Partida Rol por web

Aquella zona del pueblo estaba demasiado tranquila, es más no se veía a nadie por el lugar, tiendas y demás puestos cerrados, una de dos, algo estaba pasando en aquel lugar o toda la gente del lugar estaba en el casino, aunque Edward optaba por la primera ahora no era el momento de ser curioso, tenían que conseguir los materiales cuanto antes.

Poco mas adelante se podía ver una solitaria persona andando por el lugar, aunque mas bien era un gato humanoide, si bien había oído de aquellas razas era muy raro verlos por este lado del mundo, aunque lo que mas le llamo la atención era el barco de la marina que estaba amarrado cerca del casino, justo a donde se dirigían ellos, solo esperaba poder conseguir el dinero y materiales sin mayores problemas.

Como no podía ser de otra manera caminaba cerca de Shire en dirección hacia el casino, parte del camino nos acompañaron Lux y el nuevo integrante de la banda Edward.

- Hasta aquí vamos juntos supongo. Suerte buscando materiales... aunque viendo como esta el pueblo lo veo difícil, bueno nos vemos a la vuelta -me despedí de ambos

Ahora si había tomado la delantera respecto a la capi y por el camino vi un gato pero estaba vestido y parecía comportarse de forma muy humana, ladeé la cabeza extraña sin entender que estaba viendo. Mi confusión llego a tal punto que me detuve en el sitio y cuando Shire llego hasta mi le señale al gato.

- ¿Tu sabes que es?

Me plantee como hacer la entrada, pero había perdido demasiado tiempo, asique golpee la puerta tres veces y con la otra mano abrí la puerta del despacho. 

- Señor Genome, llevo un rato buscándolo, me vendría bien su ayuda, tengo un caso de envenenamiento, y solo tu puedes conseguirme la cura. ¿Me puedes ayudar? - Entrar así en su despacho podría llevarme malas consecuencias, pero estaba bastante cansado de tanto entretenimiento, si la niña moría, Genome sería quien se lo explicase a su abuela.

Vigilando detenidamente a los guardias en la entrada, MewPaw se percató de la presencia de otros dos sujetos cerca de ahí. Uno alto y una de baja estatura.

Vestían como civiles, pero podrían ser piratas. Piratas como los que lo estaban buscando, por ejemplo.
No había forma de saberlo sin llamar la atención de los tipos cuidando la entrada del casino y el sigilo ya no parecía ser opción con esas miradas sobre él. Esta hubiera sido una situación escabrosa para cualquiera, pero obviamente, no para MewPaw, puesto que ya tenía una estrategia para ese tipo de emergencias, una que siempre funcionaba, sin falta.
El gato rápidamente juntó sus miembros a su cuerpo y obtuvo una posición fija sentado con uno de sus brazos levantado imitando perfectamente a uno de esos adornos de gatos de la suerte.

apenas conocia la mitad de los nombres que dijo,de echo pregunte por pura educacion y mantener una conversacion,pero mientras me decia eso en mi mente solo circulaba una pregunta ¿muestro mi lado bueno al inicio del espectaculo? o mejor ¿inicio con el lado a un mejor? cuando note que termino de hablar,intente mantener el ambiente ensayando algunos movimientos con ella y descansando cada tanto debido mi pierna,hasta.

Bien Por ahora deberia bastar,la vere esta noche, y ¡¡le juro que brillaremos mas que la estrella verde en el escenario!! dijo el gyiojin posando de una inecesaria y  exagerada forma.

Al principio no me di cuenta de a qué se referían pero cuando vi a aquel gatito tan mono, tuve que reprimir todos mis impulsos para no lanzarme de lleno a por él, estrujarlo entre mis brazos y ponerme a acariciarle la barriguita. Pero aún y así mis ojos empezaron a ponerse llorosos y sonrojarme por la emoción de verlo.

.-No se que será pero es muy mono, Capitan apodemos enrolarlo en la tripulación? Por fi, por fi, por fi, por fi, por fi, por fi, por fi.-dije agitando los brazos y los puños cerrados y entonces me acerqué a él con cuidado:-Hola, perdona que te moleste pero................puedo acariciarte la cabeza, eres muy mono!!!-y no pude resistirme a preguntarselo. 

-¡Rayos, una vez más mi peluda y compacta apariencia hace de las suyas! -pensó MewPaw para sí. La situación estaba escalando, ya no sólo se había hecho blanco de miradas, sino que ahora hasta estabamos hablando de mimos-. Aunque unas caricias no vendrían nada mal, después de estos días tan malos una buena rascada detrás de la oreja... -hizo a un lado tales pensamientos. No podía fiarse de la gente frente a él, por lo que sabía en verdad venían a capturarlo  y podrían estar intentando un truco para raptarlo. 
Algunos se hubieran paralizado del miedo, o ir directo a una ofensiva y para acabar con el problema, pero no MewPaw, él tenía la forma de comunicar lo que quería de la manera indicada.

El gato se puso en cuatro patas dando unos pasos hacia atrás. Arqueó la espalda, esponjó el bello de su lomo e hizo un gruñido corto.
Eso era claramente una advertencia a no acercarse más. A MewPaw le parecía un mensaje muy obvio con lo amenazante que debería verse en esa posición. Aunque no contaba que con su corta estatura, más bien parecía una bola de pelo esponjosa haciendo ruidos raros.

Me despedí también de Lux y Edward y seguí mi camino con Ryuta. Antes de que le preguntara sobre el extraño felino ya se había fijado en él, componiendo una ligera mueca que mezclaba sorpresa y emoción. - ¿Es posible que sea...? No tiene mucho sentido que esté aquí, pero recuerdo haber leído sobre algo parecido hace tiempo. Una tribu de seres antropomorfos con aspecto de animal en el Grand Line.

Cuando terminé de hablar reparé en que Lux no se había podido resistir y se había lanzado en su encuentro con intención de adoptarlo. - Cálmate Lux, parece que nuestro peludo amigo no quiere que le mimen.- Aunque yo misma estaba como loca por hablar con el felino y bombardearle a preguntas traté de contenerme; pero era una oportunidad única para aprender sobre una raza que apenas mencionaban los libros del East Blue. - ¿Que hace tan lejos de su hogar alguien como tú?.- Pregunté desde una distancia prudencial para no incomodarle.

Genome estaba arreglando documentación del casino cuando escucha la entrada de Howell. El mafioso le tenía estima a su médico personal y raramente le negaba cualquier ayuda.

¿Un envenenamiento? ¿Qué tipo de veneno? ¿Se trata algo de comida?

Le pregunta mientras cierra el libro de cuentas y le presta atención.

Mewpaw lazon una piedra hacia un lugar alejado de la entrada principal del casino. La piedra se topo con otras e hizo un ruido para alertar a los dos guardas. De mientras el agazapado, se escondía entre las hierbas.

Guarda A: Eh, has escuchado algo? Algo parece moverse entre esos matorrales.

Guarda B: Ve a revisarlo, no se puede colar nadie a la fiesta sino está invitado.

Uno de los guardas se va a revisar que es el ruido, el otro se queda en la puerta. Aunque escondido, eso no lo pudo ocultar de los piratas que le vieron por la espalda. Shire reconocio que se debía tratar de alguien de la raza Mink, una raza en forma animal que residia mas alla del Grand Line. MewPaw pudo notar como la mano de Lux le acaraciaba la cabeza, y no parecía gustarle mucho. Las voces de la conversacion hizo que el guarda que estaba en la puerta mirara hacia el grupo. El otro volvio y se escucho el gruñido que MewPaw ejercicio para alertar a los piratas de no acercarse más.

Guarda B: No he visto nada. Segun ese ruido debe ser algún gato que corre la isla.

Guarda A: Me da rabia que los visitantes se traigan animales y los dejen sueltos. Alli hay un grupo de gente.

Guarda B: No parecen ser peligrosos. Dejalos, si quieren entrar los identificamos. Los invitados ya estan todos adentro.

Solo estaban a la vista Lux, Shire, Ryuta y Edward, mientras MewPaw de cuatra patas seguia oculto entre la hierba al no superar en altura.

Elísea no perdía la ocasión para tocar al gallo y apreciar su suave plumaje. Este se iba acostumbrando a las caricias y se calmaba.

El guardián responde a Alvert sobre su pregunta:

Las mascotas son difícilmente aceptadas, y no quieren a nadie durmiendo por la calle. Para ellos es rebajar el cache del lugar.

Deberías ir a esa mesa de allí. Allí podrás canjearlas por otros productos o incluso dinero. Parece que la suerte está de tu lado. Nosotros debemos ir a otro lugar. ¿Si nos permites?

Tirando levemente del brazo de la chica le indica que se deben ir ya. Ella se despide de Alvert:

Lo siento Alvert, pero tengo que irme. Espero más tarde volvernos a ver. Kiko sigue tan blandito como siempre.

Deja ir una leve sonrisa contenta de verlo de nuevo.

El casino ya se había llenado de gente y no parecía que nadie iba a entrar. El bullicio se notaba y los invitados de la fiesta privada iban yendo hacia el comedor.

Namia se despidió de Dailin hasta la hora del espectáculo. 

Aún queda para nuestra actuación. Deberías visitar el casino y jugar un poco. Puedes hacer contactos si quieres hacerte famoso. Ya cuando nos toque, estaré por aquí. Mucho gusto, Daikin.

Ella se fue por la parte de atrás del escenario y se perdió entre la gente. Se podía escuchar el bullicio dentro del casino, y el ruido de las máquinas tragaperras y otros juegos.

El guardia había ido a revisar el ruido, pero otro se había quedado cuidando la entrada. Bueno, por lo menos era bueno saber que aunque su anonimato no se hubiera visto comprometido por el montón de gente haciéndole preguntas, aún así su plan hubiera fallado.

Cuando la otra chica preguntó sobre él, por fin pudo relajarse. Aunque era muy extraño que alguna forma ella supiera que era un mink, no mencionó nada de buscar a un mink gato, ni nada por el estilo, es más, se veía sorprendida. Eso sugería que ese grupo no iba tras de él.

Viéndose claramente más calmado, se puso de pie y tomó su báculo, el cual utilizó para dibujar un pescado en la tierra, y luego se sostuvo el estómago, tratando de comunicar que tenía hambre. Todo ese intento de infiltrarse en el casino podría ser obsoleto si ellos llevaban algo de comida consigo.
¿Personas que lo acaricien y le den de comer? Esta situación le parecía bizarra por decir lo menos, pero la prioridad en ese momento era llenar su barriga.

.-Pero Capitana, es que es tan mono, snif, snif.-dije aún con cara de niña pequeña que quiere un caramelo y su madre no se lo compra. Pero entonces ocurrió algo que ninguno nos esperábamos.

Vi que el Mink cogía una piedra y la lanzó hacia el casino así que me quedé quieta cuando vi que uno de los guardias acercándose. El gato se había casi ocultado y cuando el guardia estuvo cerca se bufó para alertar de su presencia, entonces el guardia que había venido se alejó de nuevo quejándose del gato. 

Cuando la situación se calmó, el gato salió de su escondite y se puso de pie, cogió el bastón que llevaba, dibujó un pez y se señaló el estómago:-Creo que tiene hambre Capitana. Podemos llevarlo al barco y prepararle algo de comer?-pregunté a Shire. 

    Ko-ko se dejaba querer en manos de la señorita Elisea mientras el señor Coket daba su explicación  del actuar de la gente de este sitio ... plausible pero... - Bueno... pero igual deberían tener sitio para gente con nuestra necesidad... digo, e visto mas de un noble andar con perros o gatos gigantes y dudo que quieran perder ese dinero así como así...

  E-entendido...- dejando que marcharan a lo que vinieran a hacer en este sitio - pronto nos vemos... y tal vez con mas dinero si tengo suerte jajaj... - mientras me llevaba a Ko-ko en la cabeza y llevando con cuidado mis ganancias ... entonces se pueden canjear aquí... cuanto necesitare para comprárme un barco pequeño... quiero dejar de depender de la señorita *...

  llegando al sitio indicado y mirando al sujeto en recepción - B-buenas tardes, v-vengo a canjear estas pelotitas... son las que gane en la maquina de por... ¡allí! - apuntando a la colorida caja de brillos y musica - pa~pachin....ko... ¡s-si...! algo asi se llamaba.

Le mire a los ojos, cuando pregunto lo de la comida me sorprendió, aunque lo oculte en mi expresión ¿Sabría algo?

- Si, una niña se a envenenado al comer algo mal cocinado, su abuela la ha traído hace bastante tiempo, y necesito curarla, pero yo no dispongo de los medios para ello, aunque imagino que tu si los tienes y podrás proporcionármelos. 

Aquella gente si que era extraña, parecía ir recogiendo gente por donde pasaban, a él mismo le habían reclutado así hace muy poco tiempo, la verdad o eran demasiado amigables o confiaban demasiado en la gente.

Edward no tenía mucho que decir ante la pregunta de Lux, él era nuevo en aquel grupo y no sabía muy bien como hacían las cosas, si bien ya era raro que aquel "gato" estuviera allí escondido, algo debería estar tramando, no parecía que fuera agresivo o peligroso, al menos de momento, así que Edward como novato de aquella tripulación seguiría las órdenes de la capitana.

Escuche atentamente la explicación de Shire, el Grand Line... un lugar donde casi cualquier cosa era posible, un mar lleno de peligros y de maravillas, el lugar al que nos dirigíamos y del que posiblemente procedía este gato. Además para subir mi nivel de confusión se dedico a hacer las veces de estatuilla de la suerte. Ese gato hizo que nos volviéramos a cruzar con Edward y Lux a la cual le había atraído mucho el pequeño. En mi vida no es que hubiera sido alguien que sintiera mucha atracción por los animales, es decir por supuesto que me parecían adorables y daban ganas de darles mimos pero no me atraía la idea de tener una mascota que cuidar.

De todas formas mi atención se fue a otro punto cuando los guardias fueron alertados, no aparte la mirada de ellos en ningún momento desde que empezaron a hablar hasta que ambos estuvieran en su puesto de nuevo. Esta situación no era lo mejor para nosotros pero al menos sacamos algo de información útil, el casino estaba vetado para el público solo los invitados podían entrar y ya estaban todos dentro del edificio. Eso sonaba mal...

Entonces volví la mirada hacia el mink y Lux, si que parecía tener hambre y de camino a esta isla si había algo que habíamos conseguido era pescado, tanto como había podía conseguir yo lo cual no era mucho.

- La decisión es suya capitana, tenemos pescado a bordo y no creo que coma mucha cantidad. Además no creo que podamos entrar por las buenas en el casino.

Genome vio con curiosidad como Howell respondía al mencionar la comida. Este le explica dónde puede conseguir ayuda:

Ves a hablar con Hodiar, el cocinero. Le gusta cocinar peces venenosos. Es un experto en ello. Posee una variedad de antídotos por si algún cliente enferma. No me gustaría que alguien le pasara en mi casino, sería una mala fama. También se están poniendo de moda como producto en el mercado.

El guarda que examino el lugar donde cayo la piedra volvio a su posicion al lado de la puerta. Se podia escuchar el ajetreo de las maquinas, la gente jugando y el ambiente de fiesta que habia dentro del casino. Algo usual en aquel lugar.