Partida Rol por web

Sí, en el juego original debería de haber sido así. Pero no lo voy a aplicar; me parece un poco putada, y es más divertido cuando hay más roles. Así que de anciano sólo tenía la doble vida, en caso de que fuera atacada por los lobos.

Aish, disculpa en serio... al ir poniendo que los roles estaban activos, he llegado al tuyo y me he quedado fría vov. De todas formas, sigues pudiendo coger el del Conall, si quieres. 

No, no te preocupes. Teniendo en cuenta que no le he visto actuar, sería como coger un rol al azar y a ciegas.

Me esperaré a ver quién es el siguiente... Si llego viva para entonces. ^^

Máster, duda importante:

Si tomase el rol de Phil no se sabría lo que era. ¿Se diría activamente que no se sabe, o parecería que no tenía nada?

Se diría que tenía un don desconocido.

El elegido para morir esta noche es Phil Darrell. ¿Quieres adoptar su don?

Es realmente tentador... Me lo pienso y en unos momentos te digo ;)

Estaré expectante o.o

Llegado el momento Michelle tuvo que tomar una decisión, y ambas opciones eran tentadoras.

Por un lado descubrir la verdad. De hecho iría mucho más allá: sería la única que supiera lo que estaba pasando realmente, pudiendo jugar con esa información a su favor. Además a estas alturas estaba claro que todos confiaban ya en ella. Incluso si Phil era un infiltrado tenía ya en su mente la gente a la que eliminaría, y en qué orden. Charles, por sus vigilancias nocturnas. Zarina caería en votaciones... Y luego sería coser y cantar.

La idea de ser la única superviviente alimentaba su orgullo. Sería como demostrar que ella estaba por encima de tantos Alfas. A lo largo de los días muchos habían demostrado no tener el nivel necesario, ni mucho menos. Sería como una especie de purga.

Pero por otro lado hacer todo eso implicaría acabar del lado del Gobierno, volviendo a encapsularse como hasta el momento. Los días aquí encerrada habían supuesto un reto, y le habían ayudado a despertar. Aún echaba de menos el soma, pero ahora las cosas habían cambiado. Sería renunciar a todo eso.

Michelle echó cuentas de los que quedarían tras las votaciones. Charles, Dolores, Monica, Sasha y Zarina. De todos ellos había al menos tres que le parecían estúpidos. Prácticamente deltas. Si por Michelle fuera podrían morir, y ni ella - ya tan acostumbrada a la muerte - ni el mundo notarían la diferencia. Ni siquiera tenía claro que fueran de verdad capaces de pensar por sí mismos.

Probablemente este era el momento más difícil de todos desde que había llegado al lugar. Hasta ahora había sido un reto lógico tras otro. Observar, escuchar, analizar. Desenmascarar a los asesinos. Y sí, quizá hubiera cometido algún error como con Charlotte, - un error sin importancia - pero desde luego no lo estaba haciendo nada mal.

Con un pequeño suspiro Michelle se dio cuenta de que la hora se acercaba, y estaba dejando pasar una vez más la oportunidad. Su oportunidad. Sin embargo eso cada vez le parecía menos malo. Salir de allí sin haber hecho uso de ella era otra forma de triunfo.

Y entonces se dio cuenta. No quería tomar nada de Phil. A pesar de su determinación de desconfiar de todo y de todos, si aquel chico era un infiltrado era el único que la había engañado realmente. No encubriría lo que él hacía. No le ayudaría a ser recordado como un mártir, sino que dejaría que - si de verdad era de ellos - todos tuvieran claro le monstruo que era.

Por fin en el momento de la votación Michelle mantuvo un momento los ojos cerrados, tratando de decidirse. Se daba cuenta de que el mayor motivo para unirse a los infiltrados era demostrar que era superior que todos esos falsos Alfas de los que había estado rodeada en los últimos días. Y aquello no era malo. Sin embargo, tratando de analizar el problema de una forma más consistente mil problemas podrían surgir si intervenía. Si alguien sabía lo que ella podía hacer y Phil era inocente no importaría que negase haberse unido a los infiltrados: darían por hecho que lo había hecho. Si él era el último, lo cual era bastante plausible, sería ella contra todos, y a pesar de que ella fuera mejor en todos los aspectos siempre podían tener un golpe de suerte. Sólo Ford sabía cómo podían desarrollarse los acontecimientos.

Y cuando quiso darse cuenta el momento había pasado, y ella no había hecho nada. Respiró aliviada: probablemente era lo mejor.