Partida Rol por web

Las sombras del pasado (+18)

Petición de reunión

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16/08/2016, 16:41
Director

Como obtener escenas privadas con otros jugadores durante la partida.

Elegir un lugar que consideréis privado para hacerlo; las almenas, las habitaciones de ese personaje (si dispone de ellas).

Si no indicáis que intentáis evitarlo, y tenéis éxito, siempre os vera alguien hablar. Cuando uno de vuestros personajes entra en una escena recibirá una descripción de lo que ve y allí entrara los personajes que hay y que hacen. La descripción será desde su punto de vista si puede variar algún detalle. Puede que no puedan ver los de la torre donde reside la familia Falcon, a menos que asomaran fuera mirando hacía abajo lo puedan ver una pareja que saliera de los establos creyendo que estaban todos durmiendo.

La taberna, lo puse pensando que tendríais una aldea, podría ser una dependencia del castillo que hace sus funciones y los de las cocinas se ganan unos lunares extra. En si sería el lugar idóneo para un primer contacto.

Modo de funcionamiento:

Creo una enésima escena “Petición de reunión”. Aquí enviáis un mensaje con los que queréis realizarla y donde. Sí esa estancia del castillo u otro lugar no tiene escena antes me la solicitáis argumentándola para abrirla. El argumentármela es justificar que la usaréis para una trama, para recordar que te debe una copa solamente no.

Una vez enviara y aceptada os encontráis allí, recordar que si estáis en la sala de audiencias, al mismo tiempo no peséis estar en los establos y entrándoos en el patio de armas mientras estáis buscando quienes han asaltado una caravana de comerciantes.

Igual que en la vida real no podéis aceptar hacer varías cosas al mismo tiempo en diversos lugares.

El inicio lo tenéis que rolear. Prácticamente todos podéis justificar estar en un momento junto a otro personaje. Entonces podéis después de describir que habláis, le hacéis un reverencia, un abrazo… Le ponéis un mensaje sólo para los dos indicando que le susurráis o le pasáis disimuladamente una nota. El susurro o la nota, recordar que alguno puede que no sepa leer, lo ponéis en “Petición de reunión” indicando donde y cuando:

A media tarde mañana en la taberna, de aquí dos días en el vado del roble partido, en la zona de entrenamiento mañana después de desayunar, en mis habitaciones a la caída del sol…

En algunos lugares cualquiera que pregunte de seguida le dirán que os vio el o quienes lo comentaban, otros puede que si alguien os ve puede encontrar interesante que estuvierais allí como si os llevarais algo secreto entre vosotros.

Notas de juego

Por cierto por si alguien me lo pidiera, ¿como se hace para que una escena la vean sólo sus destinatarios? Los mensajes ya se que es marcándolos sólo a ellos pero me refiero que los otros jugadores no puedan ver esa escena. Una escena llamada “Compra de venenos en Puerto Gaviota” si los demás veían los que iban enviando mensajes, si vas a portada te indica quién ha sido el último que ha escrito en una escena, puede que nunca quieran comer o beber con ellos.

He repetido aquí las normas de esta escena. Y vigilar los destinatarios.

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02/10/2016, 21:05
Vanesha

Zane, si andas aprendiendo a leer y escribir, ¿te parece que abra una escena por aquí de los dos en clase con el Mestre Gilbert?

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02/10/2016, 21:15
Zane

Notas de juego

Por mí guay, adelante. Zane ya sabe leer y escribir, asiste las a las clases para aprender a reconocer estandartes de otras cosas y demás.

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02/10/2016, 21:40
Vanesha

Zane y Vanesha; estudiando.

Otra de las cosas que no le gustaban a Vanesha, erea estudiar  el vocabulario. Si bien entendía la necesidad de aprenderlo, en ocasiones era superior a sus fuerzas y claudicaba con rapidez. La vista fija en una lista de palabras, que cada semana se complicaban, llegando a descubrir términnos que no sabía que existieran. Quizás por eso el Maestre Gilbert, juntase a la muchacha con Zane en aquellos momentos en los que el chico debía repasar aquellos libros con infinidad de escudos nobiliarios. Supuso, que los miembros de cada casa y la geografía de cada una ya serían leeciones particulares. Pero aquellos momentos, que gustasen o no, eran silenciosos, sin interacción, también debían venirle bien al Maestre, pues su labor durante ese tiempo no dejaba de ser una tarea de mera supervisión y podía aprovechar para consultar libros, colocar sus innumerables pergaminos o realizar cualquier otra cosa pendiente.

Vanesha disponía de pluma y papel para escribir las palabras y su significado, pues parecía memorizarlo mejor si lo escribía. Además, se había empeñado en hacer las letras perfectas y tener una caligrafía digna de un artista, así que le encantaba escribir con aquellos ribetes y adornos.

Sentados uno frente a otro en aquella mesa, Vanesha arrancaba pequeños trocitos de papel y hacía pelotitas que iba dejando a su izquierda, como si del motor de su atención se tratase, mientras con la otra escribía tanto la palabra como el significado de la lista que el Maestre le había facilitado. De vez encuando levantaba la vista para ojear aquellos escudos tan coloridos, con distintos motivos...leones, castillos, espadas, todo tipo de animales. Sin duda, mucho más llamativo.

Estando Zane ojeando una de las páginas con aquellos escudos, una de las pelotillas de papel impactó casi en la frente del muchacho, más bien en su flequillo. Al alzar la vista, Vanesha continuaba escribiendo ajena al suceso. Al percatarse de que la observaba, alzó la vista e hizo un gesto silencioso extrañada por aquella expresión, como si se preguntase por qué la miraba, para finalmente continuar con su tarea.

Cambió a una pluma mucho más pequeña y fina y desplegó un pequeño trozo de papel que se utilizaba para los cuervos. Estiró el brazo echando ligeramente el cuerpo hacia adelante para alcanzar un nuevo frasquito de tinta, y con disimulo pinchar a Zane en la mano con la nueva y puntiaguda pluma. Al volver a su posición, apoyó la mano derecha en su rortro, como para evitar que los mechones de pelo la entorpeciesen en su labor. Probablemente era para que, de mirar, el Maestre no pudiera verle el rostro, el cual miraba hacia abajo, hacia su hoja, cada vez más rojo, mientras su pecho se agitaba rítmicamente y una lagrima comenzaba a correr por su rostro. Podría quizás confundirse aquello con un llanto, pero el ritmo rápido de aquella agitación, sin duda pertenecían a una carcajada silenciosa. A un esfuerzo titánico por no romper a reir ante la reacción del chico.  

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02/10/2016, 22:26
Director

Notas de juego

Os copio el mensaje a la escena “Clases del Maestre Gilbert.” Esta escena es para acordar estar juntos en las diversas escenas.