Partida Rol por web

mmm... guau... esta chica tiene unas manos de oro... ¡que relax!

¿esta miel se puede comer? digo mientras instintivamente me llevo el dedo con un poco de miel a la boca

Cuando la saboreo me doy cuenta que la chica cada vez me masajea más lentamente y de una manera más sensual... ¡ups! oh dios mio... me estoy excitando un poco ¿qué hago? ¿se lo digo? ¿le digo que pare o la dejo seguir? ¿y si se molesta y me dice que ella no me está haciendo nada y que soy una calentorra? mejor la dejo que haga lo que quiera, a lo mejor es parte del masaje...

Lucy sigue con el movimiento de sus manos y dedos cuando le haces la pregunta -Claro que me lo puedes comer.. Lucy se queda como algo avergonzada sobre sus palabras que le han salido del alma. -Vaya, seré estúpida-.. la miel, me refiero- Da un suspiro interior y mas o menos ha arreglado su "instinto" sexual.
-Ya está- Dice entre calores -Despues de cinco minutos se te secará.. se chupa dos dedos seguidamente uno detrás del otro para quitarse un poco de miel que habia en ellos. -Toca la espalda, y esta te la hare con chocolate negro, vas a tener que quitarte las braguitas..- Lucy esta preparando en una mesita de madera el chocolate para masajearte la espalda mientras pasan esos cinco minutos..

¿que me quite las braguitas? joder... no me lo puedo creer pero... me está poniendo, pero si a mi no me gustan las chicas... estoy confusa...

Vale digo tímidamente mientras espero a que se seque la miel

Me va a poner chocolate en la espalda... con lo que me excita el chocolate... ufff

Mientras te llevas las braguitas Lucy prepara el chocolate en otro cuenco plateado y empieza a removerlo con la espátula a la vez que se gira hacia ti, ya que en ese momento te daba la espalda.

-Perfecto, ¿te das la vuelta?- Deja tiempo para que te des la vuelta y aprovecha para quitarse la fina bata blanca que cubría parte de su cuerpo y la deja caer como una cascada por su espalda. -Voy a ponerme encima tuya, si te peso me lo dices.. Se sube a la camilla y se sienta en tu trasero flexionando las piernas para tener toda tu espalda a su vista. Se frota las manos un poco para que el contacto no sea tan gélido..voy a darte un masaje primero con mis manos- Sus dedos juegan con tu espalda haciendo movimientos verticales muy suaves durante unos minutos, ella se inclina hacia ti y empieza a dar soplidos cerca de tu cuello -¿joder, y si no le gusta?- Veo que esta muy relajada y me atrevo a mordisquear su cuello con mis dientes muy suavemente y besitos cortos por su espalda..

Ohhhh... guau... es estupendo digo cuando empieza a masajearme pero de pronto empieza a besarme y a darme mordisquitos, me quedo en silencio pero relajada

Creo que esto ya no forma parte del masaje... ¿o si? Bueno, tú dejate hacer que tan igual te gusta...

Me encanta lo que me haces digo tímidamente para romper el incómodo silencio

-Bueno, al menos le está gustando-

-Me encanta tu piel..- Lucy sigue con sus besos hasta separar los labios de su espalda y volver a jugar con sus dedos por ella, de vez en cuando arrastrando sus uñas por cada centímetro de la espalda. -Ahora tocan los muslos.. Me deslizo por sus piernas hacia tras para tener su trasero y parte de sus muslos ante mi, dejando algo mas alejada la espalda. Empiezo a masajear sus piernas y espero que no se sienta incomoda, si es asi paro.

Masajeo sus piernas presionando mis manos sobre sus muslos, hasta que poco a poco mis manos van a su sexo y empiezo a frotar tres dedos por su sexo muy suavemente..-Voy a ponerte un poco de chocolate..- Con la mano libre cogo la espatula y la refriego un poco por su espalda para que ese espeso chocolate empiece hacer su función. Sigo frotando su sexo mientras con la otra mano hago rotaciones para masajear la espalda con ese chocolate..

¡Dioooos! no sabía que una mujer supiera hacer tantas cosas a la vez.

Sí, ponme lo que quieras, el chocolate me encanta, es una de mis golosinas favoritas digo algo inocente pero muy excitada.

Dejo que Lucy haga conmigo lo que le apetezca... después de unos minutos tocándome y masajeándome empiezo a sentir una sensación muy familiar de humedad en ciertas partes...

El calor del chocolate en mi espalda, el aroma de la habitación y esa exótica mujer me nublan los prejuicios y empiezo a dejarme llevar por la situación, lentamente y con cuidado voy abriendo las piernas para facilitarle el acceso a la masajista a zonas más interesantes...

-Vaya, no me esperaba llegar tan lejos..- Pienso al ver como abre sus piernas lentamente. Entonces me siento mas tranquila al verla tan relajada por mis caricias. Introduzco un dedito y a continuación otro en su sexo moviendolos delicadamente y en rotaciones.. -De acuerdo, tú relájate..- Digo al tiempo que saco los dedos para lubricarlos con mi lengua y volverlos a meter inmediatamente después y seguir con el mismo proceso de antes hasta que la respiración de Monic se altere. A la vez masajeo su espalda con mi buena mano y lubricarla con el chocolate..-¿Quieres probar el chocolate?- Susurro para no cortarle su relajación..

No puedo evitar soltar un gemido de placer cuando introduce sus delicados dedos dentro de mi mmm...

Tengo curiosidad... a ver qué sabe hacer esta masajista... ¡ja! menudo día llevo hoy...
pienso divertida

¿Que si quiero chocolate? por supuesto, me encanta le digo suavemente mientras sonrio

-Mmmmm, a mi también me encanta..- Dejo de rozar su sexo con mis dedos y me escurro por su cuerpo para tener mas cerca sus labios..-Espero que te guste, tu dejate llevar..- Introduzo mi dedo indice dentro del cuenco de chocolate negro y me lo llevo a la boca lamiendo sensualmente. Aun sin tragarme el chocolate que hay dentro de mi boca, acerco mis labios a los suyos para saborearlos y dejar que las lenguas peleen con un morreo cariñoso y muy dulze..

Cierro los ojos y me dejo hacer, noto como la exótica mujer me besa con sus cálidos labios y llega a mi boca el sabor del chocolate.

Nunca había hecho nada parecido, por ahora no está mal... pero es un poco raro que sea una mujer... bufff va a ser difícil correrse sin penetración...

Con los ojos aun cerrados y aprovechando la cercanía comienzo a acariciar la espalda de la masajista muy suavemente de arriba a abajo, primero con la yema de los dedos y luego con toda la mano.

Llegas a casa, despues del gran masaje con la asiatica y la verdad que tu puso bastante a tono sin esperartelo y contenta con mi nueva compra, pero realmente satisfecha por el excitante encuentro con el chico de la tienda. Sacas de la bolsa la falda que te comparaste y la miras encantada. No lo necesitabas, pero te gusta comprar.
Vas al baño y dejas correr el agua de la bañera, hasta que sale caliente, pones el tapón y echas unas sales que en el acto perfuman agradablemente el baño.
Llamas a un restaurante asiático y pides tus platos preferidos, incluso los más caros, adoras concederme caprichos, te hace sentir bien.
Enciendes unas velitas y pones un cd de relajación, donde se oye la lluvia cayendo sobre el mar, truenos y las notas de un piano que lo acompaña todo.
Cierras los ojos y te sumerges en el agua y en tus pensamientos antes de ir a la playa..donde probablemte veas a Mario..