-¿Marie, has preparado ya mi gabardina? Pero cómo puedes ser tan inepta. Te pago solo por una razón, por una sencilla razón: para que estés ahí siempre que lo necesito. Y ni siquiera eso eres capaz de hacer. Qué le vamos a hacer. No se hizo la miel para la boca del asno. Y hay quien no llega a más. Largo. Estás despedida.
Ni siquiera me giré para verla marcharse. No merecía ni un segundo más de mi atención. Era la sexta o la séptima doncella que pasaba por allí aquel año y ninguna, absolutamente ninguna, había demostrado estar a la talla de la difunta Rose. A lo largo de mi vida había estado acostumbrada a una cosa, algo que Rose siempre sabía hacer a la perfección: quería lo que pedía, tal y como lo pedía. Si quería la leche templada, significaba que la quería templada, ni muy fría ni muy caliente. En su punto. Si decía necesito mi bolso y mi gabardina ahora, era ahora, no dentro de cinco, ni tres minutos. Órdenes sencillas que esperaba que fueran cumplidas sin dilación. No soportaba la imperfección ni la mediocridad. Me sacaba sencillamente de mis casillas.
Quizás la culpa de esto la tuviera mi madre, mi bien amada madre. Desde la cuna, me crié entre algodones. Una princesita rubia y pálida de ensoñadores ojos azules nacida en el seno de una aristocrática familia británica trasladada a Estados Unidos. Mi padre, además de ser duque de Sutherland, también era embajador del Reino Unido en territorio americano, de ahí que nuestro hogar se hallara a tantos kilómetros de distancia de nuestra amada tierra, del único lugar sobre la faz de la tierra al que me enorgullecía llamar patria: Inglaterra.
A pesar de haber pasado prácticamente toda mi vida en suelo americano, mis costumbres, mis tradiciones y mis modos y actitudes eran puramente británicos. Mis exquisitos modales jamás pasaron desapercibidos allá dónde iba, ni siquiera cuando no era más que una cría, contrastando siempre con aquel paradigma de barbarie y mala educación que, a mi parecer, representaba la sociedad americana. Cuerpos vacíos y mentes vacías, movidos tan sólo por los más primarios instintos. En toda mi vida nunca, jamás, había encontrado una mente digna de elogio, jamás, a pesar de mi belleza y mi inteligencia, había conseguido encontrar algo más que un mero entretenimiento, que una pasión pasajera de una noche que acababa por esfumarse a la mañana siguiente, cuando el deseo y la pasión dejaban paso al intelecto y la elocuencia.
El tiempo pasó y llegó mi 25º cumpleaños. Hasta entonces, mi vida había sido la de cualquier niña de alta cuna, rodeada de todo tipo de lujos, educada en los mejores colegios, con los mejores maestros. Cuando terminé el instituto continué mi formación, dispuesta a seguir los pasos de mi padre. Después de todo, me había criado entre embajadores, príncipes y recepciones. Aquello era mi vida, el ambiente donde mejor me desenvolvía y cada vez que veía a mi padre, me imaginaba con algunos años más, ocupando su lugar en aquellas elevadas charlas entre miembros del cuerpo diplomático.
Lo que no esperaba era que aquello sucediera tan pronto.
Como bien he dicho, era mi cumpleaños. Aquel año había decidido salir con mi grupo de amigos, un selecto grupo que apenas se podía contar con los dedos de una mano pero que para mí siempre había resultado perfecto e infalible. Habíamos reservado mesa en uno de los mejores restaurantes de la ciudad y Peter, mi mejor amigo y eterno pretendiente, se había esforzado para que aquella mesa fuera en un espectacular reservado, con todo lo imaginable a nuestro alcance. "No todos los días se cumplen 25, Bella" me había dicho cuando llegamos y vi la sorpresa, satisfecho con su obra que, ciertamente era perfecta.
Sin embargo, a media cena, todo cambió. Mi móvil comenzó a sonar. Era mi madre. Por un momento pensé que quizás quisiera unirse a nosotros, o que era posible que alguien hubiera hecho llegar algún regalo a casa para mí.
Recuerdo que la sangre se me heló, y que la sonrisa se congeló en mi rostro cuando escuché la voz de mi madre, pronunciando aquellas palabras que jamás olvidaré: mi padre había muerto.
No sentí pena, ni angustia, ni tristeza, ni alivio. Hasta aquel momento, creía haber querido a mi padre, suponía que lo amaba, como todas las hijas aman a sus padres. Siempre nos habíamos llevado bien y aquella simpatía que él despertaba en mí siempre había sido interpretada por mí como el más puro y desinteresado de los amores.
Pero no era así. Ahora, allí, con la voz de mi madre repitiendo mi nombre al teléfono, y mis amigos observándome con gesto de estupefacción, no sentí absolutamente nada. La más total y profunda indiferencia. Y lo peor, es que ni siquiera me sentí mal por ello. Sabía que aquello no estaba bien, que debería considerarme una mala hija, un monstruo incapaz de amar a su propio padre. Y, sin embargo, lo único que sentía era una ligera dicha: ahora aquel puesto, aquella posición con la que tanto había soñado, estaba vacío. ¿Y quién mejor que yo, la desvalida hija del embajador fallecido para ocuparlo?
Una semana después del entierro ocupé mi nuevo cargo. No fue demasiado difícil convencer al responsable en cuestión de que yo era su mejor baza. Siempre se me han dado bien maquillar la realidad para que cada uno la vea de la tonalidad deseada. Y aquella no iba a ser una excepción.
Mi madre volvió al Reino Unido y yo no sólo heredé el puesto de mi padre, sino también su título. Me convertí en la duquesa de Sutherland con tan solo 25 años algo que, no lo negaré, he disfrutado enormemente desde entonces.
Ya hace año y medio de aquello y lo cierto es que estoy más que satisfecha de mis logros. Sin embargo, no puedo evitar sentir cierto hastío cuando miro hacia el futuro. Este año y medio ha sido emocionante, no lo negaré. Muchos contactos por hacer, muchas fiestas a las que acudir, muchas posiciones que escalar.
La cuestión es bien sencilla, ¿Y ahora qué? ¿Cuál será mi siguiente paso? Hace algunos meses que ando buscando una nueva meta, un objetivo que esté a mi altura. Necesito más, quiero más, lo quiero todo, y no pienso conformarme con las migajas del resto.
Quizás por eso he decidido acudir a esa fiesta. Ni siquiera sé quién ha enviado aquella extraña invitación. Esta vez no me he molestado en comprobar, como de costumbre, quien es el remitente. Tampoco me ha importado rechazar la invitación de Peter de celebrar, como cada año, juntos, el fin de año. No, este año no. Este año será diferente. Una fiesta exclusiva, en un lugar exclusivo, fuera del alcance de toda esa chusma sin clase y de todo aquel que no tuviera una invitación.
Un lugar que, con casi total seguridad, presupongo que estará a la altura de mis expectativas.
En cualquier caso, de algo no hay duda: saludaré al nuevo año como se merece. Como ambos nos merecemos.
Pnjs:
Nombre: Peter Colleman
Edad: 30 años
Relación: Desde siempre, Peter ha sido el eterno pretendiente de Isabella. Desde pequeños les ha unido una profunda relación de amistad que, sin embargo, se ha quedado en eso. Aunque Peter siempre ha sentido algo más por Bella, lo cierto es que ella no ha terminado nunca de encontrar en él al hombre con el que compartir su vida.
Aún así, es la persona en la que Isabella más confía y han acabado liándose alguna vez que otra, aunque la cosa nunca ha llegado más allá de una noche.
Es ambicioso, y elitista, aunque quizás, para el gusto de Isabella, se preocupa demasiado por lo que puede opinar o pensar el resto del mundo. Además, en cuestiones morales, sigue teniendo demasiados escrúpulos como para que Isabella termine de entenderse con él.
Nombre: Albert Black
Edad: difunto
Relación: se trata del difunto padre de Isabella. Duque de Sutherland y embajador del Reino Unido en suelo americano, pocos son los que, en aquel mundillo no conocía al señor Black.
Sin embargo, Isabella no se está quedando atrás a ese respecto. La hija del difunto señor Black ha conseguido hacerse un hueco en ese mundo de diplomacia y alta alcurnia al que siempre han pertenecido.
En cuanto a la relación entre ambos, Albert siempre fue un padre cariñoso, que no dudó en llevar a su hija a todo tipo de actos, abriéndole camino en un mundo tan difícil como aquel, en el que las apariencias lo rigen todo.
Nombre: Margaret Black
Edad: 53 años
Relación: es la madre de Isabella y, viéndola, no es difícil adivinar de dónde ha sacado la belleza.
Eterna mujer florero, siempre ha basado su existencia en manipular a su marido, hasta el día de su muerte, para obtener todo lo que se propusiera.
Es de ella de quien Isabella ha aprendido todo lo que sabe y es a ella a quien Bella más se parece.
Frívola, altanera, clasistas y manipuladora, Margaret nunca ha dudado en llevarse por delante a quien fuera necesario con tal de conseguir sus intereses.
Mantiene con Isabella una buena relación, llegando a ser prácticamente amigas y confidentes, aunque Margaret jamás ha llegado a perdonarle a Isabella que no le diera una oportunidad a Peter quien, en su opinión, sería el yerno perfecto.
Nombre: Rachel White
Edad: 25 años
Relación: es la mejor amiga de Isabella desde que tiene uso de razón. Rachel siempre ha sido la hermana que Isabella nunca tuvo, su amiga y confidente, y su mejor compañera en fiestas y otros eventos.
Ambas siempre se han entendido a la perfección y, curiosamente, es la única persona que no le ha insistido en el tema de Peter.
A pesar de que podría interpretarse como un intento de Rachel de no presionar a su mejor amiga, lo cierto es que en más de una ocasión Isabella la ha sorprendido con la mirada fija en Peter, como embelesada.
En cualquier caso, es algo que, lejos de enfadar a Bella, siempre le ha resultado divertido. Jamás han hablado del tema pero, si Rachel lo sacara, Isabella la animaría a intentar algo con Peter sin dudarlo. Al fin y al cabo, ella sigue pudiendo tenerlo cuando quiera...
Nombre: Isabella Black |
Naturaleza: Perfeccionista |
Sire: |
Jugador: Valysse |
Conducta: Competidor |
Generación: |
Crónica: Asamblea de bestias |
Concepto: Aristócrata diplomática |
Clan: |
Atributos
Físicos (3) |
Sociales (7) |
Mentales (5) |
---|
Fuerza |
•• |
Carisma |
••• |
Percepción |
••• |
Destreza |
•• |
Manipulación |
•••• |
Inteligencia |
••• |
Resistencia |
•• |
Apariencia |
••• |
Astucia |
•• |
Tu si que eres bonico :*
Talento (13) | Técnicas (9) | Conocimientos (5) | |||
---|---|---|---|---|---|
Alerta | Armas CaC | Academicismo | •• | ||
Atletismo | Armas de Fuego | •• | Ciencias | ||
Callejeo | Conducir | • | Informática | ||
Empatía | •• | Etiqueta | ••• | Finanzas | |
Esquivar | •• | Interpretación | Investigación | ||
Expresión | ••• | Pericias | Leyes | ||
Intimidación | Seguridad | Lingüistica | •• | ||
Liderazgo | ••• | Sigilo | ••• | Medicina | |
Pelea | Supervivencia | Ocultismo | • | ||
Subterfugio | ••• | Trato Animales | Politica | ||
Lingüistica: (Inglés), Francés, Alemán.
Expresión: Oradora
Academicismo: Diplomacia
Ala, ala.... xD
Tu tienes el ok por guapa :D :D :D
Conciencia | • |
Autocontrol | •••• |
Coraje | ••••• |
Trasfondos:
Influencia: Tienes a la gente cogida por el pescuezo. Ya sea por tu dinero, tu prestigio, tu posición social, tu cargo, chantaje o mil y una formas más de control. La influencia mide tu capacidad para influir en la sociedad humana, sobretodo en la policía, la burocracia o las finanzas. Debes definir en que ámbito eres influyente y el porqué.
• Moderadamente Influyente, importante en tu barrio.
Como miembro del cuerpo diplomático, Isabella es de sobra conocida en los circulos más influyentes. Eso, obviamente, le abre muchas puertas en más de un sitio cuando necesita algún favor, o simplemente agilizar un trámite... o conseguir algunas entradas para una fiesta.
Recursos: Este recurso define tu fuente financiera o tu acceso al dinero. Una elevada puntuación no te da un acceso directo a liquidez o efectivo, sino más bien es un indicativo de tu nivel de vida, tus posesiones y tu poder adquisitivo. Debes mencionar que posesiones tienes. Además, todos los meses recibirás cierta cantidad de dinero, que deberás indicar de donde procede (Por ejemplo, ser dueño de una tienda, o ser un asalariado en una fábrica).
•••• Rico: Miembro de la clase alta. Una mansión y varios coches. Si lo liquidaras todo tendrías unos 500.000$ en metálico. Ingresos de 9000$ mensuales.
Isabella es rica. Mucho. No solo como miembro del cuerpo diplomático, sino también como miembro de la aristocracia británica y como única heredera de su padre, disfruta de un patrimonio bastante rico que incluye una casa enorme, un buen coche y una cuenta bancaria bastante llena de ceros.
Ahora mismo se queda asi. Luego ya me subo otras cosillas :D
Muuuuuuuuu bien. Muuuuuuuuuuu bonica. 20 Puntos de Gratis.
Puntos gratuitos:
Trasfondos:
Contactos: Conoces a gente por toda la ciudad, y cuando te pones a hacer llamadas telefónicas puedes lograr una enorme cantidad de información. Los contactos son gente a la que puedes sobornar, manipular o amenazar para que te haga favores, pero también puede tratarse conocidos importantes que pueden ayudarte en sus especialidades. También hay conocidos de menos importancia, simplemente, gente que conoces como ese portero de discoteca que llevas saludando todos los sábados por la noche, que no tienes que especificar. Por supuesto, a todos estos contactos tendrás que convencerlos para que te ayuden, o te digan lo que buscas.
••• Tres contactos importantes.
Influencia: ••• Tienes una buena posición o influencia, importante en el estado.
Habilidades:
Talento (13) | Técnicas (9) | Conocimientos (5) | |||
---|---|---|---|---|---|
Alerta | xx | Armas CaC | Academicismo | •• | |
Atletismo | Armas de Fuego | •• | Ciencias | ||
Callejeo | Conducir | • | Informática | ||
Empatía | ••x | Etiqueta | ••• | Finanzas | |
Esquivar | ••x | Interpretación | Investigación | ||
Expresión | ••• | Pericias | Leyes | ||
Intimidación | Seguridad | Lingüistica | •• | ||
Liderazgo | ••• | Sigilo | ••• | Medicina | |
Pelea | Supervivencia | Ocultismo | •x | ||
Subterfugio | ••• | Trato Animales | Politica | x | |
Atributos:
Atributos
Físicos (3) |
Sociales (7) |
Mentales (5) |
---|
Fuerza |
•• |
Carisma |
••• |
Percepción |
••• |
Destreza |
••x |
Manipulación |
•••• |
Inteligencia |
••• |
Resistencia |
•• |
Apariencia |
••• |
Astucia |
•• |
Trasfondos: 3 puntos contactos + 2 puntos influencia.
Habilidades: +2 alerta (4 puntos) + 1 esquivar (2 puntos), +1 ocultismo (2 puntos), +1 política (2 puntos)
Atributos: +1 punto (5 puntos)
Ale nena bonica, ponlo todo junto y todo perfecto :D
Contactos:
Nombre: Isaiah Wood
Profesión: Inspector jefe de policía
Relación: Como embajadora y miembro de la alta sociedad, el contacto de Isabella con las fuerzas de seguridad siempre ha sido bastante frecuente. No son pocos los eventos en los que Isabella ha tenido que confiar la seguridad a Wood y, con el paso de los años, se ha establecido una buena relación entre ellos basada básicamente en el beneficio que Isabella suele sacar de ella: una intervención limpia, rápida y eficiente de la policía siempre que lo ha necesitado... y alguna información privilegiada.
Nombre: Leroy Hampton
Profesión: Secretario de Estado
Relación: No sólo los embajadores acuden a las recepciones diplomáticas. Leroy Hampton, actual Secretario de Estado de Estados Unidos no pierde la ocasión de frecuentar una buena recepción llena de embajadores, sobre todo si hay mujeres bellas en ella.
La fama de mujeriego del representate exterior de los Estados Unidos le precede, y dicen que nunca sabe decir no a las peticiones de una cara bonita. De ahí que, en más de una ocasión, Isabella haya conseguido, con tan sólo una llamada, que las recepciones de la embajada británica se hayan convertido en algunas de las más sonadas en la ciudad.
Nombre: Julie Filch
Profesión: Directora del San Francisco Chronicle
Relación: No hay nadie más receloso de su intimidad que Isabella. Por eso siempre siempre se ha guardado bien de mantener una buena relación con la prensa.
Desde que comenzó a llamar la atención de los medios, Isabella llegó a una especie de "pacto" con Julie, la directora de uno de los diarios más influyentes de San Francisco: tendría información y una foto en primera plana de todos los actos oficiales que se organizaran, a cambio de mantener al margen la vida privada de Isabella. Con el tiempo, Julie ha sido decisiva en más de una ocasión, cuando Isabella ha necesitado conseguir algo de información o llamar la atención sobre algo.
Subelo todo a la ficha y los contactos a la parte de notas
Ya tienes prólogo. Dudas, consultas, peticiones, quejas, correciones, lo que sea, por aquí por favor. Si me equivoqué o me dejé en algo hazmelo saber, que seguramente se me haya pasado ^^u
Méritos:
Defectos: