo eso, y mas, gracias.

-Hay cosas que las palabras solas no pueden arreglar Macario, sobre todo cuando abusas de ella para el mal uso.- Respondio amargamente Botas, desviando la vista culpable.-Hay heridas que solo las cura el tiempo, joven amigo, y a veces, ni incluso eso.

>>¡Pero basta de parlotear, pues tiempo es lo que no nos sobra ahora! Debeis retroceder y borrar vuestras huellas, antes de que descubran nuestro escondite, pero aun falta algo que hacer aqui.- Dijo retirando la espada de su funda, y esgrimiendola delante suya y del duo, de manera ceremonial.-Ser Xavi, solo quiero decir que entre los honorables caballeros de la corte de Verano, me alegro que sea vos con quien pueda compartir un Compromiso, siempre he admirado vuestra honestidad y sinceridad, lo mismo digo, Macario, puedes tener la cabeza en las nubes, pero tienes un corazon de oro y una pasion digna de un cortesano de Primavera. Dicho esto, empecemos...

Yo, Ser Botas de la sagrada banda del estandarte dorado, juro por mi arma y mi honor aqui presente, defender y ocultar de todo peligro a la Perdida conocida como Berry Legs y dar mi brazo por mis compañeros de armas, mis estocadas cortaran incluso la sombra de mis enemigos y por mis venas recorrera el fervor de la energia de Primavera, de faltar a mi palabra, se rompa en mil pedazos cada una de mis armas y mi lengua sea marcada con el simbolo de un mentiroso, asi sera, hasta que la luna muestre cada uno de sus rostros a los mortales. Ser Botas, Macario, repetid este voto conmigo..

Ceremoniosamente, el floreciente dijo: 

Yo, Macario, cortesano de la primavera, juro por mis pinturas y mi honor aquí presente, defender y ocultar de todo peligro a la Perdida conocida como Berry Legs y dar mi brazo por mis compañeros de armas.  Mis palabras cortarán incluso la sombra de mis enemigos y por mis venas recorrerá el fervor de la energía de primavera.  De faltar a mi palabra, se rompa en mil pedazos cada una de mis plumas y pinceles y mi lengua sea marcada con el símbolo de un mentiroso.  Así sera, hasta que la luna muestre cada uno de sus rostros a los mortales.

Ahora si amigos, vámonos de regreso, borrando huellas.   Y comenzó a tararear una bella canción mexicana...

Tu no perteneces a la Sagrada Banda del Estandarte Dorado, así que no tienes que incluirla en el juramento

Notais como el Wyrd es atraido por el compromiso y se enreda en las armas de cada uno de los presentes, aunque en el caso de Macario, es su propia voz, y se extiende hacia vosotros, tocando y cambiandos en torno a vuestra promesa. Os notais mas rapidos y agiles que antes, y vuestras armas mas ligeras que antes, sin embargo, tambien notais que recae una gran responsabilidad sobre vuestros hombros.

De repente unas campanillas suenan fuera de la cabaña, Berry es la primera asomarse por la ventana, saltando gracilmente sobre los muebles. 

-Es una de mis trampas, las suelo usar para saber cuando se acercan depredadores.- Explica Berry, asomandose con cuidado por la ventana. De inmediato, se lleva una mano sobre la boca, abierta de par en par entre sorpresa y terror.- ¡Oh no, es Miriam!¡Es demasiado tarde, Primavera debe ya estar aqui!

-¿Hay alguien mas con ella?- Pregunto calmado Botas, examinando su alrededor.- ¿Hay una salida trasera?

-Hum, no que yo vea, y si, hay una trampilla, pero...

-Nada de peros, no es momento de dudar.- Dijo el duelistas cogiendo la mano de Berry, firme pero con ternura. La satira no la rechazo, aunque se sonrojo un poco.- Macario, Pietrus, saldremos de aqui sin que nos vean, vosotros ocupaos de la Perdida insconciente y de Miriam como veais, intentad hacer que ganemos un poco de tiempo de ventaja, por si la acompañana rastreadores. Recordad que un caballero no derrama sangre inocente, y menos de una dama.- Indico el felino, con determinacion y honor.- Hasta mas ver, caballeros.

Nada mas decir eso, Botas y Berry se fueron al interior de la cabaña, dejando a solas con la Perdida convaleciente, una Miriam merodeando por los alrededores.

- Maldición. - digo al ver a Miriam por la ventana. ¿Que hace ella aquí?

- Macario, quédate con la perdida. - le digo. Yo me llevaré a Miriam de aquí. Cuando lo haga lleva a la muchacha a buen recaudo. Luego regresa con tu amiga la veterinaria. Nos veremos allí en cuanto pueda.

Todavía no entendía porque Miriam era la persona con la que estaba emparejada en el sueño que tuve y esta era un buen momento para intentar averiguar algo.

Salgo de la puerta cuidándome bien de que no se vea el interior de la cabaña.

- Miriam. - digo mientras avanzo hacia ella atento a todo lo que nos rodea. ¿Que hacéis aquí?

Defender y ocultar de todo peligro...   Bueno, Ser Xavi, Miriam puede no ser un peligro.  Recuerde que yo puse signos de que buscaríamos a nuestros amigos y mandé avisar a primavera con el chaval aquel.  Debe venir en nuestra ayuda.  Seguro. -dijo, dandole siempre un su lugarcito a la duda.  

¡Suerte Botas, Berry!  Nos comunicamos vía los pajarillos que anidan en La Sagrada Familia.  

Macario revisó que la chica perdida estuviera bien. Le dio un poco de agua del cuenco de guaje que tenía Berry colgado de una cuerda de sisal y le hablo suave:   ¿Cómo estas muchacha?  Ya despierta y dinos tu nombre.  Necesitamos que te comas algo sano y limpio.  Tomó una de las frutas mundanas y la partió para que su olor ayudara a despertar a la chica. 

 De la ventana de la cocina se asomó a ver a Miriam y echó un ojo para ver si alguien más venía con ella.  Buscó signos en los árboles y matorral, a ver si la flora o fauna reaccionaban como a la presencia de alguien más.

Mm, ese Ser Xavi es bueno para muchas cosas, pero quien sabe para cotorrearse a alguien.  Mejor salgo a ayudar.  Miriam, ¡hola! -sonrió sincero, Miriam era su amiga y una lindura- ¿viste mi mensaje en la barda o les avisó el chaval este que mandé?