Partida Rol por web

-No! Pensé que podrías ser más rápido, Boros, lo siento mucho- exclamo mientras llamo a mi weavile a su pokéball.

-Es tu turno Mani!- y lanzo la pokéball con mi Mamoswine al campo del combate.

Ahora tendría que hacer todo lo posible con terminar éste combate con mis dos pokémon restantes, Glalie y Mamoswine.

Mamoswine sale por parte de James.

Staraptor por parte de Touka, el cual vuelve a intimidar a sus rivales con tan solo extender sus majestuosas alas.

El combate ya estaba decidido, sus pokémon tenían la ventaja de velocidad y un poder ofensivo suficiente como para terminar el combate. - BlackHawk, con todo a por ese mega Galie: A bocajarro. - Ordenó a su pokémon pájaro que inmediatamente se lanzó en picado.

- DuckHead, Mamoswine es tuyo. Bola sombra. - Antes incluso de que terminase de dar la orden Porygon Z ya estaba comenzando a cargar su ataque para poner fin al combate.

Poco podía hacer ya el entrenador de tipo Hielo frente al panorama que se le venía encima. Con la alta velocidad con la que contaban tanto Staraptor como Porygon-Z, ambos pokémon lanzaron ataques fulminantes que debilitaron a los dos últimos pokémon de James.

Su mega Glaglie fue incapaz de soportar el golpe de tipo lucha que le asestó Staraptor con A Bocajarro. Y Mamoswine, pese a estar con la salud completa, no contaba con las defensas apropiadas como para soportar un Bola Sombra de un Porygon-Z cuyo tipo había cambiado al Fantasma y, además, estaba boosteado.

Por tanto, tras caer debilitados ambos pokémon de James, la victoria fue para la entrenadora Touka.

Con la mirada un poco sombría no puedo más que lamentarme por la derrota y llamar a mis pokémon a sus pokeballs, 

-lo siento amigos, quedé en blanco y no supe que ordenes darles para el combate y al final nos vencieron... La próxima trataré de darlo todo hasta el final junto a ustedes.

Muchas felicidades Touka, una vez llevaste el combate por donde querías no tuve oportunidad para derrotarte, y simplemente quedé estupefacto-

Me acerco a mi rival a estrechar su mano felicitándole por la victoria

-Más te vale no perder, ok? Mira que quedaré muy mal si te derrota alguien más débil que yo, ok? jejeje- le digo a modo de broma para evitar ponerme triste por la derrota.