Un pozo de negrura absoluta se abre a los pies de los tres hombres y el peluche. Sus bordes, desdibujados, parecían unas mandíbulas cuajadas de dientes dispuestos a devorar todo cuanto se encontrar a su alcance. En menos de un latidos, los tres comienzan a hundirse en aquella ausencia de luz bajo la atónita mirada de la reportera, que solo acierta a susurrar un - ¡La cámara! - antes de ver como su gran noticia desaparecía ante sus ojos sin dejar el menor rastro de su paso. Lo último que ve Cofre antes de hundirse en su portal es el destello azul de la joya incrustada en el pecho de Freeze. Lo último que siente Freeze antes de ser tragado por el poder de Cofre es un frío intenso pero nada molesto en su pecho...
Firen permanece ajeno a las conexiones místicas de sus dos compañeros de viaje.
Y os toca esperar a que otro pj llegue a la zona, que os tenéis que encontrar. Será en breve, lo prometo.