Partida Rol por web

El montaignés se apresura para recorrer la distancia que le separa de la contienda, saltando a duras penas los troncos en el camino. Una vez cruzado el obstáculo y cerca del combate, se detiene:

...quizás ese engendro no esté solo...

Desenfunda su arma y se queda en alerta por si aparece algún enemigo más.

Además del el asqueroso olor de su añiento, sientes que la cabeza te da vualtas y que un frío te sube por la espalda. De pronto la vista se te nubla y comienzas a sudar frio. Nunca te has sentido tan mal en tu vida como en ese momento, tanto como para temer por tu vida.

Los compañeros de Gabriela son los primeros en llegar en su auxilio. Hanss, como ya se dijo, hiera a la criatura, pero es atacado de una forma extraña por el bicho (le lanza el aliento) y el aiseno cae al suelo como si estuviera enfermo. No obstante, Fiora hace un tiro al aire para espantarlo, lo cual logra a media, pues el enano se pone en alerta por el fuerte ruido pero sisea enrabiado debido a las interrupciones.

En tanto Neira, que viene aún al galope, les grita.

- ¡No pierdan el tiempo! ¡Tírenle tierra!.

- ¿ Tierra? ¿ Eso es una broma? - Pensé cuando escuché aquellos gritos aunque la broma había sido ver a un hombre tan apuesto como el que había visto y luego encontrarme al enano de ojos saltones este.

No entendía nada de lo que estaba pasando, pero comenzaba a creer que es esa tierra había muchos demonios y cosas raras y a falta de ningún plan mejor hice lo que decían y con un ágil movimiento me agaché para coger un puñado de tierra de al lado de mis pies y lanzárselo a aquella critatura como si fuera agua bendita o algo parecido.

- Púdrete enano!!

Gabriela toma un de tierra pero ese bicho, por muy contrahecho que fuera, era muy agil. Además al ver lo que le intentan lanzar hace un amago como si no fuera tierra, sino acido o algo así. Pero su actitud cambia cuando ve a Fiora. Vualeve a sonreir entre dientes y se lanza es pos de ella con una expresión tan lujuriosa que da miedo.

La extraña criatura no parece huir del ruido ni de las armas pero si del puñado de tierra que le lanza Gabriela, lo que hace que se lance a por mi con expresión lujuriosa, ni loca pienso permitir que ese engendro me toque con sus sucias manos pero no creo que me de tiempo a agacharme para coger un puñado de tierra como Gabriela.

Doy una patada al suelo tratando de lanzarle algo de tierra a la criatura, lo que levanto,me temo que tenga más de polvo que de tierra pero espero que sea suficiente y esa jugada no solo me sirva para quedar con el pie dolorido.

¡Alejate de mi engendro asqueroso! Grito en vodacce que es la lengua que utilizo cuando pierdo los nervios.

Fiora levanta una nuve de polvoque detiene al enanno y evita que se acerque a ella, mas ahora se debate en tre volver a hostigar a Gabriela o enfrentarse. Entonces los montoneros que están con ustedes llegan  al claro y lo rodean, tapandose la boca con una mano en caso de que esa cosa vuelva a usar su aliento. Entonces Nicanor toma un puñado de tierra y se lo lanza, llegándole en plena cara, lo que hace que esa cosa huya despavorida entre la malesa.

Entonces Neira se acerca a Hanss y lo examina. Después les dice al resto:

- El trauco lo atacó con su soplo. Se va a enfermar cada ve má. La única persona que puede curarlo en una de las me'icas de lo indios. Tenemos que llevarlo rápido, sino se nos va.

El enano huye a la llegada de los montoneros y yo suspiro aliviada.

¿Estas bien? Le pregunto a Gabriela y acto seguido miro al eiseno y sonrio satisfecha por lo que dicen nuestros guias. Ya os dige que el Destino nos guiaba darle las gracias a esos indios... teneis que aprender a hacer caso a una vodacciana cuando habla de esas cosas, muy rara vez nos equivocamos.

Me quedé un poco sorprendida al ver como de verdad aquella cosa huía cuando le echabas tierra, cosa que aunque había intentado, dudaba que sucediera, pero en realidad había sido efectivo, así que asentí pensativa mientras veía como salía huyendo.

- Sí, yo a parte del estómago revuelto de que esa cosa se me haya acercado estoy bien.. - Dije mirándome aunque en principio no me dolía nada. - aunque creo que me gustaría darme un baño cuando fuera posible..

Lo que no pude evitar a eso fue poner cara de asco.

Levanté la cabeza para mirar a nuestro compañero y luego asentí..

- Vamos entonces, no perdamos tiempo.

Cita:

Quien te dice que acepto ir. - Dice el Eiseno tosiendo. - Paso de ir de maleficio en maleficio. Si tengo que morir no será debajo de las manos de otro brujo asqueroso.

Y al que ose contradecirme se levantará un día con un tiro en la espalda. - Termina amenazando.

Neira se queda mirando con cara de pocos amigos a Hanns. Entonces saca su cuchillo (uno curvo, que parece una cimitarra) y se le coloca en el cuello al eiseno. Entonces le dice:

- No me gusta que me amenacen, meno cuando intentamos salvarte la vida, mierda. No se como será en tu pais, pero acá no matamos por la esparda, sino que metemo el cuchillo en el pescuezo.

Neira muestra toda la intención de cortarle el cuello a Hanns, aunque lo deja en el suelo los mira a ustedes:

- ¿Lo llevamos a la fuerza o lo dejamos pudriéndose aquí? Al final, a mí me interesa una mierda lo que le pase.

O no, claro. No matáis por la espalda pero si cuando están en el suelo incapaz de defenderse ... no me vengas con un falso honor Neira.

Responde Hanns intentando levantarse del suelo (supongo que inútilmente).

No voy a dejar que me toque un brujo, con lo que me puedes dejar aquí.

Termina hablando en eiseno:

Spoiler (marca el texto para leerlo):

Fiora levanta una ceja algo sorprendida por los comentarios del eiseno, le estaba empezando a caer mal pero lo que no sabía es que también era estúpido.

Vaya, yo creía que los eisenos eran valerosos y honorables pero parece que no todos los estereotipos pueden ser correctos... comento con una leve sonrisa negando. Aquí tenemos a un eiseno con miedo a algo de magia y amenazando con disparar por la espalda por escapar y no agradecer a quien le debería la vida por dos veces. Todo un ejemplo de valor y honorabilidad sin duda... Dice en tono irónico.

Poco me importan tus palabras vodaccia.

Responde sin siquiera prestarle atención.

Luego sonríe.

Aunque nunca había oído que llamaran a un esieno esto. ¿Supongo que no has oído hablar de las guerras de la cruz verdad? O a lo mejor piensas que fueron batallas inteligentes y honorables... - Termina burlándose.

Miré al eiseno sin entender demasiado bien qué era lo que debíamos hacer.. quizás con dejarle inconsciente bastaría para que lo pudieran curar, pero si prefería morirse, siendo consciente de lo que suponía el no ir donde esos indios, era cosa suya.

- Suéltale. Si le llevamos obligado en cuanto nos descuidemos buscará venganza por no haber cumplido con lo que deseaba y yo sinceramente, prefiero que se muera él si es su decisión claro está a no volver a despertarme porque me han metido un tiro en la cabeza mientras dormía..

Miré al Eiseno.

- No te ofendas, simplemente respeto tu decisión aunque no la comparta. Prometo darte sepultura cuando mueras..

Florian se queda mirando por un momento al eiseno y niega con la cabeza, como quien desaprieba el comportamiento de un niño pequeño. Seguido a esto, agrega:

- Non, non! Rien ne laissait mourir. Nada de morir y dejarme sin protección. Tú irás a donde estos valientes caballeros te llevaran, que de seguro esos salvajes solo te darán alguna infusión y ya.

"No me quedaré sin una protcción en esta tierra de salvajes"

Sin más, al escuchar lo que dice Florian, los montoneros se acercan al aiseno y Neira le dice:

- Bueno, parece que el señor va a tener que comenzar planificar como matarnos por la esparda, porque aunque no te lo merezcas, te vamo a llevar a'onde lo indios. Si es posible andate tranquilito, mira que no tengo problema en amarrarte, pero eso no va quitar má tiempo.

Y los hombres de Neira ponen de pie a Hanns, que no para de sentir calosfríos y dolores que le recorren todo el cuerpo, y acercan un caballo para subirlo arriba.

Hanns masculla algunos insultos en eiseno ante las palabras de florian.

A Neira le responde.

No será necesario que vigiles tu espalda. Florian es quien paga mi sueldo, si quiere que vaya con los indios iré ... aunque no me guste nada la idea.

Aunque mas le vale que no me vuelvan ha echar otro maleficio o se termina el contrato.