Todo a tu alrededor se veía bastante caótico y aunque una parte de ti lo disfrutaba, a otra le inquietaba lo que podía ser de tu futuro.
Entonces, casi como respuesta a tus pensamientos, escuchaste el sonido de una cadena arrastrarse por el suelo. Te giraste para buscar el origen de aquel sonido, pero no diste con este y de repente, algo envolvió tus manos con violencia y te arrastró. Gritaste para que tus compañeros te auxiliaran, pero nadie pareció notar nada, incluso el polvo que se levantaba mientras eras arrastrado pasó desapercibido para ellos.
Cuando aquello cesó, intentaste levantarte, pero no te era posible y desconocías la razón. Sentiste tus muñecas doloridas y fue allí cuando la viste, tus muñecas sangrantes por culpa de unas filosas cadenas que te retenían. Sentías ira, dolor, confusión y temor, pero una silueta femenina apareció frente a ti y te besó con delicadeza al principio, para luego hacer más intenso su tacto, llevándote al borde de la excitación y aunque no era el entorno ideal, te viste absorbido por ese beso.
Luego, sentiste un fuerte dolor en el pecho y viste que unas tenebrosas garras te había atravesado, dejando allí insertada una pequeña esfera negra. No sabías qué era, pero sabías que, de romperse, nunca volverías a ser el mismo. Bajaste la vista y al volver tu mirada al frente, la chica que te había seducido con un simple beso había desaparecido.
Eres el Condenado. Te explico el funcionamiento de tu rol:
- Vas a morir y lo sabes. Por esto, estás preparado.
- Si eres atacado por un rol diferente a los hombres lobo, absorberás ese poder y podrás usarlo una sola vez.
- Si por el contrario eres atacado por los hombres lobo, te unirás a ellos sin miramientos.
- Si por el contrario eres seleccionado en las votaciones, morirás sin remedio.