Partida Rol por web

Ayudenme a bajar por favor, yo sere el primero asi recupero mi bota y voy sosteniendo a los que bajen despues...  - Dylan espera que le tiendan una mano para ser el primero en bajar sin mucha dificultad.

Lucius se afianzó bien en el suelo, por encima de la trampilla, para sostener el peso del otro hombre. Mucho se temía que no sería capaz de aguantarlo él sólo, de modo que buscó con la mirada a otro más para ayudarle...

-Chicos, si no les molesta, no quisiera quedarme aquí sola...

Dijo observando a su alrededor con cierta aprehensión. Mejor salir de allí cuanto antes, eso piensa y espera poder hacerlo.

Iñigo se acerca a Lucius para ayudarle a bajar a Dylan.

-Yo les ayudare, suficientes peligros hay en estas habitaciones como para que nosotros mismos nos provoquemos accidentes.

Entre los dos agarran a Dylan para ayudarle a bajar.

Entre Lucius y yo conseguimos ayudar a Dylan que baje a la siguiente habitación.

Se sentó a la orilla del lugar por donde debía bajar y miró a sus compañeros.

-Necesitaré ayuda, suerte que soy menuda-sonrió un poco y se colgó del piso o techo según se vea, esperando que Dylan le ayudé abajo.

Tras llegar a la nueva habitacion, rapidamente Dylan se apropia de su bota que habia arrojado y nuevamente se calza. Hace un paneo visual de la habitacion pero su nueva e intempestiva compañera decide rapidamente arrojarse por la portezuela que lleva a dicha habitacion.

Ven niña! Arrojate tranquila... ............ PAF! - el delicado cuerpo de la rubia cae en los brazos del joven... - uffffffff!! pero si eres mas liviana de lo que pareces. Este mameluco que nos dieron definitivamente no te sienta para nada bien.

Al verme sujeta entre los brazos de Dylan abro los ojos que había cerrado tras hacerle caso y soltarme. Lo miré a los ojos y mi rostro se sonrojó.

-Supongo que pensaron que era más... Esto... Si, lo soy. Gracias, Dylan.

Esbocé una sonrisa y puse mis manos en sus antebrazos para apartarme suavemente.

bien sigo yo supongo dice acercandose a la orilla

Es que no me gustaria caerme como recien

realiza un gestos sobandos el aun resentido hombro.

Iñigo intenta ayudar a Edward pero se da cuenta de que el solo no puede.

-Lucius hechame una mano,.... mmmmfffff-

Dylan y Amy habían logrado bajar sin problemas, aunque Lucius estaba seguro de que Iñigo debía ser realmente fuerte para ni siquiera haber sudado al bajarles. Cuando emprendían el descenso de Edward, sin embargo, la mano de Iñígo resbaló, provocando que todo el peso del hombre recayera en el escuálido limpiador.

No! Cuidado!  gritó Lucius cuando sintió que el hombre caía sin remedio...

Lamentablemente, a pesar de todos vuestros intentos, Edward cae golpeándose la espalda contra el suelo. Se encuentra perfectamente, pero le dolerá un buen rato.