Merida se encontraba practicando con el arco y las dianas, como hacia cada tarde desde que el invierno había terminado.
El día no estaba nada mal para la muchacha hacia buen tiempo y el cielo estaba mayormente despejado, en el patio de armas solo se escuchaba el silbido de sus flechas y el impacto en los blancos de paja.
De pronto una voz rompió ese silencio
-Sabia que aquí podía encontrarte.- Dijo la Voz de Lady Tyanne a sus espaldas.
La mujer llevaba un vestido largo y blanco, sobre sus hombros tenia una capa del mismo color sujetada al vestido con un broche de ónice en forma de cuervo y uno de rubí en forma de corazón.
Si bien siempre estaba bastante concentrada en los tiros la voz de Lady Tyanna me saco de aquel mundo y me tomo por sorpresa.
Baje el arco , haciendo una leve reverencia a la Esposa de mi Padre.
-Buenas tardes Lady Tyanna, ¿puedo serle util en algo?-pregunte en un tono amable pero sin verla diractamente a los ojos, aun no sabia como reaccionar o como comportarme ante ella y bastaba verla sin poder evitar en pensar en mi Madre y en el lugar que ella debio haber ocupado....trataba de no pensar en todo eso , dejarlo solo para mi.
-No para nada.- Dijo Lady Tyanna, -solo vengo a ver como practicas.- Agregó sonriendo a la muchacha.
-¿Te sientes segura de cara a este torneo? me dijeron que Irán grandes arqueros y no será sencillo ganar.-
Lady Tyanna se acerco un poco más a la muchacha y extendió una mano
-Déjame ver ese arco.- Pidió a la hija natural de su marido.
¿a verme practicar? wooh creo que eso era bueno.
-Como desee My Lady-dije respetuosamente -Para serle sincera es la primera vez que estoy en un evento de tal magnitud, pero dare lo mejor de mi-agregue con cierto orgullo en el tono de mi voz.
Volvi a tomar mi arco, a apuntar para fijar bien el objetivo cuando la esposa de mi padre se me acerco, no pude evitar ponerme a la defensiva e inconcientemente dar un paso atras.Al oir su peticion me acerco.
-Ohh, si , disculpe My Lady-le acerque el arco para que pudiera apreciarlo mucho mejor.
Lady Tyanne tomo el arco y tenso el mismo torpemente, -no sirvo para estas cosas.- nunca soporte el peso de un puñal menos podria yo manejar el arco.- Comento la señora de la casa.
Le devolvio el arco a Merida con una sonrisa sostenida.
Hizo unos segundos de silencio antes de volver a hablar
-¿que sera de mi cuando mi hija se case? me quedare sola entre espadas, armaduras y lanzas.- Lanzo mirando a Merida a los ojos.
Sonrei de una forma amable ante la intencion de Lady Tyanna de tensar el arco.
-No es algo sencillo de aprender , pero si se interesa puedo ayudarla...digo como para pasar el tiempo, si lo desea My Lady-dije en tono respetuoso con una timida sonrisa.
-El casamiento de Constance no debe ser sencillo, pero bueno es por la casa verdad?-comente casi preguntandome a mi misma-La vida de los nobles es algo sacrificada si se lo pone a pensar-agregue.
-Agradezco la intención pero estos brazos viejos no podrían tensar el arco, y mis dedos se cortarían con la cuerda, ya ha pasado mi tiempo de aprender a usar las armas.- Comento Lady Tyanna
-Eso dice tu padre, que es por la casa ¿y que puedo hacer yo? en su momento también me fui de mi hogar y vine aquí dejando atrás a mi familia, Constance tendrá que hacer lo mismo por mas que me duela.
La señora de la casa escucho la opinión de la hija de su marido sobre la vida de los Nobles ¿y dime Merida, es fácil tu vida?
Escuchaba atenta y podia sentir el vacio que Lady Tyanna sentia con la futura partida de Constance, y si....no seria agradable...¿pero que podiamos hacer?
Por primera vez en la conversacion fije mis ojos en la esposa de mi Padre -Lamentablemente las cosas deben ser asi mi Lady, se que ....-dude un segundo en como referirme a mi padre para no ofenderle-Nuestro Lord sera muy cuidadoso de entregar la mano de Constance a alguien quien la merezca y la cuide como se debe-dije en un tono sincero para luego volver la vista al campo de entrenamiento-No busco ofenderle mi Lady, pero personas como yo , quienes somo considerados lacras ante la sociedad noble, contamos con la libertad que muchos de estos no posee-rasque un poco mi cabeza en un gesto algo torpe de mi parte-No se es facil ....pero la libertad no tiene precio, cualquiera persona comun puede ser feliz fuera de los muros del castillo, logicamente la riqueza y la gloria de un noble da muchas facilidades , pero deben sacrificar mucho para ello.....-casi me pierdo entre mis palabras, pero me hizo recordar que fue voluntad de mi madre que estuviera bajo el ala de mi Padre, si no ....estaria fuera de estos enormes muros...me sumergi unos segundos en mis pensamientos...¿porque ella habla esto conmigo? .....no me molesta...solo ...solo me siento...extraña...
Lady Tyanne asintió a lo dicho por la hija de su marido.- Tienes mas libertades pero sabes que el mundo no te tratara con cariño.- Dijo la mujer.
-Yo tuve la suerte de elegir con quien casarme así que en mi cazo tu apreciación no se aplica pero en el caso de Constance es diferente.- Su hija no elegiría a su marido como lo hizo ella y eso le daba pena
-Espero que cuando mi hija se vaya puedas tener un tiempo para dedicarme a mi, me sentiré muy sola en este castillo y vos a necesitar a alguien con quien charlar.-
No iba a ponerme a discutir sobre la libertad, conocia mi temperamento y no era bueno, asi que solo asenti ante sus palabras.
-Comprendo lo afortunada que fue al poder elegir a su prometido mi Lady, pero confio en que mi Padre sadra en manos de quien deja a Constance-trataba de que se quedara tranquila , confia en mi Padre no se la dara a cualquiera que no la mereciera. Preste atencion con cuidado a sus palabras.
-Bueno mi Lady....-comenze diciendo con voz timida-Si asi usted lo cree correcto o de su agrado, puede contar conmigo para lo que nececite-logicamente no era mi mismo que su hija , pero bueno era algo y esperaba no ofenderle.
-Si, se que tu padre hara una buena elección con el esposo de constance y eso me deja traquila en ese aspecto pero solo en ese.- La mujer hablaba con calma y siempre miraba a Merida a los ojos.
-Me agrada escuchar eso, que no soy una mujer muy divertida pero se que te agradara mi compañia.- Agregó con una sonrisa. -Creo que es tiempo de dejarte practicar en paz, tu padre deposito muchas expectativas en ti y no quiero ser yo la responsable de que no ganes.-
No pude evitar sentir como mi rostro se sonrojo por completo ante las palabras de Lady Tyana, era raro que sea asi conmigo o en si mi madre siempre me la hizo imaginar de una manera muy distinta.
-El placer sera todo mio mi Lady-hice una leve reverencia-La dejo seguir su camino, me preocupa mas aburrirla con mi practica que las espectativas de mi Padre-dije con una leve sonrisa bromista en mis labios, para dejar que ella siga su camino.
-Otro dia con mas tiempo te vere practicar ahora debo volverm aun me quedan cosas para preparar antes de partir.- Dijo la mujer sonriendo a Merida, acto seguido giro sobre sus talones con un movimiento elegante y volvio hacia el castillo
Hice una leve reverencia mientras la observaba marcharse, una vez que la perdi de vista segui concentrada practicando.
(Fin de Escena)