No estaba mal esto de tener un combate sencillo y rápido, pues cada vez que encontrábamos algo nuevo nos daban "pal pelo". Además, en este caso era mejor pues así podíamos irnos lo más rápidamente posible.
Las palabras de Roxanne me hicieron reír.
- Es que ha visto a Worm y se ha asustado. - Dije bromeando.
De todas maneras, no era el mejor momento para ponerse a hacer bromitas, así que lo mejor sería seguir.
- Sigamos, que aún estamos a tiempo de encontrar algo que nos ponga las pilas. - Y sí, eso no me iba a gustar ni un pelo.
Después de aquel encuentro, y para variar, no tuvieron el más mínimo problema en llegar a la exclusa por la que habían entrado. De hecho los Omegas casi se quejaban de una manera un poco masoca de que había sido demasiado fácil. Al parecer no estaban acostumbrados que todo les saliera tan bien.
Pero lo cierto es que allí estaban, justo a un metro de escapar de aquel lugar. Una vez en el agua sólo tenían que subir a la superficie y de allí al lugar de extracción para el doctor Aarden. El cual al no ver nada fuera se preocupó un poco.
Emm. Perdonen que les pregunte, pero está muy vacio ahí fuera ¿no? ¿Su nave está oculta? No la veo.
Se sobresaltó cuando vio claro que no habría vehículo.
¿Han entrado a pelo hasta aquí? ¿Cómo han burlado la vigilancia del puerto y los Fins que patrullan bajo las aguas?
Templario se puso la palma de la mano delante de su visor —Hemos sido muy sigilosos. Si no les vemos, no pueden encontrarnos.
Rodeó al doctor haciendo el tonto y habló con voz ronca —Soy Dark Angel.
—Oye ¿Creéis que cuando echemos a patadas a los aliens de nuestro planeta harán películas sobre nosotros? ¿Quién os podría interpretar? Yo me pediría a Ryan Reinolds si no hubiera muerto con aquel incidente con la vaselina y el hámster...
Me tuve que reír ante la pregunta del científico, pero es que no me había esperado que preguntara aquello.
- Si te cansas te puedo llegar. Prometo no zarandearte demasiado. - Sonreí de manera divertida, lo cual casi decía que era probable que de tener que llevarlo le hiciera alguna perrería.
Claro que momentos después Templario dijo aquello de las películas y me encogí de hombros.
- Pues pues... no sé, la verdad. Quizás Jennifer Lawrence. - Esa tía me caía bien.
De todas maneras primero había mucho que hacer, por lo que no le di demasiada importancia a aquel pensamiento.
- ¿Seguimos?
Retrocedieron sobre sus pasos hasta llegar al punto donde habían tenido que ir con la ayuda te Templario por el agua. El hombre preguntó y sus dos compañeros respondieron de un modo eficaz, así que Rox no tuvo que añadir nada al tema. ¿Hay Fins bajo el agua? No he visto ninguno. Pelear bajo el agua debe ser más coñazo.
Luego empezaron a hablar de actores que podrían interpretarlos, una salida de tema habitual en el pintoresco grupo que nunca parecía tomarse nada demasiado en serio. Roxanne se quedó pensativa mientras ellos elegían y al final dijo algo. Yo me interpretaría a mí misma. No encontraría a una tía tan guapa para hacer de mí, y con las mierdas raciales seguro que me tocaría una negra. Pasando.
Ante la pregunta de Videshee, asintió. Sí, por favor. Vámonos de aquí. Si hay que cruzar al otro lado, el doctor no puede ir ni el primero ni el último. Es como el enigma ese de la gallina que me ponían en la academia. Temply, llévame primera. Si hay que darse de tortas me divertiré mientras llegáis.
El doctorcito parecía aún no querer darse cuenta de que habían mandado a los mejores a buscarle. Qué manía tenía con preguntar acerca de un medio de escape. Pero Templario y Videshee ya se encargaron de hacerle entender con quien se las tenía que ver.
Entonces el hombre de hojalata volvió a sacar uno de sus temas. Al principio Worm pensó que era otra estúpida forma de perder el tiempo, pero en seguida, viendo como los demás pensaban seriamente en quien podría interpretarles en el supuesto caso de hacer una película sobre ellos, también él se devanó la cabeza. No era fácil encontrar alguien con tan buena planta como el hombre gusano, o al menos esa era su opinión personal, pero al final Worm dio con un nombre y estaba seguro de que sería una buena opción para hacer de él en la gran pantalla.
– Danny Trejo. Ese sí que es un machote con los huevos bien puestos. Ese es el actor adecuado para hacer de mí.
Mientras el Dr.Ardeen se ponía cada vez más palida (el equivalente a V'Sori al menos) de lo escuchaba, los Omegas no le dieron más importancia a lo que les había dicho y volvieron a ser ellos mismos.
Sin más que discutir y mucho terreno por recorrer, o nadar, se metieron nuevamente en las aguas del puerto de Star City y nadaron hasta la superficie. Para sorpresa de todos el traidor alienigena nadaba con facilidad e incluso parecía respirar sin problemas en aquel ambiente.
Una vez en la superficie no tuvieron más que evitar algunas patrullas, la mayoría humanas, y llegar al lugar de extracción final para el científico V'Sori. Les esperaba una nave que ya habían visto otras veces, o parecida, y cuatro soldados de Destrucción. Estos les saludaron y se llevaron a Aarden, el cual antes de irse les saludó efusivamente.
Ha sido un...placer conocerles. Estoy seguro de que podremos hacer grandes cosas juntos y así poder eliminar la tiranía que les ha causado mi especie. Estoy deseando trabajar nuevamente en ustedes. Digo, con ustedes.
Perdón. Todavía tengo problemas con el idioma.
Un par de soldados cogieron a Aarden de manera poco educada e insistieron en llevarlo al interior de la nave. Por supuesto llevaban los cascos puestos, pero lo cierto es que parecían bastante serios. Como si no estuvieran muy agusto con lo que estaban haciendo.
Bueno, pues meto el turbo que este capítulo era basicamente de interludio para los dos siguientes.
Dejo unos días por si queréis decir o hacer algo y lo termino para preparar el penultipo capitulo.
Templario estaba defraudado.
—Menuda misión más fácil. Me alegro de que no te hayan cosido a tiros esta vez, Garritas aunque no de que Rusita no nos deleite con otro striptease, pero joder, yo quería un poco más de acción.
Recordó el mejor momento.
—¿Vísteis como explotó el tipo de la granada? ¡Como una piñata voladora! Puede ser mi movimiento definitivo. Voy a guardar una para el overlord ese. ¿Tendrá boca?
Tenemos... avance?
Roxanne empezó a pensar, mientras observaba al Doctor marcharse, que estaba viviendo algún tipo de síndrome de Estocolmo. Ya se ha pillado de uno de nosotros. Fijo que de mí, o de Videshee. Creo que las únicas posibilidades que tiene son con sus manos de ahora en adelante- ¿un placer? ¿Acababa de usar esa palabra? Lo mismo era gay. Enarcó una ceja al escuchar sus últimas expresiones.
-Aprende bien el idioma o quizá no tengas lengua la próxima vez- dijo la mujer con cara de pocos amigos mientras veía que se lo llevaban.
Las palabras de Templario provocaron que la mujer le enseñara el dedo corazón tal y como le habían estado enseñando, una de las costumbres de la superficie. Te puedo hacer yo algunos agujeros si quieres que Videshee se desnude para tapártelos. También me he quedado con ganas de matar.
El comentario sobre el tipo de la granada le recordó que casi la habían cagado por culpa del hombre de la armadura, pero lo cierto era que resultó tan gracioso que decidió perdonarle la vida. Empezó a reírse a carcajadas recordando la cara de miedo que había tenido el científico antes de irse al otro barrio. Seguramente nunca imaginó en convertirse en una piñata. Pero nuestro trabajo es sorprender al público. Quiero una medalla cuando esto acabe, sino la robaré yo misma. Miró a los demás y se llevó las manos detrás de la cabeza mientras se estiraba. ¿Quién invita hoy?
Después de aquello sólo quedó volver al cuartel general, o edificio ocupado, que tenían los Omegas. La tónica de después de las misiones era ir a divertirse a lo grande, y esta no iba a ser menos. No obstante cuando llegaron sintieron una presencia que les llamaba a la sala de guardia. No era que no pudieran negarse, pero algo les decía que no sería buena idea hacerlo.
Cuando bajaron se encontraron con una imagen holografica del Dr.Destrucción.
Bien hecho Omegas. El Dr.Aarden ya está en una de mis instalaciones y será reeducado para tener la completa seguridad de que está de nuestro bando. Sus conocimientos nos serán muy útiles, y servirán para adelantar nuestro plan de ataque si realmente es capaz de hacer lo que dice.
Caminaba por la sala como si estuviese allí, aunque cuando atravesaba una silla o columna uno recordaba que era una simple imagen.
Necesito que estéis preparados para cuando os llame. Tenéis que estar centrados y no organizar ninguna de vuestras locuras habituales. Después de lo de hoy seguramente os estarán buscando aún más concienzudamente que antes. Y no podemos permitirnos ningún desliz ahora mismo. Sois mi grupo principal. El más capaz y en el que más confio. NO me defraudéis.
Un momento estaba ahí, y al siguiente sólo el recuerdo de su imagen. La armadura, como siempre, ocultaba su voz haciendola bastante mecánica. No obstante podía notarse su determinación. Su voluntad de ganar. A cualquier coste.
Que el grupo de Omegas le hiciese caso o no ya es otro cantar.
Bueno. Pues cierro capítulo. Aunque si queréis quejaros o hacer algo podéis todavía mientras preparo el siguiente.
Eso sí, me gustaría que me dijeráis si váis a hacerle caso o no a Destrucción. Que no tenéis por qué. Que ya sois mayorcitos. XDDD
Algo me decía que aquel hombre no había dicho aquello sin querer, pues seguro que era uno de esos médicos chungos que hacían experimentos con gente con poderes como nosotros.
- Cuidado. A los demás también nos gusta medir nuestros límites con pacientes vivos. - Fue mi respuesta, pues estaba claro que era rubia, pero de tonta no tenía un pelo y quería dejarle bien claro que como volviera a pensar en ello lo mandaría a su planeta de una patada en el culo.
Destrucción parecía esta haciendo uno de esos cursos absurdos de cómo tratar a tus empleados, pues al menos, se estaba esforzando para que no tuviéramos ganar de arrancarle la calavera cada vez que nos hacía llamar.
- Diría que intentaremos portarnos bien, pero tenemos a Templario... - Me reí al decir aquello, porque después de la liada de la granada, ya me podía esperar de él cualquier cosa.
Por lo demás, no dije nada más, a fin de cuentas ya había quedado todo dicho ¿no?
Eramos los más capaces y los mejores. Por supuesto, asentí a las palabras del Dr. Destrucción.
Al doctor le habíamos dejado con una buena amenaza de Videshee, que pertenecía al grupo más letal del universo, capaz de cumplir todas sus amenazas y jugártelas de la manera más chunga: Las mujeres.
La miré desde dentro del casco —¡Eh, nunca es culpa mía! —refexioné— Entonces a quedarse en la base. ¿Pedimos comida? ¿Y bebida? Si nos quedamos aquí dentro difícilmente podemos liarla demasiado.